Taehyung estaba bastante contento con la última elección de modelos. Su primera parada había sido Busan y mucha gente se había presentado al casting. Nunca tenía una cantidad fija de gente que podría elegir y esta vez había contratado a diez nuevos modelos.

Varios de ellos eran modelos de agencias reconocidas pero otros eran amateurs. Siempre le daba la oportunidad a todo el mundo, por lo que sus audiciones eran abiertas a modelos profesionales y no profesionales. Sin importar edad, sexo, peso, religión, nacionalidad o color de piel, todos tenían oportunidad.

De sus nuevos modelos, sus favoritos eran una señora de cincuenta años que se había divorciado unos días antes del castimg y una pareja de mellizos. La mujer había querido ser modelo toda su vida pero se había casado joven y su marido era un hombre controlador que no la dejaba trabajar. Cansada de él, se divorció y se inscribió en la audición buscando cumplir su sueño de juventud. Taehyung había quedado deslumbrado con ella, no sólo por su belleza sino que también por su actitud. La había elegido ni bien la vio subir a la pasarela.

Los mellizos también le habían gustado mucho. Ambos habían caminado la pasarela juntos a pedido de ellos. En medio de la pasarela se habían detenido y la chica fue la primer en caminar hacia el final para mostrar su forma de desfilar. La verdad era que le faltaba técnica y se veía algo torpe caminando con tacones pero tenía un belleza tan llamativa que la convertía en un diamante en bruto.

Su hermano era todo lo contrario. Era especial. Y no lo pensaba porque era un chico con síndrome de down. Sino porque había desfilado con tanta elegancia y precisión que había hecho que todas las personas presentes se detuvieran a mirarlo. Fue el mejor de todos los que se habían presentado ese día.

Sonrió contento al recordar el abrazo que había recibido de parte de los mellizos cuando fueron elegidos. Se colocó mejor su abrigo y siguió caminando hacia su destino.

Siempre que visitaba Busan hacía una parada obligatoria en el mar. Cada que iba se tomaba al menos cinco minutos para caminar por la playa y esa vez no sería la excepción.

No había mucha gente alrededor, lo que era lógico considerando la fecha del año. Sólo podía ver a algunas personas a los lejos caminando por el muelle. Sin pensar mucho se quitó su calzado junto con sus medias y empezó a caminar por la playa.

Sin saber exactamente porque comenzó a andar hacia un chico que se encontraba sentado cerca de la orilla observando las olas. Cuando estuvo junto a él se dio cuenta porque su silueta se le había hecho familiar. Sin decir nada se sentó junto al muchacho, su mirada se clavó en el horizonte donde comenzaban a aparecer los primeros indicios del atardecer.

-¿Cómo me encontraste?- preguntó el chico mirándolo de reojo.

-Casualidad. No te estaba buscando realmente- respondió estirándose hacia atrás. -Nisiquiera sabía que estabas en Busan. Vine a buscar modelos para mi próxima colección.

-Oh, cierto. Mi amigo me dijo que vendrías a la ciudad.

-¿Con ese amigo es con quien te estás quedando?

-Si- aceptó en un suspiró. Imitando la postura del mayor se sostuvo con sus manos detrás de su espalda antes de seguir hablando. -¿Cómo están todos?

-Bien. Mi hermano, Nam hyung y Hobi hyung están ensayando para esa premiación que tenían. Seokjin hyung ya es un pez globo de lo enorme que está su vientre, pero no le digas que te dije eso porque va a golpearme, el embarazo lo tiene con las hormonas alborotadas y se enoja más fácil de lo normal- Jungkook sonrió imaginando lo lindo que se vería Seokjin con su vientre de ya ocho meses.

-¿Falta poco para que nazca verdad?

-Sólo quedan unas semanas. Todos estamos comprando ropa unisex, yo les di una extensiva charla de porque la ropa no tiene género y que no importa si es nene o nena, él debería poder usar la ropa del color y del tipo que quiera- el menor sonrió de acuerdo con él.

Durante algunos segundos se quedaron mirando el mar en silencio.

-Jimin te ha estado buscando como loco- volvió a hablar Taehyung.

-Lo sé- respondió sentándose derecho. -Mamá me dijo que no deja de llamar.

-Estaba seguro que ella sabía donde estabas.

-No, no lo sabe. Sólo la llamé un par de veces, pero no sabe que estoy aquí. Necesitaba tiempo para pensar así que me quedé con un amigo de la infancia.

-Te extrañamos, Jungkook. Todos lo hacemos- dijo haciendo que lo mire. -En algún momento debes volver. Lo sabes, ¿no?

-Lo sé. Sé que debemos hablar, más siendo que trabajo en el mismo edificio que Yoongi hyung. Pero es difícil, no quiero escucharlos.

-Sé que estás enojado con ellos, pero...

-No, no estoy enojado con ellos- lo interrumpió. -Estoy enojado conmigo mismo. Porque lo sabía. Sabía lo que ellos sentían pero me aferré a Jimin. Yo estaba... estoy- se corrigió. -estoy tan enamorado de él que no quería dejarlo ir. Pero es injusto para él, no puedo obligarlo a estar conmigo cuando es obvio que él no siente lo mismo que yo- sonrió con tristeza antes de seguir. -¿Sabes? Creo que siempre supe que él no me amaba. Lo veía en sus ojos pero me engañé a mi mismo diciéndome que me miraba con amor. Pero cuando cuando vi el brillo en sus ojos cuando estaba con Yoongi hyung... - suspiró resignado dejándose caer sobre la arena. -Lo veía como si Yoongi hyung fuera quien pone las estrellas en el cielo.

Taehyung entendía lo que sentía por lo que no podía refutar a eso. Se recostó a su lado y observaron el cielo por algunos minutos, sólo el sonido de las olas cortaba el silencio.

-Hyung...- lo llamó despacio.

-¿Si?

-¿Alguna vez te enamoraste de alguien que no correspondía tus sentimientos?

-Si- respondió con resignación.

-¿De verdad?- preguntó el menor levantándose un poco. Se sostuvo con uno de sus brazos y lo miró desde arriba. -¿Qué hiciste?- Taehyung cerró sus ojos y suspiró antes de responder.

-Cuando me di cuenta que amaba a alguien más y que su felicidad no estaba conmigo, intenté enterrar mis sentimientos y dejar de pensar en él para no lastimarme.

-¿Y funcionó?

-No realmente- Jungkook asintió decaído y se dejó caer nuevamente sobre la arena. -Ya lo dijo un escritor brasileño... "Amar a alguien es una cosa. Que te ame alguien es otra. Pero que te ame la misma persona a la que amas, lo es todo"

-Es una muy bonita frase pero a la vez es muy dolorosa.

-Lo es- El celular de Taehyung comenzó a sonar interrumpiéndolos. -Debo irme, Jungkook- comentó poniéndose de pie. -¿Estás bien?

-Lo estaré, hyung- respondió sentándose sobre la arena.

-Jimin debe hablar contigo. Realmente debe hacerlo ¿Me prometes que tratáras de escucharlo?

-Lo prometo. Tal vez no sea en los próximos días pero pronto volveré. Además, he descuidado mi carrera cuando recién ha comenzado.

-No dejes que esto arruiné todo- el menor se puso de pie también y lo miró unos segundos antes de abrazarlo.

-De verdad, me alegra haberme encontrado contigo aquí. Necesitaba un abrazo amigo.

Amigo.

La palabra se repitió una y otra vez en la mente de Taehyung. Le dolió, claro que lo hizo. Pero lo ocultó con su mejor sonrisa falsa y se fue de allí sin decir nada.

Deseaba que sus corazones pudieran sanar pronto.

Desde que Yeonjun había nacido, el sueño de Jimin se había vuelta muy ligero teniendo la habilidad de despertar ante el más mínimo movimiento a su lado.

Por lo que despertó y enseguida se puso alerta. Aún era de madrugada por lo que tuvo que prender la luz del velador, tuvo que tomarse unos segundos para que sus ojos se acostumbraran pero rápidamente rodeó la cama para ubicarse al otro lado y observar a su acompañante.

-Hyung, ¿qué sucede?- preguntó despacio. Lo vio muy alterado por lo que con cuidado lo ayudó a sentarse contra el respaldo de la cama. Cuando movió las sabanas pudo entender que sucedía.

Las sabanas estaban completamente mojadas.

La mirada del mayor también bajo allí. Asustándose aún más.

Había roto fuente.

-Hyung, estás en trabajo de parto. ¿Tuviste contracciones?- lo vio asentir lentamente. -¿Desde hace cuánto?

-Unas horas- respondió tan despacio que Jimin apenas pudo oírlo.

-¿Por qué no me lo dijiste?

-Creí que eran falsa alarma como la otra vez. Aún falta para la fecha prevista- respondió comenzando a agitarse. Parecía estar al borde de un ataque de pánico. -Pero ahora duelen más.

-De acuerdo, no pasa nada. No te asustes, es normal que algunos bebés esten ansiosos por conocer a sus papis y quieran apresurar las cosas- dijo en tono dulce tratando de que se calmara. -Necesito que respires, hyung. Yo iré a preparar todo, ¿ya vuelvo si?

El mayor asintió antes de que el peligris saliera disparado hacia el pasillo. No tardo mucho realmente en volver porque el bolso del bebé ya estaba listo. Pero aún debía preparar uno para Seokjin. Mientras volvía a la habitación principal llamó al hospital para que tuvieran todo listo para cuando llegaran, ellos se encargarían de contactar a la obstetra que lo atendía.

Cuando entró a la habitación vio al mayor con una mueca de dolor en el rostro. Corrió a su lado y miró la hora en su celular para controlar el horario de la contracción. Cuando el dolor terminó corrió de un lado a otro tomando las cosas que creía que el mayor necesitaría en el hospital.

Con el bolso listo volvió a acercarse al modelo. Tomó su celular y marcó otro número, al segundo tono respondieron.

-¿Jimin? ¿Qué sucede? Es de madrugada en Corea. ¿Sucedió algo con Jin hyung?- No alcanzó a responder antes de que ruidos raros se escucharan al otro lado de la línea.

-Jimin, soy Namjoon. ¿Qué sucedió?

-Jin huyng esta en trabajo de parto- respondió observando al doncel sobre la cama. Tenía una nueva mueca de dolor en el rostro. Por el poco tiempo que había pasado desde la anterior contracción y por la intensidad con la que lo parecía atacar, Jimin supo que no quedaba mucho tiempo para que naciera. Puso su celular en altavoz antes de volver a hablar. -Nam hyung, él te está escuchando. Está muy asustado, hyung. Y yo sé que tú lo acompañaste a todas esas charlas prenatales, háblale. Te necesita.

-Mi amor- lo llamó. -Sé que duele, cariño. Pero, ¿recuerdas lo que aprendimos en las charlas? Debes respirar. Inhalar y exhalar- lentamente Seokjin comenzó a respirar al mismo ritmo que podía escuchar lo hacía Namjoon.

Aprovechando que el modelo se veía mucho más tranquilo, Jimin siguió buscando las cosas que necesitaría antes de cambiarse él. Agradecía que Yeonjun estaba con sus abuelos y no se tuviera que preocupar en prepararlo a él también.

-Hyung, te ayudaré a ponerte este nuevo pijama para que viajes más cómodo al hospital, ¿de acuerdo?- preguntó Jimin cuando ya tuvo todo listo. Seokjin se dejó hacer, seguía concentrado en lo que su novio le decía al otro lado del teléfono.

Cuando tenían todo lo necesario, Jimin ayudó al mayor a llegar al ascensor con cuidado. Todo el tiempo Namjoon estuvo en el teléfono dándole calma.

Realmente no tardaron mucho en llegar y como ya habían sido avisados, rápidamente Seokjin fue recibido por enfermeros en la entrada e ingresado directamente a la sala de partos para su cesárea.

-Hyung, ¿sigues ahí?- preguntó Jimin llevando su celular a su oído.

-Soy yo- respondió Yoongi.

-Ya fue ingresado, hyung. Ya viene el pequeño principe- dijo sonriente Jimin.

-Así es- respondió el mayor. -Mientras Namjoon hablaba con él, Hoseok y yo sacamos pasajes aéreos para nosotros. Saldremos en una hora.

-De acuerdo, hyung.

-Iré a prepar mis cosas. Avísanos ni bien sepas algo, ¿bien?

-De acuerdo, buen viaje.

Cortó la llamada y soltó el aire que no sabía que estaba reteniendo. Se había obligado a actuar con mucha calma porque Seokjin lo necesitaba pero claro que había estado asustado. Verse solo con su amigo a punto de dar a luz le dio miedo incluso cuando él ya había pasado por eso.

Se dejó caer sobre uno de los asientos de la sala de espera. Sacó su celular y sonriendo envió un mensaje a todos los que querrían saber que el bebé ya estaba por nacer con un "3312, tenemos un 3312. Bebé en camino"

Guardó su teléfono luego de acordar con todos la hora que llegarían al hospital. Los padres de Namjoon, quienes se encontraban fuera de la ciudad, tardarían dos horas en llegar. Los de Yoongi irían en la mañana. Taehyung tardaría unas tres horas en llegar porque debía esperar que saliera el único vuelo que había conseguido.

Jimin suspiró y comenzó a acariciar su vientre. Sonrió sabiendo que en unos meses le tocaría a él estar en la sala de partos.

Pero estaba vez sería diferente.

Ya no estaría solo. Ahora tenía una familia que sabía que lo acompañaría.

Más de una hora había pasado desde que Seokjin había sido ingresado al hospital y Jimin comenzaba a impacientarse por no recibir noticias.

La sala de espera estaba vacía. Sólo él esperaba noticias. Ni siquiera veía médicos o enfermeros pasar.

Se puso de pie con la intención de buscar el baño cuando la puerta de la guardia se abrió. La obstetra de Jin salió de allí quitándose la cofia. Jimin caminó rápidamente hacia ella.

-¿Cómo están? ¿Cómo salió todo?

-Afortunadamente todo bien- el peligris sonrió aliviado. -Tuvo algunas complicaciones con su presión por lo que tuvimos que darle anestesia completa para evitar riesgos. Pero el bebé nació en perfecto estado. Deberá quedarse en neonatología por le menos está noche como precaución- Jimin asintió comprendiendo. -El señor Kim va a ser llevado a su habitación en unos minutos. Aún no ha despertado así que si quiere ir a ver al bebé primero, puedo hacerlo. No puede ingresar a la habitación por obvias razones, pero podrá verlo por la ventana de la puerta. Lo reconocerá fácilmente, ya que es el único niño de la sala.

Jimin sonrió aún más con la noticia de que era un niño. Sabía que todos estarían celosos por ser el primero en saber el sexo del bebé.

La mujer le informó por donde debía ir antes de retirarse. Caminó con rapidez hacia neonatología, le hacia mucho ilusión conocer al pequeño.

Realmente fue fácil reconocerlo. No sólo porque era el único niño sino porque reconoció la linda manta de patitos que él mismo había comprado. Sonrió enternecido al verlo envuelto en su mantita.

Le sorprendió lo lindo que era. La mayoría de los bebés al nacer no se ven muy bonitos, sino que están rojos y con sus caritas hinchadas. Pero ese pequeño era precioso.

-Supongo que eres tan lindo porque tienes los genes de modelo de tu papi- dijo para sí riendo.

-Realmente es un bebé muy bonito- dijo alguien a su lado. Jimin dio un brinco en su lugar por la repentina aparición del extraño.

-Lo es- respondió.

Se giró hacia el hombre y sonrió nuevamente al ver quien era.

Aparezco (han pasado 84 años)
Perdón por la espera😭
Empecé a trabajar pero espero poder hacerme un lugar para terminar esta historia y darles por fin el final que merecen 🕯️
El bebé ya nació y es un niño! Ya tengo decidido su nombre, pero ¿Cómo lo llamarían?
Also, ¿Quién creen que es el hombre misterioso? 🤨

Espero que hayan tenido un inicio de año genial💪🏻
Nos leemos!💜