Capítulo 23
- ¡Sasuke! -
¿Esa es la tal Karin?
- Karin, quiero que vengas conmigo -
Todos fuimos a hablar a una habitación donde Sasuke se sentó y le dijo a la tal Karin lo que quería de ella pero esta se negaba.
- Y bueno, así es la vida ¿Nos vamos? - Pregunté.
- Suigetsu, ____ liberen a los presos - Dice.
- Mira Sasuke, yo no estoy aquí porque quiera asi que a mi no me das órdenes como si fuera ese que parece tu perro - Dije apuntando a Suigetsu.
Sasuke me dirige una mirada que... si bien no daba miedo... era realmente, y aunque no quiera admitirlo, sexy...
¡Maldito emo sexy!
Suigetsu me hizo caminar y yo lo hice a regañadientes. Nosotros dos fuimos hasta donde estaban los presos que Sasuke había mencionado.
- ¿Me ayudas? - Pregunta apuntando a los barrotes.
- Hazlo tú solo - Respondí y me senté en el suelo.
- En serio no entiendo porque Sasuke te trajo -
Liberó a los presos y me hizo volver a la habitación pero la puerta estaba cerrada desde adentro.
- Ugh, para atrás - Le dije a Suigetsu quien me hizo caso.
Golpeé la puerta y está se abrió de golpe. La pelirroja se levanta sonrojada y nerviosa mientras que Sasuke estaba en la misma posición que antes, no se había movido ni un poco.
Yo vi hacia la pelirroja sin poder evitar sentir un pinchazo en el pecho que me molestó y frustró. Aparté la mirada cruzada de brazos.
- Nos vamos - Dice Sasuke - Suigetsu, sal de aquí con Karin -
El nombrado suspira y se acerca a Karin quien estaba negándose a salir y a la vez negándose a que Suigetsu la tocara pero finalmente se van y pude escuchar los gritos re Karin alejándose hasta que ya no los escuché.
Yo iba a salir también cuando Sasuke me llama.
- ____... tienes algo que decir... -
- Tengo muchas cosas para decirte Sasuke... - Dije entre dientes y mirando el suelo.
Él me mira un momento.
- Dilo -
Volteé para verlo y gruñí con burla pero lo hice.
- ¿Quieres que lo diga? Bien, primero me dejas sola luego de decir que no ibas a dejar que me dañaran. Te desapareces por tres años y yo no supe nada de ti, creía que te estaban controlando o algo, hasta llegué a creer que habías muerto por alguna razón que podría haber sido cualquiera - No pude evitarlo y me acerqué a él mientras hablaba - Luego te vuelvo a ver, al parecer en perfectas condiciones. Intentaste matar a Naruto y los demás... ¡Me atravesaste el puto estómago con un chidori! ¡Pude haber muerto! Me encerraste por días sin dejarme ir, luego me traes aquí ¡Y me haces acompañarte! -
Para este punto la impotencia hizo que mis ojos se cristalizaran además de todas las emociones y sensaciones que se contrariaban en mi por culpa de él... porque él era el responsable de que existieran en primer lugar.
- ¡Y lo peor de todo es que no quiero dejarte de nuevo! - Cerré los ojos y apreté los puños con furia conmigo misma por sentirme así - Intenté escapar... pero en realidad no quiero... perderte de nuevo... -
El nudo en mi garganta se hizo cada vez más grande al igual que mis esfuerzos por no comenzar a llorar.
- ¡Hm! - Me sorprendí cuando en un segundo Sasuke me dejó con mis rodillas sobre el sofá a ambos lados de su cuerpo, me sujetó y no me dejaba apartarme - ¿S..Sasuke... qué... ? -
- No planeaba traerte ahora, pero veía como te seguían tratando y ya no podía soportarlo -
- ¿Veías? ¿Me estuviste espiando? - Murmuré con la voz algo llorosa mientras pasaba mi muñeca por mis ojos quitándome las lágrimas que salían sin permiso.
- Estuve esperando el momento más conveniente - Dice.
- ¿Por qué... ? ¿Por qué lo haces? ¿Por qué te importa? -
Él aparta mi mano de mi rostro y aún teniendo su expresión seria me limpia las lágrimas con su pulgar.
- Porque no puedo evitarlo pero aún no descubro qué es lo que me hace hacer esto -
- Hm... y yo menos... - Murmuré pero me di cuenta cuando su rostro estuvo cerca del mío, sus manos me tomaron por la cintura con firmeza haciéndome suspirar por la sorpresa.
- Debería cortar el binculo que tengo contigo... - Dice susurrando, pareciera que se lo decía a él mismo más que a mi.
- ¿Y por qué no lo haces? -
Se queda en silencio mirándome a los ojos.
- No lo sé... - Sus manos me empujan hacia él y sus labios hicieron contacto con los míos por sorpresa, las emociones en mi terminaron de explotar pero esto era como una tentación, no sabía que necesitaba este momento hasta ahora...
Un sentimiento que desde antes lo había sentido, ahora crecía con mayor intensidad, cosa que me aterraba de sobremaneras pero... me gustaba.
Mis manos se apoyaron en la piel de su pecho que no estaba cubierto por su traje. Nuestros labios se movían al compás, no queríamos separarnos aunque yo me gritaba a mi misma que esto no podía ser... que esto no tuvo que haber pasado...
Me intenté apartar para acabar con esto pero Sasuke volvió a empujarme contra él y esta vez haciéndome apoyarme contra su cuerpo. No podía escaparme de esto, el beso se tornaba cada vez más intenso pero entonces tuve la oportunidad cuando nos separamos ligeramente por aire.
- S..Sasuke... - Perdí la oportunidad cuando él me volvió a besar pero esta vez no me sujetó y pude separarme de nuevo - Sasuke... tenemos que parar... -
- Tsk... no quiero... - Murmura y vuelve a besarme.
- Los otros... -
- Solo déjalos... -
- Pero... -
Él me calla cuando me empuja de nuevo y me besa sin soltarme esta vez, pero entonces escuchamos a Suigetsu gritarnos desde afuera para que nos vayamos ya, cosa que hizo que Sasuke se separe.
- Tsk... - Hace una mueca pero suspira, me mira y me suelta, yo al segundo me levanté, y él después - Vamos -
Me agarra la mano y me jala para que salgamos de allí.
- ¡Por fin! ¿Qué se supone que les tomó tanto tiempo? - Dice Suigetsu al vernos.
- No les incumbe, ya vámonos - Dice Sasuke.
Me jala de nuevo y ambos nos quedamos al frente, yo miré nuestras manos pero el beso de hace un momento invade por completo mi mente, la forma en que me besó...
Me sonrojé y traté de borrar eso al igual que traté de soltar mi mano, cosa que conseguí, me crucé de brazos y miré al otro lado donde no estaba Sasuke pero noté su mirada en mi. Me encogí en mi lugar y me reproché mentalmente por lo que sucedió.
Me había derrumbado frente a él y para cagarla aún más nos besamos...
- Así que el Uchiha pudo contigo -
- ¿Lo viste todo... ? -
- La mayoría... eres patética ¿Lo sabes, mocosa? -
- Si... lo sé, pulgosa -
Ella me deja en paz y yo volví a encogerme en mi lugar, suspiré y miré al frente. La probabilidad de que Sasuke solo esté jugando conmigo pasa por mi mente, y sinceramente... sabía que eso era lo más probable que podría ser la razón por la que hace todo esto.
Pero no quería creerlo, no quería que fuera así... estar aquí me está haciendo mal, tengo que irme... tengo que alejarme de él aunque no quiera...
Tengo que escapar de aquí.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro