Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 21: Dylan

—No me gusta este plan, lo odio.

Reyes no para de dar berrinches mientras me ayuda a poner el falso micrófono bajo mi camisa; no puedo evitar sonreír al notar su siempre perfecto rostro marcado con arrugas debido al ceño fruncido que no deja de poner; sus mejillas se encuentras un poco hinchadas como si hiciese un puchero, aunque para contrastar su boca estaba tan apretada que sus labios formaban una fina línea casi imperceptible.

—Te recuerdo que esta idea la dio Robert quien supuestamente es tu hombre de confianza— afirmo y siento el suspiro de frustración de Reyes contra mi cuerpo.

—Robert es imbécil.

Un fuerte chirrido suena en mi oído debido al auricular del micrófono que tengo en el pecho y por donde estoy seguro que nuestros compañeros nos están escuchando, entre ellos el eludido que por lo visto no le ha agradado demasiado el comentario de Reyes. El día de ayer Robert nos explicó a todos sus planes para atrapar a Brandon con las manos en la masa y decidimos llevarlo a cabo hoy mismo. Mientras más tiempo estuviese suelto el cambiaformas más peligro había de que volviese a tendernos alguna trampa a Reyes o a mí, debemos aprovechar ahora que aun contamos con el factor sorpresa, pues el viajo cambiaformas continúa pensando que mi pareja está atrapado en una celda. Sin embargo, debíamos ser inteligentes y no levantar sospechas, es por ello que todos están instalados en pequeñas bases a varios kilómetros de mi casa en los bosques de las redondas, como somos cambiaformas solo tardarían en llegar unos minutos si algo llega a suceder, pero continúan estando a una distancia bastante alejada como para que Brandon ni se imagine que se encamina a una trampa.

Al único que no logré sacar de la casa fue a Reyes, mi pequeño híbrido no ha dejado de quejarse de este plan desde que Robert lo sugirió el día anterior, no obstante, a pesar de su obstinación sabe que es lo mejor que tenemos en estos momentos.

Bajo mi camisa cuando Reyes termina de colocar el micrófono encubierto para que no se vea y sostengo su rostro obligándole a que alce la cabeza en mi dirección y me mire fijamente a los ojos.

—Voy a estar bien Reyes.

—No me fio.

—¿De Robert o de Brandon? —pregunto con burla.

—Pues ahora mismo ni de mi sombra.

—Reyes, si tienes una idea mejor todos estaremos dispuestos a escucharla.

—Arrancarle la cabeza a Brandon en el mismo momento en que cruce la puerta.

—Y dejar que quedes como salvaje traidor, ni hablar; además, Ryan tiene razón, es un anciano del consejo y ese título de por si trae mucho poder político, casi tanto como los alfas, debemos tener buenas pruebas si queremos deshacernos de él de una vez por todas.

Reyes es impulsivo, pero no me cabe ni la más remota duda que la emoción que reina en su interior en estos instantes es el miedo, la verdad es que yo también la siento. Miedo a que todo salga mal, que mi pequeño pueda terminar herido, pero por primera vez en mucho tiempo no me interesa poner mi propia vida en riesgo con tal de salvar a alguien que me importa; Reyes me ha protegido muchas veces, es mi turno ahora, lo decidí desde que le reclamé, crearía un hogar seguro para ambos, un futuro juntos.

Una persona sin escrúpulos como Brandon no va a detenerme.

Acaricio las mejillas de Reyes con mis pulgares al mismo tiempo que desciendo mis labios hacia los suyos para sellarlos y fusionarnos en un breve beso; el momento no posee lujuria alguna, aunque quizás sí un poco de preocupación y nostalgia, es el consuelo que podemos darnos el uno al otro. La calma antes de la tormenta.

—Sabes que estaré bien, ¿cierto? —Reyes tarda en asentir y mostrar su usual seguridad, hecho que solo me confirma el ansia que le corroe—. Mírame pequeño, todo saldrá bien, no voy a perder lo que tenemos ahora por nada de este mundo, me ha costado mucho encontrarte.

Mis palaras logran sacarle una sonrisa y eso provoca que mi corazón lata por unos instantes.

—Procura que no te toquen ni un pelo o bajaré a descuartizarlos a los dos.

—¡Ese es mi pequeño asesino! —Vuelvo a besarlo en el mismo momento que siento que tocan a la puerta.

Incluso a esta distancia puedo sentir el olor de otro cambiaformas en mi territorio y no necesito verle para saber que se trata de Brandon, mientras más tiempo pasamos con una persona más rápido nos acostumbramos a sus aromas y nos es más sencillo reconocerlos y, por desgracia, yo he estado demasiado tiempo con ese hijo de puta.

Noto la mirada de Reyes preocupado y siento la tensión invadir su cuerpo. Paso las manos por sus hombros y le regalo una pequeña sonrisa antes de abandonar la habitación y trancarla para luego encaminarme a abrir la puerta de entrada. Escucho por el auricular en mi oído como Robert indica que están todos listos y el micrófono se encuentra perfectamente preparado para grabar.
Abro la puerta para ver los enormes ojos del anciano observándome, su piel arrugada aún más marcada por la manera en que frunce su ceño, su postura desconfiada que no se acerca a mí, esto no va a ser tarea fácil.

Generalmente los sobrenaturales pueden pasar miles de años y no envejecer ni un pelo, se mantienen en la edad visual que desean poseer; pero al mirar a Brandon pienso que perdió el ansia de ser joven hace demasiado tiempo; su figura luce como la de una persona entre los cincuenta y los sesenta años de edad, no puedo evitar preguntarme que mueve los intereses de este hombre además del poder. EL anciano lleva puesto unos vaqueros con camisa y un enorme sobretodo puesto encima, le observo casi con la misma intensidad que él me examina a mí; tampoco me fio: hace demasiado no somos familia y mucho menos amigos.

—Entra de una vez.

Mi voz no tiene ni pisca de amigable cuando se hace escuchar entre nosotros, no me interesa parecer agradecido o buena persona, quizás eso solo le haría sospechar más, después de todo yo sé la verdad de lo sucedido hasta el momento.

—¿Es así como recibes a tu tío? Tus padres siempre te dieron una educación de mierda.

Incluso a esta distancia juraría que puedo sentir el enojo de Reyes por las palabras de Brandon, debe ser por el vínculo que compartimos. Suspiro intentando serenarme para que el híbrido también se relaje y luego vuelco mi atención en Brandon nuevamente.

—Mis padres nos dieron a mi hermano y a mí una educación maravillosa, pero así es como recibo a la basura. Sobre todo, a la que te apuñala por la espalda.

Brandon suelta una carcajada mientras se adentra en la casa, yo cierro la puerta y me mantengo detrás de él todo el tiempo posible, tan solo cuando se sienta yo me mantengo en pie en el extremo opuesto de la habitación y de frente a él; no me arriesgaré a fiarme y darle la espalda nuevamente.

—Si mal no recuerdo fue la pequeña puta híbrida quien dijo que te atacó, deberías dejar de culpar a tu pobre e indefenso tío.

Vuelvo a sentir a Reyes gruñir, ¡mierda!, o se apresura el proceso o Reyes sale a matar a este con sus propias manos.

—No finjas conmigo Brandon, no perdí la memoria en ningún momento, tampoco soy idiota.

—¿Y si tan seguro estás de que fui el traidor por qué me has llamado?, ¿por qué te arriesgas a estar solo conmigo en esta casa?, ¿Acaso no temes que se repita la historia?

—Quiero que me cuente a qué trato llegaste con Reyes. —Exijo.

—¿Y por qué piensas que hice un trato con la pu…?

Pero no termina su frase, las palabras se cortan en su garganta a medida que observa como golpeo con fuerza la pared con el puño cerrado y el cemento se ablanda a mi tacto.

—Parece que le has cogido cariño al híbrido. —Sonríe con malicia y luego vuelve a suspirar—. Como te decía, ¿por qué piensas que hice un trato con ese?

—Conozco a Reyes, no se hubiese entregado si no hubiese hecho un trato contigo.

—¿Piensas que él no se entregaría solo porque te quiere?

—Pienso que no lo haría porque es un alma libre, no nació para estar preso y sé que de tener la oportunidad te hubiese rajado el cuello. —Brandon empalidece un poco con esto último—. ¡Dime ya de una vez la verdad!

Nuestras miradas se sostienen por unos instantes y el cambiaformas luego de ello se pone en pie y comienza a dar vueltas por toda la sala sin perderme de vista.

—Tu novio me ofreció lo que yo deseaba Dylan, poder, un poder más allá de este miserable pueblo al que trajiste al clan; me dio a los híbridos y me hizo quedar como un jodido héroe y solo por el hecho de no hacerte daño a ti. —La risa nerviosa escapa de sus labios y yo tengo que cerrar mis puños para no correr hacia él y golpearlo, siento como Robert me pide paciencia a través del audífono, pero la verdad es que me está costando controlarme—. Creo que tu novio ha sido muy ingenuo si me preguntan.

—¿Y qué te hace pensar eso?

Me muevo por la sala al mismo tiempo que él sin dejar de tenerle en mi campo de visión.

—Negoció tu libertad, tu bienestar, pero el muy idiota me dio demasiado y ahora está preso y no podrá impedir que te mate.

Mete la mano detrás de su sobre todo y noto como su mano se tensa alrededor de algo que no tardo en identificar como una daga de plata; la cuchilla resplandece reluciente bajo la luz de la lámpara de la habitación. El hombre alza la daga en mi dirección y una sonrisa maniaca se posa en sus labios.

—¿Viniste hoy para matarme?

—Por supuesto y luego iré a la cárcel y mataré a tu puta, al final quedará para todos como que el maldito híbrido escapo y vino a terminar lo que empezó hace meses.

Mis garras se expanden de la impotencia y siento como las primeras facetas de la transformación se expanden por mi cuerpo, sé que voy a atacarlo, no puedo contenerme, pero primero haré que el odio se apodere de él y sea lo último que pueda sentir en su vida. Tomo el borde de mi camisa con mis manos y la alzo dejando ver el micrófono que lo ha grabado todo.

—Aunque me mates es tu fin, Ryan y el resto acaban de escucharte, estás acabado tío. —Hago énfasis en la última palabra y noto como las facciones de Brandon se descomponen.

La ira comienza a manifestarse en todas sus facciones, su ceño fruncido y sus manos a cada instante más sujetas a la daga.

—Voy a matarte.

Se lanza sobre mí y comienzo a transformarme, pero en el instante en que espero el impacto este no llega. Abro los ojos ya transformado en un felino y noto que Reyes había bajado y se arrojó contra Brandon sin pensarlo dos veces. Tomaba por el cuello al anciano y luego de ello el cambiaformas golpeó su cara enviándole el otro extremo de la habitación. Su rabia solo aumenta y me lanzo sobre él directamente hacia su yugular para morderlo y desangrarlo. Mis garras solo alcanzan a encajarse en el estómago de Brandon, pues este da un salto atrás cuando llego hasta a él. Logré arrojar su cuchillo lejos con mis zarpas, pero no por ello menosprecio a Brandon, sé que es un hombre de muchos años y mucha fuerza.

Con sus brazos rodea mi cuerpo y logro sentir como algunas de mis costillas crujen bajo su apretón enviando corrientes de dolor por todo mi cuerpo y provocando que un rugido escape de mis labios. Brandon aprovecha para agarrar el cuchillo que estaba por el suelo y cuando intento volver a levantarme ya el viejo está sobre mi, encajando la daga a trabes de mi pelaje por mi pecho. Siento como mi lado animal avandona mi cuerpo poco a poco hasta volver a quedar en la forma humana. Un pequeño burbujeo de sangre escapa por mis labios y cuando alzo la mirada noto los asustados ojos de Reyes sobre mí. Él también lo sabe, el cuchillo no ha dado en cualquier lugar, sino en una zona muy cercana al corazón. Brandon gira la daga sin retirarla y la clava más perforando mi piel a medida que un intenso dolor viene acompañado de puro frío y no necesito que me lo digan. Cuando retiran la daga y el sangrado brota con más fuerza lo tengo claro: voy a morir.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro