No Hay Que Temer, Marshall
Esa noche, en Bahía Aventura, hubo una gran tormenta que hizo que todos los habitantes de Bahía Aventura incluso Ryder y los cachorros se queden resguardados en sus casas.
En el cuartel, Ryder se encontraba en la cocina preparando chocolate caliente para él y los cachorros.
Los cachorros estaban jugando en la sala.
En ese momento, suenan un montón de truenos que asustan al pequeño dálmata.
Marshall: Truenos!!! *se esconde bajo su cojín muy asustado*
Chase: *Se acerca al pequeño dálmata* ¿Qué pasa, hermanito? Son solamente un par de truenos, no hay que temer
Marshall: Es que le tengo mucho miedo a los truenos, siempre les tuve mucho miedo *bajo su cojín muy asustado*
Chase: ¿Sabes? A mí también me daban mucho miedo los truenos cuando era pequeño como tú, pero Ryder me dió algo que me hizo sentir mejor cuando suenen esos fuertes truenos
Marshall: ¿Qué fue lo que Ryder te dió?
Chase: *Se va al baúl de juguetes y de ahí saca al oficial oso* Esto, este es el oficial oso, es mi juguete favorito en todo este mundo, jeje *sonríe muy feliz*
Marshall: Es un oso muy bonito, jeje *sonríe muy feliz*
Chase: Y tengo algo que te puede ayudar a sentir mejor cuando tengas miedo *saca un pequeño oso de peluche de la caja de juguetes y se lo da a Marshall* Ten, hermanito
Marshall: *Recibe el oso de peluche muy feliz* Gracias, hermano, jeje *lo abraza muy fuerte mientras sujeta muy fuerte al oso de peluche que Chase le dió*
En ese momento, Ryder llega con tres tazas con chocolate caliente.
Ryder: *Les da el chocolate caliente a los cachorros* Aquí tienen un poco de chocolate caliente, mis pequeños, jeje
Chase y Marshall: *Reciben las tazas de chocolate caliente muy felices* Gracias, Ryder, jeje
Después Ryder y los cachorros disfrutan de una maratón de películas mientras toman el chocolate caliente y disfrutan de unas deliciosas galletas que el Sr Porter les preparó como agradecimiento por lo que el pequeño dálmata hizo ese día.
Después de la maratón de películas, Ryder y los cachorros se quedan dormidos en la sala mientras están tapados con cobijas.
Marshall se encuentra profundamente dormido mientras abrazan muy fuerte el oso de peluche que Chase le dió.
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