Buenas noches n.n

Nueva entrega de esta historia que se las dedico con todo cariño.

Escena romántica de AioriaxShaka, una pareja que me gusta bastante.

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Había ordenado que sacaran las hojas marchitas que ocultaban las letras de la lápida de mármol, limpiar el impertinente polvo que afeaba su aspecto. El hombre que se encargaba de ese trabajo lo miraba por el rabillo del ojo mientras con una manguera quitaba el polvo y restos de hojas que caían por ambos lados de la tumba.

Cuando la blancura del mármol volvió a relucir se sintió un poco mejor, sin embargo un sentimiento de vació lo rondó cuando las letras en negro con su nombre, fecha de nacimiento y defunción le golpearon cruelmente. Por el bien de su hijo no nacido debía reponerse y evitar causarle males más adelante.

—¡ listo joven!—ante eso Aioros pagó el precio por el servicio y agradeció por el mismo.

Un gato color gris completo que dormía sobre los pies de un ángel cerca a la tumba de Shura aparte del guardia eran los únicos ese día que acompañaban a aquellos que dormían el sueño eterno. Aioros colocó un ramo de rosas rojas frescas sobre la lápida en tanto se sentaba un poco más allá cuidando de no " perturbar a su amado".

—seguro ya lo sabes....—comenzó—seremos padres dentro de siete meses.

Era quizá el anhelo más soñado del ibérico, perpetuarse a través de un hijo o hija, e incluso unir sus vidas, pero claro quiso el sombrío destino que el pelinegro no pudiera cumplir ese deseo a menos el último en vida.

  — sin duda que si— una voz conocida apareció a sus espaldas sobresaltándolo, el otro sonrió a modo de disculpa mientras se agachaba y depositaba una flor blanca— seguramente brincaste pletórico al saberlo...

— no te equivocas Milo, es la mejor noticia en meses....

  — ¿ qué nombre le pondrás?

Aún es muy pronto para eso, el castaño quería disfrutar de esa vivencia después podría a trabajar su cerebro en el nombre para su niño.

  — bueno, te dejo— Milo se sacudió sus ropas acomodando el ramo que dejaría en una tumba metros más allá— mis padres me esperan ¡ cuídate!

En el lugar donde estuvo Milo, Shura hace acto de presencia, su rostro luce gozoso, su amado no lo percibe, sólo en sueños puede hablarle. Toma una decisión.... se irá del mundo una vez que su hijo o hija nazca y los esperará hasta el día en que sus dos amores se reúnan con él.

" Siempre velaré por ti, por ambos y recuerda siempre.... te amaré hasta el fin del mundo...."

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Horas más tarde.

Había recuperado su sonrisa, podía percibir que dentro de poco con paciencia Aioria terminaría abrazando el perdón. Cuando le comunicó que permitiría que el gemelo de Saga conociera al cachorro no hizo más que aplaudir la sabia decisión de su pareja.

  — ¿ porqué tardaste tanto?

Con la queja en forma de pregunta un par de brazos morenos y musculosos lo rodearon provocándole un estremecimiento que no sentía en años;  al fin podría disfrutar de las atenciones que Eros en forma humana le prodigaría.

Pero antes de caer en aquella dulce trampa buscó con su mirada a la luz de sus vidas, Aioria intuyéndolo procedió a aclararle.

— los niños de Milo y Camus vinieron a llevárselo a una noche de películas y chucherías así que tenemos la casa para los dos.

Un ligero rubor cubrió las blancas mejillas del hindú, su amado griego era un experto en hacerle perder la cabeza, el heleno enternecido por el sonrojo apartó un mechón blondo que obstaculizaba visualizar el océano misterioso y embelesador del que se enamoró hacía tantos años.

  — ¡ gusta señor mío acompañarme a mis aposentos!— Aioria adopta un tono de voz elegante y sensual.

  — ¡ encantado ilustre caballero!

Aioria.

 Entrelacé mis dedos con los tuyos, ya lo que haya pasado no importa, te tengo y tú me tienes.

Mi juicio quedó obnubilado tras años de odio y resentimiento que en un principio me orilló a detestar al ser que hoy es mi mayor orgullo, pero tú con tu sabiduría me enseñaste, me abriste los ojos mostrándome que mientras respiremos, mientras el sol bese nuestra piel podemos surgir del pozo.

Te conduzco por el tenue pasillo, tengo tantas ganas de ti, de explorar tu alma y beber el delicioso néctar de tus labios, marcarte cada rincón hasta no dejar lugar alguno sin que mis dedos tocasen. 

La intimidad me daba arcadas, pensar en el acto sexual como algo bello que comparten dos personas que se aman me produjo aborrecimiento, las cicatrices de Kanon sangraban a mares a tal punto que me trastornaba.

Pero tú... supiste aguardar hasta que las heridas se curaran, soportaste mis arrebatos de ira y me otorgaste el consuelo cuando mis días de tornaban grises...

Nuestra alcoba nos recibe con un suspiro que me eriza la piel, en mi vientre un cosquilleo se instala y mi cerebro me pide a gritos que te tome, que te haga mío las veces que sean. 

Mi nariz roza la tuya, mi boca busca la tuya  que deseosa me recibe, nos perdemos en ese sublime beso durante un minuto, todo nos estorba así que procedemos a quitárnosla.

Afrodita desde su sitial en el olimpo sin ruborizarse nos ve, nuestra entrega fue única, sólo nuestra cama y nosotros lo sabemos, sólo diré que nos amamos hasta el hartazgo y que el resto del mundo desapareció para nosotros.

  — no fui brusco— dijo a a modo de pregunta el castaño mientras repasaba con la yema de sus dedos la tersa piel de su amante que se removió.

Pero el blondo no respondió exhausto de aquella entrega, la energía de su amante fue arrolladora que no tuvo tiempo para decir nada. Aioria sonrió pícaro para acomodarse en su sitio.

Cerró los ojos y en la oscuridad ya no vio los verdes ojos embebidos de lujuria, en cambio unos luceros del color del cielo despejado fue lo que vio teñidos de cariño, amor y comprensión.

  — ¡ gracias por salvarme!— murmuró antes de ser abrazado por Morfeo. 

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Tienda de artículos varios.

—¿ Milo?

—hump...—volteó extrañado al oír la voz, los niños que lo acompañaban hablaban a los gritos  alejados a varios pasos mientras elegían varias películas infantiles, Dahval tenía la voz cantante—¿ Kanon?

—¿porqué ese niño está contigo?—preguntó el gemelo señalando obviamente a su hijo.

—¿ qué demonios haces aquí?—dijo sin alzar mucho la voz—¿ quieres que el gato esponjoso me ahorque porque te apareciste frente al niño?

Alzó los hombros restandole importancia, desde que supo que tenía un descendiente ya no temía la furia del castaño y aunque esperaba de todo corazón que Aioria fuera justo con su deseo de ver al pequeño cuatro veces por semana, se podía esperar cualquier cosa de él. Saga era el intermediario y le había dicho que sea el acuerdo que se alcanzara debía aceptarlo por el simple echo de que él estaba en desventaja por todo lo ocurrido.

—¡ hermano!—una niña de cabellos azulinos rebeldes de seis años se acercó con una caja de cd seguida por dos niños más, Kanon se ocultó entre las perchas.

—Laila ¡ dije que sin peleas!—apostrofó el joven de piel tostada—¿ dónde está el minigato?

Kanon se carcajeó por el mote a su vástago, Dhaval venía caminando con las manos en los bolsillos de su pantalón jean, tres niños más, uno hermano de Milo y los otros eran sus hijos que traían botes de helados mientras caminaban riéndose de algo que el cachorro hizo. 

—¿ encontraste lo que querías campeón?—preguntó cuando el ejército de niños se reunió.

—no—dijo bajito que Milo tuvo que hacer un esfuerzo para oírlo.

Para el gemelo era su oportunidad de hacer algo por ese niño, sangre de su sangre y para esto necesitaba el silencio de Milo.

Ya no quería ocultarse más.

—¿ qué es lo que quiere? ¡ puedo conseguírselo!

—¡ Kanon idiota!—Milo casi se atora con su propia saliva.

Y los ojos esmeraldas del niño se conectaron automáticamente con los del mayor que sonrió, ¿ cuanto daría por regresar el tiempo y reparar su error? ¿ cuánto daría por que ese del cual se enamoró perdidamente  le correspondiera?

Y ¿ cuanto daría por hallar el amor de nuevo?. Un amor que no lo envenenara,no lo encegueciera y no lo orillara a convertirse en el terrible demonio que atentó sin quererlo contra quién ahora lo aborrecía.

—y bien..¿ qué es eso que quieres...?

Cinco minutos más tarde, un contento castañito salía brincando de la tienda con un gran paquete, Camus que los esperaba en el auto se sorprendió por el mismo, tenía entendido que Milo había ido a la dichosa tienda solo para adquirir películas y golosinas, más no compras tipo " regalo de cumpleaños".

  — mejor no me preguntes— dijo el griego una vez instalado en el vehículo.

Los otros niños pugnaban por saber qué era eso que aquel hombre le compró a Dahval, este orgulloso decía que era un secreto.

— vas a tener que explicarle muy claramente a Aioria el origen de ese paquete, y no le gustará saber que Kanon estuvo cerca del niño.

— no le diremos que fue él— dijo con calma Milo  a lo que Camus dio un frenazo— ¡ mierda Cam! ¡ casi me estampas en el parabrisas!

 — si claro, vas a decirle que porque eres su padrino te picó el bicho de darle por adelantado su regalo— reclamó Camus en voz baja— ¡ no sé que harás Milo..!

  — ¡ ayyyyy no seas dramático!— se escuchó al heleno decir mientras el vehículo volvía arrancar perdiéndose en la avenida.

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Hasta aquí por ahora.

Ha comenzado el invierno por acá y la señal se me ha caído reiteradas veces.

Con respecto a la pregunta de un posible SagaxAioros, está en veremos, puede ser que acontezca algo más adelante que cambie el rumbo de las cosas, estoy barajando opciones.

Y con respecto al otro guapo gemelito dentro de poco se sabrá quién conquistara su corazón.

Las actualizaciones de",  Adolescencia e ilusiones" verá la luz el día 27 de diciembre, "Bodas y padres" posiblemente el 30 de diciembre.

Disculpen mis errores de imprenta xD.

Eso es todo.

Muchas gracias por su apoyo y comentarios me hacen muy feliz. 

Se me cuidan y nos leemos dentro de dos días más :D