En una de las lunas de Saturno.

Mentí que tenía un asunto con Victor, era algo que dije para tener un momento a solas con Rowss, ella igual estaba algo estresada con eso de tener tanto trabajo y el pretexto de que tenían que conseguir armamento tanto como munición los demás al terminar su descanso sirvió que me diera una escapada de ese "kinder" que es mi tripulación. Era algo que también les faltaba a ellos, un respiro así como recordar el por qué se hace todo cuando se ayuda a La Armada Terrana. Los seres amados siempre son un motivo que da fuerza donde ya no la hay en una batalla cuando se siente pérdida. Alex me ayudó para conseguir un lugar solitario donde pudiera estar lejos del radar.

En el viaje hacia ese satélite de Saturno iba pensando en aquella vez que se vieron las caras mi ex mujer Sveta y Rowss, quería correr despavorido, esas miradas de dos mujeres con un carácter digno de un Rage, que si Victor las hubiera visto no imagino la burla hacia mi persona. También cuando estuvimos en el planeta espectro donde los Rage estaban como babosos mirando a Rowss y Pam armando los explosivos y cuando Victor vio como me miraba Rowss y la olfateó me dijo que ella ya era mía y en un mormullo dijo que bien pudiera ser digna de ser Rage después antes de asalto en aquel planeta.

Rowss tiene un carácter de mierda, los halagos a su belleza los toma con fastidio, es fría como un asteroide de hidrógeno gélido, su vocabulario digno de un transportista interestelar que viaja por rutas peligrosas, su fuerza es la de un oso, su mal carácter como un, wolverine (glotón), su eficaz pelea mano a mano tan mortal como la mordida de una cobra, su puntería de francotirador es tal que odiaría hacerle enojar porque no sabré de donde llegó la bala.

Es de reír el pensar como carajos fuimos a terminar de nuevo siendo pareja, yo tan distinto de carácter, como líder trato de ser justo, me impongo cuando es necesario, al fin y acabo tengo mi familia que es mi loca tripulación, pero eso de tener la suerte de encontrar el amor en dos ocasiones fue mas suerte que ver una súper nova nacer en un sistema lejano. Sveta, la mujer que me dio muchos años de felicidad y después Rowss que ahora tengo la dicha de que esté a mi lado para mantenerme cuerdo a pesar de estar igual o mas desequilibrada que yo. No hemos tenido intimidad mas que aquella vez del lago, esa vez no encontramos lugar porque las parejas se estaban dando amor en los lugares mas cómodos. Al menos esas caricias, esos besos que aun tengo el sabor de sus labios a pesar de haber sido hace meses, el sentir su piel cuando le acariciaba bajo la ropa, el aroma de su cabello y esa sonrisa que muy pocas veces dejaba ver.

— Soperutano — tan delicada como siempre mi amada — no vamos a cargar las cajas de licor para Victor?

— No vamos ahora mismo con él, quiero llegar a un satélite para descansar unos días — le dije sereno bostezando por el largo viaje que es dentro del Sistema Solar ya que no es permitido el salto warp por desechos de satiletes artificiales para comunicación o naves naufragadas o a la deriva y evitar accidentes.

— ¿Desde cuando tu descansas si ya pareces robot, con tanto metal en tu cuerpo?

— Desde que...

— ¿Qué? — pregunta con mal humor y fastidio — Mira debiste dejarme en Marte para de menos buscar la forma de hacerme taruga y no estar viajando con la poca gravedad que se siente en la nave y satélites pequeños.

— No te quejes, vamos a estar tranquilos y ya veremos como pasar el tiempo, aparte que es la primera vez en meses que estaré contigo a solas.

— No jodas, pudimos perdernos en Marte.

Y que luego salga con que uno de ellos se meta en broncas y ahí va Joel a sacarlos del apuro cuando mas tranquilo estoy — dije algo pesado — así que si saben que estoy lejos son mas prudentes.

— En eso tienes razón, oye Joel...

— ¿Qué pasa? — pregunté intrigado

— Aquella vez cuando recién tuviste la pérdida de Sveta y estuvimos solos y casi desnuda solo con una sudadera y estando solos en el sofá...

— ¿Ajá? — no daba tanta concentración a lo que decía por ir monitoreando el viaje — que tuve pesadillas con ella y la pasamos bebiendo y hablando.

— Si ese día o mas bien noche — dijo agachando la cabeza algo roja de la cara a lo que viaja al mirarla de reojo pero creí que eran las luces de los botones — ¿Por qué no me tocaste?

Trague saliva cono si en ves de saliva fueran clavos sacados del fuego al rojo vivo.

— Quiero que seas cinsero por favor.

— Si te llegaba a tocar no hubiera sido justo, estábamos tomando mucho, perdí a mi esposa en aquel entonces a pocos días, aparte no es justo para ti ya que mereces que sea por amor a ti y no por buscar consuelo y que  después pudo haber roto nuestra relación y desaparecerías sin dejar rasgo de vida por años.

Su silencio me hizo sentir inquieto, no había respuesta a lo que contesté, no hablamos por varios minutos aunque parecían horas, no miré que hacía, entré en pánico. De repente volteé hacia ella y de su rostro se veían lágrimas correr.

— ¿Dije algo malo? — pregunté apenas coordinando las palabras.

— No es nada...

— Contigo ese nada es mucho mujer — respondí parándome para buscar una botella y un par de vasos, también una cajetilla de cigarros.

— ¿Aun la amas?

— Si, fue importante ella para mi, pero tu quieres saber si contigo trato de compensar la pérdida de Sveta ¿No?

— Si, pero no sabía como decirlo.

— Toma el vaso y éste cigarro anda — quise que se tranquilizara — la verdad nunca fue así, a ella la dejé ir, a ti te tengo amor desde que te besé en aquella primer cita.

— Eres un baboso, ¿aun recuerdas ese beso?

— Obvio que si, te diría cuanto me gustó, lo hermosa que eres pero terminaría en el suelo por decirte halagos — le hice sonreír y vi como limpiaba sus lágrimas con las mangas del suéter que lleva puesto — por si no lo has notado guardé bajo llave las armas por si te hago un cumplido.

— Eres un tarado Joel, no sé como me aguantas si tengo un carácter de mierda.

— Fácil, por que se como tratarte y no porto como un idiota, te doy tu espacio cuando estás que ni tu te soportas, te escucho cuando solo quieres hablar y lo mas importante es que te amo.

Me retiro de la sala de estar o como se le llame a la parte del Buitre donde convivimos o descansamos cuando hay viajes largos directo a las duchas, pero como siempre se me olvida cubrir las piezas cibernéticas y me dan descargas horribles y me hacen gritar. Rowss entra para reírse pensando que me di un resbalón pero solo fue el golpe de mi puño izquierdo en el la lámina por el reflejo del dolor. El rostro de Rowss cambia de uno de burla a uno de preocupación y después de sonrojo por ver mi miembro erecto por la descarga provocada y la aceleración de mi corazón.

— Eres un pervertido — me lanza una toalla para cubrirme y cierra las perillas del agua de la ducha — te estabas masturbando — pensó eso y pues no era mala idea el aprovechar la erección y al empuñar mi miembro se sale toda roja de la ducha....

Continuará mas adelante...