Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

16

꒰ ✧ Papi celoso ✧ ꒱



JungKook había tenido que ir a un viaje de negocios, la duración fue de cuatro días y esos días fueron un infierno para él al no poder ver a su niño rubiecito.

Pero por fin estaba en casa.

Tres amigos suyos iban a su lado en la camioneta ya que irían a su gran mansión a tomar unos tragos para celebrar que el trato con la empresa de Estados Unidos había salido bien.

—No quiero que se pasen de ebrios en mi casa, ¿entendido? Sí no no me importara que sean mis amigos y los echaré al patio. —Advirtió Jeon mientras visibilizaba su entrada de rejas.

—Vamos, Jeon, con ese bar que tienes en tú casa es inevitable no pasarse un poquito, no seas aguafiestas —Uno de los chicos rió siendo acompañado por los demás menos por JungKook.

—Como sea, en mi casa no existen los borrachos y aparte tengo a mi chico, no quiero que tomen demasiado con él ahí —Gruñó.

Todos comenzaron a burlarse y a hacer escándalo.

—Te tienen domado, Jeon. —Riendo uno de los chicos dijo, JungKook lo miró mal.

Aunque en parte era verdad, su bebito lo tenía domado en toda la extensión de la palabra. Sí él decía que quería algo, haría hasta lo imposible por cumplirle a su niño.

Ya enfrente de su casa, los cuatro salieron del vehículo y entraron detrás de JungKook.

—Ya saben donde está el bar, en un momento voy con ustedes. —Dijo y subió las escaleras mientras sus tres amigos se quitaban los sacos e iban riendo y charlando hasta llegar al bar de aquella casa.

El mayor había extrañado aquel olor característico de su hogar, el olor a bebé y a vainilla de TaeHyung combinado con su típico perfume masculino.

Ansioso llegó a la habitación de su pequeñito y abrió la puerta esperando encontrarlo.

Pero el rubio estaba completamente dormido con su chupete en sus labios, era entendible, ya eran las diez de la noche.

YoonGi le había hecho el favor de cuidar a su bebé esos días, lo cuidaba y en la noche lo dejaba dormido para luego irse. Y sí en la madrugada sucedía algo, las mucamas se encargaban de atender a TaeHyung.

Sintiéndose completo al ver a su pequeñito, acarició su mejilla y la besó. —Ya llegué, mi príncipe precioso ..  —Susurró sin querer despertarlo, se veía cansadito.

Así que decidió cerrar la puerta silenciosamente y bajar a donde se encontraba sus amigos, ya mañana saludaría a TaeHyung.

—Malditos ebrios —JungKook escupió rodando los ojos al ver a sus tres amigos devorando todas las botellas de su vitrina.

—Tienes demasiada variedad, Jeon, no la aprovechas.

Cada uno comenzó a tomar de la botella que querían mientras parloteaban y reía entre ellos, aunque JungKook en el trabajo fuera muy estricto con ellos, ya en confianza era como una persona común y corriente.

Los tres amigos de Jeon se la pasaban haciendo broma muy malas, que para JungKook era imposible no reírse pero se estaba dando cuenta de como uno de sus amigos ya estaba muy ido.

—Ya deja de tomar, Sunhyuk —JungKook negó tomando de su vaso, solo llevaba dos y con eso era suficiente, no quería estar ebrio.

Quería despertar y enseñarle a su bebé todos los regalos que le trajo, no quería estar con resaca ni nada.

—Jeon, d-deberías aprender a divertirte, toma más, anda —Trató de servirle más de la botella pero JungKook negó.

—No, ya toma todo lo que quieras pero yo estoy bien así —Sus amigos solo le hicieron bulla mientras seguían en su mundo.

Tan metidos estaban charlando que no se dieron cuenta de una pequeña figura rubia que llegó enfrente del grupo de amigos.

—¿Papi? .. —Los cuatro voltearon atentos ante aquella voz y al ver a su niño precioso, los ojos avellana de JungKook brillaron.

El pelinegro sonrió mientras TaeHyung tallaba su ojito vestido con su pijama completa de color amarillo.

—Mi amor .. ven, mi pequeño —Abrió sus brazos sonriente, el menor aún estaba algo dormido y sonmoliento, su papi estaba de viaje, ¿acaso estaba soñando?

Tae ladeó su cabecita confuso.

—¿Eres mi papi? —Puchereando.

El mayor rió —Sí, mi vida, soy yo —Seguía con sus brazos abiertos, TaeHyung talló sus ojitos y al verlo bien, verificó que sí era su papito.

Sonriendo enormemente corrió hacia él y lo abrazó subiéndose a su regazo —¡Papi! Extrañé mucho —Llevó su naricita al cuello del mayor para poder aspirar su aroma que tanto había añorado.

—Yo también te extrañé, cariño .. —Apretó su débil cuerpecito y besó su cabeza.

—Tardar mucho, papito .. —Puchereando, el pelinegro acarició sus cachetes tintados de rosita.

—Lo sé, mi vida, pero ya estoy aquí y te traje muchos obsequios —Ante aquello TaeHyung sonrió y lo volvió a abrazar, JungKook aspiró también el olor del menor y suspiró satisfecho al detectar la fragancia a vainilla y lavanda.

Hasta que recordó que tenía invitados presentes y abrió abruptamente sus ojos, bufó abrazando más fuerte a su bebé. Los chicos ya sabían de la condición de TaeHyung así que no les extrañó tal escena.

—Vamos a que duermas de nuevo, amor .. —Lo cargó y estaba dispuesto a llevarlo a su cuarto para que siguiera durmiendo.

Tae por encima del hombro de su papi vió a los otro tres chicos con sus ojitos inocentes y negó.

—N-No dejar solo a amigos, papito .. —Abultó sus labios rositas, JungKook miró a sus amigos e hizo una mueca.

—Ellos no importan, príncipe, vamos a que duermas .. —Trató de poner su cabecita en su hombro pero TaeHyung forcejeó.

—Aquí, papi .. yo contigo —Gimoteó con ojitos llorosos, él no quería irse a dormir, quería estar con el mayor.

—Vamos, Jeon, deja al niño aquí .. —Uno de sus amigos negó de un lado a otro sirviendo alcohol en un pequeño vaso de vidrio, JungKook frunció el ceño.

No quería que su bebe viera a esos locos en estado de ebriedad, nunca lo había visto tomar ni a él y que viera a otros hacerlo era hasta perjudicial.

¿Quién tomaría alcohol enfrente de un niño?

—No voy a dejar a mi rubio aquí cuando ustedes están tomando alcohol —Gruñó dandoles la espalda para que TaeHyung no los viera.

—Esta bien, Jeon, dejarémos de beber —Otro de ellos, el menos ebrio sugirió, los otros dos se quejaron pero tuvieron que aceptar, era la casa de JungKook y tenían que obedecer lo que él quisiera.

Sí la pareja de JungKook estaba ahí, debían respetarlo.

—De todos modos ya no había mucho —Otro amigo bufó y tomó un último trago.

Jeon miró a su solecito con algo de inseguridad, no quería que estuviera ahí con sus amigos presentes, podían incomodarlo.

Sus amigos no eran unos perversos y sabía que no le harían nada al menor ni borrachos, pero aún sí podían soltar palabras disgustas.

—Mhm, no, mejor vamos a tú cuarto a que duermas, precioso —Acarició los mechones rubios y caminó a la salida, el menor sollozó negando.

—Aquí, papi —Con su carita afligida hizo a Jeon dudar.

—Ya, JungKook, deja de ser un sobreprotector, sí el chico quiere estar aquí, déjalo, no haremos nada imprudente —Rodó los ojos.

El mayor seguía sin estar del todo convencido, pero la carita de su niño lo estaba haciendo ceder.

—Yo quiero aquí, papito, contigo, por favor .. —Sorbiendo su naricita, JungKook lo rebotó en sus brazos y suspiró.

—Ah .. está bien —Regresó a la mesa en donde estaba con sus amigos, TaeHyung de inmediato se puso algo tímido y se escondió en su pecho.

—No quiero que digan nada que pueda  desagradar a mi bebé, sí lo hacen les juro que les corto el jodido cuello. —Frunciendo el ceño abrazó a TaeHyung, los otros tres chicos asintieron y siguieron hablando entre ellos.

El rubiecito quien estaba sentado en las piernas de su papi y escondido debajo de su mandíbula, comenzó a jugar con los botones de su camisa.

—Cielo, ¿seguro que no quieres ir a tú cuarto? Ahí puedes dormir agusto y puedo ordenar que te hagan tú tetita —Angustiado.

Tae negó siguiendo en su labor de jugar con los botones de JungKook.

—Yo aquí con papi .. —Puchereando, el mayor besó su cabecita y asintió arrullándolo.

Uno de sus amigos dejo de platicar y volteó hacia donde estaba JungKook con el rubio.

—Jeon, tú niño es adorable —El mayor de sus amigos, él que no había tomado tanto, dijo con ternura al ver la carita de TaeHyung.

El azabache frunció el ceño e inconscientemente tapó el rostro del menor.

—Ya lo sé.

—Te había escuchado hablar de él pero nunca lo había conocido en persona .. —Sonriendo miró al rubiecito que al sentir una mirada sobre él, se sonrojó y se escondió aún más en el pecho contrario —. Hola, ¿eres Tae, cierto?

El mencionado se sonrojó pero asintió jugando con sus manitas.

—Yo soy YeonJun, eres muy lindo y tierno —Halagó sonriente, TaeHyung rió tímidamente.

—YonJun también lindo —Soltó risitas, al escuchar esa vocesita y como su nombre fue mal pronunciado, YeonJun se infartó de tanta ternura

—Dios mío, Jeon, TaeHyung es una bolita de azúcar —Consternado pellizcó levemente una de las mejillas del anterior mencionado —. Tan bonito.

JungKook había estado observando toda la escena incrédulo.

A ver, a ver, estaba bien que YeonJun era su amigo, ¡pero nadie podía llamar lindo y tierno a su bebé más que él!

Solo él tenía ese derecho.

Él era y sería siempre el Papi oficial.

—No lo mires, me lo incomodas. —Molesto tapó a TaeHyung, quien rió divertido quitando las manos de su papi.

Al escucharlo reír y ver su sonrisa de cajita, YeonJun sonrió.

—Cuídalo que te lo robo. —Bromeó divertido, obviamente no haría eso, solo le había parecido tierno TaeHyung y ya.

Pero JungKook se lo tomó bastante serio.

Enrcando una ceja con enojo, habló —. Ni tú ni nadie me quitará a mi niño, él es solo mío de mí, de Jeon JungKook, así que deja de verlo o te largas.

YeonJun rió —. Ya, hombre, era una broma .. ahora veo cuan celoso eres.

—Imbécil —Frunciendo el ceño bajó la mirada hacia donde estaba TaeHyung —. No le hagas caso, mi vida, ese señor está loquito, ¿mhm?

TaeHyung lo miró con inocencia y luego a YeonJun —. ¿YonJun loquito?

—Sí, amor.

El de cabello negro enarcó una ceja —. Taecito, no le hagas caso a tú papá, el solo es un celoso posesivo, pero yo no estoy loco, yo estoy bien.

El rubio miró a su papi —. Papi, no decir mentiras —Infló sus mejillas —. Papi dice a bebé no decir mentiras pero Papi las dice.

JungKook fulminó a YeonJun con la mirada, ahora su pequeño lo estaba regañando por culpa de su amigo idiota.

—Sí, bebé, ya recuerdo, no mentir.

Los otro dos chicos, que hasta ese momento se habían mantenido fuera de la charla, al escuchar a JungKook decir eso se carcajearon.

—Vaya, JungKook, que obediente —Rieron, el pelinegro los ignoró y mimó a su bebé —. Mentir es malo, muy malo—Miraron sonrientes a TaeHyung.

TaeHyung miró a los tres amigos de su papi y sonrió, le parecían divertidos.

—Papito, ¿puedo enseñarles mi nuevo juguete? —Miró al pelinegro con ilusión, quería enseñarle a esos chicos el nuevo juguete que le había regalado su papi antes de que se fuera de viaje.

JungKook negó poniéndo un mechón detrás de la oreja del otro —. No, bebé, sabes que ese juguete es muy delicado y no puedes estar moviéndolo de un lado a otro.

TaeHyung puchereó mientras los tres chicos estaban atentos a la situación.

—¡Porfa, papi! —Lo abrazó.

—Deja que nos enseñe su juguete, JungKook, que mal papá eres —Molestó con diversion al ver la mara cara del empresario. Les gustaba molestar al pelinegro sabiendo que su debilidad era TaeHyung.

En el trabajo siempre lo escuchaban hablando de él y poniéndolo siempre como prioridad, y ahora que estaban frente a frente a esa escena, podían ver con sus propios ojos lo débil que era Jeon ante el rubio.

Y les daba gracia ver a ese empresario amargado, actuar así.

—¿Sí, papi? —Lo miró suplicando con esos ojos.

—Tú enséñanos tú nuevo juguete, Taecito, JungKook no te regañará —YeonJun rió. El menor feliz obedeció y fue corriendo a su cuarto por su figura de colección.

Cuando el menor se fue, Jeon volteó sínicamente ante sus amigos, estos se entremecieron un poco.

—¿Quien te crees tú para quitarme autoridad enfrente de TaeHyung? —Frunciendo el ceño a más no poder.

Los dos amigos tomaron lentamente un sorbo de su trago y YeonJun tragó saliva.

ᝰ.ᐟ

—Y papi también compró esta tableta porque las otras dos se me rompieron .. —TaeHyung sentado arriba de los muslos de JungKook, les enseñaba a los chicos sus cosas.

Estos estaban sorprendidos, sabían que Jeon ganaba montonales de dinero, pero no sabían que todo eso iba para el rubio.

¡Tenía millones de cosas que valían montones!

Por ejemplo, tenía toda una colección de figuras de Kaws, que por cierto, estas figuras en partículas, eran imposibles de conseguir y estaban evaluadas en miles de dolares.

TaeHyung tenía de todo, en todo lo que pensaran, él ya lo tenía.

JungKook miraba a otro lado mientras su pequeño presumía todas sus cositas.

—Jeon, adóptame, yo también quiero que me compres todas esas cosas —Lloriqueando su amigo pelinaranja.

—Tsk, que asco, solo mi bebé merece eso .. —Seguía con la mirada desviada, estaba un pelín de enojado.

Hace una hora que su niño había estado ahí y tenía encantado a sus amigos, ellos no paraban de hacerle caso.

Hasta habían dejado de tomar.

Y miren, él solo era un poquito, pero muy poquito celoso.

Casi ni se notaban sus celos, según él.

Pero TaeHyung tenía maravillado a sus amigos y eso lo estaba haciendo hervir en furia.

El menor debía ser asi de bonito solo con él, solo él podía admirar su lindura, así que ya fastidiado, tomó al menor de la cintura y lo cargó.

—Ya es muy tarde, ya es hora de que se vayan. —Se puso de pie y comenzó a recoger todo con su brazo derecho desocupado.

Los chicos se desconcertaron y quejaron.

—Jeon, estamos agusto, no puedes corrernos así —Todos soltaron quejas, la cara de JungKook era una de pura seriedad.

TaeHyung miró el rostro del mayor sin expresión y decidió no decir nada, parecía algo molesto pero no sabía ni porque. Así que se acostó en su hombro.

—Ya es tarde para mi bebé, es hora de que duerma, lárguense —Los contrarios jadearon y no tuvieron de otra mas que empezar a recoger sus cosas y salir del bar.

Era ya de madrugada y todo estaba oscuro en el patio, lo maravilloso de la casa de Jeon esque tenían muchos faros y luces por toda la mansión.

—Mi chófer los llevará a su casa, adiós, tienen el día libre. —Se despidió y cerró la puerta quedando solo TaeHyung y él en la sala.

El más alto emprendió camino a la habitación del rubio y entró. Tae veía la vara de su papi mientras puchereaba.

—¿Por qué serio, papá? —Con un dedito en su boca cuestionó algo angustiado.

JungKook dejó a su solecito sentado en la cuna y luego jaló un banquito para quedar al lado de él.

—No te preocupes, nene, no estoy enojado por sí es lo que lo preguntas —Sonrió.

—¿Entonces? —Su boquita estaba hecha en un puchero.

—Mhm, te platicaré algo, ¿okay? —Tae asintió ingenuo —. Esos chicos como los que estaban aquí, se llevan a los príncipes preciosos como tú —Contó frunciendo el ceño, el menor se espantó —. Por eso no puedes acercarte más a ellos, bebé —Relató preocupado.

TaeHyung tapó su boquita con sus dos manos.

—Pero ellos buenos, papá —Su carita demostraba angustia.

—No, mi amor, ellos te llevaran lejos de mi lado y no yo quiero eso —Dijo negando con la cabeza —. Tú eres mi rayito de sol, ¿solo de papá, cierto?

TaeHyung asintió asustado, no quería que esos chicos se lo llevaran lejos de JungKook.

—Okay, mi vida, entonces no debemos hablar con ellos, ¿de acuerdo? Tú solo puedes hablar con papi y tús amiguitos —El rubio estuvo de acuerdo.

—Sí, papi, yo no quiero lejos de tí —Dijo con sus ojitos llorosos, tenía miedo de que esos chicos lo alejaran.

JungKook se arrepintió de sus mentiras piadosas cuando vió que su pequeño comenzó a llorar.

—No llores, cariño, no tengas miedo, papi te cuidará ¿bien? —Acarició su cabellito —. Te amo, chiquito, mi chiquito mio —JungKook frunció el ceño levemente con TaeHyung en sus brazos.

Bueno, no siempre era malo mentir, debía de hacerlo para que a su pequeñito le quedara claro que él era su único papi.

﹌﹌﹌


-Nini 🐧

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro