50.
Despertó con una sonrisa en el rostro. No quería abrir sus ojos, se sentía demasiado cansado, su cuerpo entero dolía. Comenzó a buscar sobre la cama a su acompañante, pero una molestia en su brazo lo hizo mirar su extremidad encontrándose con una aguja clavada en su piel por la que le administraban suero.
Entonces se dio cuenta que no era el día de año nuevo y que no estaba en aquella suite lujosa.
Se dio cuenta que Yoongi no estaba a su lado.
Los hechos del día anterior comenzaron a llegar a su mente. Suspiró frustrado. Parecía que su cerebro quería hacerlo sufrir un poco más mostrándole en sueños el recuerdo de su primer año nuevo con Yoongi.
Observó por la pequeña ventana de la habitación que aún no salía el sol, a penas estaba amaneciendo. Sentía su cuerpo completamente tenso, se había dormido por cansancio no porque pudiera descansar en esa incómoda cama de hospital.
Se giró hacia el otro lado tratando de no enredarse con el gotero del suero. Se acomodó de costado, quería tratar de dormir un poco más. Pero cuando por fin estuvo lo más cómodo posible su mirada cayó sobre la silla aún lado de la cama, donde Jungkook dormía calmadamente.
Observó su expresión pacífica y comenzó a pensar en su relación con él.
Ahora que había recuperado sus recuerdos podía comprender muchas cosas. Podía comprender porque nunca había sentido esas mariposas en el estómago de las que leyó una vez en un libro. Podía comprender porque cuando besó por primera vez al menor no sintió esos fuegos artificiales de los que todos hablaban en las películas románticas. Podía comprender porque cuando Jungkook le propuso matrimonio él aceptó sin emoción alguna.
Ahora lo entendía.
No lo amaba.
Sentía un cariño inmenso por él. Realmente lo hacía. Pero no lo amaba.
Había aceptado la relación porque sintió que era lo correcto luego de todo lo que Jungkook había hecho por él. Era la única persona que había estado a su lado toda esa etapa tan difícil, terminó aceptando ser su novio porque sentía que se lo debía. Pero sus sentimientos no eran los mismos que los del menor.
Ahora lo sabía.
No sabe cuanto tiempo se perdió en sus pensamientos mientras observaba a su prometido dormir, pero fue el suficiente como para que el sol saliera y comenzará a molestar al menor por caer sobre su rostro.
Jungkook soltó un quejido despertando lentamente. Se estiró un poco haciendo sonar todo su cuerpo e hizo una mueca al sentirse tan adolorido. Había pasado la peor noche durmiendo en esa dura silla. Miró a Jimin sobre la cama dándose cuenta que también lo miraba por lo que le sonrió cálidamente.
—Buenos días, hyung. ¿Hace mucho despertaste?— preguntó poniéndose de pie.
—No— mintió.
—¿Cómo te sientes hoy?
—Con ganas de salir de aquí— Jungkook sonrió por el comentario.
—El doctor dijo que vendría a darte el alta en la mañana, luego de chequear tus análisis.
—De acuerdo.
—¿Tienes hambre?— preguntó corriendo las cortinas de la ventana para que iluminarán mejor la habitación.
Jimin no alcanzó a responder cuando unos leves golpes en la puerta los hicieron girar hacia allí. Una enfermera entró con una pequeña bandeja en sus manos. Jungkook acercó la mesa utilizada para servirles comida a los pacientes y la chica depositó los platillos que traía para el peligris, para luego retirarse rápidamente a seguir con su trabajo.
Un poco de sopa de algas, algo de arroz, kimchi y algunas verduras eran su desayuno. Para Jimin que tenía su estómago revuelto esa comida de hospital no le llamaba la atención para nada, pero para Jungkook que moría de hambre le parecía un manjar. Al notar como miraba la comida el menor, Jimin acercó los platillos para él también. Jungkook comenzó a comer y su prometido sólo, fingió tomar algo de la sopa.
No mucho después, el doctor que llevaba el caso de Jimin ingresó al cuarto. Observó los platos vacíos y anotó algo en la carpeta que llevaba antes de saludarlos.
—Buenos días, señor Park. ¿Cómo se siente?— Jungkook lo miró confundido, desde que Jimin había adoptado su apellido, siempre lo había usado incluso cuando supo cual era su apellido real. ¿Por qué ahora usaba Park?
—Bien, doctor. Con ganas de irme— respondió Jimin.
—Muy bien. Revise sus análisis y vengo a informarle los resultados. Sus glóbulos rojos están bastante bajos, lo que es preocupante.
—¿Eso es malo?— preguntó Jungkook dejando de pensar en el tema del apellido, ahora lo más importante era la salud de su novio.
—Si no se trata, si. Además, está por debajo de su peso ideal por lo que me da a entender que no se alimenta correctamente— dijo mirando a Jimin fijamente. El peligris bajó la cabeza, sabía que eso era verdad.
Últimamente Jungkook se encontraba muy ocupado en su empresa y él pasaba bastante tiempo solo organizando todo lo referido a su casamiento. Estaba tan estresado que comía poco o directamente no comía porque no tenía ganas de cocinar sólo para él.
Jungkook lo miró culpable, desde hace semanas que no prestaba atención a su novio porque preparaba su primera gira mundial. Lo había descuidado y apenas lo veía.
—Hyung...— lo llamó para tomar su mano.
—Además— el menor lo miró, ¿había más? —Tiene un cuadro de estrés, por eso su cuerpo colapsó.
—Eso es mi culpa, hyung. Te he dejado solo con los preparativos de la boda.
—No, te culpes— respondió dándole un apretón en la mano. —Yo fui quien descuidó su salud. Además, tú estabas ocupado con tu gira.
—No me importa la gira, tu salud es más importante.
—Es bueno que piense así— volvió a hablar el médico. —Le daré una dieta calórica para que alcance su peso ideal y le recetaré completos dietarios de hierro para su anemia. Además, deberá evitar las situaciones de estrés.
—Si, doctor— respondió Jungkook tomando las recetas y la dieta que el doctor les daba.
—Eso será todo. El alta ya está firmada así que ya pueden ir a casa a descansar.
—Gracias, doctor.
El hombre asintió y salió de la habitación. Jungkook dejó a Jimin cambiándose para ir a terminar el papeleo necesario para irse. Minutos después volvió guardando su teléfono en el bolsillo del saco del traje que aún usaba de la fiesta del día anterior.
—Todo listo, hyung. Ya podemos irnos— comentó antes de tomar los zapatos del mayor y pasárselos. —Llamé a la empresa y me dieron unos días para estar contigo. ¿Qué te parece si vamos a casa a relajarnos, cocinamos algo rico y te ayudo a terminar los preparativos para la boda?
Jimin hizo una mueca que Jungkook no vio. ¿Cómo le diría que ya no quería casarse con él?
—Prefería no pensar en eso ahora— no sabe cómo se lo diría pero por ahora prefería evitar el tema. —Tal vez, podríamos buscar a Yeonjunnie y pasar la tarde con él— dijo pensando en su pequeño. Tenía la necesidad de disculparse con él, aún no creía que había olvidado a su hijo. Necesitaba abrazarlo.
—De acuerdo. Llamaré a Yoongi hyung— dijo tomando su mano para dejar la habitación juntos.
Al oir ese nombre, Jimin se perdió en sus pensamientos. A él también quería verlo y abrazarlo. Pero al ver la sonrisa dulce que le brindó Jungkook cuando subieron al auto se sintió mal. Sabía que cuando le dijera la verdad le rompería el corazón. No quería lastimarlo.
¿Pero cómo haría para evitar romperle el corazón a la única persona que había estado a su lado en los días más oscuros de su vida?
Seokjin y Yoongi se encontraban en la sala viendo una película en la televisión. O eso pretendían. El rapero miraba la pantalla pero su mente no estaba allí, no tenía ni la menor idea de que trataba. El modelo había notado lo perdido que estaba su acompañante por lo que tampoco podía concentrarse en la historia.
Taehyung estaba en su estudio y Yeonjun se había ido con Jungkook y Jimin luego de llegar del zoológico con su abuela como le habían prometido. Por lo que estaban solos y decidieron mirar una película juntos para pasar el rato. Pero estaban lejos de concentrarse en el film.
—Muy bien. Se acabó— dijo el mayor apagando la televisión.
—¿Qué ya terminó?— preguntó parpadeando confundido.
—No. No finjas que estabas viendo la película porque no era así. ¿Vas a decirme que sucede o seguirás pretendiendo que todo está bien?
—Yo... Lo que sucede es que...— suspiró sin saber que decir.
—¿Tiene que ver con Jimin?— Yoongi lo miró sorprendido. —No me mires así. Ví como reaccionaste cuando Jungkook llamó diciendo que venían con Jimin para buscar a Yeonjunnie. Yoongi, literalmente te escondiste en el baño— el menor se sintió un idiota, pensó que lo había disimulado bien. —¿Sucedió algo en el hospital ayer?— el rapero lo miró durante varios segundos dudando de si decirle la verdad o no. La mirada tranquila del modelo le dio la seguridad necesaria para desahogarse con él.
—Jimin recuperó su memoria— Seokjin lo miró sorprendido, no esperaba esa respuesta.
—Eso es increíble, Yoongi.
—Supongo, no lo sé.
—¿No lo sabes?
—Él...— dudó unos segundos. —Él me dijo que me ama— comentó bajando la mirada, no quería lastimar al mayor.
—¿Y tú? ¿Tú lo amas?
—Lo hago— respondió sin mirarlo. No podía mirarlo a la cara en ese momento.
—¿Y cuál es el problema?— Yoongi se giró sorprendido. —Si ambos se aman, no veo el problema.
—¿No estás enojado?
—No realmente— dijo encogiéndose de hombros. —Incluso antes de conocer a Jimin, me di cuenta que su amor había sido muy fuerte y puro. Todas las cosas que tú y Taehyung me contaron sobre la relación que tuvieron, me mostraron que ustedes habían tenido una relación muy intensa. No me sorprende que tú sigas queriéndolo y que él ahora que recuperó su memoria se de cuenta de sus sentimientos.
—No quiero lastimarte. Si lo hice lo siento.
—¿Sabes? En realidad, yo también estaba buscando el mejor momento para contarte lo que me he dado cuenta este último tiempo.
—¿A qué te refieres?
—Me di cuenta que lo que yo siento por ti no es lo que creía.
—¿No lo es?
—Yo estaba tan hundido en esa relación tan tóxica y abusiva que cuando apareciste tú y me sacaste de ella te ví como mi salvador. Me sentí como una de esas princesas que se casan con el primer príncipe que aparece a rescatarlas de la madrastra malvada. Estaba tan falto de cariño que cuando tú me mostraste un poco y me trataste dulcemente yo confundí mis sentimientos.
—¿Quieres decir que no sientes nada por mí?
—Si que lo hago. Te quiero y mucho, pero no en un sentido romántico.
—Yo también te quiero mucho, hyung— Seokjin le sonrió y Yoongi le devolvió el gesto sintiéndose un poco más aliviado. —Tenía tanto miedo de lastimarte. Después de todo lo que sufriste, no podía hacerlo.
—No lo haces, tranquilo— dijo tomando su mano. —¿Qué piensan hacer ahora?
—Él quiere que volvamos. Pero es difícil. Jungkook aún está en el medio— comentó dejándose caer sobre el sillón donde estaban. —Ellos iban a casarse en unas semanas, es obvio que Jungkook lo ama.
—¿Le dijo algo a él?
—Aún no se lo dice y me pidió que yo no diga nada.
—No sé cuáles sean los sentimientos de Jungkook pero Jimin debe decirle la verdad. Si no lo hace probablemente lo lastime más al ilusionarlo.
—No sé cuándo se lo dirá, pero estoy de acuerdo. Creo que merece saberlo. Lo que suceda con su relación depende exclusivamente de ellos.
—Yoongi— lo llamó luego se unos minutos en silencio. El menor lo miró prestándole atención, dándose cuenta que sus orejas estaban rojas, señal de que algo lo avergonzaba.
—¿Qué sucede?
—¿Recuerdas las salidas que he tenido con mi amigo?
—Si. ¿Qué con ellas?
—Eran citas.
—Ok...— respondió sin saber que decir. Seokjin bajó la mirada. —Perdón, hyung. Me sorprendiste por eso reacciono así. Pero, ¿te gusta?
—Si— asintió, casi en un susurro.
—¿Te trata bien?
—Lo hace— respondió sonriendo, recordando a su "amigo".
—Mientras te trate como te mereces y se quieran, me alegro por ti, hyung.
—Me trata tan bien que incluso estoy pensando vivir con él.
—¿Te quieres ir? ¿No te sientes cómodo aquí?
—No es eso, pero está es tu casa. No falta mucho para que mi bebé nazca y él merece su propia habitación. Además, me gustaría tener un poco más de privacidad y dárselas a ustedes.
—¿Quieres más privacidad para estar con tu novio misterioso?
—¡Hey! Respeta a tus mayores— dijo dándole un golpe en el hombro. Ambos comenzaron a reír.
—Creo que quien no va a estar contento es Yeonjun. Él estaba emocionado por el bebé.
—Lo sé. Pero podrá visitarlo cuando quiera.
—Hyung, me alegro que hayas encontrado a alguien que te haga feliz— le dijo mirándolo a los ojos.
—Gracias Yoongi— respondió dando un apretón en su pierna.
—Eso si— comenzó. —Si te hace algo se las verá conmigo— Seokjin sonrió.
—Tranquilo, que ya lo sabe.
Yoongi asintió y Seokjin recostó su cabeza sobre su hombro. Ambos se sentían tranquilos junto al otro.
Ahora tenían mucho más en claro sus sentimientos.
Y ser amigos, era la mejor decisión para ambos.
Aparezco (tarde) otra vez.
Menos mal que no saben donde vivo porque sino así estaría mi casa todas las semanas😅
Está semana no tuve tiempo🙃 Como disculpa... SE ARREGLARON LAS COSAS CON SEOKJIN, lo siento para los que les gustó el YoonJin pero recuerden que esto es Yoonmin 😶
La vez anterior dije que tengo varias ideas en mente para otras historias. Quiero contárselas muy brevemente para que ustedes me digan cuál o cuáles les gustaría leer. Obviamente las empezaría después de que termine esta historia (A la que no le queda mucho 😶).
Idea uno: Yoongi es un ser inmortal que hace siglos se enamoró de Jimin quien es mortal, por lo que espera cada reencarnación de Jimin para volver a enamorarlo.
Idea 2: Yoongi vuelve a Corea, después de años viviendo en el extranjero, por la boda de su hermano. En el avión conoce a un chico llamado Jimin y la atracción es tal que terminan teniendo sexo en el baño del avión. Al acercarse el día de la boda descubre que el chico es el prometido de su hermano.
Idea 3: omegaverse. Jimin es un Omega que es muy fan de un famoso modelo y por cuestiones de la vida termina viviendo con ese alfa llamado Yoongi dónde descubre que en realidad su ídolo es un idiota.
Idea 4: omegaverse. Yoongi lleva pensando casi toda su vida que su mejor amiga es su Omega destinada hasta que quien consideraba su hermanito vuelve a su vida para darla vuelta por completo.
Esas son las ideas muy resumidas obviamente porque tampoco voy a contarles todo lo que planeo para cada una ahora 😶
La idea es que comenten cual les gustaría leer, incluso si recién se suman a esta historia pueden comentar cual les gustaría.
Planeo en algún momento publicar todas pero obviamente voy a ir escribiéndolas de a una.
Nos vemos, en unos días 😉
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