Escritura:

En tercera persona (Normal)

Narra Applejack (Cursiva)

*Pensamientos* (*) (Casi siempre son de Applejack, pero cuando sean de otro personaje pongo la aclaración)

"Recuerdos" ("negrita y cursiva entre comillas")

Recuerdos o momentos imaginarios, recreaciones (Negrita y cursiva)

Notas, Cartas, Carteles, Mensajes, Lugares (Negrita)

*-*-*-*-*-*-*-*-*

Stage 28

Ahí... Ahí están, esos ojos.

De vez en cuando, Rarity...

Me mira con esos ojos fríos de vidrio.

Esos ojos azules... Me ponen muy mal.

Applejack miraba a la peliazul en silencio sentada frente a ella en la mesa de trabajo del atelier.

-Entonces... ¿Empezamos a poner el encaje?- preguntó Rainbow Dash.

-Si nos dividimos las partes vamos a terminar enseguida.- respondió Rarity con las telas entre sus manos.

-¿No juntamos las partes antes?- preguntó esta vez Pinkie de pie a un lado de la peliazul.

-No podemos, no hay suficiente encaje.- dijo Fluttershy preocupada.

-Es un encaje hermoso, ¿Puedo verlo?- preguntó la rubia.

-¿No es divino? Es un diseño único de una empresa europea cerrada.- comentó Fluttershy con una sonrisa mientras le dejaba tomar el encaje.

-Woow... Los importados son muy buenos. Los colores son fantásticos, es hermoso.- dijo Applejack admirándolo.

-¡Rarity le tiñó los colores!- dijo Pinkie abrazando a la rubia del cuello.

-Ah, ¿En serio?- preguntó Applejack sorprendida.

-Applejack... Mejor ve a casa.- dijo Rarity seriamente mientras tomaba el encaje. Las demás la miraron sin decir nada.

-¿Eh? ¿Por qué? Nooo...- chilló Pinkie abrazando más fuerte a Applejack que tenía una gota en la frente.

-Terminamos de coser los canutillos. Ya no puede hacer nada excepto mirarnos.- respondió la peliazul.

Pinkie entonces la soltó y asintió rápidamente con nerviosismo.

-Aunque me vaya a casa, tampoco tengo nada que hacer ahí.-

Rainbow Dash se sentó en uno de los taburetes frente a la barra sin decir nada mientras una gota bajaba por su sien mirando a la peliazul de reojo.

-Que testaruda. Realmente lamento ser tan directa...- suspiró Rarity tocándose la cabeza y luego agarró unas tijeras.- Pero molestas.- completó dejándolas a centímetros del cuello de la rubia.

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*¡No lo lamentas en lo absoluto!*

Pensaba la rubia mientras salía del atelier rápidamente con el ceño fruncido.

*Estaba casi sonriendo cuando lo dijo. ¡Qué miedo!*

-¡Jackeline, te olvidas esto!- gritó Pinkie alcanzándola con el celular de la rubia en mano.- Lo recargué para ti.-

-Ah... Gracias, Pinkie. Qué suerte que tengamos el mismo modelo. Era molesto estar sin celular- dijo tomándolo con una sonrisa.

-Escucha tus mensajes de voz enseguida.- le dijo la rosada.

-¿Eh? ¿Me dejaste un mensaje, Pinkie?- le preguntó Applejack sorprendida.

-No fui yo... Perdona... Lo vas a entender cuando lo escuches.- Respondió dándose la vuelta rápidamente para volver al atelier.- Rarity está de muy mal humor, mejor regreso rápido. Después te envío un mensaje.- agregó antes de entrar con una sonrisa.

Applejack entonces se dio la vuelta con el ceño fruncido.

*Esa mina... Incluso Pinkie le tiene miedo.*

Applejack encendió su celular para escuchar los mensajes.

*¿Qué carajo le pasa? Estaba tan alegre esta mañana...

"Recuerdo de la mañana con Rarity ayudando a Applejack a peinarse antes de salir al colegio.

-Ya me voy... Pórtate bien.- le dijo terminando de atarle las trenzas y dándole un beso en la mejilla con una sonrisa.

-Ajá.- respondió Applejack con una gotita en la frente y aun en bata de baño."

*Todas las mañanas está así... ¡Que freak!*

Applejack se recargó en la pared llevándose el celular al oído.

*Pero en cuanto su vestido se mete en medio me trata así. Cuando se trata de ropa no le importa nada más.

¡¿Pero qué fue lo que le cambió así el ánimo?!

¿Tendrá personalidad múltiple?*

-Soy Twilight, por favor, llámame.-

Los ojos de la rubia se abrieron como platos al escuchar el mensaje.

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Academia A

La peliazul estaba por entrar al edificio cuando su celular sonó.

-¿Hola? ¡Ah! ¿Applejack?- Twilight dejó de caminar.- ¿Dónde estás? ¿Puedes reunirte conmigo ahora?- preguntó volviendo a caminar pero en sentido contrario.- Ok... Entonces... En la cafetería de la otra vez... Estoy ahí en quince minutos.-

Una vez colgó Twilight miró la hora en su celular.

5:21 pm.

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En el reloj de muñeca de Applejack marcaban las 5:36 pm. La rubia sopló en su taza de café, cuando la peliazul llegó presurosa y se sentó frente a ella.

-Perdona el retraso.- respondió suspirando.

Applejack comenzó a reírse a carcajadas.

-¿¡Qué!?- preguntó Twilight alterada.

-No te retrasaste nada. Llegaste a los quince minutos exactos. Es tan típico de ti, Twilight...- decía la rubia limpiándose las lágrimas.

-No te rías... Estuve muerta de preocupación por ti...- se quejó.

Applejack dejó de reír y la miró.

Twilight volvió a suspirar con los ojos cerrados mientras se arreglaba el cabello.

*Muerta de preocupación... Eso es un poco... Exagerado.*

-Bienvenidas.- dijo una moza dejando un vaso con agua mientras las chicas estaban en silencio con la mirada hacia abajo.

-Ah. Un café.- pidió la peliazul.

Luego volvieron a quedarse en silencio por unos segundos más mientras la moza se iba.

-Pinkie me contó que te escapaste de tu casa.- empezó a hablar Twilight.- Así que... ¿Qué estás haciendo? ¿Trabajas?-

-No... No pude encontrar trabajo.- respondió la rubia con los ojos cerrados.

-Dijiste algo de una oportunidad la ultima vez... ¿Que fue?- le preguntó mientras tomaba el vaso para dar un sorbo.

-Ah, sí. ¿No te lo contó Pinkie?- preguntó Applejack mirándola.- Estoy tratando de convertirme en modelo profesional...-

Twilight la miró en shock y luego empezó a toser. Applejack se sonrojó y varias gotas bajaron por su frente.

*Cuando lo digo así en voz alta parece que una niña dijera que quiere convertirse en princesa.*

-...Es la primera vez que oigo algo así...- volvió a hablar la peliazul una vez se recuperó, mirándola con una gota en la frente.- Aunque seguramente vas a poder conseguirlo. Cuando llevas esa ropa realmente pareces una modelo profesional. ¿Alguien te descubrió?-

-Sí... Se podría decir que si...- decía Applejack mientras se rascaba la nuca.- Pero no siempre es tan fácil... Estoy buscando alguna otra agencia ahora.-

-Es decir que ahora mismo no tienes nada.- suspiró la peliazul.

Applejack no dijo nada tomando su taza.

-Oí que estabas viviendo con tu novia...-

La cara de la rubia se puso roja.

-¿Ella no dijo nada al respecto? ¿Sobre tu casa o dejar los estudios? ¿Sobre tu futuro?-

No respondió.

-Algo me dice que esto no pasaría si ella lo hiciera.-

-No es eso, Twilight. Dejar el colegio y huir de casa fueron decisiones mías.- negó con una sonrisa nerviosa.

-Ya lo sé.- asintió la peliazul mirando abajo con expresión triste.- Pero si ella hubiera dicho, que era mejor quedarte en casa y terminar la secundaria... Tu no habrías hecho algo así, ¿O no?-

-¡Ella no tiene nada que ver con esto!- respondió Applejack con el ceño fruncido mirando la mesa.

-Claro que si...- respondió la peliazul está vez mirándola.

-Fue decisión mía. No hago lo que los otros me dicen.-

-¿Qué te pasa, Applejack...? "No tiene nada que ver", "Lo que los otros dicen"... ¿Por qué estás tan cerrada?- preguntó Twilight preocupada.- Nadie puede estar seguro de lo que realmente quiere. Todos estamos preocupados y confundidos, somos influenciados por las ideas de las personas que nos rodean.-

-Pero...-

-Más si esa persona es la que amas, ¿No te parece? Es algo natural... No digo que sea malo.-

Los ojos de Applejack se volvieron vidriosos.

*Pero a Rarity...

No le gustan las mujeres sin iniciativa...*

La rubia se cubrió el rostro con una de sus manos.

*En el fondo no soy más... Que una mujer influenciada por esa misma idea...*

-¿Por qué lloras? ¿No van bien las cosas con tu novia?- volvió a preguntar preocupada.

-¡Van perfectamente! ¡Lamento haberte preocupado tanto, pero soy muy feliz ahora!- respondió mirándola mientras una lágrima escapaba de su ojo izquierdo.

-Siento el retraso.- dijo la moza llegando con el café mirando a Applejack de reojo.

-Si lo dices llorando...- susurró la peliazul nerviosa cuando la moza se fue.

-Perdona, te estoy haciendo pasar un momento incomodo en público.- dijo mientras se limpiaba con una servilleta.

-Ojalá fuera ese el problema.- suspiró Twilight.- Si ella no dice nada... Cuando tú estás en un estado emocional tan inestable, no puedo dejar de preguntarme si realmente te quiere.- completó.

*No tienes porque pegarme donde más me duele.*- pensó la rubia apretando la servilleta mientras más lágrimas escapaban de sus ojos.

-Está bien... No me importa si no me quiere. Estoy con ella porque quiero. Soy la primera esposa.- dijo mirando seriamente a su izquierda.

-¿"Primera esposa"? Eso solo me preocupa más.- respondió Twilight con una gotita en la frente.

-¡Cállate de una vez! ¡Déjame en paz!- le gritó.

Ambas abrieron los ojos en shock.

*¿Qué...?*

Applejack la miró arrepentida.

*¿Qué estoy diciendo...?*

-Perdo--

-La directora dijo que iba a ir a tu casa pronto a ver como estabas. El colegio cree que estás enferma. Si descubren que no estás en tu casa todo va a empeorar.- respondió Twilight seriamente tomando su café.

Applejack no dijo nada.

-Fue tu mamá la que dio la excusa de tu enfermedad. ¿Realmente quieres ser expulsada?- preguntó mirándola con tristeza y luego volvió a bajar la mirada.

La rubia hizo lo mismo.

-Eso es lo que vine a decirte. Lamento haberme metido en tus asuntos.- agregó poniéndose en pie después de dejar el dinero por su café.

-¡Twilight!- la llamó Applejack incorporándose.- Realmente lo siento. Gracias por todo. Estoy bien, en serio. No te preocupes por mí.-

Twilight la miró.

-Déjame que me preocupe al menos. Somos compañeras después de todo.- le respondió con una sonrisa.

Applejack la miró sorprendida y luego sonrió también.

¿Por qué...?

¿...Me fui de casa sin mi uniforme?

En algún momento comencé a correr en la dirección equivocada...

Esperando que Rarity regrese, en el departamento de Rarity, pensando sólo en Rarity.

Siento que me estoy convirtiendo en el tipo de mujer que ella mas odia.

Si esto sigue así todo va a terminar muy mal...

Pero no sé como volver a la dirección correcta.

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-Ya te lo dije, rompe con ese idiota de una bendita vez.- le dijo la peliazul cansada tomando una copa de vino.

-Es muy tarde... ¿Cómo voy a mantenerme a mi edad?- respondió la otra con los ojos llorosos sentada en el piso.

-Puedes empezar de nuevo. Todavía tienes 39, Fleur. Si vives hasta los 80 apenas llegaste a la mitad.- respondió encogiéndose de hombros.

-¡¿Mitad?! ¡No puede ser! ¡¿Solo me queda la mitad?! ¡Desperdicié la mitad de mi vida! ¡¿Qué voy a haceeeeer?! ¡No quiero morir así!- lloraba arrodillada mientras tiraba del vestido de Luna que la miraba sentada en el sillón con una gota en la frente.

De repente Fleur dejó de llorar y la miró con ojos esperanzados.

-Luna... Si cambio mi carácter y vuelvo a trabajar... Me tomarías como...-

-Lo siento, no necesito modelos viejas en mi agencia.- sentenció.

-¡¿Vieja?!-

De repente la conversación fue interrumpida por el sonido de la puerta abriéndose.

-¡Ah! Ya volvió.- dijo Luna con una sonrisa incorporándose.

-¿Eh?- preguntó Fleur tomando su copa.

-Oí un ruido en la entrada.-

-¿En serio?-

-¡Bienvenida, Mini!- dijo Luna con una sonrisa que enseguida desapareció cuando sus ojos se encontraron con otro par que no eran azules, sino verdes. -¿Applejack?- preguntó apuntándola con la boca abierta.

La rubia dejó caer la llave de la impresión.

No renuncié a mi vida...

Para convertirme en la mascota de Rarity.