Estaba siendo un día agotador, pero por lo menos no le había pillado de sorpresa al pálido; sabía de sobras que este miércoles iba a tener que estar desde las ocho am hasta demasiado tarde allí en el trabajo; incluso había avisado a JiMin antes de salir del apartamento. 

No es como si YoonGi se dedicase solamente a escribir sus propias canciones, también escribía y producía para otros artistas; y a última hora uno de los tantos tuvo una queja con algunas letras del disco que había escrito, así que tenía que solucionarlo sí o sí. Además también había estado ocupado con una reunión a la que había tenido que asistir para terminar de arreglar sus próximos fans meeting. 

Un lío en realidad. 

La puerta de su estudio se abrió sola; y como siempre, supo quien era al instante porque JungKook era el único conocedor de su contraseña. Realmente odiaba que le interrumpieran mientras estuviera trabajando, porque la inspiración no era algo que precisamente fuera fácil de tener bajo estrés. Sabía que si Jeon entraba allí sin avisar, sería por algo importante. 

-- Te traje la cena... ¿Seguro que tienes que quedarte hasta tan tarde? Puedo esperarte y después llevarte a casa en auto, hyung. -- Sugirió el más joven, dejando la bolsa con una cajita con comida en una esquina del amplio escritorio de Min, quien suspiró revolviendo sus cabellos oscuros. 

-- Ni en mis mejores sueños podría, JungKook-ah. Aún me quedan dos canciones que retocar; no es demasiado, pero me niego a que te quedes aquí por mi culpa. Tú también debes de estar agotado ¿Viste a JiMinie hoy por algún casual? --

Una sonrisa divertida se dibujó en los labios del mánager << ¿Desde cuándo es JiMinie y no bombón? ¿Cuándo había dejado de tener un apodo caliente para ahora tener uno cariñoso? >> Se preguntaba. -- Negativo, hyung, no vi a JiMin sunbae en todo el día. Al parecer ha hecho las paces con RyeoWook; y ambos están yendo a los lugares juntos nuevamente. La verdad es que me es más fácil solo encargarme de ti, pero los lugares a los que sunbae va a trabajar son bastante divertidos, lo echaré de menos. -- 

-- ¿Divertidos? ¿A qué te refieres? -- Inquirió el pálido girando en su silla del escritorio para mirar a su amigo, quien se había sentado en el sofá de la esquina del estudio. 

-- En las sesiones fotográficas siempre hay una mesa con aperitivos, los estilistas y maquilladores siempre son muy amables y además: Ir a cualquier sitio con sunbae son risas aseguradas. Su actitud mayoritariamente arisca se me hace divertida. -- 

Para YoonGi fue imposible contener una suave risita desde lo más profundo de su ser; porque sí, le daba toda la razón al contrario, cuando JiMin entraba en modo hadita malhumorada era bastante gracioso. Nunca le había sido irritante en ese sentido, pero si sorprendente, al principio se preguntaba como una persona podía llegar a ser famosa con esa actitud de mierda. 

Ahora que estaba acostumbrado a esta; incluso la disfrutaba, mucho más desde que no era así con él.  

No sabía desde qué momento en concreto, pero Park había dejado de estar a la defensiva cuando estaba a su alrededor. Y a pesar de que le fascinaba aquella faceta peleona y gruñona del rubio; se derretía irremediablemente cuando JiMin se volvía un jovencito lascivo dispuesto a cumplir cada una de sus fantasías. 

Bueno, y cuando le cumplía algún capricho y se ponía adorable, también. -- Maldito modelo coqueto y precioso... -- Siseó estirando su brazo hasta tomar la bolsa con comida para empezar a cenar. 

-- ¿Qué pasa hyung? ¿Dijiste algo? -- 

-- Que echo de menos el culo de JiMin saltando encima de mi poll- -- 

-- ¡Hyung, demasiada información! ¡Stop! -- Interrumpió Jeon incluso poniéndose de pie de los repentinos nervios; estaba seguro de que se había sonrojado de la vergüenza. -- ¿Ha-habéis hecho ese tipo de cosas? P-pensé que... que... -- 

-- Me lo comí al completo, JungKookie. -- Confesó el rapero sacando su lengua antes de llevar los palillos con tallarines hacia sus labios. 

Los ojos de JungKook se abrieron tanto como pudieron ¿JiMin le había sido infiel a TaeHyung? Pero... él amaba al chico granjero, lo sabía. El modelo siempre le había demostrado aquello, siempre le hablaba de Tae, solo hacía falta mirar los ojos del modelo cuando estaba frente a Kim, se encendían con adoración ¿Por qué entonces se acostaba con YoonGi? -- ¿L-le obligas a- --

-- ¡JungKook! No seas estúpido, sabes que no haría algo como eso jamás. Es solo que... uhm, ellos están teniendo problemas últimamente. TaeHyung no le habla nunca, tampoco lo toca de ninguna manera, cada día rechaza las llamadas de JiMin; y él siempre le justifica porque según el granjero con posible disfunción eréctil no tiene demasiada buena señal allí, a pesar de que acaba de instalar wifi. JiMin ha llegado incluso a la conclusión de que puede ser asexual y no sabe como decirlo. -- 

YoonGi estaba hablándole sin mirarle, con sus ojos oscuros puestos sobre la comida; cosa que el más joven agradecía. A este paso si Kook seguía abriendo sus ojos sentía que se les iban a salir de las cuencas... ¿Mala señal de internet? Él recibía mensajes de TaeHyung cada día, no uno ni dos; muchos. Tantos como para desconcentrarle de sus labores, porque siempre acababa contestándole a las adorables fotos con sus animalitos y anécdotas.

No había día en el que no le llegase un video o foto del granjero. -- Entiendo... -- Dijo, aunque no entendía absolutamente nada. -- ¿Él te gusta entonces? Quiero decir, estáis viviendo juntos y manteniendo ese tipo de relación, así que... -- 

-- No, no me gusta. -- >> No quiero que me guste << -- A él le gusta ese chico que parece idiota; no sé como es capaz de ignorar a JiMin de tal manera; me faltaría fuerza de voluntad por no caer ante su- --

-- ¿Su preciosa sonrisa? -- Inquirió JungKook con ojitos brillantes. 

-- Antes su culo de revista, Kook. -- Rió el mayor provocando que el contrario rodase los ojos; por un momento pensó que iría a soltar algo romántico. 

Y la realidad es que YoonGi se lo tenía totalmente prohibido a si mismo. Nada más allá del sexo, nada de mirarlo con ojos bonitos, solo lo iría a mirar como lobo hambriento esperando a devorarlo cada noche. O por lo menos esa era su intención, que le saliera o no es otra historia.-- Me voy, hyung... -- >> He quedado con TaeHyung hyung para charlar. << Fue a decir, pero no creyó que fuera oportuno. 

-- Bien, ten cuidado por la carretera. Descansa mucho. -- Dijo el de ojos felinos, siguiendo con la tarea de terminar con su cena, debía de seguir con el trabajo cuanto antes. 

JungKook se fue y él no quiso tardar mucho más; tenía demasiadas cosas que hacer. No se demoró en terminar la comida, tirando a la basura la bolsa con los palillos y la caja ya vacía. Lavó sus dientes en el baño que tenía en el mismo estudio y estiró sus brazos hacia arriba con cansancio en mitad de la pequeña habitación. -- Hoy me tocará dormir aquí... -- Susurró mirando el sofá-cama. 

Con apenas la luz del pc iluminando el lugar, YoonGi siguió editando las letras de las canciones; además escribiendo cosas por otra parte que le gustaba para las suyas propias. Estaba realmente concentrado, con su pies moviéndose al ritmo del beat de la canción cuando alguien tocó la puerta del estudio. Eso era raro. 

Bastante confuso miró hacia la esquina inferior derecha de su pantalla, donde brillaba las hora. Las 22:19. ¿Acaso seguía habiendo gente por ahí trabajando? Yoon estuvo a punto de ignorar a quien fuera; pero fuera quien fuere, volvió a llamar. 

-- Voy... voy. -- Exclamó arrastrando la silla hacia la puerta para abrir. 

Se le tuvo que poner cara de tonto al abrir y ver al precioso joven allí esperando, porque JiMin no dudó en reír al ver su expresión. -- ¿Qué pasa? ¿Estoy más guapo de lo usual o qué? -- Se burló el rubio, empujando la silla con YoonGi encima para pasar. 

-- Siempre te superas por complicado que parezca. -- Dijo el mayor riendo un poco, volviendo a cerrar la puerta y girándose hacia el chico rubio que se había sentado en el sofá. -- ¿Qué te trae por aquí a esta hora, encanto? -- 

-- No hace mucho que he salido de una reunión con una chica. Supuestamente nos deberíamos de haber reunido esta mañana... pero tuvo algunos problemas y bueno, me invitó a cenar. Wook me avisó de que JungKook le dijo que no irías a casa, se me olvidó que me lo dijiste esta mañana; y yo tenía muchas ganas de enseñarte algo. -- 

Ante la última información YoonGi alzó una de sus cejas sin perder la sonrisa divertida. -- ¿A mi? -- JiMin asintió ofreciéndole la bolsa que tenía en su mano. Para cuando el rapero abrió esta para inspeccionar qué es lo que tenía en su interior, su respiración se cortó durante un pequeño momento. Faldas, faldas y tops, encaje, detalles brillantes, ahí habían prendas lindas. Demasiado. -- ¿Sólo venías a enseñármelas? Porque si me haces un pequeño desfile privado con esto, no me quejo. --  

-- Hombre ¿Crees que he venido hasta aquí para solo que me imagines con eso puesto? Ve haciendo una copia de seguridad de lo que estuvieras haciendo; te voy a tomar tiempo, YoonGi. -- 

>> Gracias por preguntar << Pensó YoonGi acabando por reírse mientras JiMin iba al baño a prepararse. No podía quejarse, por alguna razón el tener al rubio allí sin tenerlo previsto le había hecho estupidamente feliz. 

Decidió hacerle caso y guardar los archivos de su pc de forma correcta, lo que le faltaba es que todo lo que había trabajado se fuera al traste. YoonGi, estaba frente a la pantalla del pc con sus gafas puestas, editando algunas pistas de audio mientras esperaba. 

-- Hyung... -- Llamó el rubio a media voz cerca de la oreja del nombrado. 

Riendo en un tono ronco por la lascivia y diversión, YoonGi volvió a girar su silla para ahora tener frente a él la más bonita obra de arte. JiMin era tan, pero tan precioso y libidinoso que asustaba. -- Creo que soy capaz de correrme como un simple quinceañero con solo tocar esos muslos preciosos. -- Aseguró con su mirada ascendiendo con lentitud por el cuerpo ajeno. 

El modelo portaba unas medias translucidas color blanco con detalles brillantes que resaltaban sus muslos adorados por Min, una falda tableada color celeste pastel y un crop top de mangas largas del mismo color. 

Para cuando el rapero tuvo sus ojos puestos sobre los contrarios, pudo ver como la primera expresión de JiMin era una sonrisita casi adorable; con sus mejillas sonrojadas y ojos brillantes. Pero igual de rápido que esa faceta casi desconocida había llegado; se fue. Park no tardó en sentarse a horcajadas sobre las piernas del pálido, con una sonrisa totalmente diferente a la de antes. -- ¿Te gusta? Yuqi lo hizo expresamente para mi, está hecho a medida y con mucho cariño por ella... Es lindo ¿Cierto? -- Inquirió con tranquilidad, como si no estuviera moviéndose con lentitud sobre el regazo del músico para pegarse a su entrepierna y apretar sus piernas alrededor su cintura. 

-- Me encanta, bombón; creo que lo sabes de sobra. Adoro cuando usas faldas, te ves extremadamente bonito. -- Como respuestas a sus acciones, Yoon rodeó la cintura ajena con uno de sus manos, teniendo la otra ocupada en peinar hacia detrás los cabellos dorados del chico. -- Las luces mejor que cualquier otra persona, tú no las necesitas, ellas te necesitan a ti. -- 

La risa del modelo resonando en aquellas cuatro paredes hicieron que el corazón de YoonGi diera un vuelco; uno que obviamente se obligó a ignorar, reemplazándolo por un movimiento de pelvis que hiciera que el bulto de su entrepierna se acomodase aún mejor entre el culo de JiMin.

-- La verdad es que no sé cual de los tres conjuntos es mi favorito... este es muy casual; pero me hace sentir bonito; me hubiera gustado poder usarlo en mi adolescencia. -- Explicó agachando la mirada para mirarse un poco. 

-- ¿Casual? Supongo que lo dices porque casualmente haría que a cualquier se le cayese la baba ¿No? -- Aquello volvió a hacer que el más joven riera, posando sus manos regordetas sobre el torso del músico. -- ¿Cuándo dices que voy a poder presumirte por las redes sociales con esto puesto, bebé? -- 

-- Te gusta mucho presumirme ¿No es así? -- Bromeó Park ascendiendo sus manos hasta tomar el rostro del mayor para borrar la poca distancia que quedaba entre sus rostro, así otorgándole un beso profundo el cual ambos disfrutaron, apegándose con anhelo al cuerpo ajeno; de forma lenta, nada apresurado. -- En dos semanas más o menos Yuqi presentará esto en su tienda online, podrás hacerlo entonces.  

-- ¿Cómo no me va a gustar presumirte? ¿Te has visto, JiMin? -- 

Aunque la frase era verdaderamente bonita y a cualquiera -incluso a si mismo en otro momento- le hubiera sentado de maravilla, algo en JiMin quebró. 

>> TaeHyung nunca, absolutamente nunca te va a mirar de esa forma y menos presumirá de tenerte a su lado<< 

>> No eres suficiente para TaeHyung; solo una cara bonita no le sirve a todo el mundo.<< 

>> Estás podrido por dentro; él se merece cualquier cosa mejor que tú. << 

>> TaeHyung, YoonGi y cualquier persona debería de correr lejos de ti. Te está mintiendo. Es parte de vuestra mentira. << 

-- V-voy a por el siguiente conjunto. -- Habló notablemente nervioso el rubio al ser herido por su misma cabeza; parecía que se quería autodestruir a base de comentarios negativos en los que las demás personas llevaban contribuyendo años. Aunque por suerte ahora en mucha menos medida; pero de nada servía ya al parecer. 

Y menos después de la noticia que había recibido hoy.

Min asintió con su cabeza algo confuso ¿Qué había pasado para que el de mejillas pomposas se levantase de regazo temblando como flan? 

Con curiosidad se quedó mirando la puerta del baño que había sido cerrada una vez el pequeño había entrado. Él decidió seguir, concentrarse en su trabajo mientras JiMin se terminaba de arreglar; aunque no pudo concentrarse ni por asomo. Estaba tardando un poco más de lo que había imaginado y aquello lo estaba preocupando de alguna forma. 

Por lo mismo YoonGi se puso de pie. -- ¿Bombón, todo bien? -- Inquirió acercándose al baño; no teniendo oportunidad de llamar a la puerta de este debido a que el nombrado la había abierto dejándose ver. -- Wow, wow, wow. -- 

-- Yuqi en serio es una gran artista... -- Dijo el de mejillas bonitas mirándose a través del espejo del baño. Unos pantalones cortos de cuero se adherían a su cuerpo hasta su cintura, siendo de tallaje alto, tenía una camisa blanca con volantes en sus mangas en su parte superior, teniendo como toque especial los tirantes negros que se enganchaban en los pantalones y estaban sobre sus hombros. -- Creo que al próximo evento usaré este outfit. -- 

-- Úsalo, pero te aseguro que cuando llegues a nuestra casa vas a acabar sin él por mucho que me guste como te queda. -- Murmuró aún asombrado ante la fascinante figura que tenía su chico. 

En serio que Min podría poder avergonzarse por parecer un adolescente hormonal ¿Pero para que sentirse mal o arrepentirse si podía gozar de eso? -- No suena del todo mal. -- JiMin giró sobre sus propios talones para enfrentarlo, metiendo sus suaves manos por dentro de la camiseta que portaba el rapero, así acariciando su abdomen. -- ¿Y si te desnudo yo ahora? -- 

-- ¿Eso quieres? Tú pide por esa boquita, pide que yo te lo consiento. -- Esas palabras eran casi mágicas para tener a JiMin mirándote como cachorrito consentido. Tan así que el rubio no tardó en asentir con su cabecita de forma energética haciéndole reír. -- Bien, quitémosla entonces. -- 

YoonGi apenas se separó un poco de su cuerpo para quitarse la polera negra que hasta hace un momento portaba, dejándola en el sofá que estaba al lado de ambos. Pronto tuvo al modelo acechándole paseando sus manos sobre  la piel pálida de sus hombros mientras relamía sus gorditos labios. 

Las manos grandes del azabache se posaron sobre su cintura, clavando sus dedos con delicadeza -pero con posesión- en esta. En este punto no les hacía falta demasiadas palabras para entenderse, sin siquiera decir lago ya sabían las ganas que tenían de juntar de nuevos sus bocas otra vez más. 

JiMin se aferraba a aquel cuerpo que le trasmitía la calidez necesaria, disfrutando de como la piel de YoonGi se sentía sumamente bien contra sus manos. Sin esperarlo se vio siendo elevado; aunque aquello no le hizo detener el contacto entre sus labios. Park arañó con suavidad los omoplatos del músico, dejándose a si mismo derretirse en las manos ajeas. 

Sus lenguas entrelazadas hacían una perfecta combinación con la respiración agitada de los dos, las manitas del rubio viajaron hacia el rostro del pálido para alzar sus gafad, dejándolas así sobre su cabeza y esto permitiéndole profundizar aún más el beso, este terminando por darse varios piquitos efímeros una vez que tuvieron que buscar aire. -- ¿Estás bien? No paro de pensar que mi bombón, mi chico con complejo de narciso; me hubiera mostrado estar encantado con los halagos de antes, pero te veo apagado, taciturno... ¿Algo que quieras cont- --

-- Me llegó una apelación del juzgado al trabajo. -- YoonGi en seguida la miró con clara expresión confusa. -- YeonGin va a intentar que la condena que se le impuso sea reducida. Una de las condiciones que se le otorgó fue el nulo uso de las redes sociales durante cuatro años, quiere reducir el tiempo, apenas le queda un año, pero supongo que quiere iniciar ya a... bueno, a usar sus medios de comunicación. -- Contó sin pensarlo dos veces, estaba asustado en realidad, necesitaba sentirse apoyado.

JiMin había llamado esa misma tarde, totalmente desesperado y en un ataque de ansiedad a TaeHyung. Ninguna de sus tres llamadas fueron aceptadas. También le envió mensajes, los cuales nunca tuvieron respuestas... aunque eso en serio comenzaba a ser costumbre. 

Venir corriendo a los brazos de YoonGi con toda esa ropa es posiblemente la excusa más barata que nunca antes se había dicho a si mismo; pero bueno, incluso ahora se había impuesto a si mismo pensar que había venido a presumir de sus nuevos modelitos; y no a refugiarse entre los brazos que le hacían sentir que siempre era primavera.

-- ¿Estás preocupado por eso? Si ese cabrón se atreve a volver a difamarte, volveremos a reportarlo ante la justicia, JiMin. -- Aseguró apretando los muslos por donde tenía sujeto al modelo, quien asintió, pareciendo aún así bastante ido en sus pensamientos -seguramente destructivos- -- ... Agárrate fuerte. -- Dijo de la nada 

-- ¿Qué d- ¡YoonGi! -- Exclamó el más pequeño rodeando el cuello del nombrado con sus brazos y apegándose a él con firmeza. El pálido había comenzado a dar vueltas en medio de la habitación con él en brazos. -- ¿Qué haces? -- Inquirió en una risita entrecortada con sus ojos cerrados para no marearse. 

-- ¡Intento volver atrás en el tiempo para ver si puedo evitar que conozcas a ese gilipollas! --  

>> Aunque eso significase que nuestros caminos nunca se encontrasen. << 

Sin duda escuchar como el de mejillas regordetas reía por su tonta acción estaba siendo un alivio. Quien le iba a decir a YoonGi que iba a tener puesta su atención en otra cosa y no en el culo de Park JiMin, aún teniéndole pegado a él modelando ese short de cuero que resaltaba sus curvas. 

-- Hyung, hyung. -- Llamó entre risas haciendo que el azabache cesase sus movimientos. -- Dudo que funcione, pero gracias. -- 

JiMin le estaba sonriendo bonito a una corta distancia. Tenía sus labios curvados hacia arriba de esa forma en la que sus mejillas resaltaban aún más y sus ojitos se hacían pequeños. Sus deditos gorditos se encontraban perdidos entre sus cabellos rebeldes de su cabellera azabache; y no, YoonGi no estaba seguro de poder seguir manteniendo la calma ante esa mirada agradecida que derrochaba ternura. 

Se sentía como cuando conseguías pasarte el la último nivel de un videojuego y la mejor de las recompensas te esperaba. 

-- Gracias no, cámbiate al tercer conjunto para poder deleitarme con las preciosas vistas que me regalas, bombón. -- Bromeó dejando al chico en el suelo con cuidado, dejando que de nuevo entrase en el baño. 

Min, exhalando profundamente -tanto como creer que se le fuera a escapar el alma por la boca-, se sentó en su silla una vez más. 23:04 pm brillaba en la esquina de su pantalla. Quería seguir jugando con el más joven, pero desde luego debía de terminar el trabajo también.

Con cuidado dejó las gafas que descansaban sobre su cabeza en el escritorio para poder estirar su cuello a cada lado, aprovechando los minutos que JiMin estaba ocupado para seguir trabajando, aunque no terminando de estar siquiera cerca de estar concentrado.

En cuanto escuchó como la puerta del baño era abierta, giró su rostro sin moverse demasiado. Volvió a escanearle rápidamente, soltando un tonto y musical silbido. -- Menos mal que eres mi chico y no el de HoSeok o cualquiera de mis amigos, sino me sentiría muy mal de pensar tan guarro y bonito a la vez sobre la pareja de alguien cercano. -- 

Y aunque JiMin fue a corregirle diciendo que no era su chico tampoco en realidad; no lo hizo, no tenía fuerzas para negar algo por Kim TaeHyung. Se sentía derrotado en ese tema, tenía el corazón roto y ganas de llorar. Pero no, él era fuerte, y si dejándose llevar en los brazos de YoonGi los pensamientos se disipaban... pues eso iría a hacer. 

Un orgasmo era definitivamente mil veces mejor que una tonta llorera. 

Portaba de nuevo una falda corta de cuadros y tableada en su parte inferior; por otra parte llevaba un chaleco amarillo sin mangas y debajo de este una camisa de mangas cortas. ¿Cómo podía verse adorable y caliente? Misterios misteriosos de la vida que YoonGi nunca lograría entender. 

Park rodó los ojos con una sonrisa ladina que detonaba diversión y gusto ante el halago. Ni un solo momento dudó en moverse hasta el pálido para sentarse sobre él, esta vez de manera diferente a la primera. Había dejado su espalda apoyada en el torso contrario, así pudiendo mirar hacia la pantalla también. 

El músico apoyó su barbilla en el hombro de su precioso acompañante, teniendo sus manos en ratón y teclado a cada lado del cuerpo ajeno.  -- ¿Qué escribías hoy, hyungie? -- Inquirió el menor sin girar su carita, como si estuviera muy muy muy interesado... y bueno, no es como si YoonGi pensase que JiMin desprestigiase su trabajo; pero dudaba que en ese instante en el que estaba restregándose contra su entrepierna de manera disimulada, el rubio estuviera realmente esperando saber. 

  -- Un rapero de la industria quería mi colaboración en sus letras, pero su empresa se las ha echado hacia detrás por ser temas algo crudos y rudos, a pesar de que a él le encantaban; pero bueno, ellos no creen que ese chico vaya a vender rapeando ese tipo de cosas. Él suele tener un estilo más... happy flower, como Hope. Así que no le dan siquiera la oportunidad de probar cosas nuevas. -- Terminó por explicar; a lo mejor el chico solo se estaba acomodando de manera correcta, sin ninguna mala intención.

-- Uhm... -- Murmuró el de mejillas bonitas para hacerle saber que le escuchaba, arqueando su espalda de manera sutil para que su trasero se alzase y estuviera a mayor disposición para YoonGi. 

Este no pudo evitar relamer sus labios, deslizando una de sus manos -la que no se encargaba del ratón- hacia las piernas del chico que tenía sentado sobre él. La mano se abrió paso con tranquilidad por el medio de sus piernas, acariciando el interior de sus muslos y terminando por rozar con sus dedos el miembro ajeno aún cubierto por la ropa interior. 

¿En serio? ¿Bragas de encaje? Park JiMin era un chico muy astuto. 

Y claro que el rubio estaba sintiendo aquellas indebidas caricias; pero pretender que nada de eso estaba pasando lo hacía aún más excitante. -- Y... Enséñame, hyung ¿Cómo grabas tus maquetas? -- JiMin abrió disimuladamente sus piernas un tanto más, para que la mano del rapero pudiera moverse con mayor libertad. 

-- Bueno, cuando son las primeras pistas que uso para ir experimentando con diferentes letras y y beats, pues canto aquí mismo con el micro que tengo en el pc. Ya luego cuando está todo listo, las grabo en la sala profesional con mejor equipo. Mira. -- El mayor acercó el micro hacia ambos, estando apoyado en el escritorio. 

El modelo juraba estar atendiendo a las palabras de YoonGi; pero no podía evitar moverse hacia delante y hacia detrás para crear fricción entre la erección de debajo suyo y su culo; y además su miembro erecto y la mano del contrario -- A-a ver... Rapea algo. -- Pidió mordiendo su belfo inferior dejándose caer totalmente en el torso que tenía en su espalda. 

Ante la sensibilidad de Park no pudo reprimir una sonrisa divertida, encendiendo el micrófono y acariciando con sus labios el cuello expuesto del muchacho mientras lo organizaba todo. Por supuesto su mano estando totalmente ocupada en estimular el miembro que se encontraba preso en aquella fina tela de encaje. Yoon podía sentir como la prenda estaba húmeda debido al líquido preseminal, su chico era adorablemente impaciente. 

YoonGi carraspeó un poco después de haberle dado al botón para iniciar la grabación, pronto comenzando a improvisar cerca del oído del muchacho. >> A la mierda, Min Suga es demasiado caliente haciendo lo suyo. << Fue lo único que JiMin podía pensar con claridad, bajando una de sus manitas con desesperación para tomar la de YoonGi y hacer que esta se metiera por dentro su ropa interior. 

Necesitaba del tacto de su hyung, necesitaba que lo mimasen, sentir que lo estaban cuidando, que alguien lo rescatase aunque fuera de ese modo. 

A pesar de que el mayor quiso reír, se reprimió siguiendo con la improvisación y su trabajo manual. En momentos como estos YoonGi demostraba ser el prodigio que era; ni él mismo se explicaba como podía seguir rapeando mientras se sentía desvanecer ante los reprimidos gimoteos del chico y sus movimientos poco inocentes. 

JiMin echó su cabeza hacia detrás, apoyándola en el hombro contario con sus orbes cerrados; el deje ronco con el que YoonGi acompañaba al beat con su letra improvisada tampoco lo estaba ayudando a estar más calmado en realidad. El más joven tuvo que agarrarse a los reposabrazos de la silla cuando el pálido con ayuda de su líquido preseminal había introducido uno de sus largos dedos en aquel orificio el cual estaba deseando tener ocupado. 

-- A-amph... -- Jadeó, provocando que el pálido parase de rapear, pero no de tocarle. 

-- Bebé ¿Pasa algo? -- Dudó de la manera más falsa, como si el jodido no fuera consciente de lo que estaba haciendo. 

-- No... n-no, sigue, sigue... -- Alentó el pequeño disfrutando de como más dedos habían sido introducidos dilatándole y rozando su próstata. -- ¡S-sigue...! -- 

El azabache rió contra el cuello del modelo, besando la zona acabando por susurrar en su oído. -- ¿Que siga qué? ¿Rapeando o tocándote? -- 

-- S-solo sigue, no pares, hyung... no pares. -- Imploró el más joven respirando irregularmente, moviéndose en suaves y delicados espasmos dados por el placer. 

Con su mano libre Min decidió que lo mejor era dejar de grabar el sonido, además así pudiéndose dedicar con su otra mano a dejar las piernas del pequeño abiertas. 

No supo cuantos minutos más estuvo dejándose llevar en los dulces gemidos y jadeos del rubio mientras lo terminaba de preparar y además llenaba su cuello y hombro de marcas de mordidas suaves y besos. -- Bonito, necesito que me dejes moverme un poco, tengo en un cajón condones... necesito ponerme uno. -- 

Park asintió con su cabeza varias veces, deseando poder tener al pálido dentro suyo. Por lo mismo, se sentó más hacia delante -en las rodillas del pálido, para dejarle más movilidad, aunque le causase cierto desespero, así YoonGi pudo estirarse hacia los cajones de derecha, de donde sacó un preservativo con lubricante incluido a este. 

El de ojos felinos apenas se bajó su ropa interior y pantalones deportivos lo mínimo para dejar salir su miembro y colocarse el condón; llevando entonces sus manos hacia la cintura de la lindura que tenía sentado en sus rodillas. Min alzó la preciosa falda de cuadros, admirando las nalgas abultadas que adoraba manosear. -- Hyung, por fi... -- Jadeó el chico removiéndose en su regazo logrando así restregar su duro miembro contra la pierna del mayor.

-- Móntame, bebé, se bueno, mi amor. -- Demandó el azabache apartando con su pulgar la preciosa braga de encaje, acariciando entonces con aquel dedo el orificio que se contraía ante el deseo de ser ocupado. -- Ven aquí. -- YoonGi alineó su miembro con el culo al que era aficionado; y entonces el dueño de este se deslizó hasta que todo estuvo en su interior. 

-- Oh, hyung, me gu-gusta tanto esto... -- Gimió apoyando sus manos en el escritorio en cuanto se sintió completamente lleno, su trasero estando totalmente pegado al cuerpo contrario. 

Bueno, no es como si fuera la primera vez que alguien montaba a Yoon; pero vaya, nunca se había sentido tan satisfactorio ver como su miembro era engullido por un culo -este en concreto perfecto ante su parecer-. -- Claro que sí, bombón, te gusta esto porque...ah... porque esto es increíble. -- Jadeó el azabache alzando aún más la falda para poder tener perfectas vistas mientras JiMin comenzaba a moverse. 

Para ayudarle le tomó de la cintura, procurando que el delicioso ritmo no se perdiera y fuera a más. 

No le tomó demasiado más a JiMin encontrar aquel rincón de su ser que había estado buscando, en una de sus autoembestidas pudo llegar a su próstata con certeza, haciendo que sus ojitos se abrieran en demasía y brillasen. -- ¡Ah!~ -- Gimió alto y agudo y Yoon sonrió no reprimiéndose en soltarle una nalgada en una de sus mejillas que veía rebotar sobre él. 

-- No pares... cariño, no pares, sigue montándome tan bien. -- Masculló, moviéndose incluso él apenas uno poco para que las estocadas fueran -si es que se podía- más certeras. Ahogado en ese placentero ambiente, JiMin se dejó apoyar un poco más sobre el escritorio tocando algún que otro botón, algo que no pasó desapercibido ante los ojos felinos de Min. -- Preciosidad, te estás grabando gimiendo para mi... -- Jadeó al ver como el micrófono había pasado de estar con la lucecita roja a verde. -- Sigue haciéndolo así de bonito... -- 

-- ¡Ah, YoonGi, YoonGi, YoonGi! ~ ¡Hyung, e-esto ¡Mhpf! esto se siente muy bien! -- Lloriqueó sin vergüenza haciendo puños de sus manitas y apretando sus ojos mientras no cesaba de mover su pelvis de arriba hacia abajo deslizándose en su miembro. 

Y aunque esto le estaba volviendo completamente loco, YoonGi podía sentir que después de los largos minutos que llevaban en esa posición, las piernas del modelo ya estaban flaqueando al no estar completamente sentado y encima moviéndose de aquella manera. Si algo tenía claro el pálido es que ahí estaban para pasarlo bien los dos, así que salió de su interior, tomando la boca de JiMin antes de que pudiera quejarse de aquello. 

En un beso ardiente en el que sus lenguas se tocaban incluso sin estar dentro de alguna de sus bocas- Min succionando la del contrario incluso- y a pasos torpes, fue que llegaron al sofá. 

Park era quien se encontraba con el mayor encima ahora entre sus piernas, no tardando ni un instante más en deslizarse hacia dentro otra vez. 

La falda a este punto se encontraba girada de mala manera alrededor de la cintura del modelo, bastante más arriba de lo que debería. Sus prendas superiores estaban prácticamente quitadas, siendo el mismo Jimin quien se deshiciera de ellas por el deseo de poder sentir la caliente piel de YoonGi contra la suya; cosa que rápidamente consiguió. 

Los gemidos de ambos llenaban la habitación. Se besaban pareciendo que acababan de aprender a hacerlo; con rudeza y lascivia, los deditos de los pies se Park encogiéndose ante las olas de placer y su próstata sintiéndose fascinantemente maltratada. 

-- E-estoy cerca... cerca, muy cerca... -- Avisó el rubio arañando la espalda y hombros contrarios; y aunque YoonGi no tuviera fuerzas para algo más que gemir en ese instante - no pudiendo avisar-, también lo estaba. 

En ese punto las embestidas habían perdido algún ritmo coherente, eran profundas y rápidas. 

El pálido gemía con su rostro escondiendo en la curvatura del cuello ajeno, deleitándose con todo lo que era JiMin en estos momentos, su sudor, el aún aroma de su perfume, sus gemidos dulces y a la suavidad y alta temperatura de su piel levemente tostada. 

Las piernas del más joven rodearon las caderas contrarias, ya encogiéndose ante el abrupto orgasmo que le estaba invadiendo; y el cual fue prácticamente contagiado al músico. 

El rubio se abrazó al cuerpo de Min en el momento en el que ambos se corrieron; el dueño de este siguiendo con las embestidas haciéndolas cada vez más lentas y acabando por dejarse caer con cuidado sobre el cuerpo caliente de JiMin.

Una pequeña manita acarició sus cabellos oscuros mientras ambos se recuperaban, siendo Yoongi el que acabase por sentarse en el sofá primero para ir al baño a quitarse el condón y limpiarse. -- Bebé... -- Llamó con voz ronca, agachándose para quedar a la altura del nombrado, quien le miró con los ojitos entrecerrados y aguados después de haber soltado lágrimas placenteras; las cuales YoonGi borró ahora con sus pulgares. -- El sofá se puede hacer cama, vamos a limpiarte y te acuestas tranquilo ¿Te parece? Quédate a dormir ahí una vez estés cómodo y limpito. -- 

-- ¿Y tú? -- Inquirió disfrutando de como el rapero se paró a acariciar sus abultados y rojizos labios tras haber limpiado sus lágrimas.

-- Yo termino el trabajo que me queda y me acuesto a dormir contigo las horas que pueda ¿Bien? Ahora levántate, bombón, te ayudo a asearte y te doy una manta. -- 

Y JiMin, tal y como el jovencito bueno que era; o más bien que YoonGi le hacía sentir que era, obedeció. 

Así fue como ambos habían acabado a las cuatro de la mañana con sus cuerpos enredados en aquel sofá cama siento cubiertos por una manta, sus rostros cerca uno del otro y por ende respiraciones mezcladas.

 Bueno, habían acabado así; y además con YoonGi teniendo una pista de audio de los preciosos gemidos de JiMin junto a los suyos guardado en su pc. 

Hola, angelitos míos. Primero, quería dedicar este capítulo a lavidasaiyana ya que en el capítulo anterior me dijo que un capítulo narrado desde un poco más la perspectiva de YoonGi podría estar bien; así que intenté que este capítulo se centrara un poco más en él. <3 

Espero que os haya gustado. 

Os quiero mucho. 

Prometo que mejoraré todo lo posible y más para haceros disfrutar y olvidaros de todo; quiero haceros muy felices dentro de mis posibilidades.

Cuidadse mucho. 

Kisssuuuu.~~

140921.