〝↢【Dess x Focus】↣〞
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No sabe exactamente cuando es que sus terrenos se volvieron el blanco de su propio pueblo.

No comprende porqué tanta hostilidad hacia su persona que luego disfrazan de bromas.

No entiende las miradas que le dirigen tan llenas de desagrado una vez creen que no los ve.

No comprende porqué de un día para otro, todos se habían vuelto en su contra.

No comprendía porqué, si nunca hizo nada mal.

No lo entendía pero se estaba cansando.

Más bien, se encontraba cansado.

Quería irse de su pueblo y no volver.

Quería escapar de ahí.

–¿Ésto es todo?–

–Si, muchas gracias Dess–

El lobo sonrió con un cofre en manos, soportando el peso de las pertenencias más importantes del ave.

–No es nada Focus–

Ambos se acercaron al camino de hielo, sentándose ambos en una misma barca, comenzando a remar.

Un par de segundos y se encontraban de camino a la aduana, dónde sin que nadie se diera cuenta, se dirigieron a los portales.

En un cómodo silencio, llegaron frente aquel portal de color azúl, dónde ambos entraron, llegando así al pueblo número tres.

–¿Estás seguro que soy bienvenido?–

Murmuró no muy convencido Focus, pues hubo un tiempo donde pueblo 1 y pueblo 3 estuvieron en guerra.

–No te preocupes, la alcaldesa dijo que puedes quedarte, ella comprendió todo, incluso planea hacer otra guerra una vez pases a ser del pueblo 3 en venganza por todo–

Dándole una sonrisa para que tomara confianza, ambos comenzaron a dirigirse a casa del lobo, dónde Focus se quedaría temporalmente.

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Un mes después...

–¿Qué haces?–

Preguntó Dess levantando una ceja al ver al cuervo pintando el techo de color blanco.

–Te hago más bonita la cueva–

Dijo sin tomar mucha importancia al lobo que no estaba tan convencido de la pintura.

–Mm, no me convence–

Focus dejó de hacer lo que hacía, para voltear a verlo, sentado en la punta de la escalera en la que estaba.

–¿No?–

–No–

Focus volteó a ver el lugar donde había pintado, pensando en que hacer ahora.

Ya llevaba más de la mitad del techo.

–Pues se queda así–

Dess negó, alzando los brazos en dirección al cuervo.

–Anda, ven baja–

El ave lo miró con ojos entrecerrados, para finalmente dejarse ir a los brazos del lobo.

–¡Pero atrápame!–

Con una leve sonrisa se dejó caer en dirección a los brazos del híbrido de lobo.

–Si si-¡Ah!–

Y con ese grito, terminó el lobo cayendo al atrapar al de alas, chocando su espalda contra el suelo y el cuervo chocándose contra el pecho del canino.

–¡Dess!–

Lo miró con preocupación, temiendo que se haya dado un mal golpe.

–¡Estoy bien!–

Ambos se quedaron mirando sintiendo el calor invadir sus mejillas, Dess aún recostado en el suelo, y Focus sentado sobre el regazo del lobo con sus manos sobre el pecho contrario.

Rápidamente las risas nerviosas se hicieron presentes.

–De verdad, madre mía, te faltan músculos por lo que veo–

Dijo ruborizado, haciéndose a un lado para ofrecerle su mano para ayudarle a levantarse.

–Pero si estoy mamado, a tí que te pesa el culo–

Dijo de igual manera, mientras aceptaba la ayuda, reincorporándose y estirándose un poco.

–¿Perdón?–

Dijo ofendido el cuervo, para darle la espalda y caminar con dirección al huerto de la parte subterránea de la casa.

–Con que esas tenemos, según tú estás mamado podrás con los cofres de patatas que quiero llevarle a Pato, si no dejo de ayudarte en la cocina–

Habló ya alejado del lobo, quien bajó ambas orejas al escuchar eso.

–¡Pero, Focus!–

Se quejó para seguirle, desde lejos se veía que esos cofres estaban pesadísimos y Focus cocinaba muy rico como para perder eso, así que tendría que hacerlo.

Focus simplemente se rió al ver a Dess con las orejas bajas y la cola entre las piernas.

–Lobo tonto, anda, vamos–

Dess sonrió al escuchar aquella risa única que poseía el cuervo y que tanto le encantaba.

–Vamos–

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Un capítulito más <3 me llegaron ganitas.