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único.

Lo dije en su momento y lo repito, si hay un acuario y Scorpio que si terminaré Shippeando serán estos, pero por ser hetero.

Soy del tipo de persona que cree que por varios factores no es normal que los santos celebren sus cumpleaños, (cof, por ejemplo en TLC la historia principal tiene un ciclo de unos 3 meses más o menos, 3 dorados y varios Saint cumplieron años en plena masacre) pero con lo modernizado que está el Santuario de Dark wings cuando me enteré que Tristán cumple años el 14 pensé "haz un fic, vale la pena"

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Aún era temprano, cerca de las 8. Si conocía a Tristán ya habría despertado, desayunado y estaría totalmente inmerso en asuntos de los cuales solo el patriarca tendría conciencia.

Eulalia aún no sabía qué ponerse. Tenía claras intenciones de hacer caso omiso a las declaraciones de su amigo, <<No tengo interés en celebrar mi cumpleaños. Prefiero quedarme investigando>> Ni loca lo iba a dejar hacer eso por otro año. Ya estaba bien aburrida de eso.

Si mal no estaba en el pasado algo como un cumpleaños era impensable en el santuario, no estaba permitido por varias cuestiones, o por lo menos no era mencionado o celebrado, detalles que en ese momento no les quería prestar atención. Estabas más ocupada en elegir su ropa.

Un vestido más corto de lo habitual fue lo que tomo, unas botas altas y el cabello como de costumbre. En su mesa de noche tenía 2 regalos para Tristán, uno por su cumpleaños y el otro aprovechando que se celebraba San Valentín ese mismo día.

- Oye Eu... - La voz socarrona de un compañero no tardó en salir a sus espaldas. Asustando a la Saint de Scorpio.

- Krematorio de Cáncer... - Apretó los dientes levemente. Mirando a su compañero notando que tenía un objeto en manos. - ¿Debo suponer que estabas esperando a que saliera de mi templo? Mucha coincidencia me parece que estés justo acá cuando voy a salir con eso en la mano. ¿La pastelería del pueblo?

- En efecto linda. Entre los 10 la conseguimos, ¿Puedes entregársela a Tristán? Todos sabemos cómo es, pero creó que estaría más dispuesto a recibirla de tu parte.

- ¿Cómo sabías que voy con él? - Escéptica se puso a la defensiva.

- No sabía, solo pensé que serías perfecta para entregarla pero ahora que lo noto. - Sonrió con picardía molestando a la rubia. - Si necesitas condones me dices.

- ¡Dame esa cosa y lárgate antes que te patee las piernas! - Roja, de ira y bochorno hizo todo en lo que su voluntad estaba para no atacar a su compañero que se reía de forma que le resultaba fastidiosa. Pasando su mano por su pelo gruño molesta.

>> Dámela que con gusto la entregaré. - Fue una orden, su voz sonó bastante agresiva.

- Vale, vale. Solo cálmate, si me disculpas convencí a Basilios que me acompañará, deséame suerte. - Hubo algo en su tono de voz al pronunciar lo último que hizo sentir a Eulalia ligeramente incómoda. No quería hacerse ideas peores de las que tenía, así que no dudaría en indagar con su amigo después.

Suspiro molesta ignorando al guardián del tercer templo. Tenía las manos más llenas de lo que esperaba, pero no lo encontró como algo negativo. Sonrió y confíaba empezando su camino como lo tenía planeado.

- ¿Puedes abrirme, Tristán? Tengo las manos llenas. - El nombrado apenas escucho eso levanto la cabeza de la computadora.

Al abrirla Eulalia entró con bastante tranquilidad, agradeciendo la amabilidad, dejando los 3 paquetes en el escritorio y separándolos, volteando a ver al caballero de acuario que simplemente le miraba con los brazos cruzados, teniendo una mueca de simple apatía.

- No era necesario que te tomarás estás molestias. Sabes que dije que no quería nada para mi cumpleaños.

- Eres un amigo importante para mí, claro que voy a querer mínimo darte algo. Y bueno, no soy la única.

- Por lo menos pudiste avisar. Estoy algo ocupado en este momento.

- Pareciera que te disgusta el tema. No entiendo porque. - Primera persona que veía poniendo peros por un regalo.

- No me disgusta, simplemente no tengo interés. Con todo este desastre no tengo cabeza para celebrar eso.

- ¿Tus excusas los años anteriores? - Apoyando su espalda al escritorio arqueó las cejas. Mirando expectante.

- En años anteriores estuve ocupado con mi entrenamiento y te recuerdo que también estuve ayudando al patriarca a buscar a la señorita Athena.

- Más razones para que por lo menos, me dejes darte este regalo. - Le sonrió. El contrario cedió la derrota acercándose a la mujer, recibiendo cada regalo. - Los chicos me pidieron que te entregué está torta, es de parte de toda la orden.

Tristán no sé hizo de rogar para aceptar, al abrir la caja no ocultó su sonrisa. Era un detalle pequeño pero se veía deliciosa, notando como a un costado había varios sobres juntos, cada uno con la constelación de uno de los 12 signos zodiacales como cello.

- Muchas gracias por esto. - Poniendo la caja de la torta nuevamente sobre su escritorio, guardó los sobres junto a la computadora. Tomaría un descanso para leerlos.

- Estos 2 son de mi parte, uno por tu cumpleaños y el otro por San Valentín. Solo no te diré cuál es cuál.

Y para acabar peor ambos estaban en el mismo paquete. Cosa que Tristán no tenía que pensar para saber que hizo a propósito, la chica se mantenía relajada y sonriendo con un deje de picardía inocente. Él simplemente la abrió.

- ¿Una carpeta de CD,s?

- Sé que esa computadora tiene lector de discos, ese tiene una recopilación de 10 animes de solo 12 capítulos que puede que te gusten. Quería saber qué tanto te conozco cuando los elegí, ya todos los ví. Así que, por lo menos a mí gusto están entretenidos.

- ¿A qué hora duermes o de dónde sacas tiempo? - Quiso reír. Ojeando el otro regalo, un libro que no tenía.

- Solo sé administrar mi tiempo. No es un secreto muy profundo. - Volteó el rostro notando que tenía el otro regalo en manos. - Te iba a bar ropa pero creí que merecías algo un poco mejor, claramente pedí ayuda.

- Bueno. No me hubiera quejado de la primera opción. Pero muchas gracias. Prometo compensarlo.

- No me debes nada, aunque. - Llevando su mano a su mentón se le cruzó algo por la mente. - No me molestaría una cita juntos en mi cumpleaños, o en el tuyo próximo. Cómo tú lo veas mejor.

- Si no hay una guerra con espectros, prometo tenerlo en cuenta. Y ya que estás, ¿Quieres algo de torta?

- No, gracias. Es pequeña y el cumpleaños es tuyo, disfruta.

- ¿Al menos te quedarías un momento?

- Con gusto.

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