Los días habían pasado, dejando paso así a la siguiente estación, otoño. Parecía ser un espectáculo a una apertura de la vida venidera.
─¿Estarás bien sola? ─
─Claro que sí, ¿Cuántas veces te lo he demostrado ya? ─ Jungkook se encogió de hombros, genuinamente preocupado.
─Bien, estaré de regreso pronto, si pasa cualquier cosa, llámame ─
─Lo hare, no falta mucho para la hora de cierre ─
Ella le sonrió de una manera que desarmo a Jungkook, y aun en contra de sus deseos, él salió del local, tenia que hacer algunas cosas que sus hermanos le habían mandado, no podía salirse por la tangente si es que no quería que sus hermanos se enteraran del incumplimiento de la promesa que hizo.
Y aunque él sabia que estaba mal lo que hacía, podía sentir que ella era su alma gemela, su otra mitad, no podía alejarse de ella mas de lo normal, incluso nada. También sabía que podía tener una oportunidad cuando se dio cuenta que el deseo por beber su sangre disminuía considerablemente, sabia que las cosas podían ir bien, solo había algo que lo seguía preocupando, el tiempo.
Ella era humana y los años poco a poco cobrarían parte de su belleza y juventud.
Por otra parte, en el local, ella seguía sonrojada, pues aun le costaba demasiado no ruborizarse con la presencia de Jungkook. Cada que él le acariciaba su mano o su mejilla, ella claramente podía sentir como su corazón era apretujado, ese sentimiento de querer decir mil cosas, pero no poder, o las mil mariposas revoloteando en su estómago.
Aunque no eran amigos tampoco eran amantes, pero se podía sentir ese sentimiento de intimidad cada que estaban juntos, sus miradas cada que se encontraban, parecían anhelar al otro. Ella suspiro, miro el reloj, los minutos habían pasado rápidamente. La hora de cierre había llegado, con seguridad apagó las luces y cerró la puerta del local con llave, se dirigió a su hogar.
Aun sintiéndose algo cohibida, ella anhelaba que el siguiente día llegara rápido, pues así podría ver a Jungkook de nuevo. Tan sumida en sus pensamientos estaba que no se dio cuenta que había llegado a su casa.
Abrió la puerta, pero sintió algo extraño, esta no estaba con seguro tal cual había dejado en la mañana antes de salir. Entró silenciosamente, miró hacia todos lados buscando alguna anomalía, no había nada fuera de lugar, solo... la luz encendida saliendo de su habitación. Con manos temblorosas sacó su teléfono y llamó a la única persona que podría ayudarla.
─" ¿Si?" ─ contestó de inmediato.
─Jungkook, creo que hay un ladrón en mi casa ─ contestó ella con voz baja y temblorosa.
─" Voy para allá, por favor, sal de ahí ahora mismo" ─ y colgó la llamada.
Pero ella no hizo caso a las palabras de Jungkook y fue rumbo a su habitación, donde tal vez ella podría haber dejado encendida la luz, tenía que cerciorarse, tal vez era una tontería. Con paso lento se dirigió a su habitación, estiró su mano para abrir la puerta por completo, no había nada a simple vista, barrió la habitación con su mirada mientras entraba de a poco. Ella suspiró cuando se dio cuenta que había dejado la luz encendida, tonta de ella.
─Te esperaba ─ escuchó una voz detrás de ella, gutural y aterradora.
Giró demasiado rápido, tanto que su cuello dolió. Un hombre alto la tomo del cuello y la levanto en el aire, la aventó hacia la cama, ella gritó del susto y por el impacto de su cuerpo con la cama. De inmediato se levantó para correr fuera de su habitación y pedir ayuda, pero ese hombre fue más rápido y la atrapó de nuevo. Esta vez el cuerpo del hombre la presionó en la cama, ella sentía como si una roca estuviese encima de ella, un gran peso le estaba quitando el aire. Sus ojos llorosos y su garganta seca...
El peso del hombre de un momento a otro fue nulo, ella tosió como loca en busca de aire, trató de enfocar su borrosa vista a causa de las lágrimas en lo que estaba pasando.
Todo fue tan rápido, Jungkook estaba detrás del hombre que la había atacado, ese mismo hombre estaba de rodillas, Jungkook atravesó su pecho sacando su corazón. Ella grito asustada por eso.
Jungkook la miró con ojos tristes, pues había mostrado ese lado aterrador a la persona que más quería, a la chica de la cual él estaba enamorado, porque sí, él lo estaba.
─Lo siento ─ murmuro él en un intento de calmarla.
─No... tú lo mataste... ─ apenas y se podían escuchar las palabras de ella, para Jungkook eran tan claras.
─Era él o tú ─ dijo él mientras se acercaba, ella retrocedió en la cama.
─No... ─
Jungkook apretó los labios, sintiendo dolor en su corazón, jamás pensó que sentiría esta clase de dolor.
─Déjame explicarte, él ni siquiera es humano, ¿lo ves? ─ le señalo a lo que antes había sido un cuerpo y ahora era un montón de cenizas.
Ella en verdad estaba tan confundida, quería hacerla olvidar ese suceso, pero había aprendido algo que ahora mismo jugaba en su contra, en ella no podía usar la hipnosis.
─Quiero estar sola, yo... ─
Y aunque a ella le dolía estar sola, alejada de Jungkook, solo quería aclarar sus ideas.
Jungkook asintió pausadamente mientras retrocedía, sus preciosos ojos se ensombrecieron y dio media vuelta hasta salir de la casa de su amada. Un intento de vampiro había atacado a su chica, y sabia claramente quien pudo haber sido. Él arreglaría esa misma noche las cosas.
Pues esta noche, un lazo que se pensaba irrompible, se terminaría.
[...]
Lamento decir que la historia acaba de entrar a una etapa final. Tal vez solo queden de 4 a 5 capítulos más.
Gracias por leer y su apoyo.
Las quiero mucho.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro