33. La trampa de Ostyn
Trina
—¡Inicia misión vengarse de Flex! —le grito a mi pandilla mientras estamos todos reunidos en nuestra guarida.
Seb levanta la mano.
—Eh... ¿No se supone que ya estábamos haciendo eso?
—¡Cállate! —le grito.
Sandal se me acerca despacio y me susurra.
—¿Podemos hablar a solas?
—¿Qué? ¿Por qué? —expreso nerviosa.
Hace un gesto para que la siga, entonces salimos del viejo gimnasio. Pongo las manos en mi cintura y me preparo para lo que sea.
—¿Qué pasa? —consulto.
Se acomoda los lentes.
—Dígame la verdad. —Frunce el ceño—. La vi en la terraza —me aclara.
—¡No sé de qué hablas!
—Para ser sincera pensaba que quería atrapar a Ostyn Macgregory para que Flex perdiera a su mejor peleador, pero cuando la vi me di cuenta que estaba equivocada.
—Ahora estás equivocada, no está pasando nada, solo quiero destruir a Flex.
—Pero creo que se le agregaron razones.
—¿Agregaron? —Me sobresalto—. ¿Qué tanto viste? O mejor dicho ¡¿Estuviste escuchando?! —chillo nerviosa.
—Solo quiero cuidarla, y no estoy en su contra, jefa.
—¡¿Entonces qué pretendes?!
—Dígame la verdad —insiste.
Bufo y bajo la cabeza.
—Bueno, sí, me gusta Ostyn, lo persigo por todas partes como una acosadora, no por la pandilla sino porque me he vuelto loquita por él. —Pongo una mano en una de mis mejillas calientes—. Es tan perfecto. —Suspiro.
—Entiendo. —Hace una pausa—. Ahora quiero saber qué fue todo ese espectáculo de recién. —Enarca una ceja.
Uno mis dos dedos índices.
—Bueno, en realidad... estaba pensando en humillar a Flex, por como trató a Ostyn. Quiero que sufra un poco de su propia medicina, pero no podía decirle a la pandilla la verdadera razón, entonces no se me ocurrió cómo decirlo, así que fui repetitiva, lo siento.
Sonríe.
—No se preocupe, para las palabras ingeniosas me tiene a mí, yo la ayudo con eso.
La abrazo.
—Por eso eres mi mejor amiga y mi mano derecha.
—Un placer.
Ostyn
Oigo un grito y corro hasta allí, al llegar hasta Flex está lleno de pintura.
—¿Qué te pasó? —Parpadeo varias veces y rápido, confundido.
—¡Los Slash! —Se levanta del suelo y tira el bote que tenía en la cabeza—. ¡Me vienen molestando toda la mañana, me las pagarán!
—No entiendo —opino—. ¿De qué sirven esas bromas? No hay amenazas y no recuperan territorio, no le veo sentido.
—Algo me dice que esto viene de parte de Trina. —Rueda los ojos.
—Deberías ir a ducharte, te quedarás duro —ofrezco—. Yo me encargo.
—¡No! —grita determinado—. ¡Me bañaré e iremos los dos! ¿Dónde estuviste? No te he visto en todo el día. —Me observa desconcertado.
—En la terraza —me limito a decir.
—¡¿Dormiste ahí?! —Se indigna.
Frunzo el ceño.
—No, pero tú me echaste, ¿lo olvidas?
Bufa.
—¡Lo siento! ¡¿Sí?! —chilla—. A veces puedo ser un imbécil. —Suspira pesadamente—. Lo que dije fue por el fervor del momento, no pienso así.
Sonrío.
—Lo sé, eres un tóxico. —Me río.
Se me queda tildado, mirándome.
—Yo... —Levanta el dedo índice y luego lo baja—. Bueno, sí, no importa, me voy a duchar, espérame aquí. —Intenta irse corriendo, pero se está pegando, así que camina lento.
—¿Seguro que eso es pintura?
—No sé, pero ayúdame ¡Ya no puedo moverme! —chilla y me carcajeo—. ¡Rápido, no te burles!
—Ya voy, ya voy —repito.
Lo empujo mientras está quieto, es muy gracioso, parece una caricatura.
Trina
—¡Conejita!
—¡¿Qué haces en mi guarida, estúpido?! —le grito a Flex cuando llega en la hora de merendar—. ¡¿No ves qué estamos comiendo?! —me quejo y mastico una galleta—. ¡Tú y tu... —Me callo viendo entrar a Ostyn—. Y tu superhombre. —Suspiro—. No nos pueden molestar ahora. —Corro a gran velocidad hasta al lado de Ostyn—. Pero tengo un refresco para ti. —Le doy la lata y sonríe.
¡Me muero!
—Hola, coneja —dice el hombre de mis sueños, pero me los rompe mencionándome como si fuera la pareja de Flex—. Gracias por esto. —Toma del jugo que le di.
Le perdono todo a esa sonrisa.
Me cacheteo para reaccionar.
—Como sea ¿Qué hacen aquí? —Miro a Flex.
—No tengo idea —responde mi ex.
—¡¿Qué?! —chillo—. ¡¿Eres idiota o qué?!
—Fue idea de él venir. —Señala a Ostyn.
—¿Por qué viniste? —pregunto ilusionada, cambiando de actitud cuando miro a mi superhombre.
—Estás intentando humillar a Flex por mi culpa. —Acierta el chico de cabello negro—. Así que vine para arreglarlo. —Saca un popote de su bolsillo y sigue tomando de la lata.
¡Ah, es tan lindo!
¡Concéntrate!
—Eres muy inteligente, Ostyn. —Suspiro—. ¿Y cómo vas a arreglarlo? —Señalo a Flex—. ¡Voy a destruirlo! —Me lo pienso—. No, mejor aún, no vale la pena, Sandal, tú destrúyelo.
—¡¿Qué?! —se queja mi ex—. ¡No mandes a tus lacayos, menos a una cuatro ojos que seguro ni sabe pelear!
Sonrío.
—Eres estúpido, no sabes con quién te metiste, si crees que tú solo tienes un arma secreta, estás equivocado —digo con orgullo—. Sandal, demuéstrale, que quede humillado, por inútil.
La castaña corre hasta él, salta en el aire y lo patea. Flex no tiene tiempo de reaccionar, hasta cae al suelo. El rubio se levanta, pero Sandal gira y lo taclea, volviéndolo a tirar. Le lanzo una vara, entonces mi amiga lo apunta con esta.
—Yo creo que perdiste —dictamina fríamente mi mejor peleadora.
Flex queda perplejo, pero todos los demás también, cuando Ostyn es el que responde:
—Oh, comenzó una pelea. —Sonríe y continúa bebiendo su refresco—. Eso significa que si ganamos nos quedamos con el lugar.
Miro al superhombre.
—¿Disculpa?
Ostyn no me contesta, le quita la vara a Sandal, la taclea, entonces ella cae al suelo. La pandilla reacciona y algunos se asustan.
—Uno menos, el que sigue. —Se pone en posición de batalla—. ¿No van a luchar por su territorio?
—¡Espera! —Reacciono—. ¿Viniste por eso? ¡¿Te has puesto en mi contra?! —me quejo.
—Que yo sepa nunca he estado de tu lado —responde fríamente, tira la lata hacia atrás y esta cae al tacho de basura, sin necesidad de ver—. ¿Vamos a pelear o te rindes?
¡Mierda, yo me rindo todo lo que quiera, pero no así!
¡Concéntrate, no puedo elegir entre el amor o la pandilla! La pandilla es primera, nadie se queda con mi guarida, ni siquiera Ostyn, la guarida es mía.
Presiono los dientes.
—¡A pelear!
___
Trina, en serio, yo valoro tu esfuerzo, pero lo siento, ya sabemos quien gana aquí xD
Atte: Vivi.
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