Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

2. Alicia

—¿¡Terminaste con Eric!?

Tengo que alejarme el celular del oído debido a la fuerza del grito.

— Primero, yo no termine con él, él terminó conmigo, segundo, agradecería que bajaras tu tono de voz, casi me dejas sorda.— contestó mientras me entraba a la boca otro puñado de palomitas.

— Ese hijo de su madre, tan lindo y tierno que se veía. — dijo Alicia indignada, ella era mi mejor y única amiga. — ¿Y cómo te lo estás llevando?

— Mal, Eric fue mi primer novio y mi primer amor, no mentiré y diré que estaba perdidamente enamorada, pero él me gustaba y mucho, yo me imaginaba un par de años más a su lado. — habló con tristeza, pero aun masticando la palomita en mi boca. — Y lo peor de todo es que justamente decide terminarme en este momento sabiendo que hace solo 5 días había tenido la pelea del mundo con mi madre.

— Quizás ya no lo tengas a él, pero me sigues teniendo a mí, y yo soy mil veces mejor que ese enano, te lo aseguro.

No puedo evitar soltar una pequeña risa. Alicia siempre sabia que decir para hacerme sentir mejor

Y disculpa mi curiosidad, pero ahora que tocamos ese tema, ¿Has vuelto a hablar con ella? — Indagó con cautela, sabía que era un tema delicado para mí.

— No, parece que ahora prefiere fingir que no tiene hija antes que hablar conmigo, pero no hablemos de eso, lo que menos necesito ahora es deprimirme nuevamente.

— Perdóname, Mic, lo que menos necesitas ahora es entristecerte más. Y hablando de necesitar. ¿Sabes lo que si necesitas?

— ¿Qué?

— ¡Un día de chicas! — Chilló emocionada— Necesitas relajarte y quitar toda esa tensión que tienes, tengo todo ya planeado, spa, cine, compras, juegos ¡Todo! Y no te preocupes por el dinero, yo pagaré, ya estoy orga-

— Mm, no creo que pueda ser posible esta semana, quizás el fin de semana podamos. — le interrumpo antes de que siga imaginando.

—¿Ah? ¿Qué planeas hacer ese día? No creó que sea trabajar, porque que yo recuerde estás desempleada.

— Gracias Ali, no hay nada que me guste más que me recuerden mi lamentable situación laboral. Es mi cosa favorita. — digo con reproche.

Alicia era la persona más agradable que conocía y también la más imprudente, dice todo lo que se le viene a la mente antes de pensar bien. Yo siendo su amiga desde hace tres años estaba acostumbrada, pero otras personas pueden llegar a tenerla por desagradable.

— Sorry, mi culpa, pero ya dime, ¿por qué no puedes?

— Tengo un curso de repostería.

—¿Qué?

— Tengo un curso de repostería. — repito con simpleza.

— ¿Tú? ¿Un curso de cocina?

— De cocina, no, repostería, son diferentes. — corrijo.

— Déjame ver si entendí, Michelle Hernández, la chica de 21 años que ni siquiera sabe hervir un huevo, que prefiere pasar todos sus días comiendo comida rápida antes que aprender a cocinar un simple arroz y que tiene como enemigo mortal el aceite.

— Esa soy yo.

— ¿¡Decidiste entrar a clases de cocina!?

Otra cosa más de Alicia, era la persona más dramática en toda la tierra.

— Cocina no, repostería, preparar bizcocho, galletas, cupcakes, etc. — digo.

— ¿Por qué no me habías dicho nada? ¿Cómo planeas pagarlo? ¿Desde cuándo estás interesada en eso?

— Primero, porque que yo recuerde no eres ni mi madre ni mi novio o algo parecido, segundo, no está tan caro, y no planeo estar sin trabajo toda mi vida y tengo varios ahorros, y tercero no lo estoy, solo estoy haciendo un favor.— le explico como si se lo estuviera explicando a un niño pequeño.

—Explícate me-

— ¿Sabes? Me acabo de acordar que tengo que ir al súper a comprar algunos ingredientes para las clases, nos vemos luego, chao. — interrumpo mientras cuelgo el cel, conocía a Ali lo suficiente para saber qué era capaz de durar la mañana entera hablando, y en este momento no era un lujo que podía permitirme.

Observe la bolsa de palomitas en mi mano, ya no quedaba ni una sola, mire a mi alrededor para ver si quedaba alguna otra, ninguna.

Genial.

Ya había acabado nueve bolsas de palomitas entre ayer por la noche y hoy por la mañana.

Realmente la separación me había pegado duro.

Con el dolor de mi alma (y mi cuerpo) me levanté de mi cama donde estaba acostada, y me dirigí al baño, me veía y apestaba horrible.

Este iba a hacer un largo día

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro