No tenía deseos de asistir, lo que menos quería era estar en una misma habitación que todos sus ruidosos ex compañero de la academia.

Se recargo en el respaldo de su silla y cerro los ojos, recién había terminado de escribir el último capítulo de su nuevo libro sobre misterio y crimen.

¿Como se había vuelto un famoso escritor del género?

Nunca se le había dado expresarse verbalmente, sin embargo cuando tenía una idea en su mente y una computadora, o algo donde pudiese escribir, sus dedos y su imaginación hacian maravillas. Al parecer tenía un don para la escritura.

Ahora, se endereso y apago la computadora, paso sus manos por su cabello rubio cenizo y suspiro.Tendría que esperar la respuesta del editor antes de hacer cualquier modificación.

Su celular empezó a sonar, miró que la pantalla se iluminaba y un nombre resaltaba.

- ¿Qué quieres? -preguntó de mala gana levantándose para dirigirse a la cocina.

- ¿Esas son formas de saludar a tu mejor amigo? -dijo Kirishima algo enojado.

- Saludo como se me da la gana -respondió gruñendo- ¿Qué mierda quieres a esta hora? -cerro la puerta del microondas con fuerzas para luego ponerlo a funcionar.

- Mañana es la reunión de ex alumnos -comentó suspirando.

-Eso lo sé -mencionó sacándose los lentes y dejándolos a un lado.

- Espero tu asistencia Katsuki -habló subiendo la voz- Estuve más de un mes contactando a todos, concordando fechas, para que uno no se digne en aparecer -concluyó apretando su teléfono.

- ¿Tanto te importa la reunión? -preguntó sacando su comida y se sentó para comer.

- Por supuesto -respondió eufórico- Han pasado ocho años, será interesante saber que han hecho todos en este tiempo -sonrió, transmitiendo su felicidad a el oji-rubi.

- Esta bien -suspiro rascándose la nuca- Me debes una -comentó cortando la llamada y dejando al pelirrojo con las palabras en la boca.

Por otro extremo de la ciudad, Izuku se recargaba sobre la mesa ya cansado de revisar los exámenes de sus alumnos. Frustrado de tantos errores, no comprendía cómo se habían equivocado en las preguntas más simples, parece que sus métodos de enseñanza no estaban funcionando.

Se levantó para encender la cafetera, necesitaba toda la ayuda posible para mantenerse despierto y terminar la revisión.

Después de terminar la universidad fue llamado, por las recomendaciones de varios de sus profesores de la facultad de matemáticas y estadísticas, a ser docente de la académica Yuei en donde el mismo había estudiando.

Tomando una taza de café recordó que al día siguiente era la reunión, paso su mano desocupada por su adolorido cuello y se dirigió de lleno a los papeles, si quería asistir tenía que terminarlos esa noche.

El local era un prestigioso centro de reuniones y entretenimiento, varias personas pasaban después de sus trabajos con sus respectivos compañeros para beber y olvidarse de la ardua jornada.

En un sitió reservado para la reunión de ex compañeros de la clase 1-A, los primeros invitados empezaban a llegar.

De apoco las conversaciones empezaron a surgir y por supuesto, las risas y el volumen de las voces iban en aumento.

Katsuki bebía de su cerveza algo fastidiado por la charla que tenían Kirishima y Todoroki, sobre no sabía que mierda. Sólo le hartaba estar rodeado de tanto ruido y charlas estúpidas.

Tomó algo de comida e intento pensar en cualquier otra cosa, aunque al pasar su vista por todos los que asistieron, le extrañaba no ver una cabellera verdosa.

No pensó mucho en ello y siguió en lo suyo, bebió un poco más y empezó una leve conversación con Sero, quien intentaba sacarle algo de información sobre lo que había estado haciendo estos últimos años.

Algo cansado estacionó su auto y salió a toda prisa intentando ordenar en algo su cabello, había estado inmerso en los exámenes la noche anterior que durmió prácticamente todo el día, despertando hace un par de horas, donde se alistó tomando una ducha rápida y vistiéndose con lo primero que encontró.

Entró al local y fue recibido por las animadas charlas que tenían los diversos clientes, le pidió indicaciones a una recepcionista para llegar a la sala de la reunión.

Respiro profundamente antes de abrir la puerta, al hacerlo varias miradas se posaron en él.

-Midoriya -nombró un carismático pelirrojo que al verlo se levantó de su asiento para saludarlo- Pensé que ya no llegarías.

-Lo siento -se rascó la nuca y sonrió- No faltaría por nada del mundo.

Tomó asiento al lado de una animada Ochako, la cual lo abrazo al tenerlo a su lado.

Se sorprendió al enterarse que Denki y el pelirrojo estaban comprometidos, los felicitó y les dio un fuerte abrazo a cada uno de ellos.

En ese instante percibió un aroma, uno tan simple pero a la vez tan embriagador que hizo voltear su mirada y quedar hipnotizado por unos ojos rubí.

Katsuki seguía desviando la conversación que tenía con Sero, sin embargo frente del pudo apreciar la figura del pecoso.

Un magnetismo hizo que no pudiera sacarle los ojos de encima, seguía teniendo la misma sonrisa de aquellos años, su cuerpo de veía más marcado y por lo que percibía, llevaba el cabello mas corto.

En ese instance, mientras lo analizaba, sus miradas se conectaron con un profundo silencio. Sin embargo un carismático pelirrubio sacó del trace a ambos al pedirle a Izuku que se sentara a su lado.

Podía escuchar claramente la conversación, bebió un nuevo sorbo a su trago y lo miró de reojo. Hasta el momento supo que trabajaba en Yuei como profesor.

-Como era de esperarse del nerd -murmuró bajo antes de llevarse a la boca algo picante.

Pasaron las horas y seguía percibiendo ese agradable aroma, intentaba ignorarlo concentrándose en la conversación que tenía con Todoroki, pero le era imposible.

De apoco empezaron a retirarse, el peliverde ayudó a poner un poco de orden a la pareja mientras veía como Katsuki se ponía su chaqueta para retirarse.

Su cuerpo reaccionó al verlo salir por aquella puerta, se despidió, tomó sus cosas y lo siguió. Sin embargo cuando cruzó el umbral que daba a la calle, lo encontró recostado en la pared encendiendo un cigarrillo.

- ¿Se te perdió algo, Deku? -preguntó al sentir aquella mirada esmeralda sobre el.

- N-No -tartamudeó al encontrarse sin saber que hacer, se acercó un poco y reconoció que el aroma que tanto le atrajo era emanado por el más alto.

-¿Entonces? -cuestionó la cercanía mientras exhalaba el humo e intentaba mantenerse calmo.

-Sólo -dijo algo nervioso- Queria preguntarte como has estado durante todos estos años -sonrió pasándose la mano por el pelo en señal de nerviosismos.

- Bien -respondió acabando su cigarrillo para luego apagarlo y votarlo al basurero- Sin nada que destacar -comentó antes de empezar a retirarse, la presencia de Midoriya lo estaba poniendo inquieto.

-¡Kacchan! -nombró el contrario deteniendolo tomando su brazo y girándolo para mirarlo- Yo... -balbuceó intentando controlar los movimientos involuntarios de su cuerpo. Miró a Katsuki y se sorprendió al verlo sonrojado- ¿Kacchan? -preguntó algo preocupado, pero cuando el aroma del ajeno se intensificó dejó de pensar.

Cuando sintió aquel toque su cuerpo se estremeció y un calor abrazador empezó a avanzar por cada célula de su anatomía.

No podía estar pasándole eso, no en ese lugar, no con Deku enfrente suyo.

Pero algo lo llamaba, una atracción hacia aquel hombre ubicado adelante de él con cara de preocupación, en donde sus ojos empezaban a reflejar deseo.

No le importó nada, sólo dio un paso sin romper el enlace de sus miradas y con una lentitud provocativa, acercó sus labios a los del peliverde.

Primero fue un roze suave, para luego sentir como unas manos se aferraban a su cadera transmitiendo un agradable calor, y al mismo tiempo ambos con unas arrebatadoras ganas de saborear más, intensificaron aquella unión.

Sus mentes sólo pensaban en poseer y disfrutar el momento, sus cuerpos reaccionaban a esa primitiva necesidad.

El rubio ceniza empujó al contrario al callejón que estaba al lado del estacionamiento, ahí acorraló a un sonrojado Izuku contra la pared.

- Sabés lo que va a pasar, Deku -susurró en el oido ajeno, en donde bajo al cuello, aspiró la mezcla de colonia y aroma propio que desprendía el pecoso. 

Fue tomado por sorpresa, ahora era él quien estaba contra la fría pared de ladrillo con sus manos sostenidas sobre la cabeza.

El peliverde ya embriagado por ese exquisito aroma, beso con más intensidad, en donde rosando sus lenguas sintieron la suavidad y a su vez el sabor del alcohol de la noche.

Una pequeña llovizna comenzó a descender, pero eso no les importó. No sentían frío, el calor que ambos emanaban esa suficiente para combatir la gélida brisa.

Continuará...

Y empezamos!!! 🙆🙆🙆😘 les dije que habría salseo del bueno jujujuju algo que va a ocurrir en casi todos los cap 👌👌
Iba a subir el capítulo mañana pero me preferí hoy 😳😍😍
sony72105287 esperó que te guste 💃
👇👇Les dejo la diferencia de estatura que tiene Deku y Kacchan para que se hagan una idea de lo que viene en el prox cap 👐👐

Sin naada más que decir nos vemos el viernes de la próxima semana para el cap 2 🙌😘
Bye 🙌🙌