Armelle

—No planeó entregártela, sólo porque el estúpido mocoso dijo que era necesario matarla.

Ben me dedica una mirada.

—Solo así podríamos unirnos y acabar con el fin del mundo —Luther insiste con el tema.

Me parece tan estúpido lo que estaba planeando Cinco, ni en sus mejores sueños iba a lograr matarme, o mínimo tocarme un pelo.

Ben lo hizo.

Me recriminó mi mente, pero no era igual, me había agarrado desprevenida. Pero ahora que lo pensaba, la probabilidad de supervivencia con esta cosa se hacía casi nula.

—¿Cómo se le ocurrió la estúpida idea al numerito? —Me acuesto sobre el sofá—. Hasta lo que se ninguno de sus planes han salido como esperaba ¿o si?

Luther me da una mirada con recelo, se humedece los labios antes de hablar.

—Su yo del futuro se lo dijo.

¿Estúpido? ¿Maniático? ¿Irritable?

Lo voy agregar a mi lista de adjetivos para describir a Cinco Hargreeves.

—¿Estas seguro que tu hermano no está loco? —no puedo evitar soltar una carcajada—, ¿a caso no sabe lo peligroso que es?

—No debería de ser tan peligroso como tu lo llamas...

—Cinco hablo con su yo del futuro. Eso es más que peligroso porque puede que nada de lo que diga pueda cambiar las cosas.

—¿A qué te refieres?

—Qué si el mundo se va a la mierda, es porque ya estaba dicho. No puedes hacer nada para remediar algo como un maldito hoyo negro.

—No entiendes...

Antes que siga hablando logro interrumpirlo.

—En primera instancia yo no debería de estar aquí, si el problema es que yo no este viva en este universo...deberían de dejarme ir a casa.

—Pues vete —dice con simpleza Luther.

Ben suelta una carcajada antes de sentarse a mi lado.

—¿Que parte de que el mocoso tiene el anillo no entiendes? —intervino Ben.

—Lo siento, pero no quiero averiguar si dejándote viva vamos a evitar todo esto.

—¡¿Quién carajo son ustedes para decidir si muero o vivo?! —pongo mi mano en mi pecho—Solo quiero salir de aquí, regresar a casa con el señor Strange y con Wong.

—A veces tenemos que tomar decisiones horribles pero no significa que por eso sean malas Armelle —Luther me mira con seriedad.

—Dime que no acabas de decir una mierda como esa—suelto una carcajada sin gracia —¡Me quieren matar para que su universo sobreviva! —hago énfasis en "su universo"—, eso es hasta la mierda de egoísta Luther.

—Vamos Armelle no es personal...

—¡Cállate por una mierda! Desde que caí por el estúpido portal Cinco se ha empeñado en asesinarme. Así que si, si es personal —me pongo de pie para después con mi mano golpear la mesa del centro—Hagan lo que quieran, pero ten por seguro que los mataré antes de que me toquen un solo dedo.

Sloane me niega con la cabeza pero solo puedo darle una mirada de disculpa. Sentía mucho lo que podría hacer, pero no estaba dispuesta a ceder mi vida por dejar que ellos vivieran.

—Es mejor que les digas a tus hermanitos que entreguen el cuerpo del anciano.

Siento un dolor en mi pecho, el aire me comienza a faltar. Caigo de rodillas frente a la mesita de noche y jalo con fuerza mi ropa, golpeó una y otra vez para recuperar el aire.

—¿Armelle? —Sloane se acerca asustada a mi y me toca mi espalda— ¿Que sucede?

Intento decirle que me falta el aire y por más que intento recuperar el aliento no puedo. El dolor punzante en mi pecho es acompañado de las arcadas para intentar respirar.

—¿Que hacemos? —Sloane esta mas que asustada, mientras los demás intentan tocarme.

Mis piernas tiemblan unos instantes, basta unos segundos antes de caer sobre la alfombra. Y comenzar a retorcerme en el suelo en busca de aire.

Escucho que se acercan a mi e intentan hablarme. Dicen mi nombre varias veces, hasta que Ben se acerca a mi y toma mi rostro.

—Vamos estúpida mocosa —me mueve el rostro— Mantente con nosotros.

—¡Ben has algo! —Sloane esta llorando.

El aire y el dolor en mi pecho comienzan a hacerse más fuertes y es ahí cuando mi cuerpo deja de luchar. Me mantengo con la vista en el techo de la sala. Ben intenta hablarme para no quedarme dormida pero es inútil. El dolor a superado mi aguante, no soy la persona fuerte que pensé...

¿Estaba lista para morir?

No, no lo estaba.

Sin más me deje llevar de nuevo por la oscuridad.