Mina Ashido

. . .
Día 01, después de la despedida.
. . .

Había llegado a la casa de mi bombón, compré unos ingredientes para prepararle la mejor cena posible.

—Corazón, ¿estás segura de hacer la cena? —me preguntó desde la sala mientras veía la televisión.

Me encanta cuando me dice «corazón», es tan romántico.

—Por supuesto, hoy te quiero consentir —dije mientras solté una risita.

Él apagó la televisión y caminó directo a mí y me dio un beso en el cuello que me hizo temblar.

—¿Kirishima? —pregunte nerviosa.

—¿Y habrá postre? —preguntó de forma calmada tocando mi cintura, después me hizo girar quedando frente a él.

—Oh, pues, yo... —y me dio un beso que yo sin rechistar le correspondió.

Ahora entiendo a que se refería con «postre».

—Está lloviendo, así que de alguna forma tú te quedarás está noche conmigo.

Y me sonroje, ¿desde cuándo Kirishima no es tan tímido para estas cosas?

Se escucha el timbre de la casa y debo confesar que me hace sentir aliviada, aún no me siento lista para ser el postre.

Mi novio suelta un suspiro largo de fastidio y yo me rio, me lavo las manos en el fregadero, en eso él timbre suena dos veces más, lo que hace que me confunda.

¿Quién vendría a esta hora que es casi la noche y con esta lluvia?

O mejor aún, ¿Quién vendría a ver a Kirishima? Sus amigos siempre lo ven en las tardes.

Cuando abrí la puerta vi a Ochako, sujetando una sombrilla negra, aferrándose a ella, mientras lágrimas recorrían sus mejillas.

—¿Ochako qué...

No terminé la frase, Bakugo me interrumpió. ¡Bakugo! ¿Qué hacía Ochako con la rubia explosiva? ¿Le hizo algo? Pero mis dudas fueran interrumpidas por él.

—Ojos de mapache —me miró serio y me intimidó por unos segundos, —cuidala...

Y se metió al auto, me sorprende que Bakugo haga estás cosas y antes de decir algo, Ochako entró rápidamente a la casa y me dio un abrazo, la sombrilla la dejó caer en la sala.

—Amor, ¿quién es? —se acercó mi novio y al oír los sollozos de Ochako de inmediato guardó silencio y su sonrisa juguetona se borró. —Haré un poco de té.

—Por favor —dije mirándolo y el asintió. Nunca habíamos visto llorar a Ochako, jamás, incluso en momentos que lo requerían, por eso, verla de esta manera es doloroso. Le di unas palmaditas en la espalda y tocaba su cabello. —Tranquila, Ochako.

—Se fue, Mina-chan... —soltó de repente mientras sus sollozos se hacían más fuerte —se ha ido.

Rompí el abrazo y pude ver cómo sus mejillas estaban más sonrojadas de lo normal, su nariz estaba roja y temblaba de frío, torcí mis labios y la conduje a sentarse en un banquito que estaba frente a la barra donde pico las verduras.

Kirishima escuchó el ruido de la tetera y la retiró de la estufa, y le entrego la taza con un sobrecito de té, creo yo que es té verde.

Ochako aun temblando de las manos tomó la taza, sopló para después tomar un poco.

—¿Uraraka-chan que pasó? —preguntó Kirishima sentándose a su lado, mientras que yo, la miraba de frente estando cara a cara.

Ochako guardo silencio y apretó la taza. ¿Le dolía hablar sobre el tema?

—Bakugo la trajo a la casa, él dijo que la cuidamos...

Y recordé lo que me dijo mi amiga cuando me abrazó.

“Se ha ido”.

¿A qué se refiere?

—Por un momento creí... —habló finalmente y con voz dolida. Kirishima y yo la miramos atentamente, ella bajo la mirada y miraba su taza de té —creí que, si se lo decía, él realmente no me dejaría —y lágrimas bajaron. Tomé una servilleta y se la di, Ochako limpió las lágrimas —pero me equivoqué.

Kirishima y yo intercambiamos miradas confundidos y con un semblante de tristeza.

—Si..., pero ¿quién? —preguntó Kirishima con duda y nerviosismo.

—De- —se interrumpió —Midoriya —con un tono seco dijo el nombre del peliverde.

Torcí mis labios, era muy extraño que Ochako lo llamé por el apellido y en ocasiones se llamaban por su nombre de pila, pero jamás mi amiga lo llamó así.

Kirishima me miró preocupado.

—S-se fue de viaje, no dijo nada, no me lo dijo, jamás tuvo confianza en mí, se iba a ir sin quiera despedirse, como si no le importará —Ochako se puso de pie y comenzó a caminar de un lado a otro mientras tocaba su cara escondiendo sus lágrimas —nuestra amistad no le importó, ni mucho menos mis sentimientos, se lo contó a Katsu-kun, pero a mí no, y él me decía «entre nosotros no hay secretos».

Ochako comenzó a hablar rápidamente que apenas le entendía, podría pensar que estaba murmurando y eso me dio nostalgia, parece que los hábitos de él se le pagaron.

Yo me puse de pie.

—Cálmate.

—¡No puedo, Mina! ¡Le dije que lo amo y me rompió el corazón!

La miré sin decir nada, su sonrojo se veía más marcado y sus ojos llorosos no ayudaban mucho al ver la imagen frente a mí, me dio dolor.

Veo como Ochako cierra sus ojos y lentamente cae al suelo, pero es sujetada por Kirishima y suelto un suspiro de alivio.

—Su cara está caliente —me dice él mientras toca su frente, —en realidad su cuerpo lo está.

—Tiene fiebre, creo que fue mucho para ella, nunca la había visto tan...

—Vulnerable —completó la frase. Kirishima cargó el pequeño y delicado cuerpo de Ochako y la llevó a la habitación de huéspedes.

Acompañé a Kirishima hasta la habitación, y me quedé mirando desde el marco de la puerta y apreté mis manos haciendo que mis nudillos se notarán. Ochako aún con su sonrojo respiraba impacientemente, mi novio me miró, se acercó a mí y beso mi frente.

—Estará bien, amor —dijo dándome una sonrisa, y yo no muy convencida asentí.

Él se fue y me dejó sola. Me acerque a Ochako y me senté a lado de ella y tome su mano, mirando su rostro pude notar como tenía rastros de las líneas que había recorrido las lágrimas. No podía creer que la causa de verla así fuera Midoriya. Tomé el bolso de ella y busqué su celular y me puse a leer los mensajes de ellos dos.

Quería buscar respuestas, esto no puede terminar de esta manera, tan drástico, pero hace casi un mes que no hablaban por mensaje.

¿Creíste qué harías más fácil tu viaje si no le decías nada, Midoriya?

¿Y por qué carajos harías un viaje y no nos avisarías?

Guarde el celular en el bolso y lo deje en la mesita de noche, ahora, en mi móvil me puse a buscar el contacto de Midoriya y le llamé.

Simplemente no puede dejar a Ochako de esta forma.

“Me rompió el corazón”.

Recordé las palabras que hace poco me dijo y no pude evitar visualizar como se veía.

Midoriya no contestó, bien, debe estar en el vuelo, solo espero que cuando llegue me regresé la llamada.

.
.
.

Ochako Uraraka

“Lo siento mucho...”.

Basta.

“Ura-chan, los mejores amigos siempre están juntos, ¿No? Quiero que estés a mi lado cuando me vuelva el héroe número uno”.

Mentiroso.

“Nunca dejaré que Ura-chan pase por tristezas”.

Ahora mismo... Mi tristeza eres tú.

“Eres la primera persona en aceptarme, y le has dado un significado diferente a la palabra Deku, por eso mismo, tú eres mi persona favorita, Ochako”.

No sigas...

“Lo siento mucho...”.

—¡Deku-kun!

¿En dónde estoy?

Había gritado su nombre, como si... Como si acabará de despertar de una pesadilla. Mire a mi alrededor, pero no reconocía el lugar. La cabeza me dolía y tengo un poco de frío, tenía puesta una manta gris de lana.

¿Cómo había terminado aquí?

¡Cierto! Estoy en casa de Kirishima-kun ya que Katsu-kun me llevó en su auto con la intención de ver a Mina-chan.

Oh no...

Ahora lo recuerdo todo, me desmaye y por eso estoy en cama, creo que estar un poco bajo la lluvia hizo que me enfermara. Tendré que faltar al trabajo.

“Lo siento mucho...”.

Deku-kun...

Es verdad, me he confesado, finalmente le dije a Deku-kun que lo amo. Y me rechazó, no dijo a dónde se iría, tampoco se quiso despedir.

¿Realmente él es así?

¿Todo el amor que le tenía fue en vano? ¿Mi amor no fue suficiente para no hacerte marchar?

Me puse de pie y caminé hacia la ventana, deslicé las telas y miré el paisaje. Uno totalmente diferente, cuando llegué aquí era casi la noche, la lluvia estaba fuerte, pero ahora, al menos está nublado, quien sabe qué hora es.

Siempre había pensado que mis emociones están ligadas al clima.

—Has despertado.

Me doy la vuelta al escuchar la voz dulce de Mina-chan, ella suelta un suspiro de alivio y yo miro la ropa que trae en brazos, ella se percata de esto.

—Oh, es ropa para ti, Kirishima me llevo a tu casa, no te preocupes le dije a tus padres que te quedarías conmigo, en una pijamada como en los viejos tiempos, así que he empacado un poco de tu ropa, espero y no te moleste.

Sonrío y me acerco a ella, Mina-chan me observa con duda, y creo saber por qué, no cualquier día llegas a la casa de tus amigos llorando y te desmayas.

—Gracias.

—E-eh, si, de nada, toma una ducha y vienes a comer algo.

Y se va, creo que directo a la cocina, observo como camina y dobla en una esquina a la derecha. Mina-chan, no te quiero causar problemas.

. . .
Día 02, después de la partida de Izuku.
. . .

En realidad, no quiero ser una molestia. Me dirijo al baño y abro el grifo para que se llene la tina. Mientras esto pasa, siento como el vapor caliente toca mi cara, veo como el agua poco a poco sube hasta llenar la tina, y gotas caen.

No cualquier gota de agua, mis lágrimas caen en la tina y se pierden en el agua caliente. ¿Por qué al cerrar los ojos lo único que me llega a la mente eres tú, Deku-kun idiota?

“¿Eh? Pero para mí, Deku suena a puedas lograrlo y por eso me gusta”.

“¡Soy Deku!”.

Creo que sería mejor llamarlo por su nombre, decirle así, solo hace que me duela más.

¿Por qué tenías que ser tan duro conmigo, Izuku?

Amarte por tres años fue sencillo, pero olvídate será difícil, pero no imposible.

.
.
.

Al salir del baño tomó una toalla y seco mi corto cabello, después lo cepillo, espero y no se moleste Mina-chan y Kirishima-kun por usar un cepillo, aún que creo que no será importante.

Salí de la habitación y camino a la sala y escucho que están hablando y cortó mi andar. Está mal escuchar conversaciones ajenas, Ochako. Será mejor que vaya con ellos, no quiero que piensen que me tardo mucho dándome un baño.

—No va responderte —dice Kirishima-kun y di un brinco, afortunadamente no hice ningún ruido. Entonces me quedo recargada en la pared.

Mina-chan suelta un quejido.

—Ni siquiera estuve tan ansiosa cuando esperaba mi resultado del examen de ingreso a UA, pero Midoriya me desespera.

Al escuchar su nombre me lleve mi mano a mi corazón. ¿Por qué su tema de conversación es sobre Izuku?

—Bueno, si no nos dijo nada, ¿Crees que ahora lo hará? —Preguntó Kirishima-kun serio, —lo que hizo Midoriya no es hombres.

—Sea donde allá ido ya debería haber llegado. Cuando conteste el teléfono lo voy a matar, no puede hacerle eso a mí Ochako.

Oh, Mina-chan, gracias por ser mi amiga.

—Creo que no es bueno intervenir en los asuntos de los demás, rosita —Mina-chan soltó un bufido.

—¡Pero es mi amiga!

—¡Y Midoriya también es mi amigo! Se marchó sin decirme nada, creí que éramos hombres de confianza, compartimos misiones juntos, pero se fue sin decirme nada, ni un maldito mensaje de texto. Me dolió que se fuera así sin avisar y, si me dolió y no éramos muy cercanos, solo imagina a Ochako-san, su mejor amiga, ella que había estado enamorada de él, la hirió más que a todos juntos.

Tanto como Mina-chan y Kirishima-kun guardaron silencio. Me lleve mi mano a mi boca reprimiendo un sollozo, no sé qué más debería sentir aparte de la tristeza que me embriaga. No quiero que ellos me demuestren sus cuidados si solo es porque me ven tan débil, podría ser egoísta, pero, no me hace sentir bien.

—Lo único que podemos hacer es apoyarla y darle nuestro amor, rosita.

Respiro hondo y ya una vez tranquila camino directo a ellos. Caminé con timidez jugando con mis manos por los nervios.

—¡Ochako, ¿cómo estás?! —Mina-chan me dio un abrazo y yo se lo correspondí.

—Estoy bien —digo mostrando una sonrisa que espero no se note lo que en verdad oculto.

Kirishima-kun y Mina-chan intercambian miradas.

—¿Segura, Ochako-san?

—¡Oye! —regaña Mina-chan dándole un codazo en el estómago al pelirrojo.

Suelto una pequeña risita y me siento en el comedor.

—Kirishima-kun, Mina-chan —digo en un susurró y ellos sentados en la mesa me miran esperando a que siguiera, —gracias por dejarme pasar la noche, y les agradezco por cuidar de mí, lamento si les he causado molestias.

Kirishima-kun sonrió y esto hizo que me calmará un poco mis nervios, la calidez que transmite con su sonrisa es grandiosa, ahora entiendo porque se ganó el corazón de mi amiga.

Mina-chan negó con la cabeza y paso el bocado que tenía en la boca.

—No tienes que dar las gracias, somos amigas, nos conocemos desde hace mucho tiempo, además, tú, Tsuyu y yo nos la pasaremos viviendo una temporada en mi departamento. ¡Será un momento de chicas!

—Solo espero y no hables tanto de Kirishima-kun porque si no Tsuyu y yo te arrojaremos almohadas a la cara —digo para luego reír. Y vaya que se siente bien.

Mina-chan se sonroja y Kirishima-kun emocionado comienza a molestarla.

Me pregunto si así estaré en esa posición algún día con él.

¡No, Ochako! ¡Basta, no te tortures más!

—Midoriya decidió vivir su vida y yo también haré lo mismo.

Al decir esto me gane sus miradas llenas de confusión.

.
.
.

Mina Ashido

Así como dije, entre Tsuyu —le conté sobre lo que pasó— y yo levantamos el ánimo de nuestra querida Ochako.
Sin embargo, había ocasiones en las noches que la escuchamos llorar a escondidas y eso nos rompía el alma, ¿Cuánto es el tiempo que se necesita para olvidar a una persona?

Cuando una persona tiene un amor sincero, nunca olvidan sus sentimientos, no desaparecen, solo dejan de ser más fuertes.

Fue un total de dos semanas y media que Tsuyu y yo estuvimos con Ochako. Salíamos entre todos como hace mucho en tiempos de escuela.

Y al pasar un año fue donde vi más estable a Ochako, se dedicó a ser la mejor heroína y sé que logrará tener un ranking en las encuestas de héroes, yo tampoco me quedaré atrás.

Todo va bien.

Solo que cada vez que habla de Midoriya se dirige a él con su apellido, supongo que lo hace así para hacer la carga más ligera.

Aunque, Ochako lo trata de esconder puedo saber que aún lo extraña, pues, siempre carga consigo la pulsera que le regaló en el último festival de UA.

Lo extraña.

Lo quiere.

Y quizá en el fondo de su corazón aún lo ama.

¡Pero no puedo permitir que mi Ochako vuelva a sufrir! No es como si el imbécil de Midoriya regresará algún día... ¿O sí?

.
.
.
.

💙¿Y qué tal? De hecho, les mentí, la historia no es Izuchako, es de la pareja Mina x Kirishima.

Yap, de hecho, voy a cambiar la portada.

Ah se crean xdd, 100% fiel al Dekuraka.

Pobre de Mina, si supiera lo que se viene XD no se preocupen ya el siguiente capítulo damos un brinco drástico de tiempo.

Una cosita más, las actualizaciones serán semanales cada sábado. Tengo hasta ahorita escritos 12 capítulos.

Eclipsa, fuera.