Un joven de cabello alborotado se encontraba terminando de alistarse para ir a su primer día de clases en una de las prestigiosas universidades de su país, mientras miraba una foto que tenía en su mesa de noche donde él recibía una medalla de un concurso, a un costado suyo un joven cabello de flama de mirada ceñuda aparecía también con una medalla.

¡Vegueta mi eterno rival¡ pensó el apuesto jovencito de cabello alborotado.

Luego el jovencito bajo con una radiante sonrisa, mientras su familia desayunaba en la sala.

¿Ya te vas hijo dijo su padre?, si papá es el primer día no quiero llegar tarde, dijo el joven de cabello alborotado mientras su madre se acercaba a darle una bolsa con algo para que coma en el camino.

¡Gracias mamá¡ dijo el jovencito antes de salir.

Gokú salió, se coloco su casco, subió a su moto y partió rumbo a la universidad.

Minutos después: "Universidad"

Un grupo de muchachos platicaban en el patio principal de la universidad:
Este año hay nuevos ingresos y están divinas, decía un joven de cicatriz.

Si yo acabo de ver a una rubia que esta bellísima, decía un calvo.

Si yo también he visto bastante chica guapa entre las nuevas dijo otro joven.

Ya cállense y dediquen a estudiar que por algo sus padres gastan tanto en ustedes dijo uno de los jóvenes.

Hay Piccolo ya te pareces al odioso de Vegueta dijo uno de los jóvenes.

Si Yamcha tiene razón dijo otro.

No me comparen con ese engreído, dijo Piccolo molesto.

A las afueras de la universidad:

El joven de cabello alborotado estacionaba su moto, mientras que justo a un costado suyo un joven cabello de flama llegaba en su moderno auto deportivo y se estacionaba junto a él.

¡Hola Vegueta¡ dijo el joven de cabello alborotado con una sonrisa.

El jovencito de cabello de flama lo miro con indiferencia y no le contesto el saludo.

Aun sigues molesto por el campeonato del año pasado, yo gané justamente, no con trampa como tú les hiciste creer a todos, dijo Gokú molesto.

Pues me importa lo que digan ahora todos piensas que ganaste con trampa y eso es lo que cuenta, dijo irónico el joven cabello de flama.

¿Porqué me odias?, solo por ser mejor que tú y que lo reconocieran públicamente, dijo Gokú enfureciendo más a Vegueta.

Claro que no maldito insecto, yo soy mejor que tú en todos los aspectos y te lo demostrare en el campeonato de este año, yo no gasto mí tiempo odiando a sabandijas, dijo Vegueta.

Eres insoportable aunque tengo que reconocer que eres un gran rival de combate, dijo Gokú.

Qué lástima que yo no piense lo mismo que tu, para mí tú no eres un gran rival solo eres un insecto, dijo el joven cabello de flama bajando de su auto y caminando hacia las aulas.

Gokú miro entrar a Vegueta dentro de la universidad y él también decidió entrar. El joven iba caminando tan apresurado que no se dio cuenta en qué momento tropezó con alguien.

¡Disculpa¡ dijo Gokú recogiendo los libros que habían caído al piso.

No te preocupes yo también tengo la culpa iba tan apresurada que no me fije, dijo una dulce voz.

Gokú levanto la mirada y se topo con una bella jovencita pelinegra que le sonreía. Toma dijo Gokú entregándole sus libros.

¡Gracias¡ dijo la pelinegra antes de retirarse.

Horas después:

Eso te dijo el antipático ese, decía un joven.

Así es Krilin, no comprendo porque me odia tanto, dijo Gokú.

A lo mejor le bajaste alguna chica dijo Piccolo.

No como crees, yo no soy así y ustedes lo saben, yo nunca me meto con la chica de otro, dijo Gokú.

O sigue así porque esa vez Bulma dijo que le parecías el chico más atractivo de la universidad, dijo otro de los jóvenes.

Puede que Ten tenga razón Gokú, a lo mejor sigue dolido por lo de Bulma, dijo Yamcha.

No lo creo además yo no siento nada por Bulma, ella solo es mi amiga, dijo Gokú.

Tu no pero tus padres y los suyos quieren emparentar y Vegueta estuvo con ella y de un día para otro ella lo termino para acercarte a ti, dijo Piccolo.

Solo es coincidencia, dijo Gokú sin prestar la debida importancia al comentario.

Si eso dices dijo Piccolo, mientras los demás jóvenes movían la cabeza.

Mientras en otra facultad:

Ese estúpido ya me tiene harto, dijo Vegueta.

Pues si lo que quieres es que el quede mal frente a Bulma y tenga problemas con sus papitos, déjanoslos a nosotros dijeron un par de jóvenes.

¿Qué se les está ocurriendo? Freezer, dijo Vegueta.

Ya lo verás, él dejara ser él buen chico que todos creen dijo Freezer.

Si Vegueta tu tranquilo, nosotros nos encargamos, dijo un joven de cabello verde.

A la salida de la universidad:

El joven de cabello alborotado iba caminando hacia dónde había estacionado su moto, cuando alguien se le acerco de manera melosa.

Gokú hermoso, te estaba esperando, dijo coquetamente una linda joven peli azul.

¡Hola Bulma¡ ¿qué tal tus vacaciones?, pregunto con amabilidad Gokú.

Bien hermoso, te traje algo dijo la jovencita entregándole una caja con un lazo azul.

¡Gracias no te hubieses molestado¡ dijo Gokú sonriendo, mientras a lo lejos un joven de cabello de flama miraba molesto la escena.

¿Me llevas a mi casa?, dijo la peli azul coquetamente.

Es que no pued........, decía nerviosamente Gokú.

No me digas que quedaste llevar alguna de tus fans, decía celosa y la vez berrinchuda la peli azul, cuando Gokú vio a lo lejos a la bella jovencita pelinegra con la que tropezó cuando iba por el pasadizo.

¡Eh, sí¡ quede en llevar a ella, dijo Gokú acercándose a la pelinegra y tomándola de la mano sin que ella comprendiera que sucedía. Sígueme el juego, le dijo muy despacio el joven de cabello alborotado.

¡Eh¡, dijo la pelinegra que no comprendía a dónde la llevaba el jovencito.

Hasta luego Bulma, dijo Gokú subiendo en su moto, colocándose el casco e indicándole a la pelinegra que subiera con él.

Milk sin entender por qué le siguió el juego y subió a la moto abrazándose a la cintura del jovencito de cabello alborotado, quién prendió la moto y partió.

Vegueta que había contemplado todo pensó: ¿quién es esa chica? ¿no la he visto antes?, y es muy bella, ¿en verdad será algo del insecto?, pensaba el joven mientras una joven peli azul miraba enfadada la escena.

Minutos después:

Gokú detenía su moto a unas cuadras de la universidad, bajando de ella junto a la pelinegra.

¡Gracias por ayudarme¡ te debo una, dijo Gokú sonriendo.

No entiendo ¿por qué hiciste algo así?, dijo la pelinegra intrigada.

Quería espantar a esa chica. ¡Discúlpame¡ no me he presentado, soy Gokú Son, dijo el joven sonriendo.

Milk Ox, dijo la pelinegra tomando su mano.

Me gustaría invitarte algo en agradecimiento, dijo Gokú.

No es necesario, ¡gracias¡ ya me tengo que ir, dijo la pelinegra levantando su mano para detener un taxi y subir en el.

Milk Ox, que bella niña eres, pensó el joven de cabello alborotado viendo partir el auto con la bella pelinegra.