Los novios salieron de la iglesia siendo festejados por sus invitados, todos arrojando pétalos blancos a su paso.

El camino estaba decorado con una alfombra roja que llegaba hasta la limusina, la cual sería el vehículo que llevaría a la familia hasta el salón de fiestas.

Yeonjun iba de la mano de ambos padres, sonriendo como nunca antes lo había hecho, sus ojitos llorosos no podían expresar más que felicidad.

Antes de llegar al salón de fiestas, se detuvieron en un parque, Jungkook no se quejó cuando el omega pidió que el auto se detenga, tampoco cuando se bajó y Yeonjun lo siguió.

Taehyung ya había avisado con anterioridad al chófer sobre este destino fugaz, no era casualidad que el beta pasara por aquel baldío, pero hermoso parque.

El alfa se bajó junto a sus dos seres amados, viéndolos ir uno hacia los juegos que estaban en el centro del parque, y otro a un kiosco que estaba cubierto con plantas enredaderas, que eran decoradas por sus hermosas flores naturales, que recién habían florecido.

—¿Sabes? —comenzó el omega. El alfa lo miró sonriente, mientras se metía al kiosco, siguiendo a su ahora esposo. —Este parque es muy importante para mí. —el alfa se sorprendió, nunca le había dicho algo al respecto.

—¿Por qué? —preguntó mientras, a pasos lentos, se acercaba al castaño.

Yeonjun se había desviado hacia los juegos, subiéndose en el pequeño castillo por medio de la pared de sogas y bajando por la resbaladilla. Todo a la vista protectora de sus padres.

—Aquí fue donde tomé una gran decisión para mi vida. —el omega sintió sus ojos arder al recordar el pasado.

—¿Qué decisión? —lo abrazó por la espalda, mientras el mayor estaba con las manos sobre el barandal, viendo hacia afuera, donde jugaba su hijo.

—Vivir.

Todo el cuerpo del alfa se paralizó al escuchar lo que esa dulce voz de ese omega, que siempre le sonreía de forma calidad, estaba diciendo justo ahora.

—Amor... —el movimiento de dedos que hizo Taehyung sobre sus manos, le impidió continuar.

—No es como si hubiera intentado morir aquí. —aclaró. —En realidad, fue más como... Me di cuenta de que no estaba viviendo durante los años pasados antes de ese día. —refiriéndose a cuando encontró el parque. —Era como estar deambulando por el mundo sin sentido, sin emociones, sin nada. —se giró, viendo a su alfa. —Te traje para mostrarle a mi yo pasado, aquel que deje llorando aquí...solo —dijo con lástima. —, que en el futuro será muy feliz, que no debe rendirse y que debe volver a elegir vivir. —sus labios sonreían, pero sus ojos lagrimeaban. —Le traje a mis dos vidas para que se dé cuenta de que quizá, estaba solo, pero que si decide seguir caminando, encontrará personas espectaculares en el camino que harán que todo sea más bello y hermoso. —el alfa sentía su corazón oprimido en cada frase.

—¿Sabes la maravillosa persona que eres? —su voz suave adormecía las preocupaciones del omega.

—El Taehyung que abandone aquí, siempre necesitó de un abrazo que le hiciera saber que todo mejoraría, pero fui cobarde y decidí ocultarlo aquí, en dónde nadie lo vería sufrir ni le ofrecería un abrazo para calmar su tormenta interna, deje mis miedos y debilidades aquí.

El alfa no podía más, la sola idea de que su precioso ser de luz haya sufrido tanto al grado de dejar todo lo que le impedía continuar en este parque, era algo que su corazón no podía soportar.

El alfa se apegó a Taehyung y sus brazos terminaron por capturar al omega, que sonrió al sentirse amado.

—Puedes traerlo de vuelta —sus palabras estaban dichas con sinceridad. —, al Taehyung que dejaste, si está herido, estudiaré medicina y curaré sus heridas; si está roto, buscaré cada pieza suya y lo reconstruiré; si está triste, haré lo que sea para traerle felicidad; y si necesita ser abrazado, yo lo haré. Lo abrazaré por el resto de mi vida y le haré saber que nunca estará solo de nuevo.

El alfa hablaba desde el corazón, mientras el omega sonreía.

Ya había llorado mucho a lo largo de su vida, ahora quería sonreír, tanto, que sus mejillas dolían.

—Papi. —el pequeño llegó y Jungkook rápidamente se giró para verlo.

—¿Qué pasa, amor? —Taehyung se inclinó para recibir lo que su pequeño tenía para darle.

—Papi, ya no soy el ounico que te dará flores. —sonrió mientras extendía un pequeño ramito de flores silvestres que recogió del jardín que tenía el parque.

El omega las aceptó y sonrió, dejando a relucir sus dientes delanteros ante el recuerdo de una escena similar hace ya muchos años.

—Te amo mucho, mi primer príncipe azul. —el alfita miró a su papá alfa que sonreía orgulloso de él.

—Papá, gracias por catargate con papi. —su lengua seguía sufriendo problemas con algunas palabras, pero los ejercicios iban funcionando.

—Gracias a ti, cachorro. —el menor no entendió, sonrió al ser alzado por su padre alfa. —Gracias por encontrarme en el museo. —las mejillas del cachorro fueron besadas por el pelinegro. —Vamos, pensarán que hemos huido si no llegamos a la fiesta pronto.

El alfa tomó la mano del omega con la mano libre que tenía y regresaron al auto, yendo en rumbo a la fiesta.

Los recién casados por fin llegaron a la fiesta, Taehyung fue raptado por Irene para retocar su maquillaje y cambiar de atuendo. El alfa se dirigió al cuarto para también cambiarse, pues la ropa para la boda era una y para la fiesta sería otra.

El salón estaba completamente decorado por candelabros, las mesas eran cubiertas por un blanco mantel, pero las servilletas café crema eran las protagonistas de la decoración, aunque los centros de mesa no se quedaban atrás.

Las luces eran tenues, dándole un ambiente sofisticado y elegante al lugar, los invitados habían llegado y tomado sus respectivos asientos, disfrutando de una relajante música Jazz en vivo mientras esperan la entrada de los nuevos esposos.

Un pasillo elevado estaba dividiendo el salón, las mesas estaban colocadas a su alrededor, todo con la intención de que al llegar los recién casados, caminen por aquella plataforma como si de una pasarela se tratase.

Taehyung ya se encontraba en su respectivo cuarto con el cuerpo completamente electrizado, la sangre le cosquilleaba de solo imaginar ponerse la prenda que estaba frente a él. Irene lo había dejado solo después de terminar con su maquillaje y le dio la instrucción que Jungkook le encomendó.

"Hoy este será tu traje, Jungkook te lo da como regalo de bodas".

Taehyung no quería ni abrir aquel bolso, no sabía cómo sería el traje, pero de solo saber que su alfa lo había diseñado y confeccionado exclusivamente para que él use este día tan especial, era suficiente para que su cabeza se desconfigure.

—Kookie, seguro es hermoso... —su mano, temblorosa, al fin se atrevió a deslizar el zíper del bolso que mantenía oculto el traje. —No... —Fue incapaz de formular más palabras.

Era más hermoso de lo que había imaginado.

Jungkook salió primero y subió al inicio de la plataforma, todos lo veían y le sonreían, era la primera vez que lo veían tan sonriente, incluso sus socios se sorprendían al ver que podía sonreír de tal forma.

Nada ni nadie podía lograr que deje de sonreír.

—Demos un fuerte aplauso a Kim Taehyung, el esposo. —Jungkook sintió su espalda caliente de solo imaginar a su omega con su diseño.

Lentamente, se giró y pudo confirmar algo; su imaginación era deficiente.

El omega era lo más hermoso y brillante de este y de cualquier otro mundo.

El negro de sus ojos hacía un inusual contraste con el blanco de su traje, un pantalón de tela fina que cubría sus zapatos bellamente lustrados. Su camisa blanca era cubierta completamente por el sacó que, como si fuera un vestido, se deslizaba una enorme cola por su espalda.

Taehyung parecía estar usando un común esmoquin, pero desde la perspectiva a sus espaldas, era como si estuviera usando un vestido, pues la cola del saco era tan larga y frondosa que simulaba la cola de un vestido de novia, además, Jungkook no podía dejar de lado los diamantes.

El saco tenía pedrería en toda su expansión, haciendo que pequeños destellos se reflejen mientras el omega caminaba hasta quedar a un lado del alfa, que no podía hacer nada, simplemente observar su diseño siendo usado por el único dueño.

—¿Cómo me veo? —fue lo primero que pregunto Taehyung al estar a su lado.

—El traje se ve más hermoso ahora que lo traes puesto. —confesó, mientras ofrecía su brazo para que Taehyung se sujete de él.

—Yo creo que siempre se ve hermoso. —el alfa negó.

—Ni en mis mejores momentos podría imaginar semejante paisaje, amor, te ves tan encantador, tan precioso, tan...tan brillante. —La mirada de Jungkook parecía hipnotizada.

—Brillo porque le pusiste muchos brillitos al saco. —dijo con una sonrisa acusatoria hacia el menor.

—No, tu brillo es incomparable con la de esos diamantes, a pesar de ser reales, sigues siendo más deslumbrante tú. —Taehyung sonrió al sentirse tan amado, pero la sonrisa se le borró al profundizar las palabras del alfa.

—¿Reales? —el alfa asintió. —¿So-on re-reales? —volvió a asentir sin darle mucha importancia al asunto.

Taehyung sintió cómo el peso en sus hombros aumento ante esa verdad. Él pensó que los diamantes eran de utilería, nunca se le cruzó por la cabeza, que su alfa pondría diamantes reales en la tela.

—No usaría falsos, no cuando se trata de un traje para ti, si así de opacos lucen estos que son reales, si fueran falsos ni siquiera se notarían. —Taehyung suspiró.

Hoy no le diría nada, ya después lo regañaría por hacer algo tan lindo, pero arriesgado.

—¡¿Qué tanto hablan?! —gritó Namjoon. —¡YA CAMINEN O HAGAN ALGO, TENGO HAMBRE! —los, ahora esposos, sonrieron ante el reclamo de su amigo y siguiendo sus órdenes, se prepararon para iniciar la caminata por la plataforma.

Jungkook se veía hermoso, él optó por usar un traje blanco, con un moño negro en el cuello y un pañuelo del mismo color en el bolsillo del saco, todo con la intención de combinar con su omega, pero él no quería brillar por eso no usó pedrería, él solo quería estar a un lado de su sol, aquel que brilla más que nada.

—Un aplauso para la pareja que hoy, la Diosa luna bendice para unir sus vidas y que todos nosotros deseamos vivan en plena felicidad. —después de lo dicho por el maestro de ceremonia, la pareja comenzó a caminar por la plataforma y por supuesto que todos comenzaron a gritar de felicidad.

La pareja se quedó al final de la plataforma, saludando y sonriendo a todos sus invitados, pero era inevitable que sus miradas se desvíen para encontrarse y que el saludo sea una sonrisa tímida.

Sus corazones bombeaban al mismo tiempo, tan coordinados que ninguno podía distinguir si lo que sentían era de sí mismo o de su esposo.

La plataforma fue desmantelada durante el primer tiempo de comida, todos estaban ocupados comiendo que ni cuenta se dieron de que en su lugar, había una pista de baile.

En el centro de la pista, estaban ilustradas las iniciales "J&T", el trabajo del staff era tan rápido y sigiloso que el cambio fue notado por la mayoría, cuando ya se había colocado música más movida.

Taehyung estaba sentado platicando con Suho, Yoongi y Jin sobre lo que debía hacer en su noche de bodas, mientras los alfas y la alfa estaban en el área de niños cuidando de sus hijos o sobrinos.

El ambiente estaba relajado, pero de pronto llegó Irene y comenzó a jalar a Taehyung del brazo para llevarlo a sentar en una silla que estaba al centro de la pista, el omega no entendía nada, pero se dejó hacer.

La música comenzó y él no entendía qué estaba pasando, hasta que los amigos de su esposo empezaron a formarse en el centro de la pista, alfas, betas y omegas, todos estaban entrando a la pista, formando un tipo de capa protectora.

—¡Y damos inicio al show del alfa para su omega! —Taehyung no podía creer lo que habían anunciado.

¿Jungkook iba a hacerle un show?

Y mientras buscaba la respuesta en su cabeza, recordó lo que había hablado con su alfa hace unos meses atrás, cuando estaban viendo películas en familia.

FLASHBACK

"Qué ridículo el alfa" comentó Jungkook.

"No es ridículo, es romántico" contradijo Taehyung y Yeonjun se ponía del lado de su papi omega con un asentimiento de cabeza.

"Es ridículo, no sabe ni bailar y le hace un baile sorpresa, su omega seguro se sintió avergonzada" el alfa podía ver las expresiones incómodas de la omega.

"Creo que depende de cada pareja, en mi caso, lo vería muy romántico, además, si es divertido, vale la pena la experiencia" el alfa lo miró fijamente, con una duda en su cabeza.

"¿Te haría feliz si yo bailara para ti en nuestra boda?" Taehyung sonrió y asintió.

"Soy feliz con cada demostración de amor que me das" confesó.

El alfa se quedó con la respuesta positiva de Taehyung ante la idea de él bailando en su boda. Tenía que empezar a buscar un coreógrafo profesional.

Fin del Flashback

—Esto no puede ser verdad...

El alfa salió a la luz cuando todos se fueron separando del nido de humanos que habían creado. Taehyung estaba sorprendido por las habilidades de baile de su esposo, él creía que el alfa no sabía bailar, pero bailaba como si fuera un profesional y cuando rompió los botones de su camisa, no pudo evitar sentirse posesivo.

Después de un baile sensual, empezó a sonar una música más amistosa y todos comenzaron a bailar, incluso sus sobrinos e hijo estaban incluidos en la coreografía, el baile era entre divertido y genial. La última canción ya estaba llegando a su fin, antes de que terminara, el alfa dio un par de giros para quedar frente a su omega y extendió la mano.

—¿Bailas? —preguntó Jungkook y por supuesto que su esposo no se negó, acepto la invitación y tomó la mano del menor para levantarse de la silla y ser guiado al centro de la pista, que ya estaba despejada para solo ellos.

La canción "The one" de Kodaline comenzó y Taehyung sintió su corazón casi salirse de su pecho, era la canción que habían elegido como su canción de pareja.

El alfa rodeó la cintura del omega con un brazo, mientras que el castaño se sujetaba con una mano en el hombro del pelinegro y, las manos restantes se sujetaban entre sí.

El balanceo de cuerpos era armonioso, sus corazones conectados no podían entenderse mejor de lo que lo hacían, el alfa no podía evitar mirar los ojos de su omega, los cuales se mantenían fijos a los suyos.

Las sonrisas de ambos eran imborrables, estaban felices de que por fin eran esposos. Ante la Diosa Luna, ellos ya eran el uno para el otro y no había poder humano que los separe.

Los brazos del alfa cambiaron de posición, ahora ambos estaban en la cintura de Taehyung, que se sujetaba del cuello del alfa y recostaba la cabeza sobre su hombro, respirando ese olor a uvas que tanto ama.

La música siguió hasta que los últimos versos fueron expresados y cuando la siguiente canción inicio, el maestro de ceremonia invitó a los presentes a incluirse en el baile, pues el primer baile de los esposos ya se había realizado.

Las parejas comenzaron a llegar a la pista y rodear a la pareja recién casada. Bailando y destilando amor cada una a su manera.

El tercer y último tiempo de comida estaba siendo disfrutado por los invitados, amagando los manjares que había dado la pareja.

Los novios estaban sentados en la mesa donde sus amigos más cercanos estaban ubicados, todos estaban conversando y riendo de anécdotas sobre Jungkook, avergonzando al alfa y causando las risas amorosas del omega.

—Ya vuelvo, voy al baño. —le susurró Taehyung a Jungkook, el alfa intentó ponerse de pie para acompañarlo.

Su lobo no quería dejar solo al omega, pero Taehyung se negó, aludiendo a que solo iría al baño y que nada malo pasaría, así que muy en contra de su voluntad, el alfa terminó quedándose sentado.

Yeonjun y el resto de los infantes, estaban rendidos y dormidos en los cuartos que eran especialmente para eso, siendo cuidados por niñeras de confianza y gente del abuelo Bae, ya que todos esos niños eran sus nietos y bisnietos.

Jungkook vio su reloj y notó que Taehyung ya había tardado mucho, no quería parecer un obsesionado o adicto a su omega, pero podía sentir miedo en Taehyung, eso le preocupó y se levantó decidido a ir al baño, pero se quedó quieto cuando todas las luces del lugar se apagaron.

El alfa sintió cómo ese sentimiento en su omega se expandía y estaba por desesperarse porque no veía nada, todo estaba oscuro y no sabía ni hacia dónde dirigirse.

El miedo emergió desde sus pies hasta llegar a su cabeza, había escuchado que alguien había ido a visitar a Bogum a la cárcel y eso solo logro que miles de ideas crucen su cabeza.

Antes de que Jungkook pudiera actuar, una luz, dirigida al centro de la pista, iluminó al castaño que estaba sentado en una silla alta con un micrófono en su mano.

—Mi alfa preparo muchos regalos para mí y este es el que yo preparé para él. —la voz de Taehyung calmó en instantes los disturbios del alfa, que volvió a tomar asiento. —Amor, espero te guste. —sus ojos se cruzaron y ambos sonrieron.

Al parecer, lo que Jungkook sentía era el miedo y los nervios de Taehyung por la sorpresa.

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"En este momento...Te veo".

"Siempre llega como yo lo creía".

La suave voz de Taehyung resonó en todo el salón, Jungkook sintió cómo su sistema nervioso reaccionaba ante la voz de su omega, era la primera vez que lo escuchaba cantar.

"Cuándo la lluvia se detiene... Tú me iluminas".

"Tu luz es lo único que me cubre del frío".

Jungkook prestaba atención a cada palabra, la letra de la canción seguramente fue elegida cuidadosamente por su esposo.

"La luna en una noche de verano... Los susurros de las estrellas, cantan como árboles de navidad para nosotros ".

Taehyung se levantó de la silla y comenzó a caminar hacia su alfa, que solo podía mirar cómo se acercaba cada vez más a él, el pelinegro pensó que fue así como Taehyung se sintió cuando le pidió matrimonio.

"Así que te diré... Un millón de pequeñas cosas que... Nunca has conocido".

"Todo se va enredando por dentro".

En este momento Jungkook odiaba haber puesto la mesa tan lejos de la pista, Taehyung ya habría llegado si tan solo no hubiera decidido esta organización de mesas.

"Y te diré... Un millón de pequeñas razones... Por las cuales me enamoro de tus ojo".

El castaño ya estaba frente a Jungkook, sus amigos hicieron espacio para que el omega se pueda sentar en la silla que estaba a un lado de la del menor.

"Solo quiero estar dónde tú estás".

Taehyung acarició el rostro de Jungkook, que cerró los ojos disfrutando del delicado toque y de la susurrante voz que lo envolvía en calma. El omega sonrió y Jungkook solo pudo pensar que lo que decía la letra de la canción aplicaba para ambos; él solo quería estar junto a Taehyung por el resto de su vida.

"Es algo tan extraño de hacer".

El alfa solo se quedó viendo fijamente a Taehyung, sin apartar la vista de él, no queriendo perderse de ninguna expresión, visualizando cada detalle de su rostro y deseando poder besar cada lunar que decoraba a ese encantador ser.

"A veces no puedo entenderte".

—Solo preguntame y desnudaré mi alma ante ti. —respondió el alfa, causando una sonrisa cómplice por parte de su omega.

"Pero siempre me trae de regreso a dónde tú estás ".

—Porque es tu lugar, amor. —Taehyung asintió a lo dicho por su alfa, haciéndolo sonreír.

Jungkook estaba seguro de que enamorarse más de Taehyung, era ya algo imposible de impedir y lo confirmaba cuando le regala esa radiante sonrisa rectangular.

"¿Sabías de esto?".

El menor lo miró con duda, mientras entrelazaba su mano con la del mayor.

"Hay un lado de ti, que solo yo conozco".

—¿Y a quién más le mostraría mi lado enamorado? Si solo tú lograste hacerme sentir así. —la mirada enamorada de Jungkook era notoria a simple vista y podía jurar que jamás dirigirá esa mirada a alguien más, Taehyung era el único que hacía latir su corazón al punto de que su pecho podría romperse.

"Eres como una primera nevada que llegó en una noche de verano".

Jungkook levantó la mano del castaño y le dejó un suave beso.

"Un milagro, un sorprendente momento que nadie vio venir... Eso eres".

—Y tú eres el sol que llegó para darle calidez a mi vida. —la confianza y seguridad con la que fueron dichas esas palabras, no le dejaban espacio a las dudas.

"Y algún día... Si la brisa del viento trae a tu corazón de regreso volando".

—¿Qué harás? —Jungkook miró al omega con una ceja levantada, retándolo a decir algo erróneo.

"Te estaré esperando".

Y después de esa frase, el alfa terminó besando al omega, dando por finalizada la canción. Los dos se separaron del beso y juntaron sus frentes, mientras que sus invitados estaban aplaudiendo y llorando de lo conmovidos que estaban.

—Te amo Jeon Jungkook. —sonrió frente a su alfa.

—Te amo, Jeon Taehyung. —confesó una vez más mientras permitía que una lágrima de felicidad se deslice por su rostro, su brillante sonrisa siendo muestra de la desbordante alegría que sentía.

Un amor envidiable y juzgado, pero único e incomparable.

Holiwilis 💜

¿Qué tal el capítulo?

Espero hayan disfrutado de la fiesta, amé escribirla. Siempre es Jungkook el que sorprende, así que ahora le toco que Tae le dé un lindo regalo <3

¡Que vivan los esposos!

Espero hayan escuchado las músicas que se mencionaron en la historia, son realmente hermosas y tardé mucho buscando alguna canción que sea significativa para las escenas y la historia de amor entre estos dos. Razón por la que me demoré tanto.

Gracias por leer, en serio aprecio mucho que le den de su tiempo a esta cosita 💕

Recuerden que las amo lunitas preciosas 💜💜💜

*Mali fuera*