꒰ ✧ Descubrimiento ✧ ꒱

❝ Tres años atrás ❞

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TaeHyung veía sin poder creerlo el artículo digital que proyectaba su tableta.

En ella se mantenía una noticia junto con una foto de él y JungKook tomados de la mano. La habían regado y en grande.

Ambos habían decidido matener su relación en secreto, sería demasiado díficil lidiar con los periodistas y la prensa sí es que se llegaban a enterar.

Obviamente todos se alterarían sí se enteraban que el lindo modelo rubio y el propietario de la empresa de autos más conocida de Asia, eran pareja.

Que es lo que estaba sucediendo ahora mismo. Ellos solo fueron a cenar como la pareja normal que eran pero al parecer alguien los encontró y les tomó unas cuantas fotos.

Bufó y jaló de sus cabellos —. No entiendo el afán de la gente, que les interesa sí estamos en una relación o no .. —Habló irritado.

Pero más que nada, le preocupaba su novio, él era el que sería él más afectado ya que era algo notoria su diferencia de edad y podían acusar a JungKook.

Aunque él ya tenía dieciocho años y era mayor de edad, Jeon ya pasaba los veinte y ya era todo un empresario, le lloverían las críticas a ambos.

Observó la tableta entre sus manos y lágrimas comenzaron a salir de sus orbes cafes ante la frustración. Se acostó en su cama y decidió bloquear su celular, ya veía venir todos los mensajes que llegarían y lo que menos quería era leerlos.

En su proceso de coraje, alcanzó a ver en su mesita de noche un minúsculo chupete rosa. Alzó la cabeza sorprendido.

Lo tomó entre sus dedos y se quedó pensando unos momentos, hacía mucho no entraba en su Little space, ni siquiera lo recordaba.

Los últimos veces había estado tan ocupado con su novio que le fue imposible no olvidarlo.

Vacilante siguió observando el chupete y ya sin pensarlo mucho, lo llevó a sus labios.

Le ayudaría mucho entrar en ese espacio en el que cualquier preocupación suya se iba y en la que olvidaba todo para solo ser un adorable pequeño.

De inmediato entró en aquella mentalidad de niño pequeño y sonriendo sobre el chupete, fue a buscar una caja en su armario que estaba llena de peluches, de ahí unos cuantos y los aventó todos a su cama.

—¡Jugalé con todos ustedes! —Habló aún con el chupón en su boquita y se aventó a la cama haciendo que todos los peluches rebotaran.

No le preocupaba el que alguien entrara y lo viera así, de todos modos, era su departamento y vivía solo, nadie podía entrar.

¿O sí?

ᝰ.ᐟ

JungKook marcó por quinta vez el número de aquel rubio que tenía como pareja, manejaba demasiado rápido por la autopista.

Estaba desesperado por saber el estado de TaeHyung al ver aquella noticia. Y se estaba desesperando más porque no contestaba sus llamadas.

Gruñó molesto cuando aquel buzón de voz le indicó que Tae seguía sin contestar. Aventó su celular sin cuidado al asiento de copiloto.

—Celular de mierda .. —Frunciendo el ceño aceleró más hasta llegar al departamento del menor, corrió hasta la entrada y ni siquiera le importó subir al elevador.

Lo más factible para él fue subir corriendo las escaleras hasta llegar al piso número seis.

Buscó entre sus bolsillos y encontró la llave que a escondidas sacó del departamento de su chico.

Bueno, era para alguna emergencia.

Y esta era una porque no contestaba ninguna de sus llamadas. Al abrir la puerta, se adentró y volteó a todos lados esperando ver al dueño del apartamento.

Caminó por la sala, la cocina, los baños y nada, no se veía ningún rastro de él.

—¡TaeHyung! ¡amor, soy yo! —Alzó la voz a ver sí así el rubio lo escuchaba y llegaba. Extrañado fue a la cocina y rápido agarró un vaso para llenarlo de agua y tómarla.

Mala idea subir tantos pisos con escaleras.

Suspiró limpiando un poco de sudor de su frente, esperando que en cualquier momento TaeHyung llegara mientras él se hidrataba.

Escuchó pasos que venían a la cocina y se volteó para dejar el vaso en el lavabo.

—Cariño, ¿cómo estás? Tú-

Al darse la vuelta, se topó con unos ojos que lo escaneaban indiscreto. Bajó la mirada y vió como aquella personita enfrente de él estaba vestido con un conjunto de pijama de fresitas y unas pantuflas adorables.

Y mientras más alzaba la mirada, más se sorprendía.

En los brazos contrarios se encontraba un peluche de conejito, en los labios un chupete de .. ¿bebé? Y aquellos ojos se encontraban más gigantes y abiertos que nunca.

Espera ¿un chupete?

—¿TaeHyung? —No tenía ni palabras para hablar y preguntar que estaba sucediendo. El menor lo analizó de cuerpo completo y luego caminó lentamente hasta él.

JungKook sentía la boca seca, su novio, aquel precioso modelo que tanto amaba, estaba frente a él con un chupón en su boca, un chupón.

¿Qué hacía con un chupón?

Al llegar el menor junto a él, se quito el chupete para poder hablar.

—¿Jugal con TaeTae? —Alzó el conejito de felpa que tenía en brazos y cuestionó. Al escuchar aquella voz tan dulce que nunca había escuchado, casi se muere ahí mismo.

Tardó unos segundos más analizando pero decidió hablar al ver como el menor esperaba una respuesta.

—¿Jugar? Pero .. Tae, ¿tú? .. —No sabía ni que preguntar, estaba casi en un trance con sus ojos bien abiertos.

—Tae ño, yo TaeTae .. —Puso una manita en su pecho —. ¿Tú?

—Bebé .. —JungKook trataba de que el rubio volviera en sí, ¿qué tal y sí se estaba volviendo loco y por eso no se acordaba de su nombre?

TaeHyung abrió su boquita asombrado.

—¿¡Yo bebé?! —Sonrió con entusiasmo, el pelinegró pensó que había sido un grave error llamarlo de esa forma.

—Eh .. TaeHyung —El mencionado puchereó al ya no ser llamado de nuevo de aquella forma que le encantó —. ¿Tú, estás bien? ¿Por qué de repente hablas .. así y tienes un chupón?

—Chupetito mío —El menor vió su chupón y con su boquita abultada lo llevó a ella, JungKook apartó la mirada, no podía caer ante la ternura de ese rostro.

Rascó su nuca sin saber que hacer, no sabía como actuar frente a aquel ser tan lindo pero que lo hacía confundirse sobre su comportamiento.

En un principio, salió de su empresa rápidamente para ver como estaba su novio ante la revelación de su relación, pero había dejado una junta a medias y tenía que regresar ya.

Pero no creía que fuera lo correcto dejar a su novio así en ese estado. Parecía un niño pequeño y estaba seguro que actuaría como uno.

Y a un niño pequeño no se le deja solo en una casa.

—TaeHyung, yo me tengo que ir, reacciona por favor —Casi llora mientras tomaba la cara de su novio entre sus manos, el menor sintió cosquillas y soltó risitas.

—Yo il también —Sonrió meciéndose de un lado a otro hablando sobre el chupete, JungKook se quedó estático.

—No, esque tienes que reaccionar, tú eres TaeHyung y yo soy tú novio, ¿por qué no recuerdas como me llamo? —JungKook casi lloraba ahí mismo, el menor lo notó y rió pareciéndole divertido.

—¿Novio? —Tae ladeó su cabecita —. Pelo TaeTae es chiquito, tiene así —Levantó tres de sus deditos, el pelinegro se desconcertó —. No puelo tenel novio.

JungKook solo llevó una mano a su cabello, ¿qué se supone que tenía qué hacer?

—¿Bebiste demasiado, cariño? —Comenzó a checar su cuerpo, Tae arrugó su naricita —. O aún peor .. ¿te drogaste? —JungKook se preocupó y comenzó a exaltarse —. No, no, mi vida, la noticia también me hizo mal pero no era necesario que hicieras eso, estamos juntos en esto.

TaeHyung solo lo veía desorientado y haciendo un pucherito, JungKook se dió cuenta de que no había entendido nada de lo que dijo.

Checó su reloj impaciente, tenía solo diez minutos para estar de nuevo en la empresa.

—¿Sabes algo? Irás conmigo a un lugar, vamos, dame —Estiró su gran palma, TaeHyung lo miró e inseguro le dió la manita.

Caminaron hacia la puerta del departamento y el azabache se encargó de cerrarla con llave.

—¿A dónde vamosh? —Caminaban hacia el elevador para que los llevara rápidamente hacia el primer piso.

Se metieron a él y las puertas se cerraron quedándose solo ellos dos.

—Tenemos que ir a mi trabajo .. —Suspiró presionando los botones del elevador.

—Bueno .. —TaeHyung solo alzó sus hombros y abrazó su peluche que había llevado consigo —. ¿Cómo es nombre tuyo?

JungKook le dió una mirada y suspiró.

—JungKook ..

El rubiecito asintió y ya no dijo nada más mientras bajaban, solo se concentró en jugar con su peluche y en analizar al hombre frente suyo.

El mayor sintió la mirada sobre él pero no dijo nada.

ᝰ.ᐟ

El pequeño rubiecito miraba asombrado cada rincón de aquel lugar tan grande. Ya habían llegado a la empresa del tal JungKook y estaba sorprendido.

Él lo único que había visto era su departamento y su cuarto, así que cualquier otro lugar era nuevo para él.

—Necesito que camines rápido .. —El mayor jalaba la mano de TaeHyung, tenía que llegar rapido a la oficina para dejar a Tae ahí y luego irse a su junta.

El peluche del rubio lo había dejado en su carro para que no sospecharan y pensaran nada sobre ver a un chico de dieciocho años con un animal de felpa.

Gracias al elevador de la empresa, logró llegar en menos de cinco minutos y entró a la oficina junto con el menor, cerrando la puerta con seguro.

Sentó a TaeHyung y suspiró —. Mira .. Tae, tengo una junta en la que tengo que estar obligatoriamente, te dejaré aquí, no abras la puerta a nadie, no hagas desastre ni ruido y no rompas nada ¿bien?

Tae puchereó —. Abulido aquí.

El pelinegro le dió un breve vistazo a su oficina y encontró una figura de colección que TaeHyung le había regalado cuando .. estaba en su estado normal.

La tomó entre sus manos y se la dió al contrario —. Ten, puedes jugar con ella, solo sé cuidadoso, no la tires ni la rompas —Acarició su cabello rubio y se fue corriendo, la puerta la aseguró nuevamente y ahora sí fue a su sala de juntas.

El menor abultó sus labios y miró la figura, bueno, podía entretenerse un rato con eso.

ᝰ.ᐟ

JungKook miraba su reloj desesperado, llevaba ya media hora en aquella reunión y necesitaba vigilar que todo estuviera bien con TaeHyung.

Pero los socios no se callaban la boca, parecíera que quisieran alargar la junta una hora más. Y él no iba a soportar eso.

Los señores frente a él eran gente muy importante y de empresas con las que podía hacer unos cuantos tratos, pero él era el jefe del edificio que estaban pisando ahora mismo así que él decidía a que horas acababa la reunión.

—Señores, concuerdo con todo lo que acaban de decir, pero me parece que se están desviando del tema  —JungKook se puso se pue y tomó su saco —. Ya quedamos en un trato así que no veo que más podamos seguir hablando, yo me retiro, muchas gracias por todo, mi ayudante los guiará a la salida.

Casi corriendo fue a su oficina y el pánico invadió todo su cuerpo al encontrarse cara a cara con la puerta abierta.

Entró de prisa esperando que nada malo haya pasado, y bueno .. no fue algo tan diferente.

—¿Enserio? ¿Y cuál es tú película favorita?

Su secretaria, Rosé, se encontraba charlando plácidamente con su novio, este lamía una paleta mientras movía sus piecitos y contestaba todo sonriendo.

—¿Rosé, qué haces aquí? —Cuestionó alarmado, nadie tenía porque descubrir aquel comportamiento nuevo en TaeHyung.

La chica rubia volteó y sonrió —. Jefe, lo siento, sé que no debí entrar a su oficina pero escuché a alguien llorando y me preocupé.

—Rosé, no le cuentes a nadie de esto ¿sí? —Inquieto se acercó a TaeHyung y trató de taparlo con su espalda, pero este asomó su cabecita.

—Oh, no se preocupe, Jefe, no lo haré —Sonrió —. Solo me pregunto .. ¿por qué de repente Tae actúa así? Es adorable pero no lo entiendo.

JungKook miró detrás suyo al menor y luego se alejó a una esquina para hablar con la chica.

—Rosé, ni siquiera yo sé lo que está pasando, yo llegué a su departamento y TaeHyung estaba con un peluche y un chupón —Susurró, la femenína lo miró atenta.

—Sí, ya ví que tiene una actitud muy particular e infantil, ¿pero por qué?

JungKook cerró los ojos —. No lo sé, Rosé, no sé nada, no sé que hacer con él, no sé sí llevármelo a casa y ver que sucede.

Un asentimiento se le fue dado —. Sí, creo que es lo mejor, llévelo con usted y esperemos que vuelva a su estado normal y le explique lo que está pasando.

Esque para ninguno era normal ver a un chico mayor de edad actuando como niño pequeño.

JungKook concordó con ella y volvieron hacia donde se encontraba sentado Tae.

—Bueno, yo me tengo que ir, nos vemos después, cariño —Sonrió despidiéndose con su mano, el rubiecito hizo lo mismo feliz —. Nos vemos, señor Jeon, que descanse —. Dió una reverencia y salió.

Estando los dos solos de nuevo, el pelinegro volteó con TaeHyung.

—Tae .. —Se sentó a un lado de él —. Por hoy, te irás conmigo a mi casa, no puedo dejarte solo y creo que tendré que cuidarte, así que vámonos, se está haciendo de noche.

ᝰ.ᐟ

JungKook observaba atentamente como el menor tomaba contento un vaso de leche y unas galletas.

Ya habían llegado a la casa de Jeon y lo primero que hizo Tae, fue decir que tenía muchísima hambre, JungKook lo único que se le ocurrió darle fue leche y galletas.

—Muy lica, pero a TaeTae gusta lechita en biberón —Dijo dejando el vaso vacío en la mesa y tocando su pancita abultada.

—Sí, pero no tengo biberón .. —JungKook apretó los labios, ¿de verdad que TaeHyung nunca reaccionaría? Ya era de noche y seguía actuando así —. Iré rápido al baño, no te muevas.

TaeHyung miró atentamente como el azabache doblaba una esquina de la casa y se metía al cuarto de baño. Mientras él, se puso de pie y comenzó a caminar por la sala.

Todo era muy lujoso, las decoraciones, las mesas de vidrio, todo.

Pero su atención se desvió a una repisa que detenía sobre ella varias fotos, había fotos de JungKook solo, con su familia y en especial, una con un chico rubio.

Abrió sus ojitos y miró aquella foto con detenemiento .. el pelinegro lo estaba abrazando ¡a él!

Su mente pareció reaccionar y de un instante a otro, salió de su espacio, ya no eran aquellos ojos inocentes los que portaba, ahora eran unos de angustia y miedo.

Comenzó a recordar todo lo que había pasado en el día, como Jeon lo encontró en la mañana y como pasó todo el día con él, tapó su boca con sus manos y sintió el pánico invadirlo.

Esto no podía estar pasando.

¡JungKook había descubierto su little space!

Estaba completamente jodido, seguramente el mayor pensaría que era un raro y dejaría de ser su novio.

Aterrado fue corriendo a la puerta y trató de abrirla para huir.

—¿TaeHyung?

El mencionado sobresaltado, cerró los ojos y negó, deseando que esto no fuera verdad.

—¿Qué estás haciendo? es peligroso que salgas así.

Tae seguía sin voltear y aquello hizo que JungKook enarcara una ceja —. ¿Qué te sucede?

El rubio volteó completamente sonrojado y con su cabeza gacha.

—Y-Yo .. —Quiso a ponerse a llorar de la vergüenza, por dios, su novio lo había descubierto en su Little space, nadie nunca tenía que haber descubierto eso.

Que la tierra se lo tragase y lo escupiera al otro lado del mundo, por favor.

—Yo, l-lo siento, JungKookie, tengo que irme —Tragó saliva dándose la vuelta para querer abrir la puerta, pero era imposible ya que tenía llave.

El pelinegro se dió cuenta de que por fin había reaccionado y sorprendido se acercó a él, TaeHyung solo se encogió ya que no quería ni mirarlo a los ojos.

—¿Ya estás bien, amor? —Asustado tomó sus hombros, TaeHyung seguía sin verlo —. Por dios, tienes que contarme que te pasó, estabas muy raro, llegué a sospechar que estabas drogado pero ahora no estoy seguro de que-

El rubio lo interrumpió y solo tapó sus ojos.

—Solo déjame ir, JungKookie, hagámos c-como que esto nunca pasó —Tartamudeó —. Sí quieres terminar conmigo por e-esto, lo entiendo, pero yo tengo que irme ya.

El de cabellos azabaches solo tomó su brazo y negó preocupado —. No, cariño, no te dejaré, ¿como podría hacerlo? —Soltó frunciendo las cejas —. Solo quiero que me expliques.

—JungKookie, e-esque yo .. no —Tapó su rostro con las manos, no sabía ni como explicarlo.

¿Cómo explicarle a su pareja, que por cierto ya era todo un adulto, que él hace tiempo había descubierto aquel espacio de cabeza en el que literal se transformaba a un ser completamente infantil?

Simplemente, no.

Ya tenía dieciocho años, era una vergüenza que él fuera así.

—No, no puedo, t-tengo que irme.

JungKook frunciendo el ceño, lo jaló hacia él —. No te vayas, amor .. —Suplicó —. Solo explícame y solucionemos esto, ¿sí?

TaeHyung lo miró unos instantes y suspiró volteando hacia otro lado.

ᝰ.ᐟ

El más alto solo se dedicaba a escuchar con atención al chico frente a él.

TaeHyung hipaba hablando y JungKook apenas le entendía bien.

Al terminar este de hablar, Jeon solo se quedó unos momentos sobrepensando.

—Oh, de verdad que no me esperaba esto .. —JungKook tragó saliva, todavia no terminaba de comprender bien.

¿Qué era eso de little space?

TaeHyung apenado bajó la mirada y se puso de pie —. S-Sí, bueno .. ya te explique, ahora me iré —Talló sus ojos al sentirlos cristalizarse.

—No, tesoro, no te vayas —Tomó sus manos y lo volvió a sentar en el sofá —. No pasa nada, de verdad, esto es nuevo para mí .. pero no te juzgaré.

El rubio lo miró con aquellos ojos aguados y sorbió su nariz —. Perdón, JungKook .. no tenías porque descubrirlo, era un secreto —Murmuró —. Pero no volverá a pasar, sí tú quieres, podemos terminar .. lo entiendo.

JungKook negó —. No, yo no quiero terminar contigo —Afligido explicó —. Yo, no entiendo todavía muy bien, pero .. puedes explicarme mejor ¿no? —Le sonrió.

TaeHyung sorprendido asintió y algo tímido comenzó a explicar todo de mejor manera, ya que antes había estado un poquito alterado.

—Pero .. de ser así, ¿qué no necesitas a alguien que te cuide? ¿O cómo has sobrevivido estos meses tú solo? —Preguntó dudoso.

—No .. cuando yo entro en mi espacio, solo me la pasaba en mi cuarto y no había ningún peligro, nadie me cuidaba —Mordió su labio.

JungKook asintió ya no tan confundido y pensó un poco lo que estaba apunto de decir.

—¿A tí te gustaría un cuidador?

TaeHyung cohibido solo asintió lentamente.

—Mhm .. —El pelinegro se quedó unos segundos sin hablar y luego alzó la mirada —. ¿Te gustaría que yo te cuidara?

El rubio lo miró con ojos abiertos al igual que su boquita.

—¿Q-Qué? ¿Enserio? —Sin poder creerlo tapó su boca, JungKook aclaró su garganta.

—Bueno, solo sí tú quieres .. —Rascó su nuca —. Yo no tengo ningún problema y tú eres mi novio .. además, cuando estás así, eres adorable.

TaeHyung solo lo miraba bastante sorprendido y emocionado, él siempre había querido un cuidador.

—N-No tienes que hacerlo, JungKookie.

JungKook solo rió —. ¿Cómo no hacerlo, bebé?

Y ese fue el gran inicio de una experiencia y estilo de vida inolvidable para aquella pareja.

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﹌﹌﹌

-Nini 🐧