cuatro
El apartamento estaba en total silencio cuando el de mejillas abultadas había entrado por la puerta, como siempre, fue algo que agradeció completamente, y más el día de hoy. Había tenido un día duro de trabajo, pero de cualquier manera estaba demasiado contento porque TaeHyung iba a hacer videollamada con él, sentía que hacía demasiado que no hablaba con su pareja.
Lo primero que hizo fue darse una ducha, lavando también su cabello y colocándose las cremas hidratantes en su rostro y cuerpo, siempre debía de cuidarse mucho.
-- Me muero de hambre y ya va siendo la hora de la cena... -- Murmuró para si mismo mirando la pantalla de su teléfono, donde estaba el reloj. -- Bueno, a TaeHyung no le molestará verme hacer la cena. --
Así fue que tomó un pequeño trípode que tenía y se fue directo a la cocina, colocando el aparato sobre la encimera y dejando su teléfono ahí. Estaba cortando las verduras cuando la llamada se hizo presente, dibujándole una sonrisa instantánea.
-- ¡JiMinie! Perdón por tardar en llamarte, pero no te lo vas a creer, una gatita se ha puesto de parto en el establo. -- Dijo el menor con los ojos iluminados, para JiMin era lo más lindo de todo el universo.
-- ¿En serio, Tae? Espero poder ver a los gatitos la próxima vez que vaya. -- Dijo sonriente quedándose unos segundos con la mirada sobre el rostro ajeno, el contrario tenía sus pómulos sonrojados, seguro que había estado trabajando bajo el sol. -- ¿Cómo has estado? Hace mucho que no he podido contactar contigo, te echo de menos. --
De los labios del granjero se escapó una risa avergonzada. -- Bien, JiMin-ah. Soy muy feliz con todo lo que tengo que hacer en la granja. De hecho ahora mismo me iría a dormir de lo cansado que estoy, mañana voy a ir al pueblo de al lado, pero tengo que hablar contigo. Me han dicho que... --
El rubio dejó de prestar atención a las palabras de su novio después del "tengo que hablar contigo" ¿Era de esa forma? ¿Tenía que hacer por obligación? JiMin estaba ahí más que ilusionado por saber de él, porque le contase qué había hecho en el día a pesar de que la granja le importaba en realidad diez mierdas enormes.
-- TaeHyung. -- Llamó interrumpiendo lo que le estuviera contando.
-- U-uh ¿si? -- Titubeó ante el tono serio del mayor por meses.
-- Si lo que quieres es irte a dormir, ve a dormir. No tienes que hablar conmigo si no quieres. --
Kim abrió sus ojos en sorpresa, la realidad es que no le apetecía estar en esa videollamada en absoluto, pero sabía cuan importante era para el joven modelo, Tae normalmente actuaba para no dañar a los demás nunca, daba igual lo que él pensase o sintiese. -- ¿Seguro...? ¿No te molestarás? -- Inquirió con algo de miedo, viendo como el ceño ajeno se fruncía de forma involuntaria.
-- No lo haré, en serio, no me hace feliz hablar contigo si sé que estás aquí sin siquiera quererlo. -- Dijo y pudo escuchar como la puerta principal se cerraba y además dos voces se escuchaban cada vez más cerca.
JiMin giró su rostro de forma natural para ver a los dos muchachos que iban a entrar por la puerta de la cocina, incluso el de tez canela a través de la pantalla se quedó callado con demasiada curiosidad.
-- YoonGi, sé que te da mucha lástima, pero no podemos hacer eso, no podemos regalar entradas vip. -- Decía JungKook siguiendo los enfurecidos pasos del rapero entrando a la cocina.
-- Me da igual si la empresa no es quien paga esas jodidas entradas, te aseguro que me da igual, las pagaré de mi bolsillo si eso es lo que tanto os interesa, solo te aseguro que esa familia van a estar ahí en puta primera fila. --
El más joven suspiró a punto de hablar, siendo en ese momento consciente de que estaba allí JiMin, bueno, y alguien más. -- Oh, JiMin-ssi, buenas noches... -- Saludó con una sonrisa algo incómoda, era cansado discutir con alguien como YoonGi.
-- Buenas noches, a ambos... -- Saludó de vuelta, extrañándose demasiado de que el pálido siquiera le hubiera dirigido la mirada ¿Qué le había pasado? Era la primera vez que no estaba ahí molestándole. -- Oh, os presento a TaeHyung, mi... novio. --
Con toda la curiosidad, Jungkook fue el que se acercó ahora con una gran sonrisa en su rostro mientras movía su mano hacia la pantalla. -- ¡Por fin puedo ponerte cara! -- Dijo animado y Taehyung de repente se sintió demasiado cohibido, ese chico sonreía demasiado tierno, le recordaba a su conejito Manchitas. -- Soy Jungkook, Jeon Jungkook. Representante de Suga. --
El castaño asintió con sus mejillas suavemente ruborizadas por sentir la mirada del joven sobre él con tanto entusiasmo, en la ciudad qué comían que eran todos tan guapos.
Yoongi simplemente miró a la pantalla y saludó con un movimiento de cabeza mientras iba al refrigerador, de donde sacó un botellín de cerveza.
-- Bueno, TaeHyung... voy a colgar, estás muy cansado y eso. -- Comentó el modelo con su mirada sobre las verduras que tenía que seguir cortando. -- Cuando quieras y eso, puedes hablarme, siempre estoy disponible para ti. --
-- Ah, claro... Gracias, JiMinie. Cuídate. U-un placer. --
Park frunció sus labios, no sabía si debía o no decirlo, menos hoy que había sido cruelmente destrozado de forma involuntaria por el joven granjero. -- Te quiero, Tae. -- Murmuró aún sabiendo que todos le habían escuchado.
-- S-sí, nos vemos, come bien. -- Con rapidez el castaño cortó la llamada.
El modelo juraba que si no rompía a llorar en ese mismo momento era porque estaba con los otros dos y odiaba que alguien más lo viera en un momento tan vulnerable, pero definitivamente, estaba demasiado triste.
JungKook supo notarlo al instante, además que no había que ser demasiado inteligente, ese chico acababa de decirle que le quería y el otro simplemente había cortado la llamada. Él podía dar fe de que el de mejillas abultadas quería a Kim, siempre se lo recordaba por su contrato, además le hablaba de él con frecuencia.
-- Ya he comprado con mi dinero las jodidas entradas, gracias por nada. -- Habló YoonGi rompiendo el silencio, sentándose en una de las altas sillas de la isla de la cocina, donde dio un sorbo a su botellín.
Su representante suspiró agotado, qué iba a hacer con ese chico. -- Yoon... intentaré que la empresa te pague las entradas ¿bien? pero no prometo nada.
Min le volvió a contestar, pero el rubio había dejado de escuchar la conversación ajena, simplemente se dedicó a terminar de hacer su cena sumido en su penumbra.
Había hecho verduras salteadas con tofu en salsa de soja.
-- ¿Qué pasó que estás tan atacado? Es la primera vez que te veo así. -- Le dijo JiMin una vez que JungKook se fue a su casa y él se sentó frente al azabache para cenar. Era la primera vez que estaban juntos en un lugar de la casa después de tres semanas que ya llevaban conviviendo.
Normalmente el menor hacía sus comidas encerrado en su habitación, y el otro lo hacía solo en el comedor. Y no es que el pálido no hubiera intentado poder hacer una vida como compañeros de piso con el joven, es que literalmente este lo echaba de su lado a cada rato.
-- Una fan mía se ha suicidado. -- Claro y conciso.
El modelo había dejado de masticar cuando recibió la noticia, aquello le había tomado en total sorpresa. Frente a él estaba el rapero frotándose el rostro con ambas manos, parecía tan frustrado, tan dolido. -- Lo siento mucho por eso... por ti, por ella y por su familia. ¿Se pusieron en contacto contigo? --
YoonGi asintió con su cabeza, moviendo su pierna con nervios. -- Su hermana pequeña me envió un mensaje diciendo que el sueño de la mayor era ir a esta gira con sus padres y ella, pero que obviamente, no iba a poder ser. Por eso la familia había planeado venir, sabían que a ella le hubiera hecho muy feliz saber que a pesar de que no está, se acordasen de ella a través de mi, pero no tienen dinero para pagar la entrada. --
-- Y... se la has comprado. -- Finalizó el modelo tomando un poco de tofu con sus palillos, recibiendo otro asentimiento de cabeza ajeno mientras tomaba un poco de su cerveza. -- Bueno, esto me demuestra que a lo mejor no eres tan idiota como tenía pensado. --
-- JiMin, no me conoces. A pesar de que siempre esté bromeando porque estoy de buen humor, eso solo es una parte de mi. --
¿Le había llamado JiMin? Si que se encontraba mal. -- Lo sé, lo sé, perdón... Volviendo al tema ¿ya le has notificado a la familia que tienes sus entradas? Oh, uhm, toma unos palillos y cena conmigo... siento no haberte ofrecido, se me fue. --
-- ¿Hoy estas amigable? -- Inquirió enarcando una de sus cejas con diversión mientras se levantaba para tomar unos palillos, tenía hambre así que lo aceptaría. -- No, aún no les he dicho nada, más tarde lo haré. --
-- Seguro que se alegran un poco... --
-- Sí, pero por desgracia no puedo traer de vuelta a su hija, a su hermana. Esa chica ha dejado todo demasiado pronto. Nada es eterno en esta vida, así que los problemas tampoco, y joder, no sabes lo que me duele no haber visto alguna interacción suya. A lo mejor si la hubiera conocido en un fan meeting, o si le hubiera contestado algún mensaje- --
El modelo alzó sus palillos apuntándole con estos, así interrumpiéndole. -- Deja de culparte. Te siguen millones de personas, es imposible para ti estar atento a todo el mundo, además insano para tu salud mental. Estoy seguro que tú y tu música le hizo los días más llevaderos. --
-- No lo suficient- ¡ash! ¡Bombón, no me golpees! --
-- Primera y última vez que me voy a alegrar de que me llames así. No te sientas culpable, YoonGi-ssi. Dedícale ese concierto y haz que su familia la sienta allí con ella, lo harás bien, eres un buen artista. --
De alguna forma el mayor se estaba sintiendo abrazado por aquellas palabras, aunque la situación no fuera la mejor, poder hablar por fin con el modelo era agradable, que no le estuviera echando de su lado se sentía como un lujo, y conocerle un poco más toda una bendición. -- Gracias, lo haré, lo intentaré con todas mis fuerzas... --
Ambos se miraron unos segundos con una pequeña sonrisa, por supuesto no duró mucho tiempo, porque YoonGi se sentía un poco más animado y con ello, bromista.
-- Oye, cariño, ese novio que tienes no me gusta para ti. Yo soy más guapo. -- Espetó el azabache negando con su cabeza.
-- ¡Min YoonGi iba todo muy bien! Calla, idiota. --
Espero que el capítulo os haya gustado mucho, gracias por leer.
Os quiero mucho, cuidadse.
291120
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro