Izuku Midoriya

No fue una pelea de pareja. Lo parecía, pero no lo fue. Pero lo podía ver en su rostro creía que yo lo había hecho apropósito y no es así.

Ella me había puesto una gasa en la palma de mi mano. Tal parece que tener cortes o marcas en mis brazos y manos ya era un hábito.

Me despedí de mi novia. Y salí del departamento hoy no tenía ir a la agencia de héroes, pero si debía de estar patrullando el perímetro. Aun así, decidí tomar el camino para ir. La conversación, o, mejor dicho, lo que me dijo Ochako era cierto. En buscar un sucesor, pero no era necesario. Ya sabía que debía hacer con este poder. Lo había pensado los seis años en que me marche.

Me dirigía había la agencia para hablar con Kacchan. Él es mi amigo de la infancia, pero siento que él no me considera un amigo, me ve más como un obstáculo que debe pasar, y aún que no me guste esa idea no puedo negar que es perfecta. Al menos así él siempre estará entrenando para ser el mejor.

—¿Midoriya? —Dijo mi nombre un confundido Todoroki-kun. Me saludó y yo hice lo mismo. —¿Qué haces aquí, no deberías de estar por los alrededores? —Se llevó su mano a su mentón y asintió —huh, quizá se deba a lo que hablamos, ¿no? Le he comentado la situación a Inasa y Utsushimi, están de acuerdo en participar y eso me tranquilizó en cierta forma.

—Eso... está bien —dije con duda. Aún sigo con ese pensamiento de que debo hacer esto solo, pero las palabras que Ochako me dijo para lograr convencerme de que esa idea estaba mal regresan a mí. —¿Y qué hay de Yaoyorozu-san? Ella es muy fuerte, seguro junto a Iida-kun nos dará una ventaja.

Ante esto el semblante serio de Todoroki-kun cambió. Su expresión la reconocía a la perfección, una mezcla entre temor y preocupación, por la persona que queremos. El temor de perderla. Comprendo bien a Todoroki-kun, yo también estoy preocupado.

—Se que Yaoyorozu es necesaria para esta batalla, y si no es importante, me gustaría dejarla de lado. Es una amiga muy valiosa para mí, pero, si pienso de esta forma sería menospreciarla y es lo que menos quiero. Ella es fuerte y tiene un intelecto muy grande, no debería de preocuparme, pero lo estoy —se rasca su cuello apenado y yo sonrió de lado. —Este sentimiento es muy... extraño. Se que es muy habilidosa y aun así quiero protegerla, —voltea a verme, —Midoriya, ¿qué es lo tengo?

—Lo que tienes no es malo, Todoroki-kun. Es un sentimiento muy bonito y que muchas de las veces nos dan la fuerza necesaria para levantarnos —le dije con una sonrisa y él aún sin quitar su mirada sobre mí soltó un suspiro más relajado.

No podía decirle con exactitud a Todoroki-kun que es lo que siente, ya que soy el menos indicado para eso. Me tarde tanto tiempo en darme cuenta de los sentimientos de Ochako y no quiero confundir a Todoroki-kun con la relación que tiene con Yaoyorozu-san.

—Deku... —escuche su voz, sonaba cansada pero curiosa, me giro para verlo.

—Kacchan —digo con un tono serio y el frunce las cejas.

—Ya no somos niños, solo llámame Bakugo. Me da nauseas al solo escucharte decir «Kacchan» —imitó supuestamente mi voz con un tono más chillón, después chasqueó la lengua y se acerca a nosotros. —La perra de la teniente sospecha de mí. ¿Cara Redonda está a salvo, no? —Asiento torciendo mis labios. —La farsa no durara mucho, según la Cuatro Ojos tenemos a lo mucho dos meses para que la visión se cumpla.

—Es más que seguro que la agencia de mi padre nos ayude como soporte. Nos esperamos un ataque superior al de USJ, no conocemos sus números, pero ellos tampoco, no saben que Midoriya no ira solo es una ventaja —opina Todoroki-kun y Bakugo levanta una de sus cejas. —Programe una reunión —dice después de una pausa y de inmediato lo miro, —ellos creen que será una reunión para recordar viejos momentos, pero —me mira, —hablaras con ellos.

Suelto un suspiro y asiento dándole la razón. No me siento para nada preparado al tener que reunirme con mis viejos compañeros de la UA. Lo único que recuerdo son sus rostros hostiles. Kacchan está por irse, pero antes de eso lo llamo lo cual solo responde con un gruñido.

—¿Qué mierda quieres? —Me pregunta dándome la espalda. —Debo de ir a un entrenamiento, tengo que estar preparado. —Y vuelve a caminar, pero lo sujeto del brazo, lo cual el levanta su brazo libre e intenta golpearme, pero lo esquivo, soy más ágil que él, esto lo hace molestarse.

—Debemos hablar, Kacchan —el gruñe porque le volví a decir su apodo de la infancia. Ladea su cuello y me señala que lo siga. Camina delante de mí y me guía a una pequeña oficina se sienta en la silla frente del escritorio y pone los pies sobre el escritorio.

—Tres minutos —me dice cruzando sus brazos. Suspiro ante su mal temperamento.

—¿De verdad?

—179, 178, 177, 176 —

—¡De acuerdo! —Lo interrumpo. Paso una mano por mis cabellos y lo miro, —es sobre el OFA.

—No lo quiero —arruga las cejas. —No me gusta hacer trampa, ¿creíste que te iba a decir que sí? —Comienza a reír. —Puedes elegir a cualquier tonto de buen corazón, hasta incluso a Pulgarcita.

Mi semblante serio hace que su sonrisa cínica se borre y hace una mueca molesta.

—Yo seré el último portador. —Pude notar como Kacchan cambió su rostro a uno de sorpresa, pero de forma rápida cambió a uno serio. —Tenía esa idea desde nuestro último año en la UA. Durante mi viaje para poder conocer los secretos de este poder, tuve una charla con los predecesores. La razón por la cual falleció el cuarto a la edad de 40 años fue porque este poder drena la vida de quien lo usa. Míralo de esta forma, cada portador ha tenido un quirk, es una copa llena, si le agregas más líquido tarde o temprano se desbordará. El cuerpo humano no puede soportar más de un quirk y ellos tuvieron la carga de más uno donde se almacenan los quirk de sus anteriores predecesores. Debo ser el último, para que la persona futura no sufra.

Kacchan guarda silencio por unos segundos, tal parece que lo está meditando a su ritmo. Baja los pies del escritorio y truena su cuello para luego suspirar.

—Si esa es tu decisión... —mira hacia el portarretratos y luego a mí, —te apoyaré —me dice en un tono tranquilo. Siendo sincero no me esperaba esa respuesta. —¿Por qué tenías esa idea desde que estabas en la UA?

—La vez que lastime a mis compañeros por culpa de La Liga de Villanos. Algo emergió dentro de mí... algo oscuro. En ese instante pensé que este poder esta maldito. Con cada generación su poder crecía y no muchos lo pueden controlar, después recordé el único propósito del OFA: derrotar a All For One, y lo haré. No había necesidad de que sea transmitido a alguien más.

Él emite un sonido lo que significa que está de acuerdo con mi idea. Nuevamente hubo un silencio, noté como Kacchan apretó su mano formando un nudillo, es difícil saber qué es lo que está pensando, así que le daré tiempo. Me puse de pie y estaba por cruzar la puerta, pero...

—Izuku... —me gire para verlo, escondía su rostro con sus cabellos, parecía vulnerable, —perdón por todo —me dice con voz entrecortada. Verlo de esta manera me parece muy extraño, y antes de responder me interrumpe: —sé que te he hecho la vida miserable desde que éramos niños, y no sé por qué fue así, supongo que fue porque todos me alababan por tener un quirk fuerte y esa mierda subió a mi cabeza. Ya no somos unos niños, ni tampoco unos adolescentes, somos adultos y me di cuenta de los errores que cometí en el pasado. La imagen de ti atormentándote me persigue, no podía dejar que mueras sin antes que oyeras mi disculpa, sé que quizá—

—Está bien. —Lo interrumpo y le sonrió. —No hay nada de que perdonar, para mí Kacchan siempre será genial —me retire sin borrar mi sonrisa.

. . .

Una hora más tarde. Departamento de Izuku y Ochako.

. . .

Al abrir la puerta usando la llave escuchó una melodía provenir desde la alcoba. Sonrió al saber que ella estaba en casa, quitó sus zapatos rojos y se colocó unas pantuflas amarillas, caminó hasta llegar a la habitación y se dio cuenta que la letra de la canción tanto como la tonada es triste.

Hablaba sobre que la persona se iría lejos en un día o dos. Ya la había escuchado en una película hace mucho tiempo, en una de acción, pero no recordaba el nombre. Le pareció sorprendente como la letra encajaba con su situación.

—Take on me —dijo la chica haciendo sobresaltar al de ojos esmeralda. Él se giró para verla, notó como ese cabello castaño corto escurrían gotas de agua. Aquella chica había salido de un relajante baño. Su toalla blanca estaba arriba de su cabeza y después se la retiró, de vestimenta usaba una blusa de manga corta color negro y un short color rosa, dejando ver sus perfectas y esponjosas piernas. Midoriya la observó y no pudo evitar el sonrojo carmesí sobre sus mejillas y parte de sus orejas. Su novia lucía hermosa con cualquier conjunto.

—¿Ah? —Respondió en un suspiro y la chica sonrió juguetona. Y se acercó a él, alzando una de sus cejas y el chico paso saliva por el repentino acercamiento. —¿Q-qué dices? —Preguntó con timidez y dio un paso hacia atrás. Su cerebro hizo la traducción literal de lo dicho por la chica. ¿Qué él la tomará? Eso no sonaba para nada bien.

Por otro lado, la castaña no le dio importancia a lo dicho ya que solo le mencionó el nombre de la canción. Estaba más concentrada en la reacción que tuvo su novio al verla. Una costumbre que la chica tiene, es que cuando sale de tomar un baño largo y relajante omite alguna prenda de ropa.

—El nombre de la canción, tonto —rio llevándose su mano a la boca. —Aunque... —bajo la mirada apenada y sintió su respiración agitada, no tenía valor, y sabía que él no diría nada de eso. Tenía que dar ella el primer paso, pero es tan difícil. —s-si quieres, t-tú —levantó la mirada con un sonrojo y está vez Izuku la miró alzando una ceja confundido; sus miradas chocaron y nadie decía nada. Ochako en serio pensó que él lo entendería e infló sus mejillas, —¡Puedes tomarme! —Grito sintiendo sus mejillas arder, se inclinó un poco si estuviera pidiendo disculpas, su corazón latía más rápido al solo escuchar la respiración de su novio y para colmo la música había acabado.

Un silencio incomodó reino la habitación. La chica aún inclinada con la mirada fija a la alfombra, su corazón no dejando de dar brincos, y el chico paralizado. La castaña cerró sus ojos y después de unos segundos los abrió y soltó un suspiro. Levantó la mirada y se encontró con esos ojos esmeralda qué tanto le encantan.

—F-fue una broma —sacó la lengua y rio.

—¿Estás segura? —La pregunta sería hizo que dejara de reír y lo mirará. —¿Ochako, en serio quieres que lo haga? —Le preguntó tocando sus hombros y la castaña se sobresaltó y lo impresionada. Su novio tenía una mirada entre preocupación y determinada. —No haré nada que tú no quieras.

¡Oh, por Dios, Izuku eres todo un caballero! La castaña pensó conmovida por la acción del chico. Y yo aquí pensando cosas pervertidas, soy de lo peor.

Lo pensó con una voz triste y chillona mientras se lamentaba internamente. Sus pensamientos fueron interrumpidos al sentir el delicado toque de la yema de sus dedos tocar su mejilla. La de cabellos castaños miró atenta a su novio, entre abrió los labios, quería decirle algo, pero no sabía cómo hacerlo. Su mirada bajo a los labios del chico y paso saliva, sintió un calor subir a su cabeza y juraría que sus labios le temblaban, el hecho que Midoriya no dejará de tocar con suavidad su mejilla le quitaba toda tranquilidad. Se sentía ansiosa por ser besada.

El chico es recto y no daría ningún paso hasta recibir una confirmación, pero su novia es muy tímida. Ya que está mal visto que ella de los primeros pasos. Y este sería uno grande para ambos. Pero dependía de ambos. Midoriya no podía avanzar hasta estar seguro, aunque las ansias lo torturaban. Esos carnosos labios rosas temblando lo hacían querer atacarlos. Una sensación muy extraña. La chica desvió la mirada avergonzada y Midoriya comprendió que sería demasiado para ella.

Por una parte, se sentía aliviado, no tener nada de experiencia lo hacía sentir inseguro, si sabía de unas cosas gracias a la curiosidad y los comentarios de sus compañeros en la UA, pero no hay nada como la práctica. De acuerdo, eso le pareció repulsivo. Pero él quería que fuera especial.

Retiró su mano de la mejilla de la chica y le sonrió. La chica de forma rápida le regresó la mirada confundida.

—Está bien —se pasó su mano por su cuello. Camino hasta llegar al dispositivo para apagar la luz en la habitación. Para que solo la luz de la luna cruzará esa puerta, —ya es tarde y debemos descansar —dijo a la par que apagaba la luz.

La castaña apretó su labio inferior con frustración. ¿Tan difícil era decirlo? ¿Tenía miedo o inseguridad? Ambas.

—¡S-sí! —Volvió a dar un grito agudo con un sonrojo más grande del ya tenía, pero por la poca luz no se notaba. —Podemos... —el chico caminó hasta llegar a ella y tomándola del mentón la hizo alzar la cabeza, —avanzar.

Tardó en reaccionar la castaña, no se había dado cuenta cuando esos labios hacían contacto con los suyos. Correspondió el beso, y notó que no era como los que acostumbraba, este era diferente, podía sentir tanto el amor y la pasión en aquel beso. La chica comenzó a jugar con los cabellos del chico.

Midoriya se sentía calmado en saber que ella le confirmó. All Migth siempre le había dicho que debía ser muy cuidadoso con las señoritas y debía de respetarlas. Su madre es muy tímida para darle esa charla de adolescente, pero All Migth fue más que su mentor, fue como su padre porque lo encaminó a conocer las tres prohibiciones de la vida.

El dinero, el licor y las mujeres. Estaba muy agradecido de haber tenido esas pláticas con su maestro. Y el haber escuchado hablar a Kaminari sus "experiencias".

Él se movió un poco más haciendo que la chica cayera en la cama. Eso la hizo sentirse nerviosa, pero no se podía echar para atrás, siempre firme a sus decisiones, es parte de su lema. Ella lo veía atenta sin pestañar, pero con un carmesí en sus mofletes. El chico sonrió con ternura al verla de ese modo y eso la hizo sentir un poco de calma, la volvió a besar cada vez más intenso, después movió los cabellos castaños de la chica que estaban por su cuello y comenzó a besarlo. Ochako sentía que se retorcía y no porque se sentía mal, era todo lo contrario, esos simples besos en su cuello era como sentirse en las nubes y sintió como esos dientes le tocaban su piel y no pudo evitar soltar un suspiro.

Midoriya sonrió victorioso. Su plan estaba funcionando, miró por un momento a su novia y la vio cerrar sus ojos apretando sus labios, ella estaba ahogando esos dulces cantos de placer.

Extendió sus brazos para recargar su peso en ellos y que la chica no estuviera incómoda. Con su mano dio un roce desde su sien hasta su mentón. Y al final tocaba esos mechones de cabellos. La chica mostraba una mirada tierna a su novio y está vez fue ella quien tuvo el valor para besarlo. Jugaba con los rizados cabellos verdosos de su novio mientras que el beso se intensificaba cada vez más. Midoriya bajo sus labios hasta volver a besar el cuello y dejando pequeñas marcas en él. Con una de sus manos tomó ambas muñecas de su novia y las alzo hasta estar en la altura de la almohada, con su mano libre comenzó a tocar el cuerpo por dejaba de esa prenda negra. La castaña sintió un extraño escalofrío recorrer por su espalda y su intimidad.

Midoriya se topó con una grata sorpresa. Para su suerte, su novia no usaba un sujetador y pudo tocar con perfección los senos de la chica.

NOTA IMPORTANTE:

Estamos en abril del 2024. Este capitulo fue publicado en el 26 de marzo del 2021, dicho capitulo en su momento tenía lemon o smut, como quieran llamarlo. Debido a las nuevas reglas de Wattpad, las historias o fanfiction con personajes menores de edad con escenas eróticas, el contenido será borrado corriendo el riesgo que también eliminen mi cuenta. Por eso mismo he cortado la parte donde estaba el smut. Mi fanfic tienen mas de 18 años los personajes, pero esto lo hago por seguridad.

Lo lamento mucho por los nuevos lectores que no pudieron disfrutar de esto.

Detalle de este capítulo: Ochako se tomó la píldora anticonceptiva, para que tengan en claro que no hay indicios de un embarazo ni nada de eso.

Ahora los dejo con mi yo del pasado:

Volví con un capítulo de más de 4,000 palabras, parece corto, pero, y me costó escribir sobre todo esa parte. No soy una experta lo sé, pero quería hacerlo. Lo he pensado, es muy probable que esta historia sea la única de IzuOcha que haga que sean adultos, y no parece correcto que unos adolescentes de preparatoria hagan eso (quizá hasta estoy dando mal ejemplo a jóvenes. Total, yo soy una adulta y es normal para mí, idk). Y también es un paso importante en la relación del Té Verde.

Les tengo una pregunta, ¿les gustaría leer una historia IzuOcha de un Universo Alternativo?

Un dato que nadie me pregunto, pero lo suelto más, ando escribiendo otra historia IzuOcha, donde están en la UA. Llevo como tres capítulos y escribiendo el cuarto, pero aún no quiero publicarla.

#IzukuComeHomeel manga esta potente, y además el estreno de la temporada es hoy.