Habian pasado unos dias y Ana aun estaba bajo el efecto del veneno, Void  no se apartaba de su lado por temor a que alguien aprovechara que estaba débil.

Elián estaba frustrado, mando a que mas jovenes y hombres, incluso  mujeres se alistaran a la guardia, esto lo hacia para mantener a salvo su hogar, le aterraba fallar a su gente, ellos confiaban en él, y era su deber cumplir las expectativas.

Se concentro tanto que se unió a la guardia de noche, comía muy poco y no se hable de dormir. Artemis vio todo eso, Elián  le habia pedido que se mantuviera fuera de esto, él era el  rey y debia de resolver esto él, por fortuna, Artemis era fiel a su familia y no a  las ordenes, asi que aqui se encontraba, frente a la puerta de su hermano, la abrió con cuidado mirando adentro.

Elián estaba revisando pergaminos sobre la situación en todo el planeta, Artemis entro y se acerco.

Artemis: es tarde, debes dormir

Elián: no lo are  -traza rutas y campamentos en caso de necesidad-

Artemis: no podras ayudarnos si estas cansado

Elián: estare bien, ustedes sigan viendo que el veneno se valla, necesitaremos a todos en el  frente  

Artemis: sabes que no resistiras mucho, eres fuerte, pero no servira si estas agotado

Elián: Artemis, no tengo  tiempo para discutir, necesito encargarme del reino

Artemis: soy  el principe de la noche, soy mas resistente para mantenerme despierto, tu debes descansar

Elián: que no! -golpea la mesa tambaleandose casi callendo al suelo hasta  que su hermano lo atrapo-

Artemis: ... que te parece una cancion  de cuna? 

Elián: no lo necesito ...

Artemis: -suspira y lo guía a la cama dejándolo sentado, aclara su garganta y canta suave-

No hizo falta mas para que Elián callera dormido,  Artemis lo acosto dando un leve beso en su mejilla, dejando dormir a su hermano y haciendo él las rutas de evacuación.

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Al  dia siguiente Elián desperto agitado, miro al rededor, no habia nadie, pero parecia que sus  planos estaban completos, suspiro y se levanto colocandose su ropa usual de toques  blancos y dorados, llendo a desayunar, los sirvientes habian preparado un desyuno mas energetico para él, Elián sabia que habia sido por petición de sus hermanos, no tuvo de otra  que  comer hasta quedar satisfecho.

Paso el dia con normalidad, Elián habia hecho su rutina, ahora tocaba la vigilancia, pero antes habia ido a ver a su "invitada", paso por su cuarto y abrió la puerta, mirandola en la cama, aun tenia sus venas teñidas de negro, pero poco a poco tomaban menos claridad, estaba dormida desde que fue envenenada, asi que no habia comido y aunque eso afectara no se podia hacer mas, Elián miro al rededor. Cerca de la ventana, ahí estaba una foto de tres personas, y un peluche de conejo que apoyaba la foto.

Elián: .... -suspiro y se acerco para guardar ambas cosas, él sabia que ella no olvidaria por completo su hogar, pero habia cosas mas importantes, asi que debian enfocarse todos, cueste lo que cueste, no dejaría que su familia callera ante simples bastardos, no lo permitiría-

Salió del cuarto y se marcho a su vigilancia, no antes de haber dejado un cello en la mano de Ana, el cello de Solaris.