Hola n.n

Créditos de la imagen a su respectivo autor.

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PDV Shura.

Ya son las ocho de la noche, hace un frío inclemente por que veo a la gente abrigada de pies a cabeza, poco más y salen con las sábanas y edredones como vestimenta. Después de haber visto a Aioros martirizarse por mi ausencia, y a Saga merodear cual lobo al acecho, me siento deprimido. Algo contradictorio al considerar que un muerto no siente nada y que los vivos deben seguir sus vidas.

Olvidaba decir que cargo las mismas ropas del día de mi deceso y que suelo andar acompañado por otro de mi misma condición, salvo que este tiene a su pareja en el limbo. No está ni aquí, ni allá.

Ahora él anda rondando el hospital, entrando y saliendo del mismo libremente, revoloteando en la sala donde su amado lucha por sobrevivir a raíz de un terrible accidente de tránsito. Su nombre Ángelo cuyo mote o sobrenombre que por cierto me eriza es.... Death Mask.

Al morir yo, me lo topé mirándome con evidente curiosidad, al principio me pareció un tipo tétrico al ver su mirada y la forma en que sonrió después, como si se sintiera a gusto en el abrazo de la muerte. Como no había nada más que hacer puesto que todo fue abrupto, me conformé con andar a su lado todos los días y a toda hora oyendo maldecir en su lengua madre.

-¿ puedes dejar de insultar por un instante?

Me mira con los ojos inyectados en sangre para refutar.

-¿ quién eres tú para decirme que debo o no decir...? ¡ es mi boca y digo lo que quiero!

-por desgracia un desdichado que tiene que soportarte cada bendito día... ¿ por cierto...? ¿ cómo se encuentra Afrodita?

La ira de sus facciones se esfuma para dar paso a la más pura nostalgia, puedo jurar que a la mención de aquel nombre Death Mask se transforma en un dócil gatito.

Nos hallábamos de pie frente a un estacionamiento de autos donde un hombre bajo de cabello hisurto, piel tostada de tanto sol y mirada vivaracha discutía con otro por su atrevimiento al dejar su auto sin pagar la tarifa correspondiente.

-mira-me señala de una fila de autos, uno azul salpicado de tierra-así era mi bebé, era nuevo y con ese pensaba llevarme a Afrodita hasta donde las carreteras nos condujeran, claro después de casarnos.... pero.... no habrá boda aquí, por eso quiero llevármelo.

-eso es egoísta-exclamo horrorizado- está tratando de luchar por su vida.

-no es egoísmo-atacó ofendido-no quiero que ningún idiota me robe su corazón e intente borrarme de su memoria.

-igual-me alejo frunciendo el ceño-si tanto proclamas amarlo, debes dejarlo en libertad.

-¡ JAMÁS!-me grita-tú deberías hacer lo mismo con tu amado arquero...

Dado a que nuestra presencia no es percibida por los comunes mortales, aquellos hombres siguen enzarzados en su absurda pelea a tal punto de agarrarse a golpes, Death Mask se queda entretenido alentando al que le parece mejor y con más probabilidades de ganar y yo me pierdo entre un callejoncito donde un pequeño perro comienza a ladrar. Aioros una vez me comentó que los perros, gatos y animales en general pueden percibir cosas que los humanos no, así que me alegré de que pudiera verme.

Sin embargo el viento trae el eco de las palabras de mi compañero muerto...

" Tú deberías hacer lo mismo con tu amado arquero"

La tentación comienza a merodearme, ¿ desearía Aioros estar a mi lado?

Pero regreso a la tierra y me percato de mi egoísmo, Aioros es una persona llena de vida con tantos proyectos en mente, algunos trazados en conjunto con mi persona, pero sé que a pesar de mi ausencia, él podrá ejecutarlos con cabalidad y tenacidad. ¿ Dé que sirve acecharlo y provocar su deceso para llevármelo?. Lo amo con locura. Soy capaz de desaparecer para siempre de este mundo y esperarlo en la otra orilla...

-ya estoy muerto.... él aún vive... debo lograr que nadie se aproveche de su duelo, a menos que sea alguien que realmente quiera hacerlo feliz-pienso con cabeza fría-sin embargo....-las turbulentas imágenes de mi hora me bombardean-aún no era mi hora y hasta que encuentre a alguien que me ayude a pasar....

-¡ hey Shura!-Death se aburrió de alentar al par de peleoneros-¡ no te tomes en serio lo que te dije! por lo que más dicho en nuestras charlas nocturnas, tu amado es alguien lleno de vida y merece....

-no importa-entrecierro los ojos desconfiado-por amor se hace cualquier cosa.

-si-de repente Death mask se le ilumina el rostro-¡ acompañame a ver a mi Afrodita!

-no estoy ocioso para ir a...

-¡ vamos!-me insta impaciente-además ya estamos muertos, nadie nos vería.

Tenía razón, no había nada que hacer nada más que vagar por el mundo así que de mala gana accedí a seguirlo por las calles solitarias ignorando los ladrinos y aullidos de los perros. Se dice que no existe el tiempo ni espacio en esta condición, que los días y las noches son indiferentes y que pueden pasar mil años y vagar por este plano físico, yo no estoy de acuerdo, para mi todo sigue tal como mi vida a lado de Aioros.....

Death mask parloteaba sin cesar acerca de su vida a lado de Afrodita, su entusiasmo logró alejar un poco los fantasmas de la incertidumbre y a alegrarme por él.... admitiéndolo aquella alma solo tenía ojos para ese chico que según describía era bellisimo.

Fue en un abrir y cerrar de ojos que nos hallábamos en la casa de salud, gente iba y venía, unos tristes y otros aliviados de saber que su familiar se hallaba bien, en fin el movimiento usual en estos sitios. Entramos, avanzamos por el pasillo que olía a alcohol y a unguentos para llegar hasta el otro piso donde Afrodita luchaba por aferrarse a la vida.

Cuando empezó a hablar yo me escabullí, no tenía ánimos para oír nada. Lo único que quería era finalizar con este martirio y ya.....

Me envuelve el manto de la noche, camino por la misma ruta hasta que llego nuevamente a mi antigua casa, visualizo a Aioros inclinado recogiendo algo de la mesa y a su lado a Aioria que reía. Shaka frente suyo estudiaba cada gesto de mi arquero como si sintiera que necesitaba ser escuchado y cuando de repente fija su mirada hacia mi dirección y alza ambas cejas comprendiendo todo.

¿ Será que puede percibirme?

Todos notan el gesto de Shaka y voltean a ver incluido Aioros, no captan nada y nada más hacen que interrogar al hindú que no quita sus orbes de mi.

-cuando Shaka pone ese gesto es por que algo percibe-cuenta cripticamente Aioria.

-no es nada-miente desviando su mirada-creí que era...

-¿ puedes percibir cosas que para nosotros son imposibles?-interroga curioso Saga.

Shaka asiente con el rostro tenso. Es probable que él sea la única persona que puede ayudarme y de una vez por todas que Aioros abandone ese manto de tristeza y yo pueda irme en paz. No obstante debo cerciorarme que ese Saga es alguien que puede velar por su corazón y hacerlo feliz.... ¡ Si! ¡ Estoy teniendo otra opinión sobre esto.....!

Por vez primera siento que tengo esperanza, debería agradecer al cielo por colocarme en mi camino a alguien que sirva de nexo entre Aioros y yo.

-confío en ti-murmuro desapareciendo- antes dile esto a Aioros.....¡ lo amo, lo amaré por toda la eternidad!

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Dedicado a quienes gusten la pareja.

Se los quiere :)