Oikawa y Kageyama estaban sorprendidos..ambos estaban sentados en la misma mesa en el centro comercial, ¿Cómo habían llegado a eso?

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—Entonces, ¿Aceptas Iwa-chan?

—Si

—Bien ¡Piedra, papel o tijera!

Imposible..Oikawa había perdido

—Gane, así que esta tarde iremos al centro comercial, me darás toda tu mesada y con el dinero comprare juguetes sexuales qué usaré toda la noche contigo

—..Imposible..¿Cómo ganaste?

—La mayoría saca tijera la primera vez, así que decidí sacar piedra y así te gane. Ahora te tengo una pregunta, ¿Pinzas o agujas?

—..¿Eh?

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—¡Vamos Ka~ge~ya~ma!

El pelinegro suspiro dándose por rendido, no podía nergarle nada a los lindos pucheros y rabietas de su novio

—Bien, te acompaño, pero tu entraras solo a la tienda

—¡Hecho!

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—Así que..cediste ante las rabietas de Chibi-chan, que patético

Susurró el castaño riendo

—..Por lo menos a mí no me violaran de forma violenta

—…………

—Conociendo a Iwaizumi-san, lo dejara sangrando en el suelo, usted puede desmayarse y él lo seguirá violando, es un pervertido en secreto. Kindaichi, Kunimi y yo lo comprobamos una vez que revisamos su celular. Me alegra saber que te podrán domar bien

—Te voy a sacar la co–

—¡Oikawa!

—Tks..Iwa-chan, no tardaste nada

—Ya sabía lo que compraría, así que fue más fácil encontrar todo..vamos a casa, te daré una lección por hablarle así a un kohai y querer hacer un escándalo aquí

—P..per–

—¡Avanza!

—¡Si!

Chillo asustado caminando a casa

—¡Kageyama! Ya encontré la que buscaba, ¿Me acompañas a casa?

—¿Te eh dicho lo bello que eres?

—¡¿Eh?!, ¡¿A qué viene eso?!

Chillo completamente sonrojado y apenado Hinata

—Olvídalo, vamos

Susurró dulce tomándolo de la mano y caminando a casa

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