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Después de la cena, Meyli dejó un plato sobre la mesa, apartado especialmente para Shu. A quien no habían visto desde que llegaron, por lo que supuso que debía estar dormido

Como era una hermosa noche, en donde el cielo estaba despejado y se podían ver las estrellas; Natsuo y Meyli decidieron sentarse un rato afuera en las escaleras. Para conversar un rato

Mientras que dentro de la casa, el menor de los Kurenai acababa de salir de su habitación. Con un semblante sombrío

❀...

"¡Shuuu!, ¡Tengamos un enfrentamiento!. ¡Anda, Yo sé que si quieres!..."

-Valt...-

"A Don presumido le gusta entrenar solo..."

-Rantarou...-

"Ustedes son... las personas mas maravillosas que he conocido."

"Espero que podamos seguir juntos por mucho tiempo..."

-Ken...-

"¡Ven aquí Kurenai!... JaJa"

"¡Vamos a divertirnos!. ¡Arriba el club bey de la Academia Beygoma!."

-TN...-

Cada paso que avanzaba estaba más cerca de la puerta. La mirada de Shu se obscurecía mientras este apretaba los puños

"Tanto tiempo... y lo perdí.", pensó

"No..."

Se detuvo. Mirando fijamente la puerta del departamento

-Tantos recuerdos... y me los arrebataron.

Shu avanzó firmemente. Lleno de valor

-Hora de descubrir la verdad.

Se dijo a sí mismo antes de tomar el tomo de la puerta

"Hora de enfrentarlos..."

❀...

-¿Cuanto tiempo crees que te falte para terminar las pasantías y obtener el título?

Preguntó la castaña, abrazando sus rodillas por el frío

Natsuo estaba recostado sobre las escaleras, apoyandose de sus brazos mientras miraba al cielo

-Quien sabe... unos meses más y me darán el crédito que falta para graduarme. Luego trabajaré con papá en el hospital.

Respondió, con una sonrisa

Meyli lo miró por el rabillo del ojo y sonrió

-Si mamá nos viera ahora...-

Suspiró. Natsuo la miró de reojo y luego volvió a mirar al cielo estrellado, con un brillo nostálgico en sus ojos

-Seh...-

-Ah Shu... ¿Ya cenaste?

El mayor parpadeó y volteó a ver a su hermana con confusión, luego siguió la dirección de su mirada; encontrándose con el albino menor parado junto a la puerta

Este asintió y fué acercándose con tranquilidad hacia ellos

-Es una hermosa noche ¿No?

Habló mirando las estrellas

Ambos hermanos mayores volvieron a mirar al cielo. Meyli sonrió mientras los tres se perdían en las maravillas de la noche

Siguieron conversando, más despacio esta vez. Se permitieron recordar algunas anégdotas graciosas y otras no tanto

Las horas pasaban en silencio. Sin que ninguno de los tres se percatara de ello

Cada vez hacía más frío y Natsuo había tenido que darle su chaqueta a Meyli para que no se congelara

Mientras que Shu había quedado en silencio. Mirando perdidamente la ciudad nocturna; tan viva y llena de luces. Muy diferente a como se veía de día

Solo que con una cosa en común; de día o de noche. Aquella ciudad nunca duerme; y las eternas luces y el ruido proveniente de las avenidas y autopistas jamás iba a cesar

En ese momento. Shu sintió que estaba solo

Aún si sus hermanos estaban ahí. Él seguía sintiéndose desolado, sentía que había perdido tantas cosas que probablemente jamás volverían

Como sus amigos o el tiempo junto a ellos

¿Cuantos días de felicidad se había perdido?. ¿Cuantos logros de los que jamás sabría?

¿Cuantas más cartas que ella le habría escrito pero que jamás tuvo la oportunidad de hacérselas llegar?

Shu se detuvo. Ahí estaba otra vez; ese sentimiento que se apoderaba de su ser. Arremetiendo contra su subconsciente

Nuevamente trató de ignorarlo. Hundiéndo la cabeza en sus pensamientos y el las cientos de dudas que seguían sin respuesta

El día que despertó en el hospital sin recordar absolutamente nada; le dijeron que su vida cambiaría por completo

Pero nunca le dijeron que iban a alejarlo de su pasado. De sus amigos, de su vida antes del hospital

Y aún si todo ello hubiese sido por su bien, ¿Acaso alguien le preguntó si eso lo haría feliz?

Porque podía haber olvidado muchas cosas. Pero jamás olvidaría la profunda felicidad que sintió al leer por primera vez aquellas páginas del diario, después de tanto tiempo

Esa profunda nostálgia que lo envolvió al comenzar a recordar y perderse en el pasado de los días cuando era alguien felíz

¿Pero que era ahora?. ¿Un chico confuso e infeliz?, ¿Realmente alejarlo de todo había valido la pena?

Y si no es así, ¿Entonces qué razones tuvo su familia para hacerlo?

-Oye Shu, ¿Por qué tan callado?. ¿En en qué tanto piensas?

Preguntó Meyli

Shu bajó la mirada del cielo y volvió a fijarse en sus dos hermanos mayores

Cerró los ojos un momento y exaló profundamente y apoyó los codos sobre sus rodillas

-En todas las cosas que han pasado desde el accidente...-

Respondió franco

Ambos quedaron en silencio. Luego Natsuo habló

-Ha pasado un tiempo...-

-¿Cómo te sientes?

Preguntó Meyli

-Extraño... digo, son tantas cosas.

Natsuo lo pensó un rato y finalmente se volteó para mirarlo

-Oye Shu... ¿Estás seguro de que recuerdas todo?.-

Shu lo miró fijamente. Captando el mensaje subliminal de aquellas palabras

"¿Estas seguro de que no sospechas nada?.."

-Eso creo...-

Respondió. Meyli hizo una mueca sin que ninguno de los dos la viera

-¿Eso crees?

Volvió a preguntar el mayor. Reincorporándose para verlo mejor

-Si. Aún hay algunas cosas que me cuesta trabajo recordar...-

Respondió finalmente

La castaña sintió un escalofrío

-¿Qué es lo que te cuesta recordar?

-A mis amigos, mi pasado y a la vida que llevaba un año antes del accidente.-

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