24.
Yoongi observaba al chico lindo dormir. Luego de que le hicieron varios estudios tuvieron que darle un calmante porque estaba muy alterado, así que el rapero esperaba en la habitación que el médico que lo atendía le diera noticias sobre el estado del chico y de su bebé. Había pagado por todos los estudios y por una habitación privada para poder quitarse el cubrebocas tranquilo. Su hermano había ido por café para ambos y a llamar a su madre para contarle la situación.
Estaba concentrado en el rostro del modelo. Taehyung había quitado todo el maquillaje que se había corrido por el llanto con unas toallitas desmaquillantes que siempre llevaba consigo, permitiendo ver unas ojeras pronunciadas y un moretón en su ojo que casi desaparecía. Pero a pesar de ello, Yoongi no podía negar que el chico era hermoso. Tenía una piel suave que te invitaba a acariciarla, unos labios rellenos que a pesar de estar resecos te daban ganas de besar y facciones perfectas, era un de los hombres más lindos que había visto en su vida.
Unos golpes en la puerta lo hicieron ponerse de pie.
—Buenas noches— saludó el médico entrando a la habitación.
—Buenas noches— respondió en voz baja como si no quisiera despertar al modelo. El hombre de bata blanca lo miró de forma tosca por unos segundos, como acusándolo de algo.
—¿Usted es la pareja del muchacho?— preguntó serio.
—No, él es...— dudó unos segundos en responder porque a penas lo conocía pero tampoco podía decirlo y correr el riesgo de que lo echen por no ser cercano. —Soy su amigo.
—Bien...— el hombre suspiró y cambio su semblante mirando con pena al chico en la cama. —¿Conoce a su pareja?
—Lo conocí hoy en realidad, tuve que defenderlo de él porque lo estaba golpeando. El golpe en su vientre se lo dio ese tipo.
—Es lo que temía, los moretones no se los puede haber hecho solo— el médico suspiró con fuerza. —El cuerpo del chico tiene muchas lesiones y marcas de golpe. Por la coloración de las mismas me doy cuenta que los golpes no son algo reciente, es claro que viene sufriendo de estos tratos desde hace meses sino es años— Yoongi apretó sus puños con rabia. —No podemos ver el estado de sus huesos por su embarazo, los rayos X afectarían al feto, pero tengo sospechas que incluso el daño en él es tan grave como para dañar sus huesos.
—¿Qué?— preguntó observando al modelo sobre la cama.
—Las marcas en su cuerpo son preocupantes, por eso lo creo. Me dijo que viene de Busán, tengo un amigo trabajando allá, así que pediré su historial médico.
—Doctor...—comenzó nervioso. —¿Cómo está el bebé?
—Tuvo una pérdida por el golpe y podría haberlo perdido si no lo hubiesen traído rápido. Ahora está estable pero a partir de ahora será un embarazo de riego. El feto es muy pequeño para el tiempo que tiene, el señor Kim deberá alimentarse mejor, tomar vitaminas que le recetaré y evitar las situaciones de estrés.
—Me aseguraré de que así sea— respondió firme. No sabía porque lo hacia pero no permitiría que el chico y su bebé sufrieran un minuto más.
—Para eso se debe hacer la denuncia contra el abusador— dijo el hombre mirándolo de frente. —Yo debo informar esto en la policía.
—Perfecto, hágalo. Ese hombre debe estar tras las rejas.
—Necesito la aprobación del señor Kim antes. Él mismo debe hacer la denuncia. Por eso le digo esto. Muchas veces he visto chicas o chicos que se niegan a denunciar por miedo, Seokjin necesita de su apoyo para hacerlo.
—Lo tendrá. Cuando despierte hablaré con él.
—Perfecto. Dejémoslo descansar por hoy. Cualquier cosa que necesite puede llamar a una enfermera con el botón rojo que esta sobre la cabecera de la cama.
—Gracias, doctor— respondió con una reverencia. El hombre asintió y salió de la habitación.
Yoongi se sentó junto a la cama y sintió la necesidad de tomar la mano del chico y así lo hizo. Comenzó a acariciarla con delicadeza sin dejar de observar el rostro dormido de Jin. No sabía porque hacia lo hacia pero estaba seguro de que no lo dejaría sólo con todo esto.
*
El olor a hospital y la luz sobre su rostro lo hicieron abrir sus ojos con molestia. Miró a su alrededor encontrándose en una habitación completamente blanca y se dio cuenta que su brazo estaba conectado a un suero colgado a su lado.
—Despertaste, hyung— dijo Taehyung acercándose a la cama mientras guardaba su celular. —¿Cómo te sientes?
—Sediento— respondió con la voz rasposa.
—Claro— le acercó un vaso de agua que bebió enseguida sintiendo como calmaba el ardor de su garganta.
—Lo siento— dijo bajando la cabeza.
—¿Por qué te disculpas?
—Por tener que pasar la noche aquí conmigo y por causarte problemas a ti y a tu pareja.
—¿Mi pareja?— preguntó confundido.
—El chico que me ayudó, ¿no era tu novio?
—Oh, no. Yoongi es mi hermano mayor.
—Oh, lo siento— se sintió un tonto. —Yo creí que... lo siento.
—No te preocupes.
—Debiste haber dormido muy incomodo allí— comentó observando el feo sillón a un costado de la cama.
—Oh no. Mi hermano se quedó durante la noche. Ahora fue a tomar una ducha en casa, aunque creo que ya debe estar por volver.
—Ay no. Que vergüenza. No se como voy a agradecerle todo lo que esta haciendo por mi. Ayer escuché que incluso pagó todo.
—Se lo puedes agradecer aceptando la ayuda que te da.
—Yo no...
—Si, tú— lo detuvo. —No nos niegues eso, queremos ayudarte.
—Yo... muchas gracias— dijo empezando a llorar. Taehyung lo abrazó rápidamente. —Me siento tan sólo.
—No estás sólo, no más. Desde ahora me tienes a mi, a mi hermano e incluso mi madre se ofreció a ayudarte sin conocerte.
—Muchísimas gracias, de verdad— se permitió llorar unos minutos más entre los brazos del menor, tratando de descargar todo el dolor que sentía.
Yoongi ingresó en la habitación y se encontró con los dos chicos abrazados. Se quitó el cubrebocas y se acercó a la cama.
—Buenos días— saludó despacio como tratando de no asustarlo. Jin que no se había dado cuenta que alguien había entrado se giró hacia él. Se sorprendió al ver quien era.
—¿Agust D?— que hacía el famoso rapero en la habitación. Estaba demasiado cansado y su mente no estaba tranquila, sino estaría fangirleando por ver a uno de sus artistas favoritos allí.
—Había olvidado que no viste su rostro... Hyung, ¿recuerdas que te dije que mi hermano es alguien famoso?
—Si...— dijo sin terminar de entender. —Espera....¿Tu hermano es Agust D?— preguntó shockeado.
—Min Yoongi— saludó extendiendo su mano hacia él. Jin la tomó temeroso y asintió.
El teléfono de Taehyung comenzó a sonar por lo que salió para responder la llamada dejando a los mayores solos.
—Tae me contó que te quedaste durante la noche para cuidarme. Muchas gracias, yo no sé como pagarte toda la ayuda que me diste.
—Págamela aceptándola.
—Tae me dijo lo mismo— dijo sonriendo débilmente.
—Es que sería la mejor manera de agradecerme. Dejándote ayudar.
—¿Por qué haces esto? A penas nos conocemos.
—No lo sé, pero quiero hacerlo— dijo mirándolo a los ojos fijamente. Las mejillas del mayor se sonrojaron por la intensidad de la mirada.
—Gracias— dijo cohibido mirando hacia otro lado.
—Por nada— estuvo en silencio por unos segundos dudando de como decir lo que quería preguntarle. —Hay algo de lo que debemos hablar— dijo sentándose sobre el borde la cama. —El médico que te revisó vio lo moretones en tu cuerpo— Jin bajó la mirada, le daba vergüenza toda la situación. —Dijo que el mismo puede llamar a la policía pero necesita que tu hagas la denuncia. Ellos no harán nada si tú no denuncias— el mayor lo miró asustado. —Sé que tienes miedo pero te apoyaremos, no te dejaremos sólo. No dejaré que te haga daño— tomó su mano y la acarició con dulzura.
—Yo quiero hacerlo. Por mi bebé lo haré.
—Yo estaré a tu lado, si lo necesitas. Yo los protegeré.
—Gracias— lo abrazó con fuerza, permitiéndose llorar en su hombro. Hace mucho que no se sentía seguro en los brazos de alguien y así se sentía con Yoongi. El rapero lo envolvió con sus brazos y acarició su espalda por unos minutos. Tratando de demostrarle su apoyo. Prometió que los protegería y eso haría.
*
Dos policías estaban frente a ellos, uno tomaba nota y otro grababa lo que Seokjin decía, ambos con una expresión comprensiva en el rostro. Yoongi estaba sentado a su lado sosteniendo su mano como señal de apoyo.
—Estamos juntos desde hace 5 años. Yo me mudé a Busan para estudiar y allí nos conocimos. No tenía a nadie en la ciudad y él fue el primero en acercarse a mi. No tarde mucho en enamorarme de él. El primer año fue maravilloso, él era cariñoso y dulce conmigo. Pero cuando me mudé con él empezaron los problemas. Comenzó a controlarme, hizo que me alejara de los pocos amigos que había hecho— se tomó una pausa. —No me molestaba en ese momento, sólo pensé que era alguien celoso pero entonces comenzaron los gritos, quería que haga todo lo que él decía y no me dejaba salir de casa. Al principio le hacia caso para evitar problemas pero un día me canse y lo desobedecí, cuando volví a casa no me dijo nada y simplemente me golpeó en el estómago quitándome el aire— Yoongi apretó su mano como queriendo darle fuerzas para continuar. —Desde ese momento los golpes no se detuvieron, cada vez eran más seguidos, más fuertes y por las más mínimas cosas. Hasta que un día terminé en el hospital con un brazo roto y golpes en todo el cuerpo. Estuve inconsciente durante dos semanas. —Tanto Yoongi como los policías lo miraron impresionados. —Luego de eso, se sintió culpable, comenzó a tratarme mejor, me dejaba salir y no me golpeó por un tiempo. Pero no duró mucho, cuando nos mudamos aquí volvió a ponerse violento— contó al borde de las lágrimas. Yoongi se dio cuenta que se estaba aguantando las ganas de llorar y lo rodeó con su brazo.
—Señor Kim. Debemos hacerle algunas preguntas también— dijo el policía que grababa.
—Si, adelante.
—¿Sólo fueron abusos físicos del tipo golpes? Tenemos entendido que está en estado de gestación, ¿el bebé fue concebido en un acto consentido?— Yoongi apretó la mandíbula, no había pensado en ese posibilidad y tenía miedo de escuchar la respuesta.
—Fue consentido— dijo bajando la cabeza.
—¿El señor Lee sabe de su estado? ¿Sabía que esta embarazado cuando lo golpeó en el vientre?
—Si lo sabía.
—¿Cree que lo haya golpeado allí con intención de hacerle daño al bebé?
—Tal vez, no lo sé. No se mostró ni alegre ni enojado cuando se lo conté. No sé que piensa al respecto.
—Bien, eso será todo— dijo el policía guardando su libreta mientras el otro terminaba la grabación. —Su doctor nos dio su historial clínico tanto de Busan como el de aquí. Con las grabaciones que nos dieron del lugar del ataque tenemos pruebas suficientes.
—Muchas gracias— respondió Yoongi poniéndose de pie para hacer una reverencia hacia ellos y luego acompañarlos hacia la puerta.
Cuando volvió a entrar, estrechó al mayor entre sus brazos permitiéndole llorar todo lo que estuvo aguantando. Nuevamente le prometió que los protegería.
Era hora que Lee Jaehwan pagará por todo el daño que le hizo, incluso si eso significaba que el bebé en camino se quedará sin un padre.
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