Por suerte, unas horas mas tarde, Hitoshi y Katsuki pudieron volver al campamento, tenian planeado volver todos a sus casas, por esos dos, pero los chicos no quisieron, fueron directo a la laguna, al final todos fueron junto a ellos. Los días después de eso fueron buenos, nadie peleo y nadie salio lastimado, comieron y disfrutaron de todo. Hablaron y gritaron, realmente fue todo muy divertido.

Ahora mismo, estaban todos en los autos, de vuelta a sus casas, de noche, como cuando se vinieron. Todos dormian en el auto de los Bakugo, a excepción de ____ y claramente Masaru. Iban en silencio, con música de fondo. ____ que esta vez estaba al medio, miraba al frente, al auto de Shota, iban cerquita por lo que alcanzaba a ver como el peinado raro de su tío, moviéndose suponiendo que al ritmo de alguna canción.

—____, pequeña. —Susurro Masaru, haciendo que la niña le mirara, haciendo que reaccionara pues también se quedaba dormida.

—¿Qué pasa? —Preguntó, Masaru rio a lo bajo y suspiro. ____ miro asustada, no sabia que pasaba, ya pensaba incluso que a su papá le estaba haciendo mal el viaje, no dormir tal vez.

—Yo seré tu papá siempre, lo sabes, ¿verdad?

—Claro, ¿por qué preguntas?

—Solo aclaro, mi papá me crió el solo, pero ni siquiera era mi padre de sangre, el me adopto cuando mi madre fallecio. Fue un golpe duro cuando llego alguien mas diciéndome que era mi papá. Fue difícil aceptarlo, pero lo hice, lo termine aceptando.

—Ah... Si, los abuelos, pero lo sé, entiendo.

—Digo yo porque me costo llamarlo papá, sentia que tiraba lejos todo el esfuerzo de mi padre, pero bueno, terminaron siendo pareja, y mi padre me dejo bien clarito en una conversación que así no era, que él siempre seria mi padre. Y bueno, yo hago lo mismo ahora, te dejo en claro que no importa como lo llames a él, si papá o Shota, los dos somos tus padres. Yo soy tu padre.

—¿Qué? ¿Por qué todo esto de repente?

—Mi niña, te conozco como la palma de mi mano, bien que hubieras saltado encima esa vez, llamandolo papá, pero no lo hiciste, ¿Por qué?

—Ah... Sabes, a veces pienso que los adultos pueden leer la mente, siempre que pienso algo cerca de mamá se da la vuelta para verme y mirarme raro.

—Si, creeme, de niño también lo hacia, mis padres también lo hacían. Al final, terminaba pensando en canciones de cuna cuando estaba cerca de ellos.

—Con razón te sabes hartas.

—Si, jaja. Pero bueno, solo queria dejarte en claro que no importa como llames a tu papá, siempre seras mi niña.

[.....]

Ya todos iban llegando, pararon un poco en la casa de Shota. Pues Nemuri e Hizashi tenian que ir a buscar sus cosas, además de los Bakugo podrían ver como va su hijo con las notas. Estaban todos entrando y acomodándose, y para ser mas exactos, fueron al patio, ya que la casa era chiquita, pero tenia un gran patio y bien bonito. Todos se acomodaron en las sillas, Shota tenia un gran jardín con hartas flores, Mitsuki estaba encantada.

Por otra parte, ____ estaba sentada en el living, en una silla que estaba ahí, observaba en silencio la casa, seguía completamente igual. Todo esto le traía malos y buenos recuerdos, los dos a la vez, haciéndola sentir una sensación rara.

—Aprovechando que estas aquí... —Shota hablo, desde la entrada a la cocina, ____ le miro en silencio, así quedaron unos segundos. Hasta que Shota suspiro entre los nervios y le apuntó hacia la escalera— Bueno, quería mostrarte tú cuarto, están tus cosas de cuando eras niña, no sé, pensé que seria buena idea...

—¿Todavía esta el cuarto?

—Todo sigue ahí, no saque ni moví nada.

La pequeña asintió, y se levanto para subir, le daba nervios todo esto, pero quería ver. Sí, tal vez si fue una buena idea. Llegaron al segundo piso, era un pasillo, a la izquierda al final estaba el cuarto de Shota, el del medio estaba el de ____, y a la derecha el cuarto de invitados.

Aizawa abrió la puerta, dejando ver el cuarto de un color lila, estaba limpio, Shota iba ir a limpiar seguido, para quitar todo polvo. ____ entro, logrando ver esa pequeña cama con las sabanas verdes, el cuarto entero era de colores que no combinan para nada. Verde, lila, amarillo, naranjo, negro, etc, etc. De pequeña le encantaba, pero ahora no, solo río y nego con la cabeza, mientras caminaba por la habitación viendo a su al rededor. Logro ver el estante con libros, todos eran infantiles, mas se fijo en ese que leía siempre, logro ver su peluche favorito, sus juguetes, incluso estaban todos esos dibujos que hacia de pequeña y pegaba en las paredes. Ese cuadro que tanto le gustaba, que lo tenia Aizawa en su cuarto pero se lo quito y lo coloco en su pequeño escritorio, salían los dos juntos, Aizawa cargaba a la niña mientras esta le abrazaba, los dos con una grande sonrisa.

Realmente miraba todo esto y no entendía que pasaba, porque todo cambio de repente, pero trato de no pensar en eso, ahora quería recordar buenos momentos, no volver a sumergirse en esos pensamientos que le llevaban torturando por años, quería estar tranquila.

—Perdón, otra vez. —Dijo Shota a lo bajo, que veía de la puerta. ____ le ignoro, abrio los cajones y sacó un poco de ropa, incluso había una que otra prenda de cuando era chiquita, sus favoritas. Estaban todas limpias, se dio cuenta enseguida que venia seguido a limpiar.

—Umh... Tienes todavía... ¿los regalos?

—¿Los dibujos? ¿El regalo del jardín? Toda cosa que me hiciste esta en mi cuarto. Si quieres te las puedo traer.

—¿Incluso el cuadro mal hecho que te hice? Jaja.

—Pequeña, tengo incluso la primera carta que le escribiste a santa. Dime, ¿todavía quieres el transformer con vestido? ¿O una capa de invisibilidad, para hacerte invisible y comer chocolate sin que me de cuenta?

—Que- No, no, no me traigas nada mejor. —Shota solto una carcajada, se paso la mano por la cabeza, tirando para atrás todo ese cabello que se le iba a la cara. Miro a la niña, levantando una ceja y riendo a lo bajo, le apuntó el escritorio.

____ solo bufo con una sonrisa y ceño fruncido, solo queria comer chocolate de niña. Se acercó hasta el escritorio, logrando ver un album de fotos, tenia portada del spiderman. Lo agarro, pero justo Mitsuki y Nemuri dieron un grito, ordenando que todos fueran al comedor para hablar.

—Quedatelo, quedate lo que desees. —Respondiendo ante los gritos de su amiga, salio del cuarto y se fue. ____ iba a dejar el album, pero decidió llevárselo, bajo corriendo y lo escondió en su mochila. Luego de eso, las cosas fueron un poco mas bonito, la tarde lo fue, quedaron todos jugando juegos de mesa. Por lo que los adultos venían quedo en el olvido. Pero bueno, tendrían que disfrutar la tarde, aguantándose el sueño, porque estaban pasandola bien pero con sueño.