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15

Taehyung estaba tranquilamente sentado en su sala, viendo una película con su cachorro cuando el timbre de la puerta sonó. Se levantó y abrió, sus ojos siendo deleitados por la presencia del alfa pelinegro.

—¿Qué haces aquí a estas horas? —ya eran las ocho de la noche.

—Te traje esto. —el alfa sacó un ramo de flores, en su mayoría blancas, pero existían otras lilas y amarillas, también rositas.

—¿Me traes flores a esta hora? —a pesar de su pregunta, le sonrió y aceptó las flores, el aroma era exquisito, pero no más que el aroma a uvas. —¿Por qué hay varios tipos de flores? —preguntó al notar que todas las flores eran diferentes, ninguna se repetía.

—Oh, es que investigué los significados al regalar cada una porque quería darte un ramo que represente mi intención y sentir hacia ti, pero había muchos tipos de flores y cada una con su significado. —el omega miraba expectante la confesión del alfa. —No pude decidir, así que anoté los nombres de las flores que definían mi sentir y las compré para hacerlas un ramo, sé que no se ve muy bien porque tiene muchos tipos y colores, pero es que... Ese ramo expresa todo lo que pienso, quiero y me gusta de ti.

Y Taehyung sintió que sus lágrimas querían salir, su corazón latía con fuerza, cayendo una vez más por el alfa. Jungkook no era para nada antirromántico, Jin le había mentido.

—Apenas ayer me pediste permiso para cortejarme y ahora haces algo tan lindo. —Jungkook sintió a su lobo orgulloso al sentir la felicidad del omega. —¿Quieres pasar?, estamos viendo una película. —el alfa negó, eso decepcionó un poco al mayor.

—Vine a invitarte a una cita, sé que sales tarde del trabajo, así que no quería usar un horario no disponible para ti. —Taehyung lo pensó mucho antes de negarse.

—No puedo dejar solo a Yeonjun. —el alfa sonrió, eso no era un obstáculo.

—Yeonjun también está invitado. —El omega no podía creer que existiera un alfa así, los que había conocido, siempre huían al saber de la existencia del cachorro. —Es más, si mi cachorro no va, no hay cita. —ese comentario hizo reír al mayor, por varios motivos.

—Está bien, deja que me cambie de ropa y vamos. Pasa, Yeonjun está en la sala. —ingresó y el alfa entró detrás de él.

—Ya te ves demasiado hermoso a decir verdad. —la lengua del alfa estaba deseosa de decir aquello, la verdad es que se había sentido frustrado por no haberlo dicho en la sesión de fotos que le hizo Irene al omega.

—Aun diciendo eso, me voy a cambiar. Cuida de Yeonjun, por favor. —Taehyung no iba a salir con el alfa vestido en pijama.

No cuando el alfa trae puesto un pantalón de vestir bien planchado, una playera de CK, un suéter de algodón grisaseo que se notaba costoso y un sacó negro enorme que le llegaba por debajo de las rodillas.

El alfa gritaba "elegancia" por donde lo mirase. El omega no iba a salir en pijama y menos con este frío que hasta hacía titiritear sus dientes.

—Ok, ok, yo esperaré junto a Yeonjun. —el alfa entró a la sala y un cachorro gritó de felicidad al verlo en su casa.

El omega primero fue a dejar el ramo de flores en un jarrón con agua y después se dirigió a la habitación para poder buscar un atuendo adecuado y conveniente para una cita a las ocho de la noche. Inconscientemente, terminó poniéndose un conjunto que combinaba con el del alfa.

Taehyung salió de la habitación y con los nervios activos, llegó a la sala para mostrarse frente al alfa, que lo había halagado cuando estaba en pijama, razón por la que no debía estar nervioso de ser rechazado, pero Taehyung no podía quitarse ese sentimiento.

—Mejor ya no salgamos. —el pensamiento de que se veía muy mal con ese conjunto, se implantó en su cabeza.

—¿Por qué? —preguntó con miedo a la respuesta.

—La Luna sentirá envidia al verte. —y el cosquilleo en su corazón y vientre bajo, no podía calmarse. —Si sales así, tu brillo opacará el suyo. —la risa fue inevitable para Taehyung.

Su lobo escondía el rostro entre sus patas, se sentía avergonzado, pero feliz.

—No creo que sea tan así. —se acercó y empezó a ponerle un suéter negro a Yeonjun, haciendo que él también combine.

—Yeonjun —el menor miró a su papá, esperando lo que tiene por decir. —, ¿Cómo se ve tu papi? —apuntó hacia Taehyung.

El cachorro miró a su papá omega y luego a su papá alfa, sabía que debía decir algo bonito, pero no sabía qué era exactamente. Solo tiene 4 años, Yeonjun no es un experto en halagos.

—Papi palece un sapo. —Taehyung comenzó a reírse, pero Jungkook no, él sabía que su cachorro no iba a defraudarlo.

—¿Por qué? —el mayor se limpió la lágrima que había salido por tanto reír y prestó atención a lo que diría su hijo.

—Poque papi es wonito y poque, poque... Papi es un plincipe. —Jungkook acarició la cabecita del menor y miró al omega.

—Los niños siempre perciben bien la esencia de las personas, si él dice que eres un príncipe, es porque lo eres.

—Un príncipe pobre. —complementó el mayor.

—Si quieres fortuna, yo te ayudaré a tenerla. —ambos se miraron, Jungkook con seriedad y Taehyung con incredulidad. —No bromeo.

—No me intentes comprar con tu fortuna. —se sintió levemente ofendido, aunque el comentario fue dicho en tono bromista.

—¿Cuándo dije que te daría la mía? Te ayudaré a que construyas tu propia fortuna. —aclaró el menor. —Mi omega no tiene por qué pedirme nada a mí, aunque si lo hace, yo no diría que no. —el lobo del castaño se removió al escuchar "mi omega".

Un título que añoraba sea suyo.

Jungkook sonrió y luego se levantó del sofá, el omega no sabía qué responder ante eso, así que se quedó sentado a un lado de su hijo, poniéndole unas botas afelpadas que impedirían el frío.

—¿Y a dónde nos llevarás? —preguntó el omega, recibiendo una mirada del alfa.

—Investigué y de todas las ideas, una cena en la playa me gustó más, pero al no poder ir a la playa, opté por ir a un parque. —el omega estaba encantado con la personalidad del alfa.

Era muy tierno, contrario a lo que pensaba al inicio.

—¿Siempre investigas? —el alfa lo miró dudoso. —Lo de las flores también, dijiste que investigaste sus significados.

—Oh, sí, no soy un experto en esto. Jin y Yoongi me dieron consejos, pero no los quiero tener de referencia —no al ver cómo son con sus alfas. —, así que investigué por mi cuenta y resulta que hay muchas formas de cortejar a un omega. Elegí la que más se acoplaba a lo que quería hacer por ti.

—¿Investigaste todo eso ayer?

—Si algo me interesa, invierto todo mi tiempo sí es posible. —el alfa era muy bueno con las palabras, en cada frase dicha, lograba que el omega se impresione más de él.

—Bueno, ya salgamos. —no sabía qué responder a esas frases tan lindas, él no era para nada bueno en ser romántico.

—Papá... —Yeonjun, que estaba en los brazos de su padre omega, extendió sus brazos hacia el alfa.

—Yeonjun, deja que papi te cargue. —un omega celoso impidió que el alfa abrace a su cachorro. —Vamos, yo lo llevaré. —el menor asintió y caminó delante de Taehyung para abrir la puerta.

El alfa los llevaría a un parque cercano, aquel donde Yeonjun solía jugar con Soobin, así que el uso de su auto no sería necesario.

—Entonces, ¿cuántas citas quieres que tengamos antes de formalizar? —el alfa fue directo al grano.

—No sé... ¿Cuántas quieres tú? —contraatacó el mayor.

—¿Lo decimos al mismo tiempo? —propuso el alfa y el omega aceptó.

—¡Diez! —dijo el alfa.

—¡Cinco! —dijo el omega.

Ambos se miraron sorprendidos ante sus respuestas, Taehyung se sentía un fácil por haber dicho cinco.

—Iba a decir cinco también, pero creí que lo verías muy pronto, quedémonos con cinco, estoy feliz si son cinco. —era verdad, el alfa iba a decir cinco.

—Me parece bien. —respondió, dejando de lado su pensamiento pesimista.

Ambos mayores estaban sentados en las bancas del parque, Yeonjun estaba en las piernas del omega, comiendo una galleta que el alfa le dio, las migajas estaban por toda su cara, pareciera que estaba haciendo una mascarilla de galletas.

—Yeonjun, ya te manchaste toda la cara. —mencionó el pelinegro, mientras limpiaba las mejillas del pequeño con la manga de su saco.

—Te dije que no le dieras la galleta. —regañó el omega.

—No puedo decirle que no, es mi cachorro. —esa simple frase, causó muchas cosas en el interior del omega.

Escuchar al alfa decir que Yeonjun era su cachorro, había sido la mejor forma de comunicarle que estaba bien emparejándose con él, que era un omega con un lazo roto y un cachorro.

—¿No te molesta que tenga a Yeonjun? —el alfa lo miró, la serenidad en su rostro ya le daba la respuesta.

—No —pero de igual forma, la comunicó verbalmente. —, de hecho, es la razón por la que te conocí. —golpeó suavemente la nariz rojiza del infante con su dedo índice. —¿Cómo podría molestarme? —sonrió de forma que sus dientes delanteros resaltaban.

—¿Yo te gusto? —Taehyung no estaba para la técnica de ensayo y error, él quería las cosas claras desde el inicio.

No quería volver a confiar y salir herido.

—Me gustas. —admitió el alfa.

—¿Por qué? —cuestionó el castaño, queriendo saber qué era lo que le gustaba de él al menor.

—¿A qué te refieres con por qué? —las cejas del menor se levantaron al no encontrar sentido en esa pregunta.

—¿Por qué yo? —preguntó realmente no sabiendo la respuesta. —Convives con omegas mucho más hermosos, ricos, de buena familia y sin hijos, ¿por qué te gusta alguien como yo?

—¿Alguien como tú? —el omega asintió.

—Un omega feo, que es padre soltero, con una cuenta de banco que no da ni para vivir un mes y con un lazo roto. —dijo sus inseguridades.

Jungkook suspiró, analizando y escogiendo las palabras correctas para transmitir bien sus pensamientos.

—¿Yo te gusto? —el omega lo miró sorprendido.

Jungkook había sido honesto sobre sus sentimientos, él también debía serlo si quería que el alfa le diga todo con sinceridad.

—Sí, me gustas.

—Me hace feliz saberlo, pero ahora eso me hace cuestionarme, ¿por qué al omega más hermoso que he conocido le gustaría yo, que soy un alfa tan aburrido, amargado, egocéntrico y desinteresado? —los ojos del omega se expandieron.

—No di-

—¿Por qué el omega que tiene un cachorro encantador me permitiría la oportunidad de formar parte de su preciosa familia?

—Eso no-

—¿Por qué ese omega que detesta la idea de que le dé mi fortuna, me da la oportunidad de compartirla con él?

—Jung-

—¿Por qué ese omega se daría una segunda oportunidad con un pésimo alfa como yo?

—No eres un pésimo alfa, si lo fueras no te daría ninguna oportunidad. —por fin se le permitió hablar.

—Así es, todo de ti me interesa, no eres feo, créeme, eres hermoso y me atrevo a decir que pareces venir de otro planeta, porque la tierra nunca podría crear a un ser con tu belleza. —Taehyung sentía un nudo en su garganta. —La única cosa que no me gusta de ti, es que no te conoces.

—¿Cómo no voy a- —el alfa lo miró y Taehyung juraba haber visto la galaxia en sus ojos.

—Si te conocieras, sabrías por qué no puedo querer a nadie que no seas tú, llevó 26 años soltero, y tal como dices, he visto y conocido muchas personas hermosas, pero ninguna logro causar en mí, lo que tú sí.

—Es que yo sé que no es como piensas, yo...

—Si te pudiera mostrar todo lo que veo en ti, no dudaría en hacerlo. Amaría mostrarle al mundo lo hermoso que eres, pero creo que el mundo ya se percataba de eso, yo era el ciego. —aludiendo que él se negaba a que el omega era hermoso y que le atraía. Jungkook posó una de sus manos sobre las del omega. —Te lo dije antes, incluso la luna envidia tu brillo, ¿por qué aceptas compartirlo conmigo?

—¿No quieres un café? —preguntó el omega, cortando la conversación. Jungkook sonrió y asintió.

—Iré por ello. —se levantó para ir hacia el dispensador de café que estaba en el centro del parque.

—No, yo quiero ir, ¿Podrías sostener a Yeonjun mientras regreso? —el alfa no estaba del todo feliz con dejar ir solo a Taehyung.

—Si es así, vamos los tres. —el omega negó y se levantó. Colocó a su hijo en la banca, junto al menor.

—Ya vuelvo, te traeré un café. No me sigas. —el mayor se apresuró a ir hacia el dispensador de café.

Jungkook se quedó viendo cómo la silueta del omega desaparecía de su vista.

Taehyung llegó al dispensador de café, pero se desvió hacia los baños, entró a un cubículo y cerró la puerta. Bajó la tapa del escusado y se sentó sobre de ella.

Las lágrimas comenzaron a deslizarse en sus mejillas, sus manos se mantenían sobre de sus ojos, los cuales presionaba con fuerza.

Las palabras del alfa habían sido tan lindas y románticas, él siempre deseó escuchar aquello, lo veía en películas y cuentos cuando era pequeño, soñaba con encontrar a un alfa que lo tratara como trataban al protagonista de esas películas románticas.

Ahora que estaba viviéndolo, no sabía cómo reaccionar. Su corazón estaba tan lleno que bombeaba al doble de lo normal, su estómago no paraba de sentir maripositas revolotear.

Y su lobo estaba ya encantado con el alfa.

Su llanto no era porque estuviera triste, al contrario, estaba muy feliz. Su corazón no pudo soportar tanto y por eso huyó. Seguramente el pelinegro pensará que es un omega extraño, pero no quería llorar frente a él.

Una vez que se tranquilizó, salió del cubículo, se lavó las manos y humedeció su rostro para eliminar los rastros de sus lágrimas. Por fin logró salir del baño e ir por los cafés. Había hecho esperar por mucho tiempo al alfa, que obedeció su orden de no seguirlo.

Mientras el segundo vaso estaba siendo servido, recordó las maravillas que le había dicho el menor y una sonrisa surcó sus labios.

—El papá de Soobin es un mentiroso. —reveló al recordar que Jin le había dicho que no se enojara con Jungkook, ya que no era bueno en el romance.

Jungkook vio al omega regresar con un café en cada mano. Taehyung se sentó a su lado y asentó los vasos en la pequeña mesita que estaba a un lado de la banca.

—¿Y Yeonjun? —preguntó al no ver a su cachorro donde lo había dejado.

El alfa sonrió y se giró un poco, dejando en evidencia su enorme estómago, que no era realmente su estómago. Jaló un poco el cuello de su suave y cálido suéter para dejarle ver al omega dónde estaba el cachorro.

—Aquí. —Taehyung vio por dentro del suéter y ahí estaba su cachorro, abrazado al alfa con sus ojitos cerrados y la mejilla pegada al pecho del pelinegro. —Tenía mucho frío y cuando lo dejé dentro de mi suéter, se quedó dormido. —el omega moría de ternura.

—Vamos a casa —se levantó el omega y el alfa le siguió, sosteniendo a Yeonjun con su mano derecha para evitar que se cayera. —Sí, hace mucho frío hoy. —confesó el mayor y Jungkook lo miró con una sonrisa en los labios. —¿Qué? —la risa nerviosa que soltó, fue prueba de que Jungkook no se equivocaba en lo que pensaba.

—¿Quieres que te cubra con mi saco? —extendió su brazo izquierdo dejando ver la gran capacidad de espacio que este tenía.

—Sí. —El omega sorprendió al alfa al acercarse y abrazarlo, dejando a su cachorro en medio de ese abrazo.

Jungkook tenía la respiración en pausa, no pensó que el castaño fuera a aceptar su ofrecimiento. Felizmente, rodeó al omega con su mano libre.

Taehyung rodeaba el cuerpo del alfa con ambas manos y el bulto que era Yeonjun solo hacía que el abrazo sea más acogedor de lo que ya era.

—Tres... —dijo en un suspiro de paz.

—¿Mmm? —emitió mientras su nariz se rozaba por los sedosos cabellos del mayor.

—Tres citas más y formalizamos. —el alfa sonrió al escuchar aquello.

—Si eso causa un abrazo, mejor nos abrazamos tres veces más y ya. —Taehyung se carcajeó al escuchar al alfa.

—Papi apasta a Yeyu. —se quejó el menor al despertar por la risa de su progenitor.

—Vamos, ya es hora de volver. —el omega se despegó del alfa y agarro los vasos de café nuevamente.

Jungkook sostuvo al pequeño cuerpo dentro de su suéter con ambas manos, protegiéndolo de no caer al suelo. Taehyung caminaba a su lado, se deshizo de su vaso de café para poder rodear sus manos alrededor del brazo del pelinegro.

Marcándolo con su aroma, algo que no pudo ser ignorado por el alfa, pero no sé quejó, ser marcado por el omega, era un orgullo como alfa.

Solo faltaban tres citas más y ya podría llamarlo "su omega".

Holiwilis ♡

¿Qué tal este capítulo?

Espero les haya gustado tanto como yo disfrute escribirlo <3

Perdón por la confusión, estaba editando y por error le di en publicar, no había visto sus comentarios porque estaba editando el capítulo :(

Gracias por leer, en verdad me hace feliz saber que mis adoraciones e historias kookv son también amadas.

Las amo bellas lunitas, nos leemos en el siguiente capítulo 💞

*Mali fuera*

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