NICOLAS

Detengo el auto en el último semáforo antes de salir de la ciudad, veo a Hannah que teclea en su celular y luego lo bloquea, suelta un suspiro.

—¿Todo bien?— pregunto y ella me mira.

—La familia llega a ser agotadora— me contesta y me mira— De acuerdo, necesitamos una historia que debamos contar ante todos— veo que juguetea con sus dedos— Algo creíble, como nos conocimos y todo eso.

—Tengo la pluma lista— anuncia desde atrás Alice con una pluma y una libreta, mira hacia abajo por su pies— Malvavisco pelea con alguien abajo.

—Oh, Flaco— exclamó recordando y freno de golpe, bajo de auto y abro la puesta trasera y saco la jaula de mi gato, Malvavisco le gruñe y Flaco a el.

—No me contaste que tenias un gato— me dice Hannah mirando hacia atrás.

—No era mio, era de mi ex y pienso dejárselo.

—¿Que?— me pregunta Alice— No puedes hacerle eso, te extrañará.

Abro la jaula y de inmediato olfatea al otro gato, espero que comienzen a discutir pero no lo hacen y los dos se echan en el tapete mirándose.

—¿Por qué le pusiste Flaco?— me preguna Hannah cuando regreso adelante con ella— Esta gordo.

—Cuando lo compramos mi novia y yo era flaco. Cuando terminamos me dejo el anillo que le di y al gato.

Hannah mira hacia atrás y sonríe al verlo.

—Bien, ¿Como nos conocimos?

—Por la aplicación de citas— le contesto a Hannah mientras pongo el auto en marcha.

—¿Que? ¡No! Una historia mejor que esa.

La observo de reojo mientras manejo. Hannah se queda pensativa mientras observa la carretera.

—Necesitamos algo romantico, algo que nos crean todos— dice a mi lado.

No se que decirlo, la verdad es que no soy tan romántico.

—Tengo ideas— dice atrás de nosotros Alice— Puede ser que se conocieron en un concierto, en una fiesta, en una excursión...

Nos mira al dar ciertas ideas, miro a Hannah y veo que tampoco esta convencida.

—Por los gatos— aconsejo y ella me mira— Podemos decir que se te escapo tu gato, te ayude a buscarlo, comenzamos a hablar y el amor de nuestros gatos fue lo que nos unió.

Hannah asiente con la cabeza y señala a su hermana.

—Anota esa idea— me mira— Yo encontré a tu gato y tu al mio en una noche de verano que llovía con fuerza...

—Y entramos a una cafetería en donde nos corrían por tener animales pero al final accedieron al ver que no tenían clientela— le sigo una idea y veo que asiente convencida.

—Compramos dos cafés y comenzamos a hablar, cambiamos números y me invitaste a salir. Luego de dos meses nos hicimos novios....

—Perfecto— asiento con la cabeza— Perfecto— repito.

Alice deja de escribir.

—¿En donde entro yo en todo esto?

—Tu no entras en el plan— nega Hannah al lado mio.

Me quedo callado, no creo que sea prudente meterme eso, ella es su hermana y la realidad es que yo soy un completo extraño para ella. Veo por el retrovisor que Alice hace una mueca y mira por la ventana.

—Tal vez podría tener un pequeño papel en esto...—dije y Hannah me miro— No se, la hermana que no me quiere y después acepto la relación, no tengo hermanos pero las hermanas de mis amigos eran celosas— recuerdo que siempre que una amiga en común iba a la casa de ellos cuando eramos adolescentes, sus hermanas hacían muecas de disgusto.

—Sería increible— exclama Alice y ve a su hermana— Por favor Hannah, yo también quiero participar.

Hannah se queda callada y ve por la carretera, pienso decir que lamento meter a su hermana en esto cuando ella habla antes.

—Lo pensaré de aquí hasta que lleguemos— dice sin mirarnos.

Veo como Alice sonríe y le sonrio también, Hannah no nos observa y entiendo que debo quedarme callado hasta que ella quiera hablar, no la conozco y lo que menos quiero es tener un problema con ella.

Y el silencio entre nosotros no es incómodo, me gusta, me siento bien.