Alice's POV

Sonó el timbre para la hora del almuerzo y me levanté de mi sitio para salir de clase. Cuando salí, vi a Benny, Ethan y un familiar vampiro rubio, alias Rory, caminando por el pasillo. Una diferencia, al igual que todos los demás, Rory es más alto. De hecho, tiene casi la misma altura que Benny. Una sonrisa me cubrió la cara y corrí hacia él.

— La luna está a salvo. Por ahora-- ¡Whoa! — dijo Rory gritando un poco por el impacto de mi abrazo, pero sin embargo correspondió.

— Hola, Alice. ¿Cuándo volviste? — preguntó, todavía sosteniéndome en sus brazos.

— Ayer. Es bueno verte, Roar.

— Es bueno verte a ti también — me abrazó con más fuerza.

Escuché a alguien aclararse la garganta.

— De acuerdo... — dijo Benny mientras me sacaba de los brazos de Rory — ¿Puedes devolverme a mi novia, ahora? Gracias — golpeé su pecho ligeramente por actuar de forma posesiva.

Rory se rascó la parte posterior de su cuello y rió nerviosamente.

— Lo siento — murmuró.

Me di cuenta de que encontraba la situación algo incómoda, aunque no sé por qué, así que decidí cambiar de tema.

— ¿De qué estaban hablando? — pregunté.

— De los impulsos vampíricos de Sarah — dijo Benny.

— ¿Impulsos vampíricos? — pregunté.

— Sí, y ella metió a nuestro nuevo subdirector en una papelera — continuó.

Sonreí al hecho de lo que le hizo a Stern, justo era lo que yo quería hacer antes.

— Eh, cambiemos de tema — dijo Ethan — Ya vale de drama vampírico por hoy.

Entramos en la cafetería y estaba más ruidoso que de costumbre. Todo lo que podíamos escuchar eran los chillidos de las chicas.

— ¡Guau, el rumor era cierto! — dijo Rory cuando vimos a un grupo de chicas amontonándose alrededor de un chico.

— ¿Quién es él? — pregunté.

— ¡Es Dirk Battison de Atardecer! — respondió Rory con entusiasmo y rodé mis ojos.

— No me creo que esté aquí — dijo Ethan.

— ¡Yo no me creo que a alguien le importe! — dijo Benny diciendo exactamente lo que iba a decir yo — ¡Oh! Tengo corazón, sangre, chispa y muchísima tristeza. Capullo.

Ethan se acercó a Dirk y comenzó a hablar con él.

— 'Dirk' , suena como un cruce entre idiota y imbécil — dije mientras me miraba las uñas.

Me di cuenta de que Erica había aparecido y ahora estaba alejando a Dirk de las demás chicas, Dirk le pasó a Benny su taza de café en el proceso.

— A ver, ¡gente! — le dijo Benny a las chicas que gritaban pidiendo la taza de café de Dirk — ¡¿Quien quiere la taza del tío de Atardecer?! ¡La puja empieza en cien!

                                                          ..........Al día siguiente...........

Mi primera clase era orientación con Benny e Ethan, pero por alguna razón Ethan no estaba allí. Benny me dijo que el Consejo Vampírico lo estaba buscando pero que no sabe por qué. Sí es cierto. Consejo Vampírico. Dios, ¿por qué mi vida no puede ser normal por una vez?

Después de que el profesor apuntó quien vino y quien no, saqué un libro mientras Benny hojeaba su libro de hechizos. Estábamos sentados en el sillón con nuestras manos entrelazadas descansando en mi pierna.

— ¿Alguna palabra de Ethan? — pregunté.

— No, le enviaré un mensaje. — cerró su libro de hechizos y sacó su teléfono.

Mientras le enviaba un mensaje de texto, deslizó su mano fuera de la mía y me envolvió con su brazo.

Dejó su teléfono y me besó en la parte superior de la cabeza.

Sonreí y seguí leyendo mi libro. Benny apoyó su cabeza sobre la mía mientras jugaba con los dedos de mi mano libre en silencio.

— ¿Sabes cuál fue la peor parte de tu ausencia? — preguntó, moviendo su mano de la mía y poniéndola en mi rodilla.

— ¿Qué? — pregunté, sin apartar los ojos del libro.

— Que perdimos muchas oportunidades de pasar un tiempo a solas — susurró sugestivamente, moviendo su mano lentamente por mi muslo.

Mi respiración se enganchó porque no sabía cómo reaccionar. Levanté la vista para ver que, afortunadamente, el profesor no estaba mirando. Él detuvo su mano a mitad de mi pierna y suavemente frotó su pulgar contra el interior de mi muslo.

— Tendremos que compensarlo — susurró aún más en voz baja, apretando mi muslo y enviando escalofríos por todo mi cuerpo.

¿Que esta pasando? ¿Es esto una de sus hormonas adolescentes que se ha vuelto rebelde? Y lo más importante, ¿por qué me gusta mucho más de lo normal?

Comenzó a mover su mano otra vez, pero cuando sonó el timbre salí disparada del sillón.

— Vamos a buscar a Ethan — sugerí, arrojando mi libro en mi mochila y colocándola sobre mis hombros. 

Benny dejó escapar un suspiro antes de levantarse, recogiendo su bandolera y siguiéndome.

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— ¿Por qué están enfadados con Ethan? — le preguntó Benny a Sarah.

— Creen que va a por ellos. Primero dos vampiros son atacados en su jardín. Después otros dos quieren secuestrarlo y también los eliminan — explicó ella.

— ¡Wow! Cuatro vampiros son asesinados cuando estaban cerca de él. Inocente o no, eso realmente no se ve bien para Ethan — dije.

— Estoy preocupada — dijo Sarah y suspiró.

— Yo también — empezó Benny — Les prometí entregar a Ethan si me dejaban en paz.

Golpeé el brazo de Benny justo cuando Sarah gritó.

— ¡Pero él no ha hecho nada!

— Ow — chilló Benny de dolor mientras se frotaba el brazo.

— Dicen que los atacó una nube verde apestosa — dijo Sarah con más calma.

— ¿Nube verde apestosa? — preguntó Rory viniendo detrás de nosotros — ¿la madre de Ethan ha vuelto a preparar tacos? Por cierto, ¿está aquí? El Consejo quiere que lo 'llevemos ante la justicia', donde quiera que esté eso.

Benny se frotó la cabeza en frustración por Rory, mientras a mí me costaba contener la risa.

— ¿Por qué no le preguntas a la nube verde apestosa? — bromeé.

— ¡Psst! Es cierto, había una nube verde. Yo la vi — dijo la voz de Ethan. Miramos a alrededor para ver que no estaba cerca de nosotros. 

— Es Ethan pero no lo veo — dijo Sarah.

— Estoy aquí — Todos vimos que su voz venía de donde estaban las taquillas.

— ¡Mola! ¿Sabes que significa esto? — preguntó Benny contento — ¡He perfeccionado el hechizo de invisibilidad sin ni siquiera intentarlo!

Rory sonrió como un loco. Bien hecho, Benny, ahora tienes a Rory muy emocionado.

— O está dentro de la taquilla — Señalé hacia la taquilla de donde parecía provenir su voz y Benny se acercó a ella.

— ¿Ethan? — preguntó él y golpeó su puño en la puerta.

— ¡Auuch! — gritó Ethan — Sí, Benny, estoy en la taquilla. Si los vampiros vienen a por mí en el colegio, al menos tendré apoyos.

— Puedes contar conmigo — dijo Rory y golpeó su mano en la taquilla.

— ¡Auuuch!

— Después de que te lleve ante la justicia. ¿Sabéis si está por aquí?

— No puedo ayudarte, Rory. Necesito demostrar mi inocencia. Pero en los pasillos solo hay colmillos.

— No son vampiros de verdad — dijo Sarah — Es el día de Atardecer en el insti, en honor a la nueva mascota de Erica — luego se acercó a la taquilla y silenciosamente le dijo algo.

— Te burlaste de la forma de cocinar de la madre de Ethan mientras él estaba ahí — le dije a Rory.

Los ojos de Rory se abrieron y frunció sus labios. Me reí levemente de su expresión haciendo que él solo me sonriera.

— Muy bien, chico de la taquilla. Me han perseguido todo el día porque te culpan a ti — empezó Benny — Y tú culpas a una nube verde y seguro que la nube verde culpa a los unicornios y--

— La nube era real, Benny. Estaba viva. Y también olía. Olía como a... malvado.

— ¿Malvado? — preguntó Benny frunciendo el ceño.

— Como los tacos de su madre — le susurré a Rory, haciéndole reír.

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Entré en la habitación de Ethan para escuchar un golpe en la ventana. La abrí para ver a Rory levitando afuera con un Ethan envuelto en una manta sobre su hombro.

— Vamos, entra — me aparté del camino.

Rory prácticamente tiró a Ethan al suelo, haciéndole gemir de dolor. Una vez que se desenredó de la manta, Ethan se levantó, se sentó frente a su ordenador y comenzó a escribir algo, Rory y yo miramos por encima de su hombro.

— Despejado — anunció Benny cuando entró en la habitación — He dado la vuelta dos veces y he marcado los hechizos en los que hay humo malvado, azufre y violencia.

— Wow, pues sí que hay violencia humeante — dijo Rory mirando boquiabierto el libro de hechizos con muchos marcadores que sobresalían de él.

— De ahí el nombre de magia negra y no magia alegre en un día soleado — respondió Benny.

— Whoa, whoa, whoa — dijo Ethan haciendo que Benny y Rory se callasen — Hay más de doce desapariciones en un mes. Y en casi todas pone, no hay foto reciente disponible — dijo leyendo del ordenador.

— ¡Osea que la nube mágica ataca a personas que no tienen cámara! — dijo Rory.

— O la nube ataca a personas que no salen en las fotos — expliqué.

— ¡Claro! — Rory chasqueó sus dedos — A los tímidos.

Oh, Rory.

— No, tío. ¡Vampiros! — dijo Ethan.

— ¡Eh, eh, eh, eh! Tiene que ser esto — Benny nos mostró el libro — Inspira mortis. El Aliento de la Muerte. Quien use esto puede transformar su ira o energías oscuras en un vapor físico que localiza y destruye su objetivo.

— ¡Quizá por eso me ignoró a mí! Solo va tras los vampiros — dijo Ethan — Hay que avisar a Sarah — sacó su teléfono y la llamó, pero ella no contestó.

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— ¡Alice! ¡Ponlas en su sitio! — me ordenó Ethan.

Hice un puchero, dejé de lanzar sus rocas lunares en el aire y las puse debajo de su almohada.

— Solo estaba jugando con ellas — dije recostándome en su cama — Estoy taan aburrida. ¿Por qué no podemos hacer lo que los adolescentes normales suelen ha--

— Ya sé como luchar contra el aliento de la muerte — Benny me interrumpió y me hizo suspirar.

— ¡Oh! — Rory levantó su mano.

— No digas tapaos la nariz — le dijo Ethan y él bajó su mano.

— Las tribus antiguas usaban botellas de brujas para apartar a los espíritus malignos y atraparlos — continuó explicando Benny.

— Guay — dijo Ethan.

Me senté en la cama, cruzando las piernas.

— Sí, pero hay un problema, ya no nos quedan botellas de brujas.

— Cualquier contenedor vale. Como este — Benny agarró el portalápices de Ethan y arrojó su contenido al suelo — Siempre que le pongas los símbolos adecuados y yo diga el hechizo correcto. Lo difícil es el cebo.

— ¿El cebo? — preguntó Ethan.

— Objetos que busca el espíritu.

— Osea que ponemos cosas de vampiros dentro, ¿no? — pregunté y Benny asintió.

— ¿Qué cosas dices? — Rory se levantó de la cama — Mis órganos internos no, ¡los necesito!

— ¿Ya has ido a hacer un pis? — le preguntó Benny.

— ¡Eww! — chillamos los tres con asco.

Rory, vacilante, agarró el frasco de Benny y salió de la habitación.

— Sarah no contesta — dijo Ethan y suspiró.

Pude escuchar los pasos de Rory volviendo a la habitación, así que sostuve el cómic que él estaba leyendo antes, se lo lancé y salió como una exhalación.

El teléfono de Ethan sonó y él respondió.

— ¡¿Un juicio?! No, esto es malo. Corren todos peligro. ¿Dónde es? — preguntó por último y colgó.

— Sarah está en camino con el Consejo Vampírico en el viejo hostal mason. Tenemos que irnos.

¿Soy solo yo, o toda la cosa del Consejo Vampírico parece realmente estúpida e inútil?

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— ¡Dejadla en paz! ¡Me queréis a mí! — dijo Ethan mientras entrábamos caminando rápido hacia donde se estaba llevando a cabo el juicio.

— ¡Ya me encargo yo! ¿Qué haces aquí? — preguntó Sarah.

— ¿Por qué él está aquí? — murmuré para mis adentros cuando vi a Dirk Battison. Como si él realmente tiene alguna relevancia aquí.

— Intentar protegerte — le respondió Ethan.

— Pues yo intento protegerte a ti — dijo ella.

— Bueno, ¡nosotros también te protegemos! — añadió Benny con torpeza.

— Mirad, yo no toqué a vuestros amigos. Fueron atacados por el hechizo Aliento de la Muerte — explicó Ethan.

— Sí, menudo miedo, ¿verdad? — dijo Benny — ¡Pero lo que importa es que podemos pararlo!

— ¡Cierto! Me obligaron a mear en un frasco — añadió Rory.

— ¡Cállate! — gritó la pequeña niña vampira. Aunque parece joven, probablemente tenga unos pocos cientos de años — Tal vez les debamos el demostrar su inocencia.

Bueno, no esperaba que lo entendieran tan pronto, pero no me quejo.

— Oh, eso es razonable, gracias — dijo Ethan, guardando su estaca.

— Yo digo que los mortales sean devorados ahora — continuó la niña.

Eso es más lo que me esperaba.

— Espera, ¡¿qué?! — pregunté.

— ¡No podéis hacer eso! — gritó Sarah al mismo tiempo que Dirk se desmayaba.

— ¿Cómo podemos demostrar nuestra inocencia? — preguntó Ethan mientras apuntábamos las pistolas de agua bendita hacia los vampiros que empezaban a acercarse a nosotros.

— Si los ataques siguen sucediendo, ¡supongo que erais inocentes! Me parece justo — dijo la niña mientras se volvía a sentar.

— ¡Serás hija de p*ta! — grité.

— ¡Estoy en desacuerdo con tal argumentación! — gritó Benny.

— La orientación me ha servido de algo. Me habéis enseñado a cuando controlarme, y a cuando no — dijo Sarah furiosa.

— Sarah, espera — la paró Ethan — ¿Y vosotros os llamáis consejo? ¿No tendríais que votarlo?

— Bien — dijo la niña- quiero decir la vampira jueza — ¿Todos a favor? Esas manos.

Todos alzaron sus manos a excepción de uno, cuyos ojos eran verdes. De repente, comenzó a tratar de atacar a la niña.

— ¡Benny! ¡Benny! La botella, rápido — le ordenó Ethan.

— ¡Apártate de mí! — gritó ella.

— Oh, ahora necesitas nuestra ayuda — dije y rodé los ojos.

Ethan tomó la botella de Benny y comenzó a atraer al vampiro poseído en su dirección. Estaba funcionando hasta que Ethan tropezó con NADA, como qué demonios era eso, y derramó el contenido del tarro sobre él. ¡Ew!

La neblina verde dejó el cuerpo del vampiro y comenzó a revolotear sobre Ethan.

— Ew, tío es horrible. Y asqueroso — dijo Benny a mi lado.

Sarah se puso de rodillas junto a Ethan y le preguntó si estaba bien. Probablemente fue una mala idea porque pronto Ethan era ahora el que estaba poseído y comenzó intentar atacarla.

— ¡¿Qué hacemos con él?! — preguntó Sarah mientras se defendía de Ethan.

— ¡Destruyelo! ¡Te lo ordenamos! — gritó la niña.

Levanté mi mano hacia ella.

— Mira, perra. Retrocede. Es nuestro amigo y no creo que sepas cómo funcionan los amigos — ella solo me silbó, mostrando sus colmillos.

— ¿Y la botella de la bruja? — Benny se dio cuenta de donde estaba y la recogió del suelo, recogiendo también las piedras mágicas y metiéndolas dentro.

Se acercó a Rory y a mí. 

— Todavía necesito algo más.

Sin dudarlo, arranqué unos pelos de la cabeza de Rory y los arrojé al frasco.

— ¡Auuch! — gritó Rory de dolor.

— Lo siento, Roar.

— ¡Santus-dalthorum-recantos-algora! — dijo Benny el hechizo mientras sostenía la botella de brujas.

Sarah tiró a Ethan al suelo y la bruma verde fue succionada de su cuerpo hacia la botella de brujas.

— ¡Te pillé! — Benny cerró el contenedor — ¿Alguien quiere nube anti-vampiro? 

— ¿Sigues enfadada por defender a los mortales que te han salvado la vida? — le preguntó Sarah a la niña.

— Erica tenía razón; no eres divertida — respondió ella — Esta bien. Podéis iros.

— Gracias. Mucho mejor.

Erica ayudó a Dirk a levantarse del suelo y todos comenzamos a irnos.

— ¡Alto! — gritó la niña.

Gruñí en frustración.

— Antes de iros... Quiero el autógrafo de Dirk — dijo ella — Para una amiga.

Puse los ojos en blanco.

— ¡Vampi raro! — cantó Benny.

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En fin, mañana intento subir el capítulo 3. Quiero vuestras opiniones sobre las hormonas adolescentes que tiene Benny (no sé cómo decirlo xd). La autora pensó que la idea de llevar la relación al siguiente nivel *guiño* *guiño* era bueno para la historia 7u7 Así que, no diré más nada para no spoilear a nadie, chau!♥