Cap. 5 "Dolor"

Imágenes confusas...

Recuerdos de otro pasado...

¿Mi pasado?

Sí, aquel que he olvidado...

Pero... no todo... No a ti...

El rostro del ser amado... que impotente aun espera...

-¡No! Por favor... ¡NO!

Lagrimas silenciosas derramadas como lluvia caen sin cesar... presagiando un desenlace fatal

-¡Espera! Por favor... ¡ESPERA!

Estoy tan cerca

Mi mundo y el tuyo... pronto se unirán

**************** & ****************

Tip... Tip... Tip...

El constante goteo de líquido frio en su rostro hiso despertar a Hinata que abrió parsimoniosamente sus ojos.

-"¿Dónde... estoy?"

Un cielo encapotado con nubes bajas a través de un espeso follaje fue lo primero que vio tendida desde el suelo fangoso de un bosque.

-"¿Qué fue... lo que... paso?"

No estaba segura, tenía la mente confusa con varios fragmentos inconexos que no le decían nada... Entonces, un fugaz recuerdo le sobrevino.

Flash Back

-¡Corre! –grito Itachi, interponiéndose entre ella y Madara- ¡Corre y no te detengas! ¡No mires atrás!

Torpemente ella obedecía levantándose tan rápido como sus temblorosas piernas se lo permitían, corriendo hacia el bosque a través de zarzas que herían su delicada piel como cuchillas. Entonces, justo cuando estaba a punto de alcanzar el claro, un grito escalofriante resonó a sus espaldas, en la dirección de donde venía, en la dirección... de Itachi.

Fin Flash Back

-¡Itachi! –exclamo Hinata levantándose de golpe, pero al hacerlo sintió un fuerte aguijonazo en su costado que la hiso caer de nuevo al suelo profiriendo un grito de dolor que se escuchó por todo el bosque.

-"¿Qué...?" –quejándose por el dolor y llevándose instintivamente una mano a la zona afectada que le aquejaba, experimentando al contacto con la sensación de un líquido caliente y espeso discurriendo entre sus dedos. Confundida, alzo su mano para ver de qué se trataba y... ¡oh, sorpresa! La sustancia mezclada con lodo en su mano era...

-¿Sangre? –musito, abriendo desmesuradamente los ojos contemplando temblorosa su mano ensangrentada.

Si, definitivamente era sangre, SU sangre, y por la cantidad, deducía que no era poca la que había perdido, por lo que de continuar así... moriría.

-"Mo... rire" –pensó asustada sin poder actuar para evitarlo, paralizada por el miedo- "Moriré" –se repitió entrando en pánico empezando a hiperventilarse. En eso, el rostro de ese joven rubio vino a su mente, el cual reflejaba una profunda tristeza, y supo que era por causa de ella. Saberse responsable de su dolor la golpeo de lleno, haciéndola reaccionar- "No" –se dijo con firmeza- "No puedo rendirme. No antes de verlo... a el"

Habiendo tomado tal determinación se puso en acción; primero presiono con su mano la herida para contener momentáneamente la hemorragia, después como pudo se sentó y desgarro la parte inferior de su blusa haciendo una tira que paso por su cintura a modo de torniquete colocando otro trozo de tela por debajo para hacer presión y fuese más efectivo su improvisado vendaje, aguantando en todo este proceso el dolor debido a lo brusco de sus movimientos.

-Listo –dijo exhausta dejándose caer con la respiración entre cortada por el esfuerzo realizado- L-Lo... logre –cerrando los ojos.

Sin embargo, apenas lo hubo hecho, escucho un leve zumbido como de un objeto cortando el aire, e instintivamente su cuerpo reacciono rodando sobre si misma para esquivarlo, quedando a cuatro patas mirando sorprendida los 3 extraños cuchillos que tenían un mango con un anillo que estaban incrustados en el lugar que antes ella ocupara.

-Vaya –dijo una voz áspera proveniente de arriba de los arboles a sus espaldas- Parece que no es una presa tan fácil como pensábamos.

Hinata quedo un momento petrificada al escuchar esto, luego muy lentamente conteniendo el aliento giro su cabeza, alzando su vista, encontrándose con 3 sujetos mal encarados de ropas extrañas que portaban bandas en la cabeza con un símbolo extraño que le hiso pensar en nubes, y que la miraban con sonrisas maliciosas que le produjeron escalofríos.

-¡Oh! –dijo el de la voz áspera que se encontraba en el medio- Que tenemos aquí... Byakugan.

-Si –confirmo el de la derecha, un tipo gordo- Definitivamente lo es, y... -inspeccionando en derredor- ...está sola. Que afortunados –tornándose su mirada codiciosa- Nos darán mucho por ella.

-Ja ja ja –intervino riendo el de la izquierda, el más alto de los 3 que tenía la cara picada- Y pensar que solo veníamos en misión de reconocimiento al país del fuego –se mofo desdeñosamente- Quien diría que nos haríamos con el legendario Byakugan. Claro... -agrego con perversidad- en cuanto se lo arranquemos del rostro.

Hinata, que hasta ese momento se había mantenido inmóvil expectante ante lo que decían se aterro al oír esto último, por lo que sin siquiera pensarlo o hacer caso al dolor de su costado se incorporó tambaleante en un desesperado intento de fuga. Desafortunadamente para ella, apenas hubo dado 3 pasos cuando el sujeto de la izquierda se materializo frente a ella cortándole el paso.

-¿A dónde crees que vas? –se burló, sujetándola con fuerza del cuello impidiéndole a la peliazul escapar. No obstante, mientras se debatía en un improvisado movimiento consiguió propinarle un rodillazo en los bajos con lo que consiguió soltarse cayendo al suelo, tosiendo por la falta de oxígeno en sus pulmones- ¡Maldita! –vocifero el hombre tomándola con violencia del cabello y arrojándola contra el suelo a varios metros por donde la joven rodo hasta quedar inmóvil boca abajo- ¡Esto lo pagaras, zorra! –amenazo acercándose a ella peligrosamente.

-Hey, hey –lo detuvo el de la voz áspera- Que la necesitamos con vida.

-Déjalo –dijo el gordo.

-Pero... -objeto el de la voz áspera- La necesitamos en buen estado.

-No –lo corrió negando con su dedo- Solo necesitamos que respire.

Dicho esto, el de la cara picada se soltó del agarre de su compañero y se encamino riendo con anticipación hacia Hinata.

-"Es imposible" –pensó Hinata mareada, sintiendo como sus fuerzas la abandonaban- "Me... matara" –mirando a través de la cortina de cabello que cubría su rostro al sujeto que se le acercaba- "Naruto" -llamo en su mente angustiada visualizando el rostro del ser amado- "¡Naruto!" –cerrando los ojos con fuerza, esperando lo peor.

Pasaron varios segundos, pero no pasó nada, y curiosamente, todo sonido ceso. No escucho nada, tan solo el sonido de su propio corazón que palpitaba con violencia en su pecho por el miedo. Después, algo similar a un quejido le llego, seguido de algo al desplomarse a su derecha, luego... todo quedo nuevamente en silencio. Abrió lentamente sus ojos, sin poder resistir más la incertidumbre, y lo que encontró fue... el cuerpo inerte de su atacante tendido en el suelo a su derecha.

-"¿Esta... muerto?" –abriendo los ojos desmesuradamente por el terror.

-¿Te encuentras bien? –escucho decir entonces a alguien, pero aun así, no pudo apartar la vista del cuerpo sin vida- Descuida –le dijo la voz- Ya no te lastimara –e intento tocarla, pero al hacerlo un estremecimiento la recorrió- Tranquila –la calmo con voz amable- Estas a salvo.

Fue extraño, en el momento que levanto su rostro y su cabello cayo hacia atrás descubriendo su rostro, aquel hombre de cabello peligris con el rostro semicubierto palideció visiblemente, borrando su sonrisa y abriendo desmesuradamente los ojos.

-Hyuuga... Hinata –musito el peligris.

-"¿Por qué... sabe... mi nombre?"

Este fue el último pensamiento de Hinata que sintio un fuerte pinchazo en el cuello, y enseguida como su vista se empezaba a nublar dándole vueltas todo, perdiendo así poco a poco la conciencia, mientras se filtraba en su mente el rostro de aquel joven cuyas bellas facciones se desdibujaba por su... "Dolor".

Holis, se q es cortito subo el siguiente el viernes  o sabado si me es posible ciao.