Terminamos de chequear el equipaje junto con Tía Chris y observo hacia donde mis amigos me están esperando. Tomo una bocanada de aire reuniendo fuerzas para la despedida.

—Todo irá bien cariño —dice Tía Chris a mi lado, dando caricias en mi espaldas. Le sonrió para tranquilizarla aunque algunas lágrimas quieren escapar de mi rostro.

—Lo sé —es todo lo que alcanzo a decir antes de caminar hacia donde mis amigos me esperan. Tía Chris no me sigue por lo que supongo quiere darme un poco de privacidad, lo agradezco internamente, éste momento no será fácil para nadie.

Me sorprendió bastante el hecho de no sólo ver a Lissie y a Finnegan sino que también Colvie está en el aeropuerto para despedirme, supongo que aún se siente culpable por todo lo que me hizo pasar aunque sinceramente para éstos momentos eso parece una pequeñez, como si hubiese sucedido hace mucho tiempo. Y ahora aquí estamos, ambas, teniendo un especie de extraña amistad semanas antes de irme.

Me observan cuando me acero y de inmediato Lissie corre hacia mi. Abro mis brazos recibiendola y las lágrimas comienzan a escapar de mis ojos sin poder contenerlas.

—¡Te voy a extrañar mucho Lena! —chilla en mi oído y río apretandola aún más fuerte.

—Gracias por ser mi amiga, por apoyarme, por ayudarme a no ser un desastre e incluso por sacarme de quicio innumerables veces —reímos y me separo de ella tomándola por los hombros.

>>Eres una gran amiga Lissie, aunque prácticamente no tuviste elección agradezco que te hayas metido en mi vida y por favor, escríbeme.

Hay espesas lágrimas en sus ojos y una sonrisa rota lo decora.

—Siempre te escribiré y gracias a ti por haberme enseñado un mundo diferente al que conozco, sé que no soy muy inteligente y de hecho tampoco soy el tipo de amiga que te va pero me alegra que ahora estés bien y que sepas usar un labial decentemente —ruedo los ojos riendo y la abrazo por última vez —Cuidate mucho Lena.

—Tú igual Lissie.

Nos separamos y se aleja un poco, al instante Colvie se acerca a mi y la verdad no sé muy bien qué hacer ¿deberíamos abrazarnos? Aún no tengo muy en claro cuáles son los límites en ésta peculiar amistad.

—Ehm.. Yo... —Cierra los ojos y suspira profundamente, le doy su tiempo para ordenar sus ideas porque la entiendo —disculpa de nuevo por todo lo que te hice Lena, si pudiese cambiarlo créeme que lo haría —hay arrepentimiento en sus ojos y creo que nunca se podrá perdonar por todo, yo ya lo hice.

—Está en el pasado Colvie, lo que importa es que no dañes a nadie más de esa forma porque no sabes las mierdas que pasan en la vida de los demás, no te mortifiques, estamos bien —le sonrió y me toma por sorpresa cuando me da un abrazo, es un poco torpe y eso nos hace reír.

—El primero y último Lena Barrow, aprovechalo —el abrazo es corto porque no estamos acostumbradas a ello y creo que nunca lo estaremos pero de nuevo, es como hacer las paces.

—Espero que te vaya bien en Ohio, no maltrates a nadie —sonríe un poco.

—Y tu no dejes que nadie lo haga contigo —asiento y se aleja un poco, junto a Lissie que está hecha un mar de lágrimas.

No sé de dónde pero ha sacado un pañuelo y se limpia las lágrimas delicadamente, eso me divierte un poco.

—¡No te burles! Te odio por hacerme quererte así —rio y ella también. Lo hace de una forma extraña mientras llora.

—Les daremos privacidad, vamos Lissie, hay una tienda de bolsos que te mueres —ambas me dedican una última sonrisa antes de marcharse.

Observo tímidamente a la última persona que queda, Finnegan ya tiene grandes lágrimas en sus ojos y de repente da largas zancadas hasta mi. Me toma por las mejillas y me besa, lenta y dulcemente, como si quisiera exprimir cada parte de mis labios en él, como si quisiera conservarlos por siempre. Se lo permito, me dejo llevar porque también necesito sentir sus labios en los míos, sus manos tocandome, la sensación ridícula que causa en mi tantas emociones que antes creía que era demasiado pero ahora quiero más, necesito más, como si todo lo que me da fuese muy poco comparado con todo lo que quiero de él.

Se separa de mi y junta nuestras frentes, para este punto no puedo controlar el llanto, las lágrimas, los sollozos y él está en las mismas condiciones.

—¿Por qué Lena?... ¿Por qué no podemos seguir juntos? —eso me hace llorar aún más y agregándole los sollozos que se escapan de él me está rompiendo el corazón.

—Entiendeme Finnegan, necesito... Necesito encontrar mi camino, quien soy y luego podre darte todo de mi, podre entregarte todo porque lo tendré, sabré qué clase de persona soy, necesito hacerlo —digo entre sollozos.

Me toma de la cintura y yo enredo mis brazos en su cuello apretandolo fuertemente, se siente como si nuestros cuerpos encajasen como las piezas de un rompecabezas, reconforta y se siente bien.

Escondo mi rostro en su cuello e intento calmarme, sé que por ahora él estará mejor sin mi, debe concentrarse en lo suyo y yo en lo mio y quizás no podamos hacerlo si estamos juntos.

—No —suelta aún en el abrazo.

Me separo de él confundida por lo que dijo.

—¿No? ¿Y eso qué significa? —limpio un poco mi rostro porque las lágrimas a penas y me dejan ver, el me obseva fijamente con una mirada triste.

—Significa que no estoy de acuerdo, creo que te equivocas al terminar pero respeto tu decisión y no puedo obligarte a estar conmigo si tu no lo deseas pero te prometo Lena Barrow que te esperaré el tiempo que haga falta, piensa que es cursi y lo que quieras pero no habrá nadie que ocupe tu lugar. Me escribirás, me llamarás e incluso haremos videollamadas divertidas pro no me esforcé tanto en hacer siquiera que me prestraras atención como para dejarte ir tan fácilmente.

Asiento riendo enormemente y de nuevo nos fundimos en un largo abrazo. Duele, quema, pero creo que es lo correcto.

—Te amo Zack Finnegan —susurro antes de juntar nuestros labios en un beso un poco torpe.

—También te amo Lena Barrow —me responde de vuelta.

No sé cuanto tiempo pasa en el que simplemente permanecemos abrazados, llorando y queriendo que este momento sea eterno, pero Tía Chris llega hacia nosotros, disculpándose por interrumpirnos.

—Ya tenemos que abordar Lena —nos observa tristemente e intento sonreírle para que sepa que todo está bien.

—Adiós Señora Chris, fue un placer —Zack la abraza y no me puedo contener, me uno al abrazo también.

Segundos después llegan Lissie y Colvie de no sé dónde y terminamos en un abrazo grupal en el que todos reímos.

Una voz que resuena en todo el aeropuerto anuncia el último aviso para abordar de nuestro vuelo y despido a mis amigos con la mano antes de pasar por la puerta que me llevará a una nueva vida, nuevas experiencias, pero parte de mi corazón, suene ridículo, se queda aquí, con mis amigos y la persona que he llegado a amar impresionante mente.

***

Cinco meses después.

—¿Entonces iremos el viernes después de la competencia? —cuestiona Betty antes de que salga del estudio.

Me giro y asiento hacia ella.

—La que pierda invita —ríe por mi comentario y me giro dispuesta a salir del estudio.

Fue un día bastante agotador y aún tengo que asistir a dos clases en una hora, no es fácil practicar baile y asistir a la universidad al mismo tiempo, sin embargo creo que lo vale. A pesar de que cuando comencé estaba bastante oxidada y era casi una mierda en ello, he avanzado bastante y mi cuerpo se ha normalizado en cuanto a las acrobacias, vueltas y demás.

Gruño recordando que Tía Chris está ocupada en el trabajo y no puede llevarme, así que hoy dependo del transporte público. Comienzo a caminar hacia la cafetería frente al estudio lista para ir por un café antes de caminar hacia la parada de autobús, pero suelto un grito cuando un tirón en mi brazo me detiene.

—¡¿Qué mierda?! —volteo hacia mi atacante y no puedo creer lo que veo.

—¡Sorpresa! —grita dejándome aún más confundida aunque no puedo evitar lanzarme en un abrazo.

—¿Qué diablos haces aquí Colvie? Pensé que estabas en Ohio —me separo y la observo, ha cambiado desde la última vez que nos vimos.

Su cabello está considerablemente corto y de hecho ahora es negro lo que le favorece, la hace ver menos plástica y menos intimidante.

—Aquí hace un frio espantoso ¿te parece si vamos por chocolate? Te lo contaré todo.

No me deja responder y tira de mi hacia la cafetería, nos sentamos en una mesa y luego de hacer nuestros pedidos la observo aún confundida por su aparición.

—Ahora sí, dime ¿cómo es que estás aquí? —frotó mis manos del pantalón para calentarlas un poco. Estamos a principios de enero por lo que el frío es latente.

—Pues a mi papá lo transfirieron aquí hace un par de semanas y dijo que quería tenerme cerca así que me cambié, investigando aquí y allá conseguí el estudio de baile donde estás ahora y buala, quise darte una sorpresa —lo dice de una forma tan natural que si cualquier personas nos viese pensaría que somos amigas desde siempre, cosa que no es así. Pero ya el pasado quedó atrás.

—¡Eso es genial Colvie! Digo, el que estés aquí y ya sabes, ¿te haz adaptado bien? —la camarera trae nuestros pedidos y de inmediato le damos un sorbo al chocolate caliente.

—Si, bueno... No todas las personas son amigables pero ese es el precio de ser la nueva ¿no? —ríe y hago lo mismo entendiendo la referencia —En fin, al menos te tengo a ti aquí y lo quieras o no seremos mejores amigas, no acepto un no por respuesta.

Ruedo los ojos divertido y en realidad la idea no me molesta en lo absoluto. He hecho bastantes amistades tanto en el estudio como en la universidad, Betty es la más cercana, aunque es un año menor que yo nos llevamos de maravilla. Pero me vendría bien una amiga como Colvie, que me recuerde el instituto.

—Está bien mejor amiga ¿Haz hablado con Lissie o Zack? —hace un puchero y niega con la cabeza.

—Con Finnegan no tuve contacto luego de irme y la última vez que hablé con Lissie fue hace un mes, me dijo que estaba de lo mejor y había conocido un lindo alemán, sabes como es, pero desde entonces no he sabido nada de ella ¿y tu? Por favor no me digas que Finnegan y tu ya no hablan, me moriría —mi sonrisa se hace un poco más pequeña recordando la última vez que hablamos.

—Pues he estado un poco ocupada con la universidad y el estudio, a parte de que a veces ayudo a tía Chris en el trabajo, así que no he hablado mucho con Finnegan, él también está concentrado en sus cosas, la última vez que hablamos fue hace semana y media, dijo que iba a estar ocupado haciendo las pruebas para entrar en un importante equipo de fútbol y los exámenes lo tenían estresado también. No le he escrito, no quiero interrumpirlo ni desconcentrarlo con todo lo que tiene y lo que está logrando.

Ella asiente entendiendo y cambio de tema para no deprimirme tanto.

—y dime ¿hay alguien especial en tu vida? —sonríe de oreja oreja lo que me hace saber la respuesta al instante.

Pasamos más de una hora hablando sobre éstos meses en los que no nos hemos visto ni hablando y cuando nos damos cuenta de que es muy tarde vamos hacia mi casa para seguir con la conversación, descubro que Colvie ha cambiado exponencialmente y para mejor. Al final sí hay un paso del odio a la amistad. Por un largo momento logro olvidarme de mi pequeña depresión por la poca comunicación con Finnegan.

Nadie dijo que soportar la distancia sería fácil.

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Eh eh eh, no desesperen, aún falta el epílogo.

Quiero saber qué opinan sobre éste peculiar final ¿les gustó? Creo que ya sé la respuesta jajajajajajaja.

Subiré el epílogo entre hoy y mañana y será el fin de esta historia. Nos leemos pronto.

Saludos y besos.

MaVaFb.