Categoría: T

Nota: Una persona puede sufrir solo por darle lo mejor a otras sin esperar nada a cambio.

"Todavía no me termina de convencer... " Lyra le hablaba a Liena, apoyadas en la baranda de la escalera. "¿Tú qué crees, Liena?"

Liena observaba desde el segundo piso como el hombre de cabello blanco se levantaba del suelo manteniendo su plato en equilibrio. "No... No lo sé... Pero el parece saber mucho sobre nosotros." Dudó ella.

"Eso es extraño. ¿Cómo sabe tanto de nosotros, y nosotros no sabemos nada de él?" Lyra se sujeto de la baranda de madera echando su cuerpo para atrás dejando caer su cabello hasta el piso. "Demasiado extraño." Enfatizó.

Para llamar a una persona de la familia, primero tuvieron que haber momentos en que ambas partes compartian algo; así como tiempo juntos, sentimientos, dolor, o aprecio. ¿Será una acosador? Es la única respuesta que formuló Lyra en su cabeza. Un acosador que puede estar espiandonos todos los días y por eso sabe cosas que a ni una persona aparte de nuestras madres sabian.

Digamos que Lyra es la perfección de responsabilidad, una chica hermosa, alta, responsable, amable, nunca le faltaría el respeto a un conocido o desconocido... Así es como es ella. Para Lyra, llegar y preguntar: ¿En verdad, quién eres? ¿Cómo sabes tanto de nosotros? ¿Es cierto que todas ellas son tus mujeres? Demasiadas preguntas que le causan vergüenza tan sólo por pensar.

"Necesito confianza." Dijo Lyra en susurro, reincorporandose a una posición más normal.

"¿Dijiste algo?" Antes de Lyra pudiera decir algo, la puerta a sus espalda se comenzó a abrir.

Loan sostenía las dos bolsas negras de basura que había hecho con Lincoln. "E-esto... " Loan vio a Liena y a Lyra, estas tenían la boca semiabierta.

"L-Loan, tu c-cabello." Menciono Lyra, provocando que Loan se alterará un poco.

"¿N-no te g-gusta?" Pregunto Loan soltando las dos bolsas de basura para poder taparse la cabeza.

"¡No, al contrario!" Lyra parpadeo al ver como Loan intentaba esconderse atras de la puerta de su habitación. Liena echo un vistazo, aun que Loan no supiera sobre ello, Liena ya conocía los malos hábitos de Loan en dejar un desastre en el piso de su habitación, lo menos que podia hacer por ella era limpiar solo un poco en las noches. Para sorpresa de Liena, toda la habitación parecía recién remodelada, como si un tornado de limpieza hubiera pasaso por allí.

"Lo que intento decir es que te ves bien." El comentario de Lyra hizo que Loan se mostrara más por la puerta.

"¿En... En serio?" La chica que antes se veía siempre despeinada, ahora tenia el pelo liso, sedoso y brillante, con un aroma muy dulce. ¿Acaso un estilista... ? No, Lincoln trabajo una vez de barbero, y digamos que se le da muy bien hacer destacar más el cabello de la mujeres que el de los hombres.

"¡Totalmente!" Lyra sonrío por lograr ver a Loan un poco más tranquila. "¿Cierto, Liena? ¿Liena?" Liena volvió en sí por el llamado de Lyra.

"Oh... Uh..." Liena comenzó a mirar a todos lados hasta que su mirada se posó en Loan. "¡Wow, te ves realmente bonita Loan! ¿Lo hicistes tú?" Liena dejo escapar una sonrisa de lo más sincera.

La chica solo sentía pequeños choques de nerviosismo pero no tanto como antes. "Ohh... N-no, fue mi Papá q-quien me hizo e-este corte." Dijo ella mientras frotaba su mano derecha con el codo izquierdo de la camisa.

Ambas; Lyra como Liena notaban la fluidez en el habla de Loan, lo que para ellas era escuchar un disco que se repetía a cada segundo que avanzaba se volvió ahora una dulce voz imposible de olvidar.

"¿Papá... ? ¡Espera¡ ¿¡Cuando dices tu papá, te refieres a él!?" Lyra dijo un poco conmocionada. Lyra tenia muchas cosas que decir pero aún asi, paso por su cabeza una gran revelación. "¿Hablaste con él, en tu habitación?" Loan asintió a la pregunta de Lyra mientras Liena se quedaba viendo la situación. "¿Paso el rato contigo sin que lo conociéramos del todo? ¿Y ya lo consideras tu padre... ?" Loan volvió a asentir.

Lyra se quedo perplaja. Miro a Liena y esta al momento se dio cuenta del porque. Loan nunca dejo que nadie entrara a su habitación, tampoco hablaba con desconocidos o personas que la puedan incomodar. La mayoría de los integrantes de nuestra familia trataban de evitarla para que no se alterará mucho. Lori decidió que lo mejor era que tuviera una habitación para ella sola. Aun que Lyra también tiene habitación propia, prefiera pasarla en el cuarto de su madre y hermano ya que Luna es muy propensa a dejarse llevar en los ensayos de la banda. Si no tiene cuidado con ella podria hasta dormirse en el suelo de la habitación pudiendo coger un resfriado.

Loan nunca considero necesario que en el día de la limpieza tuvieran que entrar y sacar su ropa sucia, parece asqueroso pero Loan mantiene un aseo con sus prendas incluso sin usarlas siempre las mantiene limpias... Otra historia es su habitación, ese lugar parece el campo minado que Lincoln le tocaba pasar en el pasillo para llegar al otro extremo e ir al baño. ¿Entonces... Esa Loan que conocían estaba cambiando? Para Lyra parece un poco forzado pensar eso, nadie cambia de un día para el otro, mucho menos alguien como Loan quien le tomaría muchos meses en lograr cambiar su forma de ser.

"¿En serio? Tal vez le pueda pedir que haga algo con mio." Dijo Liena. Lyra solo pudo susirar.

"¿Quieres que te ayudemos?" Lyra ofreció su ayuda tomando una de las dos bolsa de basura que Loan había dejado en el pasillo al frente de la entrada de su cuarto. Liena cogió la otra y con ayuda de Loan, las tres salieron fuera de la casa para depositar la basura en su respectivo lugar.

"Gracias..." Dijo Loan un poco feliz. Le dieron una sonrisa en respuesta y volvieron a adentrarse a la casa Loud.

( . . . )

"Esta frío~" Se quejo Lincoln al probar su desayuno.

En el momento de introducir el ultimo bocado en su boca siente que algo comienza a caminar por su espalda. Lincoln no logro masticar bien, un pedazo de comida se le había quedado atorado en la garganta.

"Suspiro... " Lincoln escupió el trozo de comida por los aires por el repentino susto que había recibido.

Su remitente había sido Lucy Loud, una mujer de apariencia oscura y siniestra, pero que en realidad es demasiado despreocupado cuando Lincoln no se encuentra cerca. Era como si fingiera ser una buena chica cerca suyo, y actuar como una gótica total cuando Lincoln no estaba en su campo de visión, seguro gano muchos puntos por eso.

"Si no moría asfixiado, seguro hubiera muerto de un ataque al corazón." Dijo el hombre mientras recuperaba el aliento.

"Pensaba que ya te habias acostumbrado." Dijo la mujer de vestimenta oscura.

"Lo hice... Solamente que fuisteis muy oportuna esta vez." Lincoln se levanto limpiando la mesa. Lucy se mantenía detrás de Lincoln siguiendolo hasta el lavaplatos despertando la curiosidad del hombre. "¿Se puede saber qué quieres, Dama de la oscuridad?" Lincoln se giro quedando en frente de un rostro muy pálido pero a la vez hermoso.

Lucy lo tira del cuello de su camisa llevando los labios de Lincoln hacia sus labios negros. Lincoln abrió los ojos con sorpresa para después quejarse del dolor.

"¡Ay!" Lucy mordió el labio inferior de Lincoln, haciéndole un pequeño corte. "Demonios... Se me olvido por completo coma era tu forma de expresar amor." Lincoln dejo que Lucy siguiera con el beso mientras un hielo de sangre caía por su barbilla. "¿Teeminastes?" Lucy se separa un poco.

"Gracias por la comida." Dijo Lucy con total excitación.

"Un día de estos me vas a provocar una hemorragia." Lincoln tomo una servilleta y se la paso por la boca quitando todo rastro que le diera a sus hermanas de que Lucy estuvo aquí. "Nada se puede hacer cuando conocen tus hábitos." Pensó Lincoln, recordando la ultimas que fue descubierto con mordiscos en su cuello, hombros y boca, por sus hermanas mientras tenia relaciones con Lucy.

Cuando Lincoln volvió a ver, Lucy ya no estaba. "Odio cuando hace eso." Dio dos pasos hacia adelante para despues ser frenado.

"¿Qué le hicisteis a mi Mamá?" Pregunto Lupa con una mirada de pocos amigos.

"Lupa... Yo no le hice hecho nada." Dijo Lincoln tratando de librarse de lo que sea de lo que le estén culpando.

"¿Entonces por que mi Mamá salio corriendo con la cara roja?" Pregunto la hija de Lucy metiendo sis manos en los bolsillos de su chamarra.

"Oh, eso" Pensó Lincoln con cara de poker. "Esto... Digamos que ella se lo busco." Lincoln le dio un sonrisa nerviosa.

Lupa suspiro. "Bueno, no importa... " La chica de cabello blanco al igual que lo tiene su padre, paso por un costado de él, dirigiendoce al refrigerador. "Al menos pude ver otra vez una sonrisa en el rostro de Mamá." Lupa sacó una soda de lima y comenzó a beberla. "Ah... " Se detuvo. "Y que quede claro, lo de ayer en la noche no cuenta como pasar tiempo conmigo así que ya me tocara." Lupa lo señalo con un dedo. Dando media vuelta busco el sofá y se abalanzó sobre el mueble. "Mierda, esta mejor el otro sofá en la casa de Papá." Hablo con la cabeza entre los cojines disminuyendo el sonido de su voz.

Lincoln tomo aire, estaban pasando muchas cosas el día de hoy, cosas que lo hacían sentirse bien. "Este el calor que da la familia ¿Eh?" Camino hasta la puerta trasera saliendo al patio trasero.

"Te tardaste, viejo." Dijo el chico sumiso en una llave de lucha realizada por Lacy. "¡Ahh me rindo!" Grito Lemy. Lacy lo soltó y posó como victoriosa. "Sentía que mis huesos se iban a salir se lugar." Lemy comenzó a acariciar su brazo izquierdo. "Por suerte soy diestro."

Lacy corrió hasta donde se encontraba parado el hombre. Aun que sus intenciones eran volverlo a derribar solo sintió a lo que llaman: Acción reacción. La chica cayó sentada al suelo.

"Jaja, esta vez no." Dijo Lincoln ayudándole a levantarse.

"¡Fuerte!" Menciono Lacy con ojos con forma de estrella.

"¿Y bien que hacemos?" Pregunto el adulto.

Liby alzó la mano. "Debes de ganarle a Lacy en una pelea para poder cambiar de juego." Al parecer Liby estaba de árbitro en la pelea se hace poco.

Al hombre le provoco nostalgia al ver a estos tres hijos suyos jugar juntos. Sentía sus recuerdos de la infancia de cuando Lynn lo obligaba a jugar con ella a toda clases se deportes. Lacy era su mejor representación, energética, siempre animada, como si si fuente de energía fueran los deportes. Así era Lynn Loud, y así se refleja su hija Lacy Loud. A pesar de que Lynn era experta en los deportes, su hija Lacy resulto ser una genio en ellos. Según lo que Lynn le a contado a Lincoln, su hija Lacy no a perdido ni un solo juego en el que a participado, eso es sorprendente. No había nadie capaz de igualar su talento, en ocasiones Lynn se sentia celosa de su hija. Pero sus celos se tranquilizaban al saber que ella tiene un premio que nunca alcanzara; Lincoln. Aún asi, Lincoln es un premio compartido entre todas sus hermanas.

"Tsk... Debí idear un mejor plan para vencerla." Lemy Loud, no hacía falta pensar a quién le recordaba. Es como un Lincoln más pequeño pero con gustos un poco desubicados. Claro, al ser el segundo hijo de Luna y que quedara a mayor cuidado de esta, era muy claro como iba a terminar. Un chico amante del Rock como su madre, sin miedo de hacer cosas estúpidas para conseguir su objetivo. Una pequeña fabrica de planes, Lincoln también lo era, su niñez se regía por planes complejos para cosas simples, como formas divertidas de realizar una tarea. Lincoln recordó aquella vez que se disfrazó de ardilla, bueno... Un mal recuerdo. El chico parecía ser de lo más inquieto que había en la casa, pero su puesto era usurpado por Leia Loud... Un demonio en el cuerpo de una niña.

"¡Escucha, si no le ganas a Lacy, nos tocara que jugar a las luchas toda la tarde!" Lemy corto los pensamientos de Lincoln.

"¡No perderé!" Exclamó Lacy en posición de lucha.

"Creo que estoy varias ligas fuera de tu alcance." Dijo el hombre. Caminaron al centro del patio donde Liby los estaba esperando con las manos hacia el cielo. "Me contendre." Aseguró Lincoln.

La chica corrió lo más que pudo tratando de derribar a Lincoln desde los pies. Este se sorprendió al sentir un gran golpe en sus piernas. "Este niña es fuerte. Sentí que Lynn cogió un bate e hizo jonround con mis piernas." Pensó el hombre mientras se protegía de los golpes de Lacy con sus gran manos.

[...] Despues de estar más de 1/2 hora golpeando las palmas de Lincoln, la chica de cabello descolorido se dio por vencida por sentirse increiblemente cansada.

"Me dio calambre." Aseguro ella al dejar sus brazos flojos. Era como estar pegando golpes sin parar a un gran saco de arena. "Yo... Perdí." Lacy cayó de rodillas en el césped.

"Vamos, que tal si lo dejamos como un empate. Mira, dejaste mis manos completamente rojas por tus golpes." Lincoln mostró sus manos totalmente rojas. "Eres muy fuerte, Lacy."

"Oh, increible viejo. ¿Cómo pudiste aguantar tanto?" Pregunto Lemy debajo de la sombra de un árbol.

"Digamos que tengo experiencia en tratar este tipo de situaciones." Si, lo era. Todos estos años y Lincoln ya sabia como tratar con las distintas actitudes de sus hermanas.

Por nada era capaz de hacer de hermano mayor los días en los que Lori prefería dejarlo a cargo a él y no a Leni por motivos muy obvios. De por sí, era el mayor desde Lucy hasta Lily, en ocasiones también era el mayor para Leni hasta Lynn; aunque estas últimas no eran muy fáciles de persuadir con todo eso de que ellas eran las mayores y no necesitaban que alguien menor que ellas le dieran ordenes. Bueno, Leni al menos fue algo considerada dejando que Lincoln le diera ordenes, por más complicadas que estas parecieran, Lincoln siempre se involucraba a ayudar inconscientemente. Ser un hermano presta su mano a todo en la casa Loud no era nada agotador para el chico, habiendoce acostumbrado al ruido en el pasillo afuera de su habitación, las constantes discuciones en la mesa de los pequeños, los incontables experimentos de Lisa que salían mal cada dos por tres. Cuidar a Lily él solo sin la ayuda de sus padres, tener que escuchar las malos chistes de Luan y la fuerte música de Luna, o tener que recibir golpes con pelotas de baloncesto, fútbol, tenis, etc. En cambio, los poemas de su hermana Lucy relataban su alma, no había otro momento más a gusto en el que tu hermana gótica entra en un día lluvioso y nublado por la ventilación a tu habitación solo para relatar sus nuevos poemas que escribió gracias a la inspiración de un día tan triste. Aunque al albino en realidad le encantaban los días de lluvia mientras escucha el caer de las gotas de lluvia en su ventana y tejado; sonidos muy relajantes, más la intervención de los poemas de su hermana, hacían de esos días los más cálmados en la casa Loud.

También estaba los juegos de Rol que realizaba con sus hermanas gemelas. En ocasiones era un dragon escupe barro, y otras era una especie de caballero de brillante armadura que debía rescatar a la hermosa damisela en apuros derrotando al temible monstruo de la suciedad. Su infancia no fue mas que pura experiencia al tener que vivir en una casa donde cada integrante piensa de manera muy distinta a otro. Para llegar a un acuerdo entre todos, hacían elección por medio de votación, sí por algún motivo, un hermano no accede a dar su votó, los más interesados harían lo que sea para conseguir su votó.

Pero los momentos que en verdad quiso poder haberlos disfrutado mucho más, fue el tiempo que perdió al no estar con su hermanita Lily. La vida de Lincoln había dado una vuelta muy drástica por la repentina revelación de Lori. ¿Quién es capaz de volverse padre a tan temprana edad? Al parecer Lincoln si fue capaz de hacerlo. Es cierto que entro a una etapa de negación, pero duro muy poco. De que sirve negar algo que es verdad. Lori esta embarazada de él, y no iba a pensar en una idea tan estupida como el aborto.

[Años atrás]

"Si no te gusta... Podría hacerme un-" Lori no pudo terminar su frase. Lincoln la había tomado de las manos con fuerza.

El rostro de Lincoln era claramente de negación y frustración. Nunca espero ser padre tan potro, tampoco esperaba que su primer hijo lo tuviera con una de sus hermanas.

"¡Obviamente esto esta mal!" Dijo él. "¡Esto no debía de haber paso... Pero ya esta hecho, Lori!"

"¡Pero puedo abor-!"

"¡Nada de eso!" Grito Lincoln mientras sostenía el rostro de Lori. Ella se sorprendió, no quería arruinar la relación que había creado con su hermano, es muy especial para ella. Y si por algo como dar a luz a su hijo haría que la odiara, preferiría dejar de existir antes de que su hermano la comenzara a odiar.

Lori sujeto las manos de Lincoln que se posaban en sus mejillas ahora húmedas por las lagrimas de Lori. "No hagas nada estúpido, ¿sí?" Lincoln pego su frente con la de Lori. "Me importa una mierda mi futuro ahora... Pero me importa el tuyo y el de él." Menciono Lincoln bajando la mirada. La barriga de Lori era más notable. Aún así, no tenia la confianza de ir al hospital para que le hagan varios estudios y saber si tendría un niño ocuna niña. Sus padres se habían ofrecido a acompañarla pero ella desistió la oferta. No quería hacer nada, no hasta que obtenga la acotación de si hermano.

"¿E-en serio, darías tu futuro por el nuestro?" El chico asintió provocando que Lori sollozara aún más. "¡En verdad te amo!" Dijo ella con voz cortada.

Lincoln sabia estaba mal, todo lo que estaba haciendo esta mal muy mal. A pesar de saber las consexuencias de los actos que tomara, dejo su suerte al destino. Ahora debía centrarse en ignorar por completo su alrededor y prestarle atención a su nueva familia. Despues de todo, Lori accedió a ir al hospital, su alegria fue contagiosa para toda la familia al saber que tendría una niña. En la sala de espera todos se notaban felices, pero el albino no podía dejar de pensar en los problemas que traería esta relación a largo plazo.

"¿Cómo la llamaras?" Pregunto el albino colocándose a un lado de la camilla donde se enco traba acostada Lori con solo una bata de paciente.

"Pensaba en seguir con la tradición de la familia." Lori se inclino un poco, su barriga estaba un poco más grande.

"¿Un nombre con L?" Lincoln meditó un poco. "Ya pensastes en algunos, ¿cierto?" La rubia sonrío.

"¿Por qué no mejor lo discutimos juntos cuando lleguemos a casa?" Lori tomo la mano de Lincoln que estaba cerca de la camilla.

"¡O-ok!" Lincoln se había sonrojado desviando la mirada. Lori sonrío nuevamente.

[Presente]

"Es solo... Expereiencia." Dijo el hombre con el la mirada baja.

Mientras tanto las madres veían por la ventana al hombre jugar con tres de sus hijos. Lynn estaba feliz de que su hija conociera por fin la derrota, parecía orgullosa por eso.

La comediante no se esperaba ver a su querida hija poder jugar sin inconvenientes. El hombre era muy cuidadoso con ella, no hacía muchos movimientos bruscos para no maltratarla con ese aparato que tenia en la boca. "Se ve muy incómodo." Pensó el albino mientras veía a Liby.

Luna, en cambio, se sentía aliviado de que alguien pudiera derrotar a Lacy y cambiaran de juego. Su hijo nunca se veía bien despues de cada sesión de lucha pero a él le encantaba ya que en ocasiones Leia llamaba a sus "amigas" que en realidad parecían ser mayor que ella por varios años. Entre esas amigas, había una que había captado la atención del pequeño metalero. Aún no sabia su nombre pero se veía como de su misma edad, usando los juegos de lucha, intentaba inprecionarla pero siempre quedaba en ridículo, incluso de verse como un perdedor, a la chica le causaba gracia el ver todos sus intentos en ganarle a Lacy.

"Oigan eso me recuerda. ¿Lily ya termino su curso universitario?" Pregunto Lana quien peina el cabello rubio de su hija Lizy.

Como sabe Lincoln. La distancia que había creado con su hermanita menor fue tanto que incluso él fue incapaz de ver su entrada a la primaria, trato de ver su graduacion en la preparatoria y no hubo suerte. Esperaba poder ver su ingreso a la universidad pero tampoco se pudo. Lincoln se había ido a vivir a un departamento con su hermana Lori, bajo la excusa de que cuidara de su hermana hasta que diera a luz. Los padres aceptaron fácilmente, no había ningún problema en ello, solo son hermanos.

Pero despues del nacimiento de la pequeña bebé Loan, Lincoln fue incapaz de volver a casa. Decidió cuidar de Loan mientras Lori aplicaba para varios trabajos de medio tiempo. Dejando a la suerte decidir.

Consiguió un trabajo como atender el servicio al cliente en un empresa. El horario era fiable pero el sueldo no tanto, apesar de eso. Era muy feliz al podee co partir tiempo con su hija, y poder enseñarle nuevas cosas a Lincoln en la noche. De cómo fue posible que Lincoln haya embarazado a Lori, es un misterio para él ya que no logra recordar nada de haberse acostado con su hermana antes. Todo parecía ir muy bien con la vida que llevaba Lincoln junto a Lori. Solamente llevaban casi dos años... Pero...

Los señores Loud fueron hospitalizados por un accidente de tránsito ocasionado por un drogadicto al volante de una camioneta 4x4.

Lori fue la primera en regresar a la casa Loud para poder visitar a Sr. Lynn y a Rita. Lincoln se quedo un día más en el departamento, compartiendo tiempo con Loan. Esta había hecho su primer dibujo, en el trozo de papel estaba pintado él y su hermana Lori, arriba de ellos decía: Papá y Mamá, con un corazón en el medio. Lincoln no aguanto la angustia que todo esto le estaba provocando.

Lincoln regreso a la casa Loud acompañado de Loan. Toco la puerta varias veces esperando una respuesta rápida, para su sorpresa lo fue, pero quien abrió la puerta fue Luan y no se veía muy contenta al verlo. Se adentró a la casa solo para encontrarse a Lori sentada en el sofá con las manos tapando su rostro, el resto de las hermanas estaban a su alrededor con los brazos cruzados. Al ver la presencia de su hermano, todas clavaron su mirada en su ser. El observo como Lynn se acercaba a él dando le un golpe en la cara.

El chico cayó al suelo asustando a Loan. Lincoln abrió los ojos con sorpresa, y antes de decir algo fue callado por Lisa diciendo algo que nunca esperaba que sucediera.

"Lincoln Loud... ¿Tu eres el padre de Loan, cierto?" Se podía escuchar de fondo como Lori pedia disculpas.

*Las actualizaciones pueden tardar más de lo usual por la entrada a clases... A quién engaño, las continuaré hasta haciendo examenes*

*Se pone a escribir otro capítulo*