Yugyeom subió con Eunwoo al elevador, estaba demasiado cansado aunque habían avanzado bastante en el tema de la custodia en la audiencia.

Yeridia se había vuelto loca, lo que no la estaba ayudando para nada, el río corrió a su favor a pesar de admitido que era gay, le había dicho a Donghae que él quería la custodia, para él, no para su padre no para Yeridia, la quería para él porque se lo merecía no era el mejor padre del mundo pero era mejor que ella.

Eunwoo salió primero y se quedó quieto.

—¡Appa!— se hecho a correr bajo la atenta mirada del pelinegro—¡Appa!— dijo llorando.

Jungkook que estaba frente a su departamento se limpio las lágrimas— ¡Eunwoo!— tomó al niño en brazos— perdón— le dió besos en todo su rostro, mejillas y frente— perdón Eunwoo, perdóname.

Le rogó abrazándolo fuerte mientras lloraba, Yugyeom lo rodeó con sus brazos.

—Perdón Yug...

—Shu...— Yugyeom susurró dándole un beso en la frente y otro en los labios— solo no vuelvas a abandonarnos.

Jungkook lloró más aferrándose a ellos.

—Ya no puedo, no sin ustedes, no puedo estar sin ustedes, los amo, te amo Yugyeom— le dijo escondiendo su rostro en su cuello.

—También te amo.

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