Era ya la tarde y Nicolás había pasado un día increíble con su amiga, le había enseñado la isla y transmitido su conocimiento sobre esta, mostrando que la conocía de arriba a abajo.

Pero a pesar de su alegría, cuando volvió a su hogar de nuevo sus padres lo intersectaron con las mismas preguntas de siempre, proponiéndole lugares de sus territorios y hablando de los beneficios de estos, las escuelas, la gente, el clima. Etc.

__¿Por qué les importa tanto mi opinión?__preguntó directamente mientras pasaba de largo de ellos e iba a la heladera para comer algo.

__porque también vas a vivir ahí, queremos asegurarnos que el lugar donde vas a vivir hasta que al menos te independicises sea de tu agrado__contestó Reino Unido con dulzura mientras mostraba una dirección en su teléfono__ahora, este lugar tiene lindas casas y una excelente escuela cerca.

Nicolás hizo una mueca, imitando de forma grosera a su padre sin que esté se diera cuenta, finalmente cerró la heladera y se dirigió escaleras arriba.

__no tengo hambre.

Ambos hombres miraron como su hijo huia de nuevo de discutir, el británico giró hacía su esposo, sus ojos color rubí expresando preocupación y la silenciosa pregunta de "¿Que estoy haciendo mal?". Argentina suspiró y se levantó de la silla, se acercó a su marido y pasó sus dedos por la larga cabellera de este para consolarlo.

__ire a hablar con el.

Nicolás estaba en su cama, está como siempre estaba desordenada, entre sus manos había un cuaderno que tenía anotado distintos planes relacionados con Pangea. Escuchó como alguien tocaba la puerta suavemente, con total tranquilidad ocultó debajo de la cama el cuaderno junto a otros objetos que había construido o modificado a espaldas de sus padres.

__pase__contestó mientras fingía estar distraído con un oso de peluche, Argentina entró y se acercó a él. Sentándose a su lado en la cama.

__eu ¿Estás bien?__preguntó Argentina con calma, Nicolás solo asintió__¿Aún te pone nervioso la idea de mudarte?__El joven paró con lo que estaba haciendo y lentamente bajó su juguete, con suavidad asintió__se que es difícil para tí, se que no quieres dejar de lado el lugar donde creciste y te criaste, pero es hora de seguir adelante...quizás incluso, si vivís en otra parte, podés aspirar a otra cosa que no sea simplemente a hacer bromas y corretear para molestar a todos.

Nicolás lo miró en silencio, trató de mantenerse tranquilo, pero lo que había escuchado, dolió como el carajo. Se sintió como si su padre le hubiera dicho indirectamente en la cara "inútil". Dió un suspiro y como pudo preguntó.

__¿Es todo lo que crees que ofrezco ahora mismo? ¿Ser molesto?

__No quise decir eso pero...quizás deberías comenzar a pensar en tu futuro y probar cosas nuevas.

__yo hago cosas nuevas, muchas cosas nuevas.

__vos no haces nada en todo el día, dime ¿Cuando fue la última vez que hiciste algo 100% productivo?

__a ver ¿Cuándo fue la última vez que me prohibiste hacer algo por qué lo consideraste "peligroso"?__contraatacó mientras su postura se ponía cada vez más desafiante__fue hace exactamente dos días, cuando me prohibieron jugar con una pelota simplemente por miedo a que me hiciera un raspón.

__Es imposible hablar con vos, siempre metes cosas que nada que ver.

__¿Cómo que "nada que ver"? Papá ¡Tengo quince años! Y nunca me dieron la oportunidad de elegir nada, siempre estuve condicionado por sus propios miedos.

__bájame el tonito, no sabes nada, el mundo es un peligro en si mismo y queremos verte feliz__Argentina comenzó a molestarse, y no solo eso, a angustiarse__entendenos un poquito, tus primeros tres años de vida los vivimos con él miedo persistente a despertar sin vos a nuestro lado, eras un niño tan travieso que siempre estabas metido en problemas, después llegó la diabetes y peor aún ¡Estuviste mucho tiempo desaparecido y no sabes cómo fue eso para nosotros! Creíamos en la posibilidad de haberte perdido para siempre.

Argentina suavemente puso su mano sobre el hombro del más joven, este le apartó la mano y se dió la vuelta, recostandose de espaldas a él. El mayor dió un suspiro y se colocó una mano en la frente en señal de frustración, ya no sabía cómo manejar a ese niño.

__¿Sabés lo que sacrificamos por vos como para que te nos hagas el rebelde? ¿Todo lo que hicimos para mantenerte seguro y sano?__finalmente, el argentino giró para mirarlo, con una mirada decidida de cambiar la perspectiva de su hijo a toda costa__yo trabajo como un burro con tal de mantenerte, ¿Sabes lo caro que es cuidar a cualquier chico? ¿Sabes acaso el precio de la ropa que usas? ¿Sabés lo difícil que fue para tu padre tener que sacrificar horas de sueño y tiempo con tal de asegurarse que estás bien? Al menos piensa en él, como estás tan desafiante conmigo.

__ya pasaron años, si tanto se arrepienten de haberme adoptado, quizás deberían haberme vendido o dejarme dónde me encontraron. No estaban obligados a nada.

Aquella respuesta sacó de quicio a Argentina. ya habiendo perdido la paciencia, con su tono más autoritario ordenó.

__mirame.

Nicolás rodó los ojos, se sentó en la cama y lo miró, pero antes de siquiera poder hablar, sintió como algo pesado golpeaba su mejilla y la dejaba de un tono más rojo del que era su piel. Abrió en grande los ojos, no habiéndose esperado esa cachetada y menos por parte de su padre.

__¡Me tenés aburrido ya! ¡Aunque no lo quieras nos iremos de esta isla de mierda a fuerzas si es necesario!__se levantó de la cama y lo miró con lo más cercano al desprecio que lo había mirado en años__te la bancas, y no quiero que vuelvas a evadir o siquiera estar en desacuerdo con él tema ¡¿Me entendiste?!

Nicolás se encogió, por primera vez con cierto miedo e incredulidad, asintió. Argentina por fin salió de su habitación dando un fuerte portazo, dejando todo en un pesado silencio.

El joven se quedó ahí, totalmente quieto y sin poder creer lo que había pasado, su padre nunca le había levantado la mano. Se sobó la mejilla y un sollozo se escapó de él, se sentía culpable por haber desencadenado aquella reacción en él.

Pasó una hora llorando hasta que por fin se calmó, sin pensarlo muy bien fue escaleras abajo y se encontró a sus padre mirando la televisión tan tranquilo como si no hubiera pasado nada. Nicolás miró a Argentina, esperando una disculpa siquiera, pero no había ninguna muestra de intención por su parte de querer disculparse, no entendía por qué eso llegó a dolerle tanto.

__papá...__lo llamó, el argentino giró para mirarlo, Nicolás se congeló, no sabiendo que decir exactamente, no lo pensó mucho cuando dijo__mostramo tu teléfono.

Argentina sonrió con satisfacción al escuchar eso, sacó su teléfono y se lo mostró. Nicolás no lo pensó mucho y apuntó un lugar al azar que estaba entre la lista. Argentina lo miró y sonrió.

__buena elección.

Sin decir más, volvió su mirada al televisor con indiferencia. Nicolás se quedó ahí parado, mirándolo fijamente durante un momento como si esperara que dijera algo más, pero sin embargo, no recibió más que un tenso silencio. Sin decir nada más fue de nuevo escaleras arriba, pero no fue a su habitación, fue a la de sus padres.

__así es tu papá__dijo Reino Unido, quien estaba recostado en la cama simplemente leyendo un libro mientras su hijo le contaba sus inquietudes__tiene un muy mal carácter y a veces reacciona sin pensar.

__pero no sé disculpó...__Nicolás se sobó el brazo con incomodidad.

__quizas no lo considera necesario, después de todo, entraste en razón luego de que te pegará.

__pero no es justo...

El británico apartó su mirada del libro que estaba leyendo y lo miró.

__mira hijo, ven__El joven dudó pero decidió acercarse a su padre y sentarse a su lado, Reino Unido lo agarró de los brazos y lo guío hasta tener la cabeza de Nicolás recostada sobre su hombro y comenzó a acariciarle el cabello con suavidad__a veces uno debe hacer cosas drásticas por los seres que ama incluso aunque los lastime, tu papá es así y te ama, pero no sabe cómo manejarte ahora que te comportas de maneras un tanto...desagradables.

__pero no se tomó el tiempo de siquiera ver mi perspectiva o entenderla...

__por que no es necesario que lo haga, mira, se que Argentina a veces puede dar miedo, digo, es algo y tiene presencia, además que cuando usa cierto tono de voz puede lucir ciertamente... aterrador__la expresión del europeo lentamente se fue volviendo más sería mientras miraba incómodo hacia otro lado.

__¿También te ha pegado en algún momento?__preguntó el joven preocupado.

__no, no te confundas, nunca me ha tocado un pelo, pero es normal que actúe así. Está cansado ¿Sabes? Trabaja mucho y yo no puedo aportar mucho monetariamente porque siempre he vivido demasiado comodo y digamos que no tengo tantas oportunidades laborales como él. Es normal que esté tan...frustrado.

Nicolás se mantuvo en silencio, aquel abrazo lentamente se fue sintiendo más vacío y rápidamente entendió que su otro padre tampoco estaba dispuesto a entenderlo, pero no se atrevió a apartarse y simplemente miró al adulto y como este parecía bastante incómodo con lo que decía.

__simplemente...no lo provoques ¿De acuerdo?

Nicolás asintió, dándose cuenta lo inútil que fue esa charla y sintiéndose más solo todavía. Reino Unido simplemente acariciaba su cabello con ternura, pero sin embargo, está parecía más una fachada para intentar fingir que todo estaba bien.

__papá...muéstrame tus opciones.