Tú:
Yoongi hyung~
Tu pequeño hijo te extraña muuuuucho~
Te mando un vídeo de tu mocoso 😂
[Vídeo : enviado]

Yoongi hyung.

¿Y tú? ¿no me extrañas?
Nuestro bebé es tan lindo.
Diablos, quisiera estar junto a ustedes y dormir toda la tarde.

Tú:

Claro que lo extraño, hyung 💕
Lo esperaremos aquí despiertos hasta la noche. Bueno, parece que nuestro bebé ya está por dormir ^-^

Yoongi hyung.

Los amo mucho, Jimin.
No pudiera vivir sin ustedes 😊💕

Tú:
Awws (*-*) es tan lindo, hyung. Quiero mimarlo muuuuuchito. 💗

Yoongi hyung:
Tú eres el que actúa lindo, Jimin-ssi... 😘
Bueno. Debo irme, tengo que terminar unos informes para poder llegar temprano a casa.

Tú:
Lo espero aquí, señor Min ;)

Yoongi hyung:

Waao! Que dualidad Jimin. Ese "Señor Min" me pareció muy... Erótico, pero esa foto me dice todo lo contrario, cariño. 😂

Jimin sonríe ante el mensaje de su novio. Deja el teléfono y toma a Yeong Su de nuevo en brazos pues el pequeño había iniciado a balbucear para llamar su atención cuando lo había dejado entre las mantas para que durmiera; él tenía sueño pero necesitaba escuchar los latidos de su papi para poder dormir. Jimin besa sus dos mejillas rojitas y siente su corazón derretirse al ver la sonrisita de su bebé. Aunque Jimin no sabía, Yeong Su también amaba ver la sonrisa de sus papis, especialmente la de Jimin que le hacía sentir una bonita sensación en su pechito y lo calmaba siempre.

El teléfono de Jimin vuelve a sonar otra vez, pero ahora no es ni un mensaje ni llamada de Yoongi. Últimamente Jimin había querido conseguir un sencillo empleo que ayudara a su novio con los gastos económicos que implica tener una casa y un hijo, por esa razón, estaba recibiendo llamadas constantes donde le informaban lo necesario. Jimin deja a su hijo en el colchón que está en el piso siendo rodeado por varios cojines y se aleja solamente un poquito de su hijo cuando éste a iniciado a gritar tratando de ser cargado de nuevo por su papá.

El adorable chiquillo hace un pronunciado puchero al no recibir la atención que quiere, patalea y sorbe su nariz al sentir como le inicia a picar por el llanto que se aproxima en salir.

- ¡M-Min! - grita y frunce su ceñito al ver que aún su papi sigue ocupado.

Él no es un bebé llorón, claro que no lo es. Siempre trata de estar feliz y de no preocupar a sus papás con su llanto, solo lloraba cuando fuera completamente necesario, y en ese momento... No era muy importante.

¡Pero de verdad quería que su papi lo mimara mucho ese día! quería que le sobara la espaldita y que besara sus mejillitas mientras le decía cosas bonitas, por eso razón se había decidido en obtenerlo.

Yeon Su es un bebé muy inteligente, por esa razón, cree que para ganar la atención de su papi tiene que hacer algo increíble y que nunca haya hecho, por lo que se le ocurre la idea de... caminar por primera vez.

Si, ya era momento de dar sus "primeros pasos".

El niño ya había dado sus primeros pasos unos días atrás, sin que nadie lo viera y nunca lo habia vuelto hacer porque era lo demasiado perezoso como para dejar la vida fácil de ser cargado todo el tiempo por sus papás.

Yeong Su apoya sus manitos en el colchón y con toda la fuerza que tiene, intenta levantarse, lográndolo luego del cuarto intento, se queda de pie por unos segundos tratando de mantener el equilibrio y sonríe para sí mismo cuando lo logra.

- ¡M-Min! - vuelve a gritar, ahora si llamando la atención de Jimin, quien al verlo se asombra de inmediato tratando de no gritar - ¡Min!

Da el primer paso, tambaleandose un poquito, luego mueve la otra piernita haca adelante, pisando descuidadamente, pero se detiene, de pronto le ha dado miedo, pues teme caerse.
Observa hacía adelante, encontrándose con la mirada llena de orgullo y felicidad en el rostro de su papi.
Su estomago revolotea y mueve sus brazitos con emoción, las manos de Jimin se extienden pidiéndole a su hijo que se acerque hasta él. Yeong Su no puede negarle eso, por lo que sin esperar más, corre hasta su papá , llegando a sus brazos, aferrándose a la camisa de Jimin con fuerza y riendo cuando su papi le besa el cuello con dulzura.

- ¡Tus primeros pasos, eres tan lindo, mocoso!~

Y como si fuera obra del destino, la puerta de la casa es abierta, encontrandose con Yoongi, quien los observa desde la puerta con una gran sonrisa.