En edición...

----

Jungkook miraba su celular, el número de Taehyung parpadeando en la pantalla. Había pasado más tiempo del que quería admitir desde que lo escribió, pero aún no se atrevía a presionar el botón de llamada. Es solo para el ensayo, se dijo, como si eso calmara el nudo en su estómago. Finalmente, con un suspiro, marcó.

—¿Hola? —contestó Taehyung al tercer tono, su voz tan despreocupada como siempre.

—Ah, soy yo... Jungkook. —dijo torpemente, como si eso no fuera obvio. —Sobre el ensayo, ¿todavía estás dispuesto a ayudarme?

—¿Tienes ya algo que pueda llamarse ensayo? bromeó Taehyung. —Pero sí, claro. ¿Dónde y cuándo?

Unos minutos después, Jungkook estaba camino al café del centro, donde Taehyung había sugerido encontrarse. El lugar era pequeño y siempre estaba lleno de estudiantes con portátiles y cafés a medio terminar. Lo encontró en una mesa junto a la ventana, ojeando un artículo sobre galaxias lejanas.

—¿Por dónde quieres empezar?—preguntó Taehyung, sin apartar los ojos del papel.

Jungkook tragó saliva. —Por el principio, supongo.

—¿El principio del universo o el principio de este desastre de ensayo?— Taehyung sonrió con aire divertido, ganándose una mirada de fastidio de Jungkook

—No es un desastre, ¿Ok? Solo necesito organización. —Suspiró. — Empecemos por las estrellas, ¿Qué tienes para decirme sobre ellas?

Taehyung se enderezó en su asiento, dejando el papel a un lado. —Las estrellas son básicamente enormes esferas de gas, principalmente hidrógeno y helio, que generan energía a través de la fusión nuclear. —Hizo una pausa, observando a Jungkook, que ya parecía algo perdido.

—¿Fusión qué? —preguntó Jungkook, frunciendo el ceño.

—Fusión nuclear. Es como... cuando los átomos de hidrógeno se combinan para formar helio y, en el proceso, liberan muchísima energía en forma de luz y calor. Esa es la razón por la que las estrellas brillan.
Jungkook asintió lentamente, aunque su expresión delataba que seguía procesando la información.

—Ok, entonces, ¿todas las estrellas son iguales?

Taehyung sonrió de lado. —Para nada. Las estrellas pueden ser muy diferentes dependiendo de su tamaño, temperatura y edad. Por ejemplo, las más grandes y calientes tienden a ser azules, mientras que las más pequeñas y frías son rojas. Las amarillas, como el Sol, están en un punto intermedio.

—¿Y cómo sabes eso? —preguntó Jungkook, cruzando los brazos.

—Bueno, la luz que emiten nos dice mucho. Los astrónomos usan espectroscopios para analizarla y descubrir de qué están hechas y cuán calientes están. —Taehyung apoyó la barbilla en su mano, sonriendo con un toque de orgullo.

—¿Así que las estrellas tienen colores y "vidas"? —dijo Jungkook, levantando una ceja.

—Exacto. Las estrellas nacen, viven y mueren. Todo depende de su masa. —Taehyung hizo una pausa dramática antes de añadir. —Pero eso es otra historia.

Taehyung se inclinó hacia adelante, entusiasmado.

—Pero si vamos a hablar de estrellas, tienes que entender que tienen ciclos de vida. ¿Sabías que nacen en enormes nubes de gas y polvo llamadas nebulosas?

—¿Nebulosas? Suena a algo salido de una película. —Jungkook tomó su lápiz y comenzó a garabatear en su cuaderno.

—Lo parece, pero son reales. La gravedad hace que el gas y el polvo se acumulen hasta que se forma una protoestrella. Si la masa es suficiente, comienza la fusión nuclear, y boom, tienes una estrella.

Jungkook levantó la mirada, confundido. —¿Y si no tiene suficiente masa?

Taehyung sonrió. —Entonces se queda como una enana marrón, una especie de estrella fallida. No brilla como las demás, pero aún emite algo de luz y calor.

—Ok, ok, espera. —Jungkook levantó una mano. —¿Cómo se supone que ponga esto en mi ensayo sin parecer que solo copié de Wikipedia?

—Fácil. —Taehyung se encogió de hombros. —Escribe algo como: "Las estrellas son el motor del universo. Nacen de nebulosas, viven fusionando átomos y mueren de formas espectaculares."

Jungkook miró su cuaderno, garabateando círculos al margen.
—Ok, entiendo lo de las estrellas y las nebulosas. Pero, ¿qué pasa después? ¿Cómo conecto esto con el universo en general?

Taehyung cruzó los brazos, pensativo.
—Bueno, podrías hablar de cómo las estrellas forman galaxias. Mira, las galaxias son como ciudades en el universo, y las estrellas son los edificios. Sin estrellas, no tendríamos galaxias. Y sin galaxias, no tendríamos planetas como la Tierra.

Jungkook levantó una ceja. —¿Y eso cómo ayuda con mi ensayo?

Taehyung sonrió. —Sencillo. Empieza con algo simple: "Las estrellas son los bloques de construcción del universo. No solo iluminan el cielo, sino que forman galaxias y son responsables de la creación de los elementos que componen todo lo que conocemos, incluida la vida en la Tierra."

Jungkook tomó su lápiz, murmurando para sí mismo. —Bloques de construcción, galaxias... vida en la Tierra... esto suena mejor. — Dijo intentando animarse, pero se veía frustrado.

Taehyung, notando la frustración de Jungkook, decidió cambiar de enfoque.

—Ok, ok, mira. Imagina que el universo es un pastel gigante. —Hizo un gesto amplio con las manos.

Jungkook lo miró con escepticismo. —¿Un pastel? ¿Qué tipo de pastel?

Taehyung sonrió. —El que quieras, pero digamos que es de chocolate porque es el mejor. Las estrellas serían los ingredientes: harina, azúcar, cacao. Sin ellas, no puedes hacer el pastel. Y las galaxias serían como las capas del pastel, sosteniendo todo junto.

Jungkook soltó una risa. —¿Y los planetas? ¿Las chispas de chocolate?

Taehyung chasqueó los dedos. —Exacto. Los planetas serían las chispas, y la vida en ellos... eso sería como la cereza en la cima. Es rara, no todos los pasteles la tienen, pero cuando está ahí, se ve increíble.

Jungkook tomó su lápiz de nuevo, sonriendo. —Bueno, eso tiene más sentido. Ahora sí puedo escribir algo.

Jungkook comenzó a garabatear en su cuaderno, murmurando mientras escribía.

—De acuerdo, Taehyung, escucha esto: 'Las estrellas son los ingredientes esenciales de un pastel cósmico. Sin ellas, no existirían galaxias ni planetas, y mucho menos la vida.' ¿Qué tal suena?

Taehyung inclinó la cabeza, sonriendo. —Suena bien, pero podrías hacerlo más poético. Algo como: 'Sin las estrellas, el universo sería un lienzo vacío. Ellas son los ingredientes esenciales de un pastel cósmico, los bloques de construcción de todo lo que conocemos.'

Jungkook lo miró, alzando una ceja. —¿Quién te crees, Shakespeare? Se supone que el que estudia literatura soy yo.

Rieron juntos, y Jungkook dejó caer el lápiz sobre el cuaderno.

—Bueno, esto no está tan mal. Pero, ¿sabes qué? No quiero sonar cursi, pero este ensayo es como mi forma de demostrar que puedo terminar algo importante sin arruinarlo.

Taehyung lo miró con curiosidad. —¿Por qué dices eso?

Jungkook encogió los hombros, jugueteando con el lápiz. —Es complicado. No suelo terminar cosas. Siempre empiezo algo y luego lo dejo a medias. Pero esto... quiero que sea diferente.

Taehyung asintió lentamente. —Bueno, ya empezaste con buen pie. Y aquí estoy para ayudarte a terminarlo, así que no te preocupes. Ahora, ¿qué sigue?

Jungkook hojeó su cuaderno, arrugando la frente. —Creo que con las estrellas ya tengo material suficiente. ¿Qué sigue, Taehyung? ¿Los agujeros negros o las galaxias?

Taehyung sonrió, apoyando la barbilla en su mano. —Ambos son interesantes, pero vamos con las galaxias. Después de todo, ¿qué es un pastel sin sus capas?

Jungkook lo miró, sorprendido, pero después de un momento de silencio, aceptó la propuesta. Estaba empezando a entender que la conversación con Taehyung no era solo sobre datos, sino sobre encontrar conexiones, pensar más allá de lo obvio.

Taehyung comenzó a mover las notas y los libros hacia un lado, dejando el espacio para concentrarse en lo que iba a decir.

—Las galaxias son como los ingredientes en una receta, ¿sabes? Si tomas un poco de polvo de estrellas, gas y materia oscura, puedes crear algo tan impresionante como nuestra propia Vía Láctea. Pero si no entiendes cómo se combinan, se convierte en una masa sin forma, como un pastel mal hecho.

Jungkook frunció el ceño, tomando sus apuntes. Algo de lo que Taehyung decía comenzaba a tener sentido, pero aún no lograba encontrar la forma de estructurarlo todo.

—Mmm, ¿tú crees que esto tiene sentido? —preguntó Jungkook, mirando sus notas con una expresión de duda mientras el bolígrafo dibujaba círculos sobre las palabras.

Taehyung, que había estado quieto por unos momentos, comenzó a moverse de nuevo, recargándose en la mesa mientras observaba el cuaderno de Jungkook.

—¿Y qué tal si le metes un poco de filosofía de las estrellas? —sugirió Taehyung, sonriendo. —Creo que es lo que más te gusta, ¿no?

Jungkook levantó la vista, incrédulo.

—¿Filosofía? —preguntó, sorprendido por la propuesta. —¿En serio? No sé si eso tiene cabida en un ensayo sobre el universo.

Taehyung rió y se inclinó un poco más cerca, como si estuviera por revelar el gran secreto.

—La ciencia no es solo lo que vemos con los telescopios, Jungkook. Es lo que nos hace cuestionarnos. ¿Alguna vez te has preguntado por qué miramos las estrellas? Quizás estamos buscando algo más que solo estrellas. Quizás queremos saber si estamos realmente tan solos en el universo, o si somos solo un destello en la vastedad.

Jungkook no sabía si era una broma o si Taehyung realmente estaba en una onda filosófica, pero el comentario la hizo sonreír. Era un enfoque nuevo, algo que ni siquiera había considerado. Tal vez había algo más detrás de todas esas palabras complejas que ella estaba intentando entender.

—Eso suena más interesante de lo que pensaba —Admitió, mientras hacía una pausa para escribir algunas de sus nuevas ideas. —¿Sabes? A veces me siento como si no estuviera entendiendo nada de todo esto.

Taehyung se recostó en su silla con una sonrisa tranquila.

—Mira, Jungkook. La astronomía puede sonar complicada, pero es como un gran rompecabezas. Al principio todo parece ser un caos, pero poco a poco vas armando las piezas. Es más fácil si lo ves como... no sé, como una pizza.

Jungkook lo miró, sin entender.

—¿Una pizza?

—Sí. Imagínate que el universo es como una pizza gigante, ¿vale? Cada estrella es un pedazo, pero no todos los pedazos son iguales. Algunos son más grandes, otros más pequeños. Algunos están más cerca, otros más lejos. Pero todos forman parte de la misma pizza, aunque no siempre podemos ver todo de una vez.

Jungkook rió ante la explicación, y por un momento se sintió más relajado. Si Taehyung podía usar una pizza como analogía para describir algo tan grande, tal vez la astronomía no era tan aterradora después de todo.

—Y, ¿qué hay de los agujeros negros? —preguntó Jungkook, queriendo saber más, pero aún sin soltar la idea de la pizza.  —¿Esos son como... el centro de la pizza?

Taehyung se inclinó hacia adelante, como si fuera a contar un gran secreto.

—Los agujeros negros son como las partes más pegajosas de la pizza. Esos pedazos que te quedan atrapados en el borde y no puedes quitarte de encima. Pero en lugar de ser molestos, son realmente fascinantes. Lo interesante de un agujero negro es que ni la luz puede escapar de él. Se lo traga todo, como un agujero en el espacio.

Jungkook asintió lentamente, absorbiendo la comparación.

—Interesante... Es una manera mucho más simple de verlo —Dijo, sonriendo un poco más relajado. —Gracias, Taehyung.

Antes de que pudieran seguir profundizando más, una figura apareció en su visión, interrumpiendo el flujo de la conversación. Minho, al que Taehyung había conocido brevemente antes, se asomó con una sonrisa tímida.

—¿Qué tal? —Saludó, mirando a Taehyung, que apenas lo reconoció. —¿Aún sigues hablando de esas cosas raras del universo y lo fascinante que es?

Taehyung sonrió de forma amplia, levantando la mano en señal de saludo.

—Claro. Ven, te presento a Jungkook. Está escribiendo un ensayo sobre el universo. ¿Te gustaría unirte a nosotros? Tal vez tengas algo que decir sobre las pizzas... digo, las estrellas.

Minho frunció el ceño, pero se acercó a la mesa con una sonrisa divertida.

—No estoy seguro de si quiero entrar en esa conversación, pero... ¿me invitas a la pizza?

Jungkook rió suavemente.

—Eso suena más tentador que hablar de agujeros negros.

Minho se acomodó en una silla, mientras Taehyung y Jungkook continuaban charlando. Aunque su presencia interrumpió un poco el ritmo, la dinámica entre ellos tres comenzó a formar una conexión inesperada.

Jungkook miró su cuaderno, pensativo, y volvió a escribir algunas palabras más. Mientras lo hacía, se dio cuenta de algo importante: tal vez no todo en la vida tenía que ser tan serio. La astronomía, las estrellas, los agujeros negros... todo eso era fascinante, pero lo que realmente lo estaba impulsando a aprender era la curiosidad y la conversación que se tejía con Taehyung.

—Por cierto, ¿cómo se llama tu amigo? —preguntó Jungkook, mirando a Taehyung.

—Ah, perdón. Me olvidé de decirte. Este es Minho. Y de nuevo, Minho, él es Jungkook —Dijo Taehyung, señalando a cada uno.

Minho levantó una mano como saludo.

—Un placer, Jungkook.

Jungkook sonrió, agradecido por la interrupción. A veces, una conversación entre extraños era justo lo que se necesitaba para sacar una perspectiva más clara sobre las cosas.

Jungkook se recostó en su silla, mirando el cuaderno frente a él. Las hojas estaban llenas de apuntes, frases inconclusas y pequeñas ideas que, de alguna manera, empezaban a tomar forma. El universo había dejado de ser solo un tema académico y comenzaba a sentirse como algo más personal.

Por un momento, Jungkook se perdió en sus pensamientos. ¿Cómo era posible que algo tan vasto e incomprensible pudiera hacerme sentir tan... conectado? Miró de reojo a Taehyung, quien hojeaba un libro con expresión tranquila, y luego a Minho, que parecía absorto en sus propias ideas. Quizás no se trataba solo del universo. Tal vez lo importante era lo que podíamos aprender juntos al explorarlo.

La noche empezaba a caer, y las luces cálidas del lugar hacían que el espacio se sintiera casi acogedor. Jungkook cerró los ojos un momento, dejando que las palabras y conceptos del día giraran en su mente como estrellas en órbita. No era solo un ensayo; era el inicio de algo más.

Después de eso, las horas pasaron volando. Jungkook había avanzado bastante en su ensayo gracias a las analogías de Taehyung, y aunque la noche estaba por caer, los tres compartieron un rato más de risas y conversación. Jungkook miró su cuaderno y luego a Taehyung, dándose cuenta de que el universo no solo era un tema fascinante... También era el comienzo de algo mucho más grande.

(...)

Las estrellas, esas pequeñas luces tan distantes, observaban desde lo alto. Estaban ahí, brillando en un universo vasto, inmenso, tan antiguo que ni siquiera se podía comprender. Y aquí estaba Jungkook, atrapado en ese momento, en ese lugar, rodeada de preguntas que se acumulaban en su mente. ¿Qué sentido tenía todo eso? ¿Por qué se esforzaba en cosas que parecían tan efímeras, tan pequeñas comparadas con la inmensidad del espacio? Las estrellas seguían su curso, indiferentes a sus preocupaciones. ¿Quién era él en medio de todo eso?

Su mente se desviaba. Miraba a las personas alrededor, sus conversaciones, sus risas. Todo parecía tan lejano. Como si estuviera viendo una película sin ser parte de ella. Ellos no sabían lo que pasaba dentro de él, no sabían que sus pensamientos eran más grandes que este café, que esta conversación. La gente se reía, pero él estaba atrapado en un lugar distinto, uno donde el ruido de fondo apenas importaba. Todo lo que veía y escuchaba pasaba de largo, como si no perteneciera allí, como si no fuera más que una sombra en la esquina de la habitación.

¿Era eso lo que se suponía que debía estar sintiendo? Todos parecían tenerlo tan claro. Ellos sabían qué hacer, sabían quiénes eran, lo que querían. Pero él... no tenía ni idea. Las decisiones que tomaba parecían no importar. Y si todo lo que hacía ahora era tan irrelevante, ¿qué sería de él en el futuro? ¿Seguiría siendo el mismo, perdido entre las sombras de lo que realmente quería? O tal vez... tal vez ni siquiera le importaba. Pero, ¿y si sí importaba? ¿Y si este era el momento en que las decisiones pequeñas se acumulaban y finalmente definían lo que era?

El futuro parecía tan incierto. Ni siquiera sabía si iba a lograr algo que valiera la pena. No sabía si podría cambiar o si este sería el camino que siempre tomaría. A veces pensaba que tal vez nunca encontraría algo que la hiciera sentirse completo, que sus miedos se quedarían con él para siempre. ¿Qué haría si esto era todo lo que era? ¿Qué pasaría si nunca lograba descubrir lo que realmente quería, lo que lo haría sentir... feliz, por decirlo de alguna manera? ¿Y si toda esta ansiedad, toda esta falta de dirección, se quedaba con él para siempre?

El universo seguía su curso. Las estrellas seguían brillando. Y Jungkook seguía allí, preguntándose si alguna vez todo tendría sentido. ¿O acaso era solo una chispa que se apagaría antes de que siquiera pudiera encenderse?

Jungkook dejó que sus pensamientos se disiparan mientras observaba las hojas en blanco ante él. Aunque había avanzado algo en su ensayo, algo seguía rondando en su mente, como una sombra que se negaba a irse. El universo, las estrellas, las galaxias... todo eso era fascinante en teoría, pero cuando se trataba de ponerlo en palabras, la tarea se sentía abrumadora. ¿Cómo podía hacer justicia a algo tan vasto, tan lejano y tan, en cierto modo, incomprensible?

¿De verdad estoy capacitado para escribir sobre esto?, pensó, mientras se pasaba la mano por el rostro, intentando despejar la nube de dudas que comenzaba a nublar su mente.

Se preguntaba si, de alguna manera, la ciencia no era más fácil de entender en la teoría. ¿Por qué había personas tan brillantes que podían ver patrones en lo que para otros solo eran puntos dispersos? ¿Cómo lograban dar sentido a las partículas, las fuerzas invisibles y las distancias astronómicas? Tal vez es solo cuestión de cómo se lo miras, pensó, recordando la conversación con Taehyung, sus analogías sobre las galaxias, las estrellas, el pastel. Todo se reducía a encontrar la manera correcta de explicar las cosas.

Mientras su mente seguía divagando, su mirada se posó en el cuaderno una vez más. Quizás había algo que estaba pasando por alto. Algo simple. Algo tan cercano como la vida cotidiana. ¿Cómo podía entender el universo si no entendía bien lo que sucedía a su alrededor, en su propio mundo? A veces, se sentía tan perdido, como si estuviera mirando a través de un telescopio, pero sin saber qué buscar. No era solo sobre las estrellas. Había algo más profundo en su cabeza, algo que lo tenía atrapado, que lo hacía dudar de su propio camino.

De repente, un pensamiento le golpeó con fuerza. ¿Qué pasaría si el universo fuera, de alguna manera, un reflejo de lo que estaba pasando en su vida? En las distancias incomprensibles, en el caos que parecía no tener sentido, tal vez había más conexiones de las que se podía imaginar. Quizás, todo era parte de un mismo orden, pero él no lo veía porque aún no había aprendido a mirar.

¿Y si todo esto de escribir es solo otra forma de entenderme a mí mismo?, reflexionó, sin saber si era la respuesta correcta, pero comenzando a sentir que tal vez se estaba acercando a algo. Quizás no necesitaba entenderlo todo de inmediato. Tal vez solo necesitaba dar el primer paso y confiar en que las piezas encajarían eventualmente.