Capítulo 19

Giro decidida a buscar a alguien para no quedar sola, pero todos están en pareja, alocados y pasados de vasos.

Me desespera y el temor corre por mis venas, comienzo a caminar a paso rápido pero sintiendo mis piernas gelatinas, y sentí caerme al ver mi celular nuevamente vibrar. Puede que capaz sea una jodida broma, pero para que sea tantas veces, es algo raro ¿Verdad?

Acepte la llamada y lo lleve a mi oreja, pero esta vez sí escuche, era electrónica, lo que en este momento estaban pasando, los gritos, como aquí se escuchaba.

Si algo me quedaba claro, es que esa persona estaba en la misma fiesta.

Finalice la llamada, y puedo jurar que por más personas que hayan, me sentía sola, y si me llega a pasar algo nadie se dará cuenta, porque están en su mundo, gritando, y un grito, sería uno más, pero no, no debo pensar en esto.

Me quedo justo en el medio de la pista, y miro a un punto fijo ya que la mirada que sentía sobre mí era muy pesada.

Me encuentro a lo lejos alguien con capucha observándome, no podía verlo bien, parecía todo de negro con sus brillantes ojos intimidantes, ¡Bien esto me estaba asustando! Con mis piernas como gelatina doy un paso para encarar a aquella persona, sí, me estaba volviendo loca, pero el drama, era lo último que hoy quería, pero algo me impide eso, un fuerte y apropósito empujón hace que casi caiga en un grupo de personas, observo al que me había empujado, también, con capucha, pero solo eso, ya que, en segundos no está más a mi vista, miro al lado del chico de ojos verdes pero no está más.

Sentía algo en mi garganta y mi corazón, eso fue algo muy raro y con propósito, definitivamente no me gustaba nada, algo peor, no encontraba a nadie, Justin, Trichie, Harley, Darell, Ryan, todos habían desaparecido.

Camino apresurada a una punta, iría al baño, capaz allí estaba la rata, capaz Stacey, o Harley, no importaba, solo necesitaba a alguien para tener un poco más de protección.

Solo me faltaba correr bien, porque caminaba lo más rápido posible, y en un minuto sin mirar atrás en el camino, llegue al baño y abrí la puerta apresurada, y me dirigí al lavamanos, no había nadie, mierda, pero de pronto escucho la cadena de uno de los baños y miro con atención, con mi vista fija para ver a la persona que saldría, seguramente alguien que sería mi salvación, y con la suerte de mi lado, veo a Trichie quien sale de allí, que me mira con inquietud, claro, ¿Quién no?, primero más que nada estaba como una loca prestando más atención que nunca para ver quién era, y sabía que estaba entre atacarme o no, hablarme o no, yo no lo haría, pero bueno, Trichie es diferente a mí.

La miro mal y luego recuerdo que necesito de su ayuda, asique mi expresión cambia en un instante y le sonrió, claro que falsamente, pero mi sonrisa a ella le hacía creer que era una sonrisa sincera.

-¿Sabes dónde está Justin? -Pregunte, era lo que más necesitaba saber-

Trichie me mira, y camina al lavamanos, se toma su tiempo lavando sus manos y sacudiéndolas, se pone derecha y me mira por el espejo.

-¿Para qué? -Me pregunto-

-Necesito que me ayude en algo -Le conteste-

-Que lastima -Dijo con una sonrisa falsa-

-No estoy para tus celos, y novia extremadamente protectora -Le replique- Estoy necesitando su ayuda, y no lo encuentro ¿Sabes dónde está? -Pregunto de mala gana y sin paciencia-

Miro mis uñas para no mirarla, tenía que actuar un poco más, si no mis palabras saldrían sin querer, pero me desesperaba el hecho de que ella se crea única para Justin, preguntando todo, me molestaba, y mucho.

-Que dolor, que dolor, que pena -Me canto, riéndose de mí-

-¡Oh, vamos! -Esto me estaba estresando-

-No lo sé -Ella hablo mientras llevaba sus brazos al aire-

-Y... ¿Cómo no sabes donde esta Justin? -Trichie iba a hablar, pero la interrumpí- Hay muchas chicas en esta fiesta, ¿Quién sabe que puede estar haciendo en este momento? -Eleve una ceja-

Trichie giro y comenzó a caminar a la salida, yo la seguí pero su celular sonó y ella se quedo quieta.

-¿Has visto a Ryan?

-¿Quién sabe que puede estar haciendo en este momento? -Me respondió con una pregunta-

-La diferencia entre Justin y Ryan, es que Justin es tu novio, y Ryan nada mío, por lo tanto, no me importa lo que hagan y lo que no -Ataque-

-Pero por algo preguntas -Se dio vuelta y me miro mal- La diferencia, es que a ti, te importan todos -Ahora ataco ella-

-Pregunto porque necesito su ayuda, estúpida -Me sacaría de mis casillas-

Ella giro y abrió la puerta, comenzó a caminar y yo la seguí por atrás.

-Oye, Trichie -Intento llamar su atención mientras caminaba a paso rápido por atrás de ella-

-Deja de molestar -Pidió cansada y de mala manera-

-Si ves a Justin dile que necesito su ayuda.

-No tienes amigos, y por eso necesitas la ayuda de Justin y Ryan, porque estás sola -Perra-

Me enfade por lo que dijo, y la seguí por atrás antes de que salga totalmente del pasillo y se pierda entre las personas bailando, no sé lo que haría, sin contestarle o empezar una pelea sin palabras, pero yo sería la que tendría la última palabra, no ella, no esa rata.

Miro hacia atrás por instinto rápidamente, ya a unos pasos de Trichie, que ya había salido del pasillo e iba a entrar a la multitud de gente bailando, veo a un hombre de negro a unos pasos míos, cerca, a mi costado mirándome, caminando hacia mí.

-¡Trichie! -Grito con desesperación, aunque eso, sonó como una orden-

No pude decir más, una mano tapa mi boca con violencia acompañado de un golpe en seco, algo que me hace dar un grito, ya que me dolió.

-Quédate callada -Me ordeno esa persona-

De pronto saca la mano de mi boca y rodea mi cintura, pero tenía un arma que me apuntaba e impulsaba, comienza a caminar, pero hago resistencia, poniendo toda mi fuerza intentando frenar con mis propios pies, pero me comienza a empujar de atrás a lo bruto, siento algo en mi estómago e intento gritar, hacer algo, pero nada sucede, me he quedado en un shock, totalmente dura dejándome que me lleven a los empujones, el celular se resbala de mis manos y en un momento de desesperación intento cogerlo pero antes de agacharme me toman del cabello, fue cuando reaccione, intento soltarme de las manos que tenían mis cabellos pero fue inútil, con un último empujón caigo de rodillas, y al levantar la mirada esta todo oscuro, no hay personas, la música se escucha a lo lejos, lo único que escucho es el latido de mi corazón junto a mi pesada respiración.

Alzo mis manos al aire, intentando sostenerme de algo pero no hay nada a mi alcance. Con el corazón en mi garganta me levanto y miro hacia a algún lugar, pero es como estar ciega, esta todo en negro, dejo de respirar por unos segundos con la intención de saber si alguien más y así escuchar su respiración, pero no nada, vuelvo a respirar y solo es mi respiración la escucha.

Siento temor, mucho, tengo miedo, miedo de que me vuelva a pasar algo, como ese intento de secuestro de Justin, fue una estupidez, pero es algo que jamás me olvidare, y lo digo, la oscuridad es mi peor miedo desde aquel día.

Tengo miedo de tan solo dar un paso, pero tomo valentía sabiendo que era ahora o nunca, escapar, algo que va conmigo, pero en esos tres pasos, me toman del cabello jalando hacia atrás y dejándome sentada en el suelo, mi trasero dolía.

-¡Oye! Quédate quieta, perra, no intentes gritar ni tampoco escapar, es inútil -Una voz femenina y seria a la vez habla-.

De pronto una luz se prende iluminando la habitación, en la cual eche un rápido vistazo junto dos chicos de capucha y todos de negro me miran, por cierto, en la habitación no había nada de nada.

Miro a mi costado viendo a aquella voz femenina, me sorprendía, ella estaba vestida toda de negro al igual que los demás, solo que sin la capucha, y realmente era perfecta, rubia de ojos marrones claro, casi miel y amarillo, una perfecta cutis, de tez blanca.

¡Joder que me sentía un bicho raro al lado de ella! Pocas veces me pasaba, sabiendo que soy totalmente natural y sin nada plástico, ¿Por qué envidiar a muñecas sin un toque de naturalidad?, patético. Oh, era lo que yo pensaba.

Miro hacia delante para echarle un buen vistazo como se debe a los dos chicos de enfrente mío, y allí estaba el chico de ojos mieles con mirada penetrante, tez blanca, cutis perfecta, nariz perfecta, sus labios rosados con un piercing en el labio inferior en el costado, eso era porno, no podía ver más que eso debido a su capucha, pero debo admitir, que su mirada es intimidante, dan ganas de meterte bajo las suelas de tu zapato, o simplemente ser un fantasma así no me mira, ¡Pero no es posible y el jodido imbécil tiene sus ojos clavados en mí! Pero no le mostraría la incomodidad, porque mi orgullo es ante todo.

Miro a su compañero, era "negro", bien, de ojos marrones oscuros, con una brillante sonrisa.

-Eliot, no es hora de juegos -La vos femenina me saca de mis pensamientos y la sonrisa de "Eliot" se borra-

Maldita zorra, el chico era lindo.

Un estruendo hace sobresaltarme, respirando hondo y controlando mi respiración, me preparo para quien sea que haya entrado, quizá, me matara.

Con la cabeza gacha veo dos piernas delante de mis ojos, zapatillas y pantalón negro, subo toda mi mirada y veo un chico con capucha, pero se me hacía conocido, entre cierro más mis ojos para mirar mejor y este da unos pasos hacia atrás, dejándome ver bien.

¡Era el! ¡Era Christian!

Sentí un alivio y suspire, sé que él no haría nada, es más, me siento segura al estar a su vista.

Pero todo cambia.

El rostro serio de Chris no es nada bueno, agregando que me miraba de una manera rara, algo nunca visto para mí, me miraba con ¿Odio? Con ¿Resentimiento? No lo sé, todo mezclado, pero nada bueno.

-Me he metido en problemas por ti, y tú... tu eres del bando de Justin -Suelta de repente Christian con asquerosidad en cada una de sus palabras- ¿En serio ___? Realmente no te creía así, al parecer, te has olvidado de todo lo que Justin te hizo -Dijo totalmente serio-

-¿De qué hablas? -Dije confundida, sin entender, pero sus palabras me taparon la pregunta-

-Y tampoco no entiendo que él te haya aceptado... -El entrecierra los ojos con una sonrisa arrogante- Hablo de que, no solo a mí me causaste problema, a ambos, o a muchos por nuestras partes -Paro y prosiguió- ¿Sabes que puedes salir lastimada? ¿Verdad? -El tono bajaba, entonces aproveche-

-¡Para Christian! -Hable, y proseguí rápidamente- No estoy en ningún bando, y mucho menos en el de Justin ¿Te has vuelto loco? -Pregunte- No me olvido de todo lo que Justin me hizo, no me olvido de nada, pero... ¿Qué quieres que haga? Los veo todos los días de semana, no puedo simplemente ignorarlo, intento pero de alguna forma u otra, me lo cruzo -Suspire-

-Puedes, pero no quieres -Hablo decidido- Si uno quiere, puede, sin importar nada, puede. Y tu -Me apunto- No quieres, y claro que así no te saldrá nunca -El paro- Pero me extraña que después de que le causaste y causas, tantos problemas, no te ha metido una bala en la cabeza, es algo raro de Justin y el que te ve siempre, siendo testaruda, egocéntrica y todo junto, realmente me extraña -Eso me ofendió-

-¡Sí! Pero ¿Sabes qué? -Dije enfadada- No lo hizo, ni lo...

-Tú no ves el futuro, y lo digo porque lo conozco de años -Me interrumpió- Bieber no es un juguete -Él se puso a mi altura, ya que, yo estaba en el suelo- Y uno de estos días, se cansara -Hizo una mueca- Y lo digo por tu bien ___, aléjate de Justin -El tomo mi mejilla- Te hará daño, solo eso, entiende que a él no le importas -Dijo con un tono suave- Es estúpido que te dejes ser una más, ¿Piensas que no me entere?, yo lo se todo, absolutamente todo -Dijo con total tranquilidad-

-¿Todo? Dime a que te refieres con "todo"-Hice comillas-

-Sé que te crees una chica importante y pretendes ser fatal en la vida de Justin, que al final el siempre volverá -El me miro a los ojos y hablo sin vueltas- Pero déjame decirte algo, cariño -Hizo una media sonrisa- El solo te quiere para un rato, cuando se aburre, no le importas, solo eres una más, una más que por ahora está durando, ¿Lo tienes? Vamos ___, has caído bajo aunque no lo quieras admitir, sientes algo por Bieber, algo que él no siente, solo te lo hace creer, pero no es así, las palabras que te dijo a ti, ¿Sabes a cuantas más se las ha dicho? No eres única en la vida de Justin, abre los ojos -Simples palabras- No te quiere -Que rompían de pedacitos mi corazón- Y no lo digo solo porque no te quiero con Justin, además de eso, lo digo porque te quiero cuidar, que abras los ojos de una maldita vez y veas la realidad -Sentía algo en mi garganta- Y lo mismo con Ryan, no a cualquiera le muestra su verdadero yo, tiene más de dos rostros -Él se levantó- ¿Haz entendido? Te pones en riesgo por algo que no vale la pena -Hizo una mueca que mostraba lastima-.

Realmente lo sabía, pero necesitaba que me lo digan. No podía abrir mis ojos por mí misma, necesitaba que lo hagan... no aceptaba la realidad y ahora me la hicieron aceptar.

Lo que me dijo Christian, jamás me lo olvidaría, jamás me olvidaría sus palabras, era algo que quedo en mi mente y sabía que no saldría, por un largo tiempo, un largo tiempo que vería a Justin, y pensaría más de dos veces lo que haría.

-¿Por qué te preocupa tanto esta mocosa? Se supone que veníamos a hacer otra cosa -La voz femenina interrumpió mis pensamientos de mala manera-

-Sonia -Hablo Christian como tono de advertencia-

-¿Cómo me has dicho? -Salte a mi defensiva-

Me levante y pare justo enfrente de ella, pensando que se intimidaría, pero no mostró eso, ni siquiera un poco, es más, elevo una ceja con una media sonrisa de burla, haciéndome entender que lo último que haría yo, es intimidarla.

Con minutos de hacerme ver la realidad de una, no tan buena, manera, me sentía una estúpida, igual a tener mal humor, igual a que en este momento quería descargarme, por eso, no era lindo cruzarse en mi camino en un momento así, no me importaría si llevaba un arma, simplemente atacaría, sin miedo alguno.

-Oye, niñata, no te intentes hacer la superior, conmigo -Rio- No me conoces -Me amenazo-

-Ni tú a mí -La amenace-

-Por tu bien, es mejor que no me conozcas, a ti te hacen un jueguito algo rudo, pero muy poco, como el que te hizo Justin y exageras las cosas -Ella me miro de arriba abajo, algo que despertó más la furia en mi-

-Mira zorra...-Y decidida a atacar, me interrumpen-

-Sonia deja de buscar problemas, tú también ___ -Christian me alejo de ella-

-¿Resentida cariño? ¿Resentida por qué te dijeron la verdad? -Sonia se burló-

-No te gustara conocer a ___ -Hablo Chris a Sonia, y sonreí victoriosa- Ni a ti a Sonia -Ahora Sonia sonreía- Ninguna -Finalizo-

-Perra callejera -Dije en voz baja, pero con la intención de que Sonia me escuchara-

-Prefiero ser eso, a ser tú, que le dices a la pelirroja niñata, cuando tú también lo eres, y hasta capaz más, ingenua -Soltó Sonia-

No me enfado, pero era una razón para causar una pelea ¿Verdad?

Aparte a Chris de mi lado y me lance a ella, con nuestros cuerpos se desplomaron en el suelo, yo arriba de ella tomando compostura, rápidamente antes de que ella me jalara del cabello, golpee su tabique con un puño, se quejó y la tome de los cabello haciendo que su cabeza quedara de costado y ella intentaba defenderse, abofetee fuertemente su rostro que mi mano quedo ardiendo como nunca, pero en parte rasguñe clavándome mis uñas en su perfecto rostro, en la mejilla, y de un momento a otro ella me golpeo en la garganta dejándome sin aire por un momento y aprovecho para tirarse encima de mí y darme un abofeteada con la palma de su mano junto un rasguño, patalee y de pronto la levantaron de encima mío, pero se agacho para volver a tirarse encima mío pero fui más ingeniosa y con mi tacón con mucha fuerza golpee su boca, a lo que la escuche quejarse.

Gane yo.

-¡Maldita puta, ya la veras! -Me chillo-

Me levante pero me levantaron de la cintura dejándome mis piernas colgando y mis brazos del otro lado, veía como Eliot se llevaba a Sonia. Comencé a patalear e intentar clavar la punta de mis tacones en cualquier parte del cuerpo de Christian.

-¡Mierda! Quédate quieta de una jodida vez chica -Deje de moverme-

Ese no era Christian, mire hacia delante y vi a Chris mirándome sin ninguna impresión, pero con los brazos elevados, reclamando lo que había sucedido.

-¿Qué? -Actué como si nada hubiese pasado-

-Llévatela y déjala en su casa -Ordeno Christian-

Aun arriba de la persona que sea que me estaba llevando, comenzó a caminar, y parecía que la fiesta para mi acabo, quería pasarla bien, pero no, acababa de salir de una pelea con una gata.

Me di cuenta que no estábamos pasando por la pista, puedo decir que estábamos saliendo por otro lado, porque la música se escuchaba cada vez menos, hasta que en segundos no se escuchó más.

Sentí el aire fresco en mi rostro y apenas lo sentí, este me bajo a lo bruto sin un poco de suavidad, sin preocupación, y rápidamente tomo mi mano en la suya, me apretaba fuerte, como sin piedad, olvidándose de que era una chica tal vez.

-Ya puedes caminar -Me hablo- Sonia no está por aquí, y no creo que quieras escaparte-

-Suelta mi mano -Dije seria, odiaba que me tomen de la mano, no era ninguna niña chiquita-

-Yo también quiero eso, pero no confió en ti, vas a escapar en el momento que tengas la oportunidad -Y si era así, lo haría-

Entonces comienza a caminar rápido, y yo iba atrás, me estaba arrastrando literalmente, me acorde que nunca había visto bien su rostro. Estiro mi mano con fuerza para detenerlo, frenando mí paso, a lo que le llamo la atención, él se da vuelta en un giro brusco y me mira, haciendo que su capucha se caiga.

¡Por la mismísima verdadera mierda!, pero ahora que no tenía capucha y me dejaba verlo bien, estaba buenísimo, era totalmente hermoso.

Ojos mieles, castaño claro, tez blanca, y nariz perfecta.

Soltó mi mano y me jalo del brazo y comenzó a caminar a paso apurado, en segundos estaba delante de un auto deportivo color negro, y como un flash abrió la puerta, soltó mi brazo y me empujo para que entrara, ¿Qué le pasaba?, no espero nada, cuando puse un pie dentro del auto, él ya estaba poniendo las llaves, asique me apresure en entrar y apenas cerré la puerta, el arranco, jodido bruto.

Íbamos a una fuerte velocidad, pero siquiera ¿El sabia donde vivía?, por hacerse el arrogante, ahora que no se queje, porque ya no estaba en casa, estaba en un departamento, mucho más viaje.

El aire era incomodo, ya íbamos unos minutos y solo me dedicaba a mirar por la ventana ver pasar velozmente los árboles y postes, me estaba aburriendo, y en este momento, simplemente no quería pensar, tendría tiempo, pero era algo imposible, las palabras de Christian quedaron en mi cabeza dando vuelta una y otra vez. Entonces, me di cuenta, de que fui una estúpida en caer en algo tan bajo como Justin Bieber. Yo pensaba que jugaba con él, pero no, no era así, era el quien lo hacía y yo lo sabía, pero mis ojos no se terminaban de abrir, me dejo como una perra máxima, porque era muy consciente de que como actuó conmigo, lo hacía con Trichie, con Harley y con muchas otras más, y conmigo era a escondidas, verdaderamente estúpido ¿Verdad? Mierda, simplemente me gustaría desaparecer de la tierra, no veo la hora de salir de High School y empezar con mi carrera en la universidad que tanto quiero estudiar. Volviendo al tema, creo que esto lo repase muchas veces en mi cabeza, alejarme de Justin, pero... yo lo digo, aunque no lo hago, puedo intentar pero no lo logro, por más que lo vea los días de semana, puedo ignorarlo, lo puedo hacer, pero no quiero, ahora sí quiero, pero sé que Justin volverá e insistirá, debo aprender a decirle que no, me es difícil por con su rostro de ángel y esa encantadora sonrisa me cuesta un poco, mucho, por lo tanto, todo lo que pienso se borra, ese es un afecto que Justin logra en mí, lo detesto, y ahora más que nunca.

¡Que imbécil fui!, ¿Por qué no me aleje desde un principio? ¿Por qué no le hice caso a Chris? ¿Por qué? Y ¿Por qué justamente Justin Bieber?

Simplemente no lo quiero ver nunca más, pido eso.

-¿Pensando en Bieber? -La voz del chico a mi lado me sobresalto, ya que me había olvidado de su presencia- Mira, eres linda y Bieber un idiota, deja de pensarlo porque él no lo hace contigo, él no se toma diez minutos en su vida para pensarte a ti -Muy tierno, pero con palabras duras- Tu lo piensas y Justin esta con alguna chica -Él no me miraba, solo miraba hacia delante-

-Gracias -Realmente no sabía ni que decir-

-A nadie le gusta que le digan la verdad, pero... a veces es necesario, para no ilusionarte más -Me explico-

-No me ilusione, ni me lastimo -Negué a lo que él se rio-

-Bieber te gusta aunque no lo admitas, pero nadie que no te valore vale la pena -Ahora me miro y me guiño un ojo-

-¿Con que poeta? ¿Eh? -Pregunte- Es raro que un chico como tú, diga esas palabras, se supone que son rudos y no le importan los demás-Opine-

-No me importas -Dijo serio- Pero esto se lo diría a cualquier chica que esté pasando por lo tuyo, aunque también es raro que una chica como tú, este rogando a alguien como Bieber, se supone que son de corazón de hielo -Eso, me ofendió- Y no quiero ofenderte, pero muestras algo que no eres -Levanto los hombros-

-Oye, todos tenemos sentimientos -Dije ofendida-

-Y no dije que no, pero la clase de chica que eres, tendría más escudos respecto a los sentimientos -El paro- Pero, al final no eres tan puta como te creí.

Me estaba diciendo cosas bonitas, y acaba de decir eso, este chico es hasta ahora, el más bipolar que conozco.

-Y tú que pareces un chico malo, eres un completo chico, seguramente, enamoradizo, que hace frasecitas de amor -Ataque-

-En realidad no, ya lo dije, lo que te dije a ti, se lo diría a cualquier chica, no es lindo que sufran, lo digo porque tenía una hermana de diecisiete años y siempre estaba sufriendo por amor -Hizo una media sonrisa y a la vez triste-

-¿Tenias? -Pregunte, por si se había equivocado-

-Ella... murió -Dijo en voz baja-

-Lo siento mucho -Dije con culpabilidad- Debe ser horrible -Dije con tristeza-

-Me decía que era muy frió, y que si la veía llorar solo le decía que todo iba a estar bien y nada más, y que se suponía que era el hermano y era obligación decirle algunas palabras -Rió- Así que, aprendí.

Eso era tierno, así que también era un chico de roca que cambiaron, seria horrible perder una hermana, si yo tendría, la cuidaría más que a mi vida, podría cuidarla y darle muchos consejos, ser su mejor amiga como ella la mía, en este mundo me gustaría una hermana, por parte es feo ser sola, sin hermanas, porque de vez en cuando necesitas ese apoyo, nunca voy a saber cómo se siente, pero debe ser hermoso, aunque ¿Perderla? Sería como que se te venga el mundo abajo, como que te dejen solo con un poquito de corazón.

-Oh -Dije interesada- Por eso, te convertiste en un gran poeta -Le dije-

-Algo así -Y yo solo asentí- ¿Pero por qué mierda te he contado eso? -El parecía enfadado-

¿Lo ven? Realmente bipolar.

Levanta mis brazos al aire e hice una mueca de confusión, a lo que este me miro mal.

-¿Cómo te llamas? -Pregunte intrigada- Hasta ahora no lo he sabido -Le confesé-

-Hans -Dijo-

-Lindo nombre -Hable con la verdad-

El solo me miro, pero no agradeció. Vete a la mierda Hans.

-Llegamos -Dijo de repente-

Estaciono en la entrada del edificio, y me dejo sorprendida, porque aquí estaba mi departamento, ¿Cómo lo sabía?

-Bien, gracias por...

-No fue porque quise, debía hacerlo, ahora sal rápido, ya no quiero perder más tiempo de lo que perdí contigo -Dijo en tono serio-

¡Oh, por favor! Si no fuera porque me trajo hasta aquí, le tiraría mi tacón por la cabeza, era muy bipolar, realmente la caga con su hermosura, aunque parecía ser a veces tierno y cuando se acordaba era una mierda.

-Vete a la mierda -Le dije mientras abría la puerta y ponía un pie fuera-

-Entonces voy a tu lado -Se burló-

-¡Eres un imbécil! Púdrete idiota -Estaba enfadada y ya fuera del auto, por cerrar la puerta con fuerza-

-___-Él puso la mano en la puerta para evitar que la cierre-

-¡¿Qué?!

-Pásame tu número -Dijo sin descaro-

-Es enserio, púdrete Hans-Gire mirando su precioso rostro por última vez y me marche adentro del edificio-

Era una lástima pensar que esa fue la única y última vez que lo vería.

Ya duchada y con pijama, me tire a la cama disfrutando de la suavidad, paz y silencio que presenciaba, era un placer, estaba algo cansada, fue una noche con un poco de todo, agotador.

Enumerare todo lo que paso en una noche.

Uno, Trichie cambiada.

Dos, fiesta de Justin.

Tres, Stacey falsa.

Oh, eso, ¿Dónde estará?

Cuatro, Ryan y Harley.

Cinco, Fiesta de Justin.

Seis, Ryan me beso.

¡Oh eso también! Mierda, me había olvidado completamente, que buen momento.

Siete, Justin maldito bastardo, interrumpe el momento.

Ocho, Justin me hace una escena de celos.

Nueve, conozco al barman que me da "consejos".

Diez, las llamadas raras.

Once, de un momento a otro estoy en una habitación donde me llevaron por la fuerza.

Doce, la estaba pasando mal.

Trece, la chica ruda y perfecta, donde por un momento la envidie a esa gata de Sonia.

Catorce, era Christian pensando que estaba en el bando de Justin, y después se aclaró todo.

Quince, me hicieron ver la realidad de cómo son las cosas verdaderamente.

Dieciséis, entendí que para Justin soy una más y el solo juega conmigo en mis narices.

Diecisiete, peleamos con Sonia, y no con palabras.

Dieciocho, Hans me trajo a mi departamento y hablamos en el camino, me di cuenta de que es muy bipolar.

Diecinueve, Hans es el amor de mi vida.

Bien no así, pero está buenísimo y no me canso de decirlo.

Y ultima; Veinte, Justin Bieber y Ryan Butler, pueden irse a la mierda.

Un "índice" de las cosas que pasaron en la noche.

Pensé en mi conducta, en que después de la muerte de mis padres, buscaba sola los problemas, los causaba o los buscaba, de alguna forma u otra los encontraba, y no cualquier clase de problema, me refiero a este problema. Soy confiada, y mucho, con los chicos, hoy no tuve problema de subirle al auto de Hans, no digo tampoco que me subiría a cualquier auto, tuve más confianza porque es amigo de Christian, y dudo que me haga algo, como así fue, pero tampoco puedo justificarlo como buena persona porque soy consiente en lo que él está metido, como Christian, Justin, Ryan, prácticamente mi circulo, se basa en ellos, en esa clase de personas, por decirlo más fácil, en mafiosos, algo que sabia y tenía claro todos los días, que en algún momento alguno de ellos iba a terminar con mi vida.

Estaba muy agotada, así que no perdí mucho tiempo, y cerré mis ojos con la intención de descansar al fin, pero a los segundos los abrí nuevamente, tenía un mal presentimiento y también, me molestaba demasiado, mi panza, la perra callejera rasguño mi panza pero no creo que me duela más a mí, que a ella por lo que le hice en su rostro.

Me acorde de Justin, y de las palabras de Hans, en que Justin no pensaba en mi pero yo lo pensaba a él y muy dentro mío esperaba que las palabras de Hans fueran incorrectas pero también sabía muy bien que él decía la verdad porque tenía claro que Justin tenía muchas chicas a su disposición, él no se tomaría un segundo de su vida para pensar como me encuentro, o con quien estoy, como yo lo hago con él, hablo de que Justin solo me necesitaba para un rato, pero seguía deseando que las palabras de Christian y Hans hasta la misma Sonia se equivocara y no estuvieran en lo cierto, que Justin si me pensara pero eso no era cierto, por alguna extraña razón sentía que Justin tenía algún tipo de compromiso conmigo al saber su secreto, solo por eso, me mantenía a su lado.

Iba a dormir y esperar que mañana mis problemas se solucionaran, esta vida ya me cansaba.

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Espero que les haya gustado, las amamos, leo todo los comentarios.

¡Bienvenidas a las nuevas lectoras!

Voten!