Todoroki Shoto

—Ya veo, será mejor que me marche.

Menciona Midoriya en un tono triste. En cuanto a mí camino hasta donde se encuentra él. Midoriya se da la vuelta y alza el brazo despidiéndose, algo que me causo duda, pero mirando más su brazo veo que lleva un brazalete, no, es una pulsera color rosa.

Después miró donde se encuentra Uraraka y notó como su semblante serio cambio a uno de angustia.

¿Qué planeas hacer, Midoriya?

“Ura-chan, necesitamos hablar”.

Cierto...

Bakugo aprieta los dientes al darse cuenta del estado de Uraraka. Una vez que Midoriya cruza la puerta yo también lo hago.

—Mido— digo, pero me interrumpe el sonido de la puerta abriéndose de golpe.

—¡¿Qué mierda acabas de hacer, Deku-teme?! —Grita Bakugo terminando con la paciencia que tenía o si es que tiene. Junta su puño con la palma de su mano y se genera una pequeña explosión, Bakugo sonríe de forma cínica.

—Kacchan —dice el susodicho frunciendo el entrecejo y torciendo sus labios.

—¡Contesta! —Grita y una explosión un poco más grande se forma en sus manos, pero él la ahoga estando en la misma posición.

—Bakugo, tranquilízate —le digo mirándolo serio.

—¡¿Ah?! Esto no tiene nada que ver contigo, Mitad-Mitad —voltea verme molesto y yo solo me cruzó de brazos. Se acerca a Midoriya lo toma de la polera azul y mirándolo dice: —Ochako está saliendo conmigo, no la molestes más, si notó que ella cambia tan si quiera un poco, no me importará que seas el elegido porque te mataré —luego lo empuja, pero no logra caer al suelo.

Lo que Bakugo dijo me dejó confundo, ¿El elegido? Midoriya era el elegido, pero para qué cosa. Y un recuerdo apareció en mi mente, aquella vez antes de enfrentarnos en el festival deportivo.

"¿Eres el protegido de All Might?"

All Might. Es muy probable que ellos tengan una conexión más fuerte que solo alumno y maestro.

“Ahora... es tu turno”.

—No será tan fácil, Kaachan, porque está vez ya te he superado —dice Midoriya con una sonrisa. Bakugo aprieta las manos formando puños, y sin decir algo vuelve entrar al salón de la fiesta.

Al cerrarse la puerta Midoriya guarda silencio, se encuentra pensativo, hasta creo que ha ignorado mi presencia. Carraspeo un poco la cargante y meto mis manos en los bolsillos.

—Oh, Todoroki-kun —me llama y sonríe apenado. —Debo volver agradecerte, pero no era necesario, aun así, lo que dijiste sobre mí me hizo sentir un poco bien.

—¿Solo un poco? —Pregunto soltando un suspiro, —no dije algo que no fuera cierto. Vamos, —señale hacia la calle —demos un paseo.

—Vaya, creo que está será la segunda charla que tendré —me dice él caminando a mi lado.

—¿A quién fuiste a ver primero? —Él me voltea a ver confundido a lo que continúo —si llegaste al cumpleaños de Eri significa que alguien te lo dijo.

—¡Ah! Si, —asiente y se rasca la mejilla, —fui a ver a All Might, él me dijo sobre la fiesta. Y bueno, quería ver Eri-chan, sí que ha crecido mucho —dice emocionado.

—¿Y tenías que verla hoy? Así te evitas lo de hace rato.

Midoriya guarda silencio, piensa durante unos segundos y luego niega con la cabeza.

—De cualquier forma, tenían que enterarse que he regresado. En especial ella —dice lo último serio y con tono triste.

—¿Por qué quieres hablar con Uraraka? —Pregunto de repente y lo volteo a ver deteniendo mi paso. No me contesta, —¿Pasó algo entre ustedes dos?

—¿Por qué preguntas, Todoroki-kun? —Responde con otra pregunta y su tono cambia a uno un poco bromista, pero al mismo tiempo con nervios.

—Porque tú te entrometiste en mis asuntos personales hace un tiempo.

“Pero, es tu poder, ¿no?”

Midoriya sonríe un poco.

—«Entrometerse en asuntos que no nos llaman es la esencia de un héroe» eso dice All Might —dice con una sonrisa.

Tomamos asiento en unas bancas.

—Solo te estoy regresando el favor —le digo mirando un edificio y Midoriya suspira. Un suspiró cansado y largo. Como si de alguna manera cargara con tanto.

—Quiero hablar con Ochako para decirle la verdad —dice firme.

—¿Sobre el motivo de por qué te fuiste? —Vuelve a guardar silencio. —A todos nos sorprendió, pero Bakugo no parecía afectado, de hecho, estaba mucho más encendido, tenía mucha energía y decidió entrenar, en esos momentos Uraraka también se le unió. Pienso que, gracias a eso Uraraka se ha vuelvo muy buena como heroína.

—Solo quiero hablar con ella. Disculparme y...

—¿Y decirle que la amas? —Pregunto mirándolo y él se sobresalta y me mira sorprendido. —Es muy obvio, Midoriya. —Noto como un color carmesí le cubre todo su rostro, —Oh, estás poniéndote rojo, ¿te sientes bien? Debe ser fiebre.

—No, no, no es fiebre. Estoy bien, —comienza a toser un poco y yo arqueó una ceja, —es solo que me tomaste por sorpresa. ¿Yo amar a Ochako?

—Midoriya, ¿qué sientes por Uraraka?

La verdad no soy experto en estos temas, pero de lo que he escuchado hablar a Natsu y Fuyumi creo que soy bueno para continuar las charlas. Un día en la casa, mi despistado hermano mayor Natsu contaba que se sentía muy extraño a lado de su compañera de trabajo, Fuyumi muy emocionada le pregunta muchas cosas haciendo que Natsu se pusiera nervioso y nuestra madre reía por la situación.

Así que le preguntaré justamente lo que mi hermana le preguntaba a Natsu.

—Es complicado.

La repuesta me dejó perplejo, Midoriya lo había arruinado. Natsu no contestó eso, ¿ahora como seguiré con las preguntas? Shoto te has metido en un terreno que no sabes manejar.

—Entonces no es para tanto —digo y Midoriya me voltea a ver —solo son amigos o compañeros que únicamente compartieron momentos en la UA, como todos los demás. Lo que ella haga no te debe de importar. Si me lo preguntas ella está mucho mejor sin ti.

—Tal vez tengas razón, Todoroki-kun —dice apretando su puño y veo como este le salen pocos rayos verdes —pero, estás equivocado, Ochako es mucho más, es más que una simple compañera o una amiga, quiero protegerla y estar con ella hasta que mi vida me lo permita. Cada vez que la veo me siento débil y fuerte al mismo tiempo; una mezcla de sentimiento que me causa temor, aun así, quiero estar con ella, para siempre. Lo más que deseo es que ella sea feliz y si lo es estando con Kacchan lo aceptaré aún que eso me lastime a mí.

—Querer la felicidad de ella sobre la tuya —digo mirando las nubes, el cielo se encuentra nublado y sintiendo la suave brisa digo: —no se nada de esos temas, pero estoy seguro que eso es amor. — Midoriya no dice nada, —o quizá no. Solo debes de estar confundido, creo que hablar con una mujer te ayudara. —Me pongo de pie y el me mira —, perdona que haya dicho eso, solo fue un truco para conocer tus verdaderos sentimientos, te espero en la agencia.

Y camine directo hacia el salón de fiestas ya que ahí estaba mi motocicleta.

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Ochako Uraraka

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Después del encuentro.

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Desearía poder quedarme más en la fiesta, pero no me sentía muy bien. Katsuki se ofreció a llevarme a mi departamento, pero me negué, parte de mi quería saber qué fue lo que le dijo a Izuku, ya sea bueno o malo, no debería de importarme, aun así, quiero saber.

Al regresar lo primero que hice fue acostarme en mi cama y abrazar un peluche en forma de panda, miro el techo y el silencio comienza a matarme.

—¡Estúpido Midoriya por que tenias que regresar! —Estrujo el peluche atrayéndolo mas a mi pecho, doy la vuelta y miro el armario, —él tenía la pulsera, eso significa que todo este tiempo el... —siento como mi rostro aumenta su temperatura, —no, no, no, solo me estoy ilusionando —me reincorporo en la cama y me siento cruzando mis piernas.

Mi celular vibra y lo saco de la cartera. Veo que es un mensaje de Katsuki:

<< Si necesitas hablar solo hazlo, cara redonda ☠>>

Sonrió y sin responder el mensaje apago mi celular.

Gracias, pero debo manejar esto yo sola.

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Hace seis años, dos semanas después de la despedida de Izuku y Ochako.

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Me sentía mal al mentirle a mis amigas que debía ir a la agencia de Ryuku-sama, hacer que Tsuyu no sospechara nada era aun mas complicado, aunque presiento que sabia bien a donde iría.

Tenia que ir, solo así siento que descansaría.

—¿Jovencita Uraraka? —Pregunta sorprendido.

—All Might-sensei —digo casi en un grito lo que parece asustarlo. Trato de tranquilizarme, —¿Puedo, no —niego, —necesito hablar con usted —veo como hace una mueca —por favor —le suplico y al fin accede.

Una vez estando adentro de la casa de All Might-sensei me da una taza de café, parece ser que noto mis nervios, espero que solo haya sido eso y no fuera por mi rostro, me he estado maquillando para que no se note mis ojeras, no he podido dormir nada en las últimas semanas y cuando logro conciliar el sueño, ese momento se repite una y otra vez.

—¿De que quieres hablar? —Me pregunta serio y yo cierro los ojos con fuerza y luego los abro.

—¿Dónde está él? ¿A dónde se ha ido Deku-kun? Se que lo aprecia tanto como si fuera su hijo, así que al menos a usted le tuvo que haber dicho algo, un indicio o no lo sé, quizá una coordenada, su madre tampoco no sabe nada, pero usted —lo miro a los ojos deseando que All Might-sensei tenga las respuestas que tanto anhelo saber. —Tiene que saber, ¿verdad?

All Might-sensei guarda silencio y mira su taza de café, ¿está dudando en decirme?

—Lamento decepcionarte, pero no tengo idea. No se donde esta.

Paso saliva de forma apresurada y comienzo a ver borroso, tal parece que mis lágrimas se asoman para salir.

—Se iba a ir sin quiera decirme, sin siquiera decirme adiós —comienzo a decir con tono quebradizo. —Bakugo-kun fue quien me dijo que Deku-kun se iba...

—Quizá no quería hacerlo doloso —me dice.

—¡¿E irse sin decir nada no lo seria también?!

—No por ti —levanto la mirada hacia All Might-sensei y tomando aire me dice: —para él. Midoriya-shonnen es muy tonto en hacer las cosas, pero lastimarte no es algo que él haya querido hacer, es solo que debía irse.

—Las peores despedidas son aquellas que no tuvieron una explicación. Le dije lo mucho que lo amaba, me sentí estúpida creyendo que eso lo detendría. Creo que al final de todo nunca termine de conocerlo.

—Midoriya-shonnen regresara, le tomará tiempo y debes ser paciente. Estoy seguro que tus sentimientos son correspondidos.

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Me despierto porque la luz de mi habitación me molestaba y también porque el sueño que tuvo fue una conversación con All Might. Decido cambiarme de ropa ya que aun llevaba el vestido color negro, me pongo mi pijama y voy hacia el baño a refrescarme la cara.

—Creo que no tiene caso darle mas vueltas al asunto. Midoriya volvió y eso no significa el fin del mundo, pero aun así no puedo evitar sentir curiosidad...

Katsuki sabía que Midoriya se iba a ir, All Might también, pero no sabían a dónde, pero eso no significa que no conozcan el motivo de su partida.

¿Por qué nunca me lo había planteado? Incluso Todoroki-kun lo dijo.

“Él no es la clase de persona que solo se va sin decir nada, seguro tuvo una razón muy importante”.

A pesar de que haya dicho que no me importaba solo fue el momento imprevisto de su aparición. Es muy probable que Midoriya haya hecho una misión secreta.

“Es solo que debía irse”.

¡Aja! Eso fue lo que dijo All Might lo que significa que lo sabe.

Tengo que saber la verdad así que me acercaré a él.

Descubriré los misterios que ocultas, Midoriya. 

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¡Hola! Quizá hayan notado en un parpadeo y digan: «¡Qué!, ¿ya se terminó?» Fueron casi 2000 palabras, fueron 1980 (para ser exactos).

Y no me gusta solo escribir para que sean 2000 luego siento que pierde el hilo o agrego algo de más y no concuerda, pero recuerden capítulo semanal. Esperen hasta el siguiente sábado.

¿Les gustó la idea que Todoriko narrará? A mí en particular sí.

El siguiente ya empiezan los problemas.

Hippolyta,fuera.