NILA

Cuando abrí mis ojos ya no estaba en brazos de Ayton, paradójicamente me encontraba en una habitación oscura con cuerpos al rededor. No sabía dónde estaba.

Me dolía el cuerpo a tal punto de que era momento de empezar a preocuparme. En cambio, fui demasiado estúpida cuando lo busqué a él. 

Tanteé las paredes con miedo, temblorosa, en busca de algún interruptor. Pero nada encontré. Aquí fue cuando sucedió.

Cuando encontré la perilla de la puerta y un alivio me recorrió el cuerpo, mezclándose con el dolor interno. Sucedió que alguien golpeó mi cabeza con fuerza. No sentí nada.

Y por un momento pensé que sólo fue un ruido exterior. Hasta que empezó a punzar de dolor. Toqué el lugar dañado y mi mano se sintió caliente. Sangre. Jodida sangre.

Sentí náuseas y me volteé lentamente, tambaleándome.

Me miré las manos y observé la sangre. Levanté la mirada buscando el causante de mi golpe.

Y lo encontré a él, de pie frente a mí. Más pálido de lo que alguna vez pude verle, con ojeras moradas que tanto miedo daban bajo la tenue luz oscura. 

Cruzaba sus brazos por detrás y sonreía de esa manera cínica.

Me tambaleé de nuevo y el dolor en mi cabeza amenazó con matarme.

Mi visión se nubló.

—¿Qué has hecho? — mi voz dolía, por mi cara se escurría la sangre negra.

Caí al piso y pude verlo desde otro ángulo.

Me pesan los párpados.

—¿Te acuerdas de lo que te dije aquella noche en el Club de la Costa? — se acercó y cerré mis ojos unos instantes.

Estaba perdiendo mucha sangre.

—"Bajé con un propósito, Thompson — susurró citando aquella frase, la primera vez que lo vi. 

—Y no volveré hasta cumplir" — sentenció.

Trague saliva y mi cuerpo vibró.

—Te amo — susurré antes de sentir el dolor descomunal atravesarme el cráneo.

—Y te perdono.

Ayton frunció el ceño, ¿O ladeó la cabeza? no sé, ya ni podía verlo bien.

—Patética — insultó y me dejó morir.

"Bajé del cielo porque estoy completamente enamorado de ti"

"De verdad, lo perdono"