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Parte 3

Victoria

Salí disparada del bar, no podía creer que casi me beso con Jack, él es mi amigo pero no puedo mentir; siempre he sentido una gran atracción por él, pero sé que nunca se fijaría en mí. Yo de estúpida me deje influenciar por Karen que me dijo en el baño que le bailara de esa manera. Qué pena no sé si sea capaz de verle la cara de nuevo.

Llegue a mi casa. Estaba agotada por el día que tuvimos; Jack siempre termina en peleas no puede con un su maldito genio; termina perjudicando al grupo, él es un gran líder y ahora está suspendido; por lo menos no lo veré por una semana.

La semana había pasado rápida, menos mal no me cruce con Jack; cuando al fin apareció el jefe le sugirió que buscara ayuda con una psicóloga así que le ofrecí el servicio de mi hermana, ella lo podría tratar.

-Entonces que piensas Jack, ¿le pido cita con mi hermana o no?.- él se estaba quitando la camisa para ponerse el uniforme, empecé a ver su cuerpo musculoso y esos tatuajes que lo adornaban, se veía tan sexy y caliente. No sé en qué momento quede embobada cuando siento que carraspean, alzo mi miraba y me quedo mirando sus ojos, el poco a poco se fue acercando, susurro en mi oído.

-¿Te gusta lo que ves?.- trago fuerte saliva, no me salían palabras de mi boca; el muy idiota sabía que él me afectaba y se estaba burlando de mí. Lo empuje lejos de mí; estaba realmente furiosa.

-Que te hace pensar eso, no seas ridículo; sabes que vete a la mierda.- cuando me dispongo a salir, él me toma de la mano.

-Espera Vicky no te enojes, solo bromeaba.- agacha su cabeza avergonzado. –Sabes que no confió en nadie, me cuesta creer en las personas y sé que tú eres una buena amiga; llama a tu hermana confió en ti pero eso si tú me acompañas a las terapias.- sonríe, yo le devuelvo la sonrisa y lo dejo solo para que termine de alistar.

Mi hermana había aceptado en ayudarlo con sus terapias para manejar su temperamento, yo lo acompañaba pero me quedaba afuera del consultorio. El a veces salía rojo de rabia y se iba sin ni siquiera dirigirme una palabra me dejaba hay sentada como una estúpida, otra veces salía todo sumiso, cariñoso y amable conmigo. La verdad es que me estaba cansando de su bipolaridad; mi hermana me decía que le tuviera paciencia y que él tenía que quemar todo eso negativo que tenía por dentro, que descargara esa energía.

Un día me toco turno de noche junto con Jack, Matt y Karen. Faltaba poco para salir de ese turno y llegar a casa. Sabia que entre Karen y Matt había más que una amistad, ellos era como follamigos, eso decían. No tenían control de sus actos, nosotros los cubríamos pero a veces se pasaban. Nos tocó una emergencia y nos demoramos en salir, porque estos dos estaban follando en algún lugar de la estación.

-Mierda Matt!!, apúrate que llegamos tarde!!.- Grita Jack, mientras Matt viene organizando el uniforme.

Karen estaba a mi lado terminándose de peinar.

-Mierda!!!.- grita ella. La volteo a ver para saber que pasaba.

-Olvide mi brasieles.- sonríe sarcásticamente, solo niego con la cabeza y Jack me mira con picardía; pongo mis ojos en blanco.

Cuando llegamos ya estaba otro grupo de bomberos, el batallón de Raúl el rival de Jack. Sabía que Jack no podía tener ningún problema con nadie en especial con Raúl ya que le habían advertido que lo sacaban de la institución; después de apagar el incendio empezó Raúl y sus compañeros a tirarle indirectas a Jack. Veía su rostro frustración, él quería ir a partirle la cara a Raúl y sus amigos pero se estaba controlando y eso lo veía cuando apretaba sus manos.

-Vamos chicos no deje que ellos les afecte.- Dije yo tratando de tranquilizar la situación.

-Eso Jacki hazle caso a tu perra.- grita Raúl y todos ellos empieza a burlarse. Veo que Jack se le tensiona la mandíbula y se dirige a él; le hago señas a Matt y los demás para que se lo lleven antes que él se le tire al imbécil este.

-Que dijiste cabron.- Le preguntaba Jack a Raúl rojo de la rabia.

-Lo que escuchaste.- Raúl le muestra sus dientes aumentando su burla, cuando veo que Jack se le va a tirar me paro en el medio y sin pensarlo lo tomo de su rostro y lo beso.

Él se queda quieto unos segundos sin saber qué hacer, un momento a otro ciento sus manos en mis mejillas y abre su boca para profundizar el beso, le sigo el ritmo; no sé cuánto tiempo paso, pero cuando nos separamos Raúl y sus compañeros ya se habían ido. Matt tenía una sonrisa de picardía, Karen se mordía los labios y le susurraba cosas al oído de Matt.

Como siempre no pude verlo a la cara y Salí disparada al camión, me senté al frente con el chofer ignorando los aplausos de los demás compañeros.

Victoria

No podía creer lo que había hecho, por tratar de tranquilizar la situación me lance en brazos de Jack, no sé cómo se lo iba a tomar el, yo tenía mucha pena. Cuando llegamos a la estación me fui a cambiar lo más rápido posible así evitando a Jack y mis compañeros. Como había terminado mi turno me fui a casa, dándole gracias a Dios de no encontrármelo a él.

Llegue a mi casa, me di una ducha tratándome de bajar esta calentura que mantenía por Jack, me puse unos shorts cortos que llegaba hasta el inicio de mis nalgas y una blusa holgada sin ropa interior, me encantaba estar sin ella. Pedí la cena a domicilio ya que no me apetecía en cocinar, en menos de 10 minutos sonó el timbre, supuse que era el de domicilio así que apreté el botón de entrada para que el repartido entrara al edificio.

-Vaya que llego rápido la comida.- Digo yo al momento de abrir la puerta, pero al que vi me dejo sin aliento; ahí estaba el.

-la comida es mejor comerla calientica.- sin darme tiempo se lanza dónde estoy yo y me acorrala contra la pared, me toma el cuello y empieza a besarme con desesperación, yo aún estoy en shock cuando el jala mi labio con sus dientes, suelto un jadeo y pongo mis manos alrededor de su cuello; el aprovecha y me estruja más contra el sintiendo su enorme erección. Baja una de sus manos por mi blusa y la mete debajo de ella, cuando ve que no llevo brasiel suelta un gran gemido.

-Vaya veo que me esperabas.- Sin darme tiempo de responder vuelve a besarme con ansiedad, baja sus manos y aprieta mi trasero, me alza y enredo mis piernas alrededor de él. Como el ya conoce mi casa me va llevando a la habitación si antes darle una patada a la puerta de la entrada para que se cerrara.

Cuando llegamos al borde de la cama me tira con brusquedad a la cama, yo jadeo por la reacción y muerdo mi labio inferior. Veo que poco a poco se va quitando los zapatos y la camisa hasta quedar en bóxer; yo solo contemplo su hermoso cuerpo.

-Te gusta lo que vez.- me dice con un brillo en sus ojos.

-Me gustara más si no llevas nada puesto.- le contesto con picardía. El ríe baja su bóxer y se posiciona encima mío, empieza a besarme lentamente por mi cuello pasando sus manos por mis brazos y llega hasta mis senos; me quita de un tirón la blusa y contempla mis senos. Me siento tímida y el solo sonríe.

-Hermosos, perfectos como a mí me gusta.- pasa su nariz por la punta de mi pezón y lame de él, yo arqueo mi cuerpo y contengo un gemido.

-Umm sabe delicioso.- hace lo mismo con el otro seno, sabe lo que hace; me atormenta poco a poco, pasa sus labios por ambos y respira fuerte en ellos así sintiendo su respiración, los chupa, los besas, los muerde. Este hombre me está matando.

-Janckk.- no podía ni hablar. Sabe lo que me provoca su tortura; va bajando por mi estómago, besa mi ombligo y chupa alrededor de él; cuando siento que no puedo más me baja el short.

El timbre suena y sé que es el de domicilio, le digo pero él niega.

-La única comida que quiero ahora eres tú.-

-Abre las piernas nena, déjame deleitarme con ese hermoso coño que tienes.- sin resistir más le abro mis piernas, el aspira fuerte pasando su nariz entre ella. Sin mirarme solo sintiendo su respiración en mi vagina.

-Nena dime que quieres que haga.- Mierda este hombre me quiere matar, muevo mis cadera para que mi vagina toque su boca y él se corre. Alza su mirada y me ve con esa picardía, luego con pequeños susurros encima de ella me dice.

-Sabes lo mal que me has dejado todo este tiempo.- pasa su lengua en medio de mi pliegues. –Sabes la tortura que vivía día a día cada vez que vez que te veía.- pasa de nuevo la lengua sintiendo su respiración en ella.- ahora te hare pagar por ello.- pasa de nuevo su lengua.

No aguanto más me sale un fuerte jadeo.

-No más por favor.- el ríe y empieza pasar su lengua por ella, la chupa y siento como su lengua me penetra; con una de sus manos empieza a masajear mi clítoris y sin darle tiempo exploto, lame y toma hasta la última gota de mi orgasmo.

-Ummm el mejor sabor que he probado.- pérdida aun en mi estado él se pone encima mío y me besa con pasión, yo me recupero de inmediato y paso mis piernas alrededor de él. Bajo mi mano y tomo su miembro, empiezo a pasarlos por los pliegues de mi vagina y hago el amago de meterlo pero no lo hago, quiero torturarlo como él lo hizo conmigo. No aguanta más y me quita la mano y en una sola embestía fuerte se adentra dentro de mí; doy un grito al sentirlo adentro y sigue con sus embestidas fuertes como si me fuera a partir en dos. Esto me encanta salvaje como lo es el.

Sin esperarlo me toma de mis nalgas y me alza con el adentro, se para y me lleva hasta la pared, me empotra salvajemente hasta que ambos nos corremos al mismo tiempo. Al regular nuestra respiración, trato de bajarme pero él me detiene y murmura en mi oído.

-Nena esto apenas comienza.- sin dejar de penétrame se sienta conmigo en la cama y me vuelve a besar yo le sigo, poco a poco siento como su erección va tomando fuerza y de nuevo empieza a moverse y me hace que le lleve el ritmo. Con sus manos me aprieta las nalgas, luego baja una y la posiciona en la entrada de mi ano, siento como comienza hacer presión con el dedo dando suave círculos, yo me tensiono y el sigue con el ritmo cuando mete la punta del dedo trato de despegarme pero él no me deja, seguimos moviendo al ritmo y siento cada vez más presión en el ano y con sus embestías hace que mi cuerpo se contraiga más y explote en un enorme orgasmo, cuando llego el me sigue.

No podía más, me tumba en la cama y se pone al lado mío abrazándome.

-Un día de estos no muy lejanos me follare ese culito rico que tienes.- trague saliva sin saber que responder y poco a poco fui quedándome dormida.

3z' GuS=W

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