Felix llego a su casa con una gran sonrisa, su mama lo recibió con un abrazo y una sonrisa.

—¿Porque esa sonrisa tan bonita?-preguntó la señora hacía Felix.

—Bueno mama, en el supermercado me llego un aroma a coco y frambuesa con leche -comento feliz-Me gusto mucho y tambien a mi lobito.

—¿No será un cachorro cariño?, puede que sus padres lo hayan marcado con su olor-Felix negó aun con su sonrisa.

—Lo vi mama y el también me vio, el se acerco a mi y me habló por un momento, es alguien muy maduro y me gusto mucho-como pudo dio un brinquito en su lugar.

—¿Como se llama?-pregunto curiosa.

—Te diré todo, se llama Hwang Hyunjin-sonrió-Tiene 29 años y esta soltero-chillo alegre-A parte, es un sub alfa, por eso sus olores tan suaves y tiene una actitud tan tranquila que me gusto mucho, siempre estaba sonriendo-su madre sonrió, no veía así de feliz a su hijo desde hace tiempo.

—¿Te agrado mucho?-Felix asintió feliz.

—Me agrado mucho, es también muy guapo - su madre río.

—¿Algo más que contarme cariño? - tomo las bolsas de comida que traía su hijo.

—Sí, me invitó a salir a tomar un café mañana - su madre le alzó una ceja.

—Hijo, ¿estás seguro de ir?, tengo miles de razones como tu madre - Felix asintió.

—Lose mamá, se que apenas lo conozco y que no debo irme a la primera, pero es que me agrado mucho y no solo a mi, también a mi lobo - comenzó a ayudar a sacar las cosas que trajo de las bolsas mientras le decía.

—¿Seguro que iras mañana cariño? –

—Si mamá, estoy seguro - se dio la vuelta para sonreirle a su madre - Estaré bien - le aseguro.

—Esta bien cariño - dijo aceptando la salida de mañana de su su hijo - Con una condición - sonrió de lado - Quiero conocerlo - Felix abrió un poco su boca y se le escapó una corta risa incrédulo.

—Mamá, te preocupas que salga con el a una cafetería y me dices que lo traiga a la casa, madre, ¿que es lo que dices? –

—En una cafetería no estarás vigilado, mientras que en la casa sí, cuido a mi cachorro, solo eso - alzó sus hombros.

—Mamá - reprochó - Iré y ni una tormenta me detendrá –

—Bien, mañana lleva un paraguas, de seguro llueve –

—¿Otra vez viendo las noticias del tiempo mamá? –

—Si, para algo son las noticias del tiempo y mañana llueve, si llegas resfriado que te cuide Hwang, así que valla abrigado y con su paraguas - dijo y salió de la cocina dejando a Felix solo, este mirando incrédulo a su mamá y con sus ojos achicados.

Luego de una tarde ocupada para Felix, quien estaba haciendo trabajos de traducciones al ingles, cuyo trabajo es su fuente de dinero, decidió descansar, había echo cuatro trabajos.

Se estiró en aquella silla y luego procedió a apagar su computadora, al día siguiente haría el envío de esos trabajos.

Se levantó de la silla y se fue a acostar, queriendo descansar, pero eso fue interrumpido por su teléfono que comenzó a sonar, buscando el aparato que estaba en algún lugar de la cama lo encontró, vio el remitente y todo rastro de sueño se le desapareció, respondió y colocó la llamada en alta voz.

Hyunjin

-Buenas noches bonito, ¿te desperté? -

-No, estaba despierto, apenas tocando la cama luego de un día cansado-

-Y yo aquí molestándote-

-¡No!, no digas eso, no estas molestando-

-¿Seguro?, no quiero causar molestia-

-Seguro, no pasa nada, por cierto, ¿como que bonito?, ¿para donde va con tanta confianza?-

-Solo salió, eres bonito y no está de más decir que lo eres - escucho la risita del alfa y sonrió.

-Así que bonito, gracias-

-No lo agradezcas, por cierto, ¿si irás mañana?-

Felix recordó las palabras de su madre pero también recordó las suyas, haciendo un choque entre ellas, pero iría, claro que iría, quería conocer a ese chico que le llamaba mucho la atención.

-Claro - dijo seguro - Iré mañana-

-¡Perfecto!, pero hay que tomar en cuenta algo, mañana llueve-

Felix no pudo evitar soltar una corta risa, llamando la atención del alfa.

-¿Porque te ríes?, no le veo la gracia a algo tan importante-

-Lo siento, es que pareces mi madre, siempre viendo las noticias del tiempo-

-Alfa prevenido vale por dos, si te sientes cómodo en mandarme la dirección de tu casa puedo pasar a recogerte, no quiero que enfermes por mi culpa y menos que te mojes-

-Esta bien, cuando termine la llamada te mando la dirección-

-La llamada no va a durar mucho, es tarde y debes estar cansado-

-Bien, nos vemos mañana entonces-

-Seguro, mañana bien abrigado, que pases linda noche bonito-

-Buenas noches-

La llamada finalizó y Felix le mando la dirección de su casa al alfa quien le dijo un último buenas noches.

El omega satisfecho, se acomodo para irse a dormir, mañana sería un día emocionante.

••••••••••••••••••••

El omega veía la lluvia caer por la ventana, aun no era la hora de la salida pero si esa lluvia seguía así de fuerte lo lamentaba mucho pero de su casa no saldría ni nadando, ni aunque pudiera.

—¿Decías cariño? - la mamá de Felix comentó con un toque de burla - ¿No y que saldrías así hubiera una tormenta?, esto no se acerca a una así que puedes ir tranquilamente –

—Burlate mamá - frunció su ceño y escucho la risa de su madre haciendo que el bufara - Mamá no te rías –

—Bien cariño, no me río más - tomo su taza de café y tomo un sorbo - Qué bien se siente tomar una taza de café - Felix la volteo a ver molesto y la mujer no pudo evitar reírse - Lo siento cariño, es inevitable –

—Si si - volvió su vista hacia la ventana.

Sus ánimos se estaban bajando, realmente quería salir y conocer a aquel alfa.

Los minutos pasaban y la lluvia no parecía querer parar un poco, el omega suspiró con un puchero, al parecer tenía que hacerse la idea de que ya no saldría con aquel alfa y que sería en otra oportunidad.

A sus fosas nasales le llegó un olor a coco y frambuesa con leche, su lobo comenzó a brincar hacia todas direcciones, el omega alzó su vista y al instante la puerta fue tocada unas tres veces, la madre de Felix se levantó de inmediato y fue hacia la puerta, vio por el ojo mágico de esta y volteo a ver a su hijo que miraba con ojos brillosos hacia la puerta.

—Hijo, ¿Es él? - su hijo asintió frenéticamente.

—¡Mamá ábrele, hace frío y llueve mucho! - exigió y ella no espero más y abrió la puerta, observando a un chico alto, muy alto a su parecer, vestido casualmente y al llegar a su rostro lo vio con una sonrisa agradable - ¡Mamá! - la voz de su hijo la sacó del trance y apenada se hizo a un lado y tomó al chico del brazo y lo jalo hacia dentro.

—Lo siento, estás mojado chico - dijo al ver el cabello del hombre mojado - Felix, busca una to - sus palabras no terminaron de salir al ver a su hijo venir con una pequeña toalla en sus manos - Ojalá así fueras de rápido en las compras - Felix frunció su ceño y se acercó hacia el hombre.

—¿Porque no me dijiste nada? - reclamo y su madre hizo un gesto de asombro y se fue a la cocina - Tuviste que haberme avisado, estás mojado - Hyunjin tomó la toalla y comenzó a secar su cabello

—Claro que te avise, te llamé diez veces y te mandé siete mensajes - el omega fue a ver su teléfono y efectivamente tenía mensajes y llamadas del alfa.

—Ups, olvidé ponerlo a sonar - sonrió apenado y el alfa nego.

—De todos modos ya estoy aquí, un poco mojado pero no salí nadando que es lo más importante –

—¡Felix! - el omega dio un brinco en su lugar por el susto y casi se va de lado de no se por el comedor que estaba al lado donde se apoyo y miro hacia la cocina.

—Mamá estoy a metros de ti, ¿Porque gritas? - disimulo la vergüenza que estaba sintiendo y sonrió en grande.

—Te estoy llamando y no me escuchas, te pones bobito –

—Mamá basta - dijo al ver al alfa soltar una risita.

—¿Te da pena?, cariño, presta más atención mi vida, dios mío, estás despistado –

—¿Para que me llamabas mamá? - preguntó.

—Estaba probando tus sentidos pero al parecer no funcionan bien, ve con el joven e invítalo a sentarse y que se sienta cómodo, tienes parado al pobre desde que llegó - el omega chilló internamente.

—Seguro así crezco más - hablo Hyunjin y Felix escuchó la risa de su madre y luego la del alfa.

Y el omega llegó a la conclusión de que su madre y el se llevarían de maravilla.

Y como lo supuso, así fue, el alfa y su madre parecían amigos desde hace años, es como si no hubiera ido por el sino por su madre.

Suspiró y observó a Hyunjin hablar con una sonrisa hacia su madre, era guapo, lo aceptaba, aquellos labios gruesos, ese bonito lunar, sus ojos, sus largas pestañas, su bonita sonrisa, su cara sin duda fue tallada, soltó un sonoro suspiró y el alfa lo volteo a ver con una dulce sonrisa que le sacó otro suspiró a Felix.

Quizás no sucedió lo que el alfa tenia planeado, pero fue una mañana muy entretenida, para Felix que su mamá y Hyunjin se llevarán bien fue lo mejor de la mañana.

Hablaron de diversos temas, hasta en lo que trabaja Hyunjin y sus metas, Felix solo escuchaba y su omega se sentía orgulloso del alfa.

••••••••••••••••••••

Un largo mes pasó y aquel omega era muy feliz con todas las cosas bonitas que le brindaba el alfa, aunque este notaba algo raro en el omega, pero en algún momento le preguntaría.

Caminaban en aquel parque tomados de la mano, hablaban de muchas cosas, a veces se detenían para ver el paisaje a su alrededor, un paisaje muy bonito, niños corriendo aquí y allá, parejas sentadas debajo de un árbol, otros teniendo su momento de diversión corriendo para no ser atrapados por sus parejas.

Felix veía lo último y le gustaría mucho hacer eso con el alfa, correr aquí y allá, pero no podía, sus ojitos se aguaron al no poder hacer algo que le gustaría mucho. El alfa sintió de repente feromonas tristes del omega, así que colocándose al frente de el, pudo ver los ojos aguados del omega y un leve puchero.

—¿Que sucede bonito?, ¿Porque vas a llorar? - tomó su rostro entre sus manos y preguntó preocupado, no era para nada bonito ver al omega triste, una lágrima bajó por la mejilla pecosa de Felix y su labio comenzó a temblar - ¿No te gusta algo?, lindo - lo abrazo y el omega se aferró a el, escuchando después el llanto de Felix - ¿Porque lloras?, lo que sea que te hizo llorar, dímelo - repartió caricias en el cabello del omega.

—Estoy triste porque me gustaría hacer algo contigo, algo que no puedo hacer, cosa que no te he dicho por miedo - soltó y Hyunjin lo separó un poco, limpio las lágrimas de las mejillas del omega.

—¿Que no puedes hacer?, ¿Porque tienes miedo?, ¿Acaso te doy miedo? - Felix negó rápidamente al escuchar lo último.

—No, tu eres muy lindo –

—¿Entonces?, ¿Que te sucede cariño?, estabas feliz hace unos momentos y de repente te pusiste de esta manera - los ojos del omega se llenaron de lágrimas nuevamente - Lindo, puedes decirme que es lo que sucede, ¿Porque tienes miedo?, ¿Que es el que no puedes hacer? –

—Creo que tengo que contarte - el ceño del alfa se frunció un poco - De todos modos tienes que saber, no puedo vivir escondido, vallamos a mí casa –

El alfa sintió y le dió un beso en la frente al omega, quien sonrió un poco.

El camino a la casa del omega fue corto, el parque quedaba a solo unas cinco calles.

Felix al entrar a la casa seguido del alfa, suspiró, pensando en lo que se avecina y solo lo colocaba triste, su madre no estaba así que sería más cómodo, dirigió a Hyunjin al cuarto y está extrañado y esperando algunas palabras del omega quien solo se había sentado en la cama, palmeó está y el alfa se sentó a su lado.

Felix respiro profundo y decidió hablar.

—¿No has notado que cojeo? - miro al alfa y este asintió.

—Si lo he notado, te iba a preguntar sobre eso porque noto que te esfuerzas por no hacer que se note y solo quiero que seas libre conmigo, que te sientas cómodo, no tengo problema con eso si es lo que piensas –

—¿Y si te digo que no es una simple cojera sino que tengo una prótesis? - la habitación quedó en silencio y al omega se le aguaron los ojos, Hyunjin quedó sorprendido, no se hacía idea de algo así - Llore en el parque fue porque vi a una pareja divertirse, corrían aquí y allá, y me vi a mi mismo y pensé que no podía hacer algo como eso, ya no –

—¿Tenías miedo de contarme eso porque tenías miedo de mi reacción? –

—Si, la persona que un día estuvo allí sentado donde estas tú, no se espera esto, solo me dijo, nos vemos mañana, ese mañana nunca llegó - sonrió nostálgicamente - Me rechazó de la peor manera cuando choque con el - una lágrima tras otra rodó pues sus mejillas - Me dijo tantas cosas y no quise confiar en alguien más, así que estuve un tiempo sin tener a alguien, hasta hace un mes que nos conocimos y me abrí a esto, porque sentí una seguridad así que solo lo acepte y este día llegó más rápido de lo que pensé –

—¿Crees que sería capaz de algo como eso? –

—Ahorita no se que esperar, simplemente me da miedo de que te vallas sin decir más - dijo sincero.

—Felix - tomó la mano del omega y le dió un leve apretón - No tengas miedo de algo como eso, no sería capaz, te quiero mucho, mi corazón es todo tuyo, eres muy especial para mí, yo no podría simplemente dejarte nada más porque tienes una prótesis, yo solo veo tus sentimiento y el como eres, no me enfocó en lo físico, ni te pidió que seas perfecto, si eres muy lindo pero me encanta la persona que eres y solo esto me hace pensar que eres muy valioso, que si no podemos hacer algunas actividades que impliquen correr, no importa, hay muchas cosas más que podemos hacer, nos divertinos a nuestra manera y a la que más te guste porque estoy aquí para hacerte feliz y para hacerte saber que eres muy valioso sin importar qué, primero tu, segundo tu, tercero tu y lo demás después - Felix no pudo evitar lanzarse hacia los brazos del alfa, quien lo abrazo con cariño y repartió besos por todo el cabello del omega.

—Mejor es; primero nosotros, segundo nosotros, tercero nosotros y lo demás después, tu cuentas también - y era por eso que Hyunjin adoraba a eso lindo omega que tenía entre sus brazos.

—¿Que paso? - el omega se acomodó en su pecho y comenzo a relatar.

—Eso fue hace cuatro años, iba con mi mejor amigo en su camioneta, íbamos hacía una disquera, yo fui arrastrado por el ya que quería que lo acompañará para darle mi opinión, nos detuvimos en un semáforo, si vi que a su costado estaba un camión lleno de cabillas y un enorme tubo que estaba atado, el camion estaba en la otra calle pero la parte trasera del camión daba justo al costado de la camioneta, tenía un mal presentimiento y solo rogaba que aquel semáforo cambiará de color, fue como si me hubieran puesto una venda en los ojos, solo vi como mi mejor amigo me cubria con su cuerpo y luego escuché sus gritos, pude ver cómo una de esas cabillas atravesó su hombro, fue superficial, luego dos cabillas más fueron hacia su espalda, estás fueron más lejos, cuando reaccione, me desespere mucho pero aún asi no perdí la cabeza y buscaba algo que hacer, no conte con que dos cabillas fueran directo hacia mi pierna, una fue hacia mi pantorrilla que fue atravesada, la otra cabilla fue hacia mi rodilla, rompiendo todo, el dolor era mucho que me desmayé - comentó con tristeza y los momentos llegaban a su mente, recordando cada fragmento.

—Admiro tu gran valentía y fuerza, sigues sonriendo a pesar de todo, eso me hace ver lo especial que eres y debería ser recompensado, yo pienso hacer eso, quererte, cuidarte, mimarte, darte todo lo que quieras sin límites - atrajo aún más al omega y depósito un sonoro beso en su mejilla.

El omega se sentía especial, alguien único, se abrazó aún más al torso del alfa y se acurrucó .

—Gracias alfa - Hyunjin sonrió orgulloso y su lobo infló su pecho.

—Lindo, tu amigo, ¿Qué pasó con el? - preguntó curioso.

—Está en coma - el alfa hizo una "o" con sus labios - El salió muy afectado, los doctores decían que no pasaría la noche pero lo hizo, la mala noticia fue que había quedado en coma, quedó como en suspensión, aún no despierta ni da indicios de hacerlo - habló triste, extrañaba mucho a su mejor amigo.

—Pues espero que despierte, porque le daré las gracias por haberte protegido –

Felix se sentía realmente bien, después de un tiempo volvía a sentirse bien, mucho más que antes, estaba feliz de hacer conocido a una persona así.

Hubieron muchas dificultades y el destino le recompensó con algo bonito, cuidaría mucho de ese alfa, que a cada momento lo está haciendo feliz.

Los días pasaban en un abrir y cerrar de ojos, cada día era muy consentido por Hyunjin, salían a muchos sitios, a veces se quedaban en casa del alfa para pasar una tarde agradable o hasta se quedaba y pasaba la noche en la casa del alfa.

Nunca llegó a pensar que el alfa sería una maravillosa persona, más de lo que pensó que sería, le daba la seguridad de dejarse ver con su prótesis o sin ella, aunque esta le género un poco de inseguridad pero lo superó gracias a su alfa, ahora tenía la confianza de pasearse por la casa del alfa en bermuda y con su prótesis o a veces que se encontraba en el cuarto haciendo sus trabajo o solo viendo la televisión sin tener aquella prótesis, se sentía más seguro pues cada vez que su alfa lo veía de esta manera una palabra escapaba de sus labios "Hermoso", sacándole una enorme sonrisa al omega.

Sintió que finalmente consiguió la pareja perfecta.