Habían pasado tres días desde la última vez que vio a BaekHyun, pero seguro que estaba bien, porque usualmente se cerraba de todos para trabajar o resolver asuntos y al regresar recientemente, seguro que tenía mucho que resolver. De cualquier manera, iba a ir a buscarlo cuando saliera de su terapia con JunMyeon.

—No creo que sea bueno —YiXing trataba de convencerle para quedarse regresar directamente a casa después de la terapia, apenas llegó de casa de sus padres se fijó como objetivo mantenerlo seguro y en lugares donde no pudiese tener crisis, claro que no sabía lo acontecido con el payaso.

—No te preocupes— se sentó en sus piernas y dio pequeños besitos en la comisura de sus labios. —TaeYong se ofreció a acompañarme, estará fuera del consultorio y de ahí vamos a ir a visitar a BaekHyun.

—Está bien— se rindió ante los dulces besos de su novio.

—¡Genial! — se levantó de un brinco, tomó su chaqueta y salió con una gran sonrisa.

JunMyeon le miraba con suma atención.

—¿Nunca te has planteado que lo imaginas haciendo cosas tiernas porque lo amas? — preguntó después de meditar sobre lo que SeHun le había dicho.

—¿Amarlo? — se sorprendió —Jamás, es un criminal.

—Sólo era una suposición— le sonrió tratando de tranquilizarlo.

—No suponga estupideces.

SeHun tomó sus cosas y salió del consultorio con el entrecejo fruncido.

—SeHun— TaeYong le esperaba recargado de la pared—¿Está listo?

—Sí, hay que irnos.

Llegaron en bus a la parada cerca de la casa de BaekHyun, caminaron con rapidez.

—Sería mejor que te quites la chaqueta, la casa de BaekHyun siempre es muy cálida.

Y eso era porque el sol de daba de lleno por todos lados, las grandes ventanas al ser tocadas por los rayos convertían el lugar en una especie de horno, por ello Baek tenía aire acondicionado húmedo, que al estar encendidos producen una brisa húmeda que te refresca con suavidad relajante, tenía uno en la sala, uno en su habitación y otro en la de invitados. SeHun timbró y esperó, pero nadie le abrió a pesar de que tenía las cortinas abiertas -Baek las dejaba abiertas cuando estaba en casa- tal vez estaba duchándose, buscó la llave de repuesto que Baek escondía bajo una piedra en el jardín, abrió y dejó entrar a TaeYong, colgaron las chaquetas en el perchero y caminaron para ver si Baek estaba por allí.

—Huele mal— dijo TaeYong tapando su nariz.

—Tienes razón, tal vez dejó algo fuera del refrigerador, su sentido del olfato nunca ha sido bueno— SeHun se asomó en la cocina pero el olor no se hizo más intenso.

—Vamos a subir.

Mientras más subía, más fuerte era el olor, abrieron la puerta de la habitación de Baek y el hedor les golpeó en la cara muy fuerte.

—Oh Dios— Las lágrimas salieron de golpe, el cuerpo de Baek estaba en estado de descomposición, parecía como si estuviese durmiendo, a su lado en el buró había una copa de vino vacía, al lado estaba el frasco de gotas oftálmicas vacío.

—Tenemos que llamar a la policía.

TaeYong tiró del brazo de SeHun pero este no le escuchó, fue hasta su amigo, le miró con el dolor en el corazón, el cuello y pecho de BaekHyun tenía marcas entre rojizas y violáceas, producto del livor mortis, probablemente todo el cuerpo estaba así, menos la espalda y las nalgas por estar acostado boca arriba, su cuerpo parecía estar en el período cromático, pues tenía una red venosa en la piel, líquidos salían de su orejas, nariz y boca, evidentemente el ambiente caluroso y húmedo habían acelerado su proceso de descomposición, le miraba como esperando que abriera los ojos , que todo era una broma y que lo que olía tan mal era un animal muerto bajo la cama.

SeHun no se percató de cuánto tiempo pasó mirando el cadáver de BaekHyun, llorando en silencio esperando a que abriera los ojos. La policía llegó, le pedían a SeHun que abandonara la habitación pero él no les escuchaba, TaeYong tuvo que acercarse a él y arrastrarle con fuerza. Fueron llevados a la comandancia, estaban esperando en la sala de interrogatorios, las manos del mayor de ambos temblaban con fuerza.

—Señor Oh— un oficial entró y se sentó frente a ellos— Joven Lee— SeHun le miro a través de sus pestañas— Parece ser que no es la primera vez que están en una escena de suicidio.

—¿Suicidio? — preguntó SeHun.

—Sí, el pobre Señor Byun se suicidó con una sobredosis de gotas oftálmicas, la mezcló con el alcohol y tuvo una muerte levemente dolorosa.

—Imposible— susurró, sostuvo su cabeza con las manos, sintiendo un ataque de ansiedad acercarse— Él no pudo suicidarse.

—¿Por qué está tan seguro? ¿A caso usted lo mató y armó toda la escena?

—¿Qué? ¡No! — le miró furioso— No lo había visto en tres días, eso es todo.

—Le he seguido la pista señor Oh, ha estado visitando al psicólogo, estuvo presente en el descubrimiento del cuerpo del joven Chittaphon Leechaiyapornkul, en el ataque de un payaso en el parque y ahora en esto ¿Por qué visita al psicólogo?

—No le importa— TaeYong respondió por SeHun, pues el mayor estaba temblando y rascando su piel con ansiedad— Si no va a levantarnos cargos de nada y tampoco tiene forma de acusarnos por algo, será mejor que nos deje ir.

—Bien, el joven Lee lo salvó.

El oficial salió dando un portazo.

—Tranquilo, yo sé que usted no hizo nada.

—Me duele que me culpen de esto.

TaeYong le abrazó con fuerza, consolándolo.

(...)

—Oficial Wu, yo creo que sus métodos son poco ortodoxos. Esto no es china.

—Ya lo sé, pero estoy seguro de que este hombre tiene que ver con estas muertes

—¿Tiene pruebas? — preguntó el comandante.

—No, pero...

—Entonces deje a ese hombre en paz, no quiero una denuncia de acoso o falsos testimonios, tenemos suficiente trabajo como para tener a los de casos internos sobre nosotros.

—Sí, señor.

El comandante lo dejó solo en el pasillo, Wu sacó una foto de la bolsa de su chaqueta.

—Él también fue el responsable de tu muerte, LuHan.

El oficial Wu no dejaría a SeHun en paz, hasta que él pagara por la muerte de LuHan.

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Estaré esperando el debut solo de BaekHyun beibis