Ahri sabía muy bien que ella y Kaisa estaban lejos de ser la pareja perfecta. Eran ya seis años que llevaban juntas los cuales habían estado llenos de altibajos, discusiones y malos entendidos, y sin embargo, aun con todo eso, ella podría jurar que había nacido única y exclusivamente para conocer a la bailarina, para pertenecerle y vivir su vida a su lado.

Incluso después de tanto tiempo, aún agradecía a todos los cielos, o quizás debería decir a las fosas infernales que le enviaron a Evelynn a su lado, pues fue la dichosa Diva quien la convenció aquella noche de asistir al pub en el que finalmente encontraría la pieza de su alma que le faltaba.

A sus ojos la chica de ojos de fantasía era simplemente perfecta, cada parte de ese delicioso cuerpo, el cual se había dedicado desde su primera noche juntas a adorar casi con devoción, recorriendo cada milímetro de piel infinidad de veces con sus manos, con sus labios, sintiéndolo con la intención de que la sensación y sus curvas quedaran grabadas en su memoria.

Los movimientos exquisitos de la chica extranjera tanto sobre el escenario como en las sábanas que compartían eran simplemente intoxicantes, una droga visual para ella que solo podía compararse con los efectos que producían en su ser el olor del perfume de la bailarina mezclado con su sudor luego de una sesión de baile o de bajar del escenario.

Y para cerrar con broche de oro, como si fuese hecha exactamente a pedido, toda esa exquisitez sensual y casi pecaminosa venía envuelta en una personalidad dulce, dedicada, cariñosa, atenta y casi maternal que simplemente le derretía y le enamoraba... De nuevo, Kaisa era simplemente perfecta. Y el mayor anhelo de Ahri no era otro que pasar el resto de los días a su lado, amarla y adorarla en todo momento.

Si, definitivamente ella había nacido solo para Kaisa, y si creía que se había sacado la lotería al conocer a tan hermoso ser, entonces esa suerte definitivamente se había multiplicado por diez, pues todo lo que ella podía sentir por su pareja le era correspondido y retribuido. En resumen, estaban destinadas a estar juntas pues, así como ella tenía ojos para la Bailarina, Kaisa sólo tenía ojos para ella... O eso es lo que habría jurado hace una semana.

Celos, molestia y envidia. Era todo lo que le embargaba en ese momento. Ahri podía sentir como era carcomida poco a poco por esa horrible sensación mientras apuñalaba su plato de comida, manteniendo su mirada afilada en quién se había atrevido a arrebatarle la atención y los mimos de SU Bookie la última semana.

Al principio, lo había tolerado, pensó que sería sólo un capricho pasajero de su pareja, que en poco tiempo se le pasaría y ella volvería a ser nuevamente el objeto de las caricias de su amada... Pero contrario a sus expectativas "eso" se había empezado a aparecer también durante sus horas de comida, tal como ahora, en sus ensayos y su límite había sido alcanzado hace exactamente una semana, cuando empezó a hacer acto de presencia también en sus horas nocturnas.

Ya habían sido cinco días, cinco días y cuatro noches enteras sin que las atenciones de su pareja fueran más que un par de besos cortos y algunas caricias. Y todo por su maldita culpa, en estos días solo había recibido la espalda de su pareja mientras que "eso" se llevaba todo el calor del abrazo de Kai.

Era verdad que desde hacía un par de semanas las cosas en su empresa de maquillaje no habían marchado bien, lo que requería mucho de su tiempo en aburridas reuniones.

Y esto junto a que la reciente reconciliación de los otros dos miembros de su grupo había traído consigo trabajo extra para recuperar el tiempo perdido, es decir, ensayos grupales, reuniones con los managers de la disquera, proyecciones a futuro del grupo y más cosas. En resumen, sus días habían estado ajetreados y realmente había podido pasar muy poco tiempo con las otras chicas más que los ensayos u ocasiones como esta, dónde todas compartían el desayuno en el comedor del dormitorio en el que convivían.

Es por eso, que lo único que quería al volver a casa era ser recibida con las atenciones de su novia, hablar con ella de lo aburrido que había sido su día, tomar un baño juntas y luego saciarse de ella hasta que el sueño las dominara. Era lo único que pedía, pero en cambio, veía como Kaisa sonreía mientras devoraba su comida completamente entretenida con el objeto que ella sentía se la había arrebatado.

"Kiko~"

La nefasta voz resonó y Kaisa se sonrojó mientras una sonrisa tonta se dibujaba en sus labios lo que hizo que Ahri por puro reflejo chasqueara su lengua por lo bajo, un sonido apenas audible que sólo dejaba ver su clara molestia. Para su suerte, Kaisa estaba muy ocupada jugando con "eso" y Akali le prestaba más atención a lo que sea que jugaba su celular, así que nadie lo noto, o almenos casi nadie.

- Si no te conociera, diría que estas planeando un homicidio en este momento...-

La melodiosa voz de Evelynn a su lado le hizo volver a la realidad y se giró para encararla.

- Cállate...-

Le soltó, aun en un tono bajo, pero de manera venenosa, no estaba de humor para lidiar con las burlas de Eve en ese momento.

- Que agresiva, Foxy y yo que sólo quería saber si algo te pasa... Últimamente has estado más irascible que de costumbre-

La diva hizo ademán de limpiarse una lagrima inexistente, fingiendo estar herida por la respuesta cortante, pero nada podía hacer con esa sonrisa socarrona que se dibujaba en su rostro cuando encontraba algo "divertido".

- Escucha, Demonio entrometido, si esta es otra de tus bromas más te vale que pares, no estoy de humor en este momento. Suficiente tengo con no poder dormir porque cierto demonio escandaloso no sabe que hay más personas en este dormitorio y que debe bajar la voz-

Evelynn no borró la sonrisa de su rostro, y en su lugar solo se encogió de hombros ante el comentario.

- ¿Que pasa zorra? ¿Envidia? ¿Acaso Bookie no te ha follado bien últimamente? Oh, ¡no me digas! ¿Es por eso que traes ese humor últimamente?-

Evelynn río por lo bajo ante su propio comentario. Pero contrario a lo que pensaba Ahri no solo no negó la acusación, sino que agachó su rostro a ver la masacre que había hecho con su comida, ahora un revoltijo sin forma disperso por el plato.

Evelynn se sorprendió al punto de que esta vez sí se deshizo de su sonrisa y puso una voz más seria.

- Espera, espera... ¿Enserio?-

Ahri solo asintió ligeramente por respuesta. Para ella no tenía sentido tratar de ocultarle algo a Evelynn, para su maldita suerte, si había alguien quien la conocía y podía adivinar sus pensamientos era la Demonio de ahora, cabellos platinados. Kaisa había aprendido mucho últimamente, pero para Evelynn ella era un libro abierto.

La mayor del grupo estaba por continuar su interrogatorio pero se vio interrumpida cuando Kaisa se levantó y empezó a recoger los platos de todas, extrañándose de que Ahri no había tocado su comida en absoluto.

- ¿Pasa algo amor?- Preguntó con verdadera preocupación en su voz. -No tocaste tu comida en absoluto...-

- No tengo mucha hambre-

Fue la simple respuesta de la rubia y Kaisa solo asintió, retirando el plato al igual que los demás, llevándolos a la cocina y luego volvió frente a Ahri.

- Ah... Saldré en un rato... Quizás vuelva un poco tarde-

Ahri miro extrañada a su pareja esperando una explicación un poco más detallada, pero la mirada expectante que recibía de la bailarina le hacía saber que no diría mas nada y solo esperaba una respuesta. Un simple asentimiento fue su manera de hacerle saber que no había problema y levantó un poco el rostro para que la bailarina se despidiera de ella con un beso en los labios.

- Eve, me llevaré prestada a Kali hoy también -

- Como quieras cariño, pero si van a llegar tarde no dejes que coma solo Ramen picante, asegúrate de que coman bien-

- ¡Eve!- Se quejó la menor -¡No soy una niña! ¡Creo que puedo decidir qué comer y que no sin que me estés supervisando!-

- Si, si... Por supuesto, como digas corazón. ¿Entendiste Kai?-

- Entiendo, cena adecuada y nada de ramen picante hoy-

- ¡Bookie! ¡Traidora!-

Refunfuño nuevamente Akali en señal de molestia.

- Kali, cariño... Tus tres comidas el día de ayer fueron sólo tazones de Ramen picante instantáneo. No puedes comer comida chatarra todo el tiempo, además... Si obedeces prometo tenerte un postre que quizás te guste tanto o más que tu Ramen picante cuando vuelvas-

Guiñó un ojo y sólo con eso las quejas de Akali se acallaron, haciendo reír a Kaisa quien comentaba un "qué fácil eres de comprar Kali" mientras salían del comedor.

Evelynn esperó un tiempo prudente, luego de que ambas chicas salieran del lugar y volvió nuevamente su atención a Ahri.

- Ahora ya estamos a solas, dime que te pasa Foxy-

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Las ruidosas carcajadas de Evelynn no se hicieron esperar apenas Ahri terminó de explicarle su situación.

- Sabía que era una mala idea contarte esto a ti...-

La rubia se levantó de la mesa con molestia y trató de marcharse, pero fue detenida por la mano de la Diva quien la sujetó aún entre risas.

- Espera, espera Foxy, no puedes culparme... ¡Me acabas de decir que estás celosa de un muñeco de Felpa! ¡No puedes esperar que no me haga gracia!-

Ahri apretó los dientes, es verdad que si Evelynn lo decía de esa manera no solo sonaba muy poco, sino que incluso sonaba estúpido.

- ¡No es eso lo que dije!-

- ¿Ah no? Y tus todas las quejas que acabas de ponerme de que Kai'sa recientemente prefiere dormir abrazada a su "mini Ahri" o esas miradas asesinas que le diriges al pobre muñeco cuando estamos comiendo juntas ¿a qué se deben entonces?-

Ahri Bufó molesta... Era verdad que si se sentí celosa de las atenciones que recibía "eso", aún no estaba dispuesta a llamarlo por su "nombre" pero no era ese el motivo por el que había decidido hablar con la Diva.

- No... No diré más nada respecto a eso.- Sentencio- Pero, el problema es que hace ya una semana, Eve... Una semana que Kai se desentiende completamente cuando nos vamos a dormir, incluso si intento ser coqueta, solo me dice que está cansada... ¡No es como que yo no esté cansada también! ¿!Sabes!? He tenido tres semanas muy pesadas, la disquera, la empresa, reuniones, trabajos, revisar informes... ¡Apenas he tenido un poco de tiempo para mí y todo lo que quiero es usar ese tiempo para disfrutar con mi novia!-

Ahri tomo uno de los cojines en el sofá y ahogó un grito de frustración. Finalmente empezaba a notar que sus preocupaciones iban más alla que la fijación de Kaisa con el regalo que le había dado Evelynn tiempo atrás.

- Crees...- empezó a formular, pero apenas pensar en esa posibilidad un miedo automático se apoderaba de ella, le aterraba pensar que existía la mínima posibilidad de que fuera posible. Aun así, se armó de valor y preguntó sin rodeos a la única que podía aconsejarla en ese momento. -¿Crees que Kaisa se está cansando de mí?-

Evelynn podía jurar que, si Ahri tuviera orejas Zorrunas cómo Mini-Ahri estás se habrían agachado sólo para complementar el rostro de cachorro desolado que tenía en este momento.

- Yo... Yo sé que soy un poco intensa, sobre todo cuando se trata de asuntos sexuales...-

- ¿Un poco?- Agregó Evelynn levantando una ceja de forma acusatoria.

- ...Bien- Cedió Ahri. -Quizás sea muy intensa cuando se trata de asuntos de cama-

- Una depravada ninfómana, diría yo...-

Volvió a agregar Evelynn. Y Ahri le miró con unos ojos afilados, para la rubia, la Diva era la menos indicada para criticarle eso.

- ¡Como sea! A lo que voy es que... He dado lo mejor de mí en esta relación... Incluso si podrías llamarme una loca obsesionada con arrullarme con Kaisa, no es algo que a ella pareciera molestarle antes... Incluso varias veces me dijo que "adoraba" mi energía... Pero, ahora... Eve, ¿crees que nuestra llama empieza a apagarse?

Evelynn suspiró, intentado poner una expresión seria.

- Creo... Que le estás dando muchas vueltas al asunto. Deberías pensar un poco todo con cabeza fría, puedo dar fe de que Bookie ha estado realmente ocupada estos días, no sé en que trabaja pero ella sale poco después que tú a Diario y regresa poco antes de que tu vuelvas, además de eso se encarga de mantener el dormitorio en orden, cocinar y tantas cosas que me hacen verla más como nuestra niñera que como nuestra coreógrafa-

Ahri no dijo nada y simplemente se mantuvo pensativa, ella no sabía que Kaisa había estado dejando el dormitorio todos los días, pensó que lo de hoy era simplemente una salida con Akali, entonces tendrían sentido sus excusas de que estaba agotada, pero... Ahora le daba curiosidad, ¿en qué se ocupaba tanto la bailarina?

Los chasquidos producidos por los dedos de la diva la hicieron reaccionar.

- Vuelve a la tierra Foxy-

- Lo siento... Yo...-

- Estabas pensando, empezando a darle vueltas al por qué Kaisa ha estado saliendo todos los días... Si, puedo adivinarlo por como frunces los labios mientras imaginas quien sabe que cosas...-

Ahri agachó su cabeza y no dijo nada al respecto, Evelynn tenía razón después de todo.

- Escucha - Volvió a llamarla la Diva. -Estás cansada, el estrés de estas semanas de trabajo te está jugando una mala pasada-

Ahri se refregó los ojos y se dejó caer sobre la mesa, cubriendo su rostro con su antebrazo, es como si las palabras de la mujer le recordaran que, en verdad sí que se sentía agobiada. Quizás Evelynn tenía razón, quizá sólo estaba pensando las cosas demasiado y estaba canalizando todo su estrés laboral sobre su pareja, quién no tenía nada de culpa.

- Foxy- Una vez más la voz de Evelynn le hizo detener sus pensamientos, y ella descubrió sus ojos para mirarle. -¿Qué te parece si mañana nos damos una salida? Como en los viejos tiempos, vamos a algún sitio interesante, tomamos unas copas, bailamos y te deshaces un poco del peso que tienes en los hombros, luego... Puedes venir y aclarar las cosas con Bookie. ¿Qué dices?.-

Ahri lo pensó un par de veces, pero negó con la cabeza. -No puedo. Mañana tengo que...-

El escalofrío que recorrió su columna al ver la mirada fulminante de Evelynn le hizo callarse por completo, tomó asiento de manera correcta y se aclaró la garganta para cambiar su respuesta.

- Decia... Que sí, me parece perfecto tomarme un pequeño descanso... Aunque la reunión de mañana sea de suma importancia, creo que en verdad necesito un respiro-

Apenas cambiar su respuesta el aura opresiva se desvaneció por completo y Evelynn dibujó una sonrisa satisfecha -¡Perfecto entonces! ¡Y lo mejor de todo es que tengo un lugar en mente!-

Ahri sonrió de mala gana... No se sentía de humor para ir de fiesta con Evelynn, pero era verdad que hacía tiempo no tenía una pequeña salida con Eve, además, ese respiro probablemente le vendría bien... Por supuesto, la clara amenaza fue también un factor importante para decidirse, pero que más daba.

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La noche anterior había sido horrible para Ahri, luego de la charla con Evelynn había decidido que, quizás no necesitaba esperar a "relajarse" en un bar o estar ebria para intentar aclarar las cosas con Kaisa. Se sentía tonta por pasar horas frente al espejo del baño tomando valor para hablar con su novia, intentar arreglar las cosas... Y tal vez, solo tal vez tener una noche "liberadora". Estaba segura que eso haría más por bajar su estrés que cualquier otra cosa.

Pero para su mala fortuna, un mensaje de texto de Kaisa avisando que se quedaría fuera esa noche, le arruinó los planes. El texto decía que pidieran comida a domicilio para ella y para Eve, y que Porfavor avisara a la Diva que Akali se quedaría con ella. Pero no había un por qué ni detallaba dónde se quedaría.

Esa noche fue terriblemente incómoda, Ahri no recordaba que la cama en su habitación fuese tan grande, daba vueltas sin parar intentando conciliar el sueño, y cuando se sentía inquieta instintivamente estiraba su brazo al otro lado de la cama, buscando algo que sabía no estaba allí. No supo en que momento de la madrugada finalmente había podido quedarse dormida, pero no había sido nada temprano, cómo le enseñaban las ojeras que ahora intentaba ocultar con maquillaje.

- ¿Mala noche?-

Preguntó la Diva, ya completamente arreglada, adentrándose a la habitación mirando al reflejo de Ahri.

- Un poco...- Admitió -Eve, enserio no sé si esto sea buena idea... De verdad, ahora me encuentro con aún menos humor para nuestra salida, Kaisa y Akali no vuelven desde ayer por la tarde... Y ni siquiera logro ocultar estas horribles ojeras... Creo que es mejor...-

- Tonterías -

Le dijo la Diva, acercándose a ella. Le hizo girarse y sacó las gafas fucsias que tenía en su escote, poniéndoselas a la rubia, y tomándola por las mejillas para darle un beso en la frente.

- Listo, te ves hermosa... Ahora, nos vamos-

Ahri no tuvo prácticamente oportunidad para protestar, apenas pudo tomar su bolso de mano y fue prácticamente arrastrada todo el camino hasta el auto de la Diva, antes de que siquiera reaccionara el motor rugió y ya no había vuelta atrás. Si a Evelynn no le preocupaba que Akali tampoco hubiera vuelto, quizás también debería relajarse un poco...

- ¿Almenos puedo saber a dónde piensas llevarnos?-

- Ya lo verás - La vaga respuesta hizo que Ahri le restara importancia y simplemente se acomodara en el asiento del copiloto, de todas maneras, poco importaba a donde fueran... Todos los bares eran iguales.

.... O almenos eso pensaba, hasta que la Diva detuvo su auto en un lugar en particular y ambas bajaron del Vehículo, Ahri miraba asombrada la entrada del sitio, un cartel Neón brillaba con el nombre del lugar, y cuando se adentraron no era uno de esos bares de lujo, tampoco un sitio de mala muerte dónde solo se buscaban emociones fuertes, sencillamente... Era un sitio cómodo y agradable, uno que, aunque algunas cosas eran distintas, ella recordaba muy bien.

-Eve... este lugar...-

-Oh, ¿así que lo recuerdas? Vinimos a este lugar una vez, cuando no te decidías si estabas a punto de lanzarte de algún puente o ir y cortarle las joyas familiares a un productor de poca monta-

Ahri rió por el comentario. Si...Definitivamente recordaba esa noche, la noche que había ido llorando a refugiarse en el departamento de Evelynn luego de que sentía que su carrera empezaba a hundirse en la mierda, todos los intentos que había hecho por empezar a vivir su sueño se habían visto frustrados, y todo había sido el colmo cuando alguien había querido aprovecharse de su mala suerte.

Había llegado a su límite, quería desahogarse, quizás entre los brazos y las sábanas de Evelynn y simplemente ocultarse del mundo.

Pero en lugar de arrastrarla a su dormitorio, Evelynn limpió sus lágrimas, y luego de un cambio rápido de vestimenta la subió a su auto y vinieron precisamente a este lugar. La idea era sencilla, hablar, desahogarse, emborracharse y luego follar, si no había pretendiente, simplemente pasarían la noche juntas.

Sin embargo... Esa noche, que parecía que todo se había ido a la mierda, se convirtió en la mejor noche de su vida. Sólo recordarlo le hacía sentir su corazón cálido y al mismo tiempo comprimirse de manera dolorosa...

-Pero... ¿cómo?- Le pregunto a Evelynn. –Pensé que este lugar había sido cerrado hace tiempo-

-Ah... Parece que fue comprado recientemente, lo remodelaron un poco y justo hoy es la gran reinauguración. Sé que quieres perderte en tus recuerdos Foxy, pero ven... Tomemos algo, aun falta un poco para el Show-

-¿Show?- Volvió a preguntar la rubia mientras tomaba asiento en una de las bancas altas de la barra y recibía uno de los cócteles que había pedido la Diva para ellas.

-Por supuesto cariño, ya lo verás-

Y luego de desentenderse del tema, Evelynn sólo se dispuso a disfrutar de su bebida.

Ahri hizo lo mismo, y pronto simplemente se encontraban conversando de anécdotas de su pasado, o cosas sin importancia. Ahri empezaba a relajarse, no podía negar que había sido una excelente idea salir y tomar algo con Evelynn, pero no quería excederse, estar en ese lugar sólo le recordaba la urgencia que sentía por hablar con Kaisa, y lo tonta que había sido por haber esperado tanto para saber que podía confiar en su novia lo suficiente como para hablarle sobre cómo se sentía.

Terminó su tercer y empezó a prepararse para marcharse. –Eve... gracias por todo. De verdad necesitaba un respiro, gracias por eso-

-Hmm... de nada, pero, ¿a dónde crees que vas?-

-Voy al dormitorio, pediré un taxi, no te preocupes...-

-Pero Foxy- Replicó la diva. – ¡El show está por comenzar!-

-Lo siento, Eve... Pero de verdad necesito hablar con Kai... ya no puedo...-

Ahri pausó cuando un par de manos enguantadas cubrieron el rostro de Evelynn, interrumpiendo la conversación, pero ésta contrario a mostrar rechazo sonrió con genuina felicidad.

-Te tardaste, Kali-

Le dijo, y apenas Ahri fijó su vista en la persona a quien le pertenecían las manos se encontró rápidamente con la alocada cabellera inconfundible de la maknae, quien rápidamente dejó de cubrir la vista de la Diva y en su lugar giró su rostro para plantarle un beso en los labios.

-Perdón... Surgieron algunas cosas de último momento...-

-¿Akali?- Preguntó Ahri sintiéndose desubicada.

-Ey- Soltó Akali levantando su mano a modo de saludo.

-¿Por qué estas aquí? ¿No estabas con Kai?-

-Ni me lo recuerdes...- Dijo rodando los ojos la menor del grupo. –O mejor si, recuérdamelo... Bookie me debe ahora dos meses de ramen picante para la cena- Comentó en tono alegre.

-¿Enserio fue eso lo que le pediste?-

Akali simplemente se encogió de hombros ante la pregunta de Evelynn.

-¿Qué tiene? Bookie cocina delicioso-

Ahri seguía sin entender nada. Asi que simplemente decidió preguntarle a Akali. -¿Y entonces? ¿Dónde esta Kaisa?-

Akali sonrió y señaló con el pulgar sobre su hombro. –Ella esta justo allí-

Dijo, y casi como si estuvieran sincronizados, las luces oscuras iluminaron el escenario que, Ahora que Ahri lo veía era mucho mas grande que en el pasado y la música suave y ambiental fue detenida, dando unos segundos de anticipación para que la silueta sobre el escenario hiciera acto de presencia y una música completamente distinta empezara a sonar.

Automáticamente, la silueta que apenas era reconocible como femenina por cómo los colores neón brillaban y acentuaban sus curvas gracias a las luces negras empezó a moverse, lenta y sensualmente, el compás que marcaban los altavoces. Sus caderas se movían deliciosamente sobre cada nota, avanzando más al centro del escenario sin perder el ritmo, Ahri conocía una sola persona que era capaz de adueñarse por completo de su vista de esa manera sólo con sus movimientos.

-¿Que esperas?- Soltó Evelynn ya envolviendo su brazo en las caderas de Akali y atrayéndola a sí misma. –ve por ella-

-¿Tu lo sabías desde un principio, y no me dijiste?-

-¿Y por qué iba a arruinar la sorpresa? Bookie se esforzó mucho en esto... Feliz aniversario, por cierto.-

Ahri parpadeó un par de veces, ¿aniversario? Aniversario... Era verdad que no estaba casada con Kaisa ni mucho menos, pero si que solían intercambiar regalos y felicitarse, aunque había empezado como una broma... ¡Espera! ¿¡Exactamente qué fecha era!?.

Ahri decidió posponer todos sus pensamientos y decidió acercarse finalmente al escenario, no podía evitar rememorar aquella noche, exactamente en el mismo lugar, y ahora que Evelynn lo había mencionado, lo recordaba... También exactamente en la misma fecha, su vida había cambiado por completo.

Casi como si estuviera esperando por ella, apenas llegar al borde del escenario, la sensual figura se acercó a ella, al igual que aquella vez, invitándola a subir al escenario.

Ahri no tardó en tomar su mano, y dejar que las manos de la bailarina se adueñaran de sus caderas, empezando a moverse al ritmo que le marcaba la otra persona.

-Hola, mi amor...-

El susurro sobre su oído le hizo estremecerse, se dio la vuelta, tal como Kaisa le pedía que lo hiciese con sus movimientos y se apegó a ella, aun moviéndose con la música de fondo.

-¿Recuerdas? Fue exactamente así como nos conocimos...- Las manos de Kaisa abandonaron las caderas de Ahri y en su lugar abrazaron su cintura, apegandola mas a ella, y apoyando suavemente su mentón en el hombro de la rubia mientras hablaba.

-Esa noche, todo lo que pensaba era que finalmente reuniría el dinero que me faltaba para poder pagar mi vuelo a América... Estaba segura que después de esa noche, mi vida iba a cambiar, que todo sería mejor...-

Ahri no pronunciaba ninguna palabra, simplemente se dejaba hacer mientras escuchaba las palabras que Kaisa susurraba en su oído.

-Y entonces te vi... Te veías tan fascinada por mi show, en mis movimientos... Que todo lo demás desapareció para mí... Ya no estaba en un escenario, frente a una oleada de personas... Simplemente estábamos la música, yo y... Una hermosa rubia que no apartaba su mirada de mí-

Ahri sintió un beso cálido en su mejilla, mientras su corazón empezaba a derretirse.

-No quería nada más... Solo quería bailar para ti, quería moverme para ti, quería que me vieras solo a mí... Y antes de darme cuenta... Ahora era yo quien estaba fascinada contigo-

Dejó otro beso más en la mejilla de Ahri mientras continuaba.

-Y cuando subiste al escenario y empezaste a bailar para mi... Lo supe, inmediatamente sabía que quería a esta "hermosa rubia" y cuando me invitaste a tu casa pensé... "Esta será la mejor noche de mi vida"... Pero, entonces vino la noche siguiente, y la siguiente, y todas las que siguieron... Poco a poco, esa "Mejor noche" se convirtieron en las "Mejores noches" de mi vida, desde hace seis años hasta hoy...- 

-Sé que, no soy la mejor novia del mundo... y muchas veces me pregunto si de verdad te merezco, pero te juro que doy lo mejor de mí en cada momento que estoy contigo... Y... Gracias por estar conmigo un año más, feliz Aniversario. Mi amor...-

Como había hecho antes... finalizó dando un tercer y ultimo beso en las mejillas de Ahri a medida que la canción que sonaba empezaba a llegar a su fin, pero esta vez sintió la salada humedad que recorría las mejillas de su pareja, y la liberó del abrazo para que esta se pudiera dar la vuelta.

La pista terminó y las luces blancas volvieron a iluminar el lugar. Dandole la vista de una Ahri que se había retirado los lentes oscuros color fucsia que llevaba y ahora podía ver unas ojeras enormes disimuladas con un maquillaje que ahora estaba desecho por las lágrimas que escapaban de manera rebelde por sus ojos, alarmando a Kaisa.

-Ahri... amor, ¿estas bien?-

Ahri sonrió de manera genuina, mientras empezaba a refregar sus lagrimas con sus manos, no podía importarle menos ya terminar de arruinar su maquillaje, estaba feliz... Estaba increíblemente feliz, y se sentía como una estúpida.

-Si.. Yo... solo, lo siento, Kai... Lo siento tanto, soy tan tonta...-

Kaisa ladeo su rostro un poco, no entendía a que se referia, pero rápidamente retiro las manos de Ahri de su rostro y fue ella quien se dedicó a limpiar sus mejillas antes de darle un suave beso en los labios.

-Olvide nuestro aniversario...A pesar de que tu lograste conseguir un Show justo este día para rememorar esa noche... Yo... No tengo nada para darte...-

Admitió con pena Ahri, agachando su mirada.

Kaisa simplemente la envolvió en su abrazo y sonrió un poco.

-Ah... no fue realmente muy difícil conseguir el Show... Lo verdaderamente difícil fue el papeleo para comprar el lugar, no pensé que me tardaría casi una semana entre arreglar el papeleo, la decoración, el amoblado... Fue un poco agotador a decir verdad-

Ahri volvió la vista sorprendida por las palabras.

-Espera, espera... Me vas a decir que compraste todo el lugar... ¿Para esto?-

Kaisa rió inocentemente negando con la cabeza.

-Por supuesto que no, amor... Pienso ponerlo a funcionar como es debido, creo que se me ha pegado un poco de la mentalidad tuya y de Evelynn... Pero, por ahora... ¿Nos vamos? Aun, estamos de aniversario... Y creo que es momento de nuestra "luna de miel"- El guiño y la sonrisa pícara de Kaisa hicieron que la temperatura en su cuerpo aumentara drásticamente y simplemente tomó a Kaisa de la mano, para marcharse del lugar, se subieron a la motocicleta de Kaisa y mientras esta acomodaba su "MiniAhri" en la parte delantera y Ahri se abrazaba a la espalda de su pareja se le ocurrió una idea.

-Kai, amor... ¿Podemos desviarnos un poco?-

-Hmm... por supuesto. ¿Pero a dónde?-

Ahri rió con malicia.

-A uno de mis viejos departamentos... Puede que si te tenga un regalo de aniversario después de todo...-

El trayecto fue un poco más largo que si se hubiesen dirigido al dormitorio que compartían, y apenas llegaron a la puerta no pudieron evitar subir al ascensor a trompicones entre besos y caricias ya un poco desesperadas, Ahri empezaba a notar que ella no era la única que había padecido la abstinencia.

Cuando finalmente llegaron a la habitación Ahri empujo a Kaisa sobre las suaves sábanas de su cama, pero contrario a lo que la bailarina esperaba, no se lanzó sobre ella a despojarla de sus prendas y devorarla. En su lugar, se dirigió a uno de los armarios y tomó unas llaves, abriéndolo y sacando una caja sellada de manera hermética, rompió el sello y llevó la caja cerca de la cama.

-Ya que tanto te gusta...- Mencionó la rubia sacando una falda con excesivos volantes y un par de orejas de zorro falsas. –Te demostraré la original, es mejor que la "mini"- Dijo terminando de sacar el conjunto y empezando a desvestirse para cambiarse al atuendo que llevaba su versión afelpada.

Una vez terminó de vestise volvió sobre la cama, gateando en dirección a su pareja y sentándose en su vientre mientras buscaba sus labios. Aparentemente su loca idea había sido del agrado de su pareja por el fuerte sonrojo que llevaba ahora su amada Bookie. Sonrió y empezó a colar sus manos sobre la camiseta de su pareja.

-Feliz aniversario.... Mi amor-

Selló sus labios con un beso, y decidió cerrar su noche de manera magistral junto a la persona que más amaba en este mundo... Entonces, recordó la promesa que se hicieron hace ya tantos años.

-Hasta que las estrellas se apaguen, mi amor...-

Dijo sobre el pecho de Kaisa. Y ésta le devolvió el gesto con un beso.

-Y cuando se apaguen, brillare yo en su lugar, para mantenerte mi lado, mi vida-

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Nota:

Wooolaaa! Prometí un regalo de San Valentín, y aquí tengo su regalito de San Valentín! :D espero que disfruten leerlo tanto como disfruté escribirlo ^^ lo malo es que me tomo el tiempo de edición de Cantos de Sirena porque, no pensé que esto fuera a quedar tan largo :'v pero bueno... Siempre que le guste siquiera un poquito habrá valido la pena... Y si, este es una "continuación" de "Hasta que las estrellas se apaguen" y "Cantos de Sirena" ... En fin, pasen un feliz San Valentín ❤️

Y si no tienen pareja como esta pobre cosita sin vida social que pasara su 14 de febrero jugado lol, recuerden que yo los amo.

Sin más, nos leemos pronto!

#ImHakku