—Buen día chicos, —saluda Hwang Hyunjin al entrar a su salón de clases, veintidós años, radiante, con una sonrisa alegre y movimientos de muñeca, un chico amigable por naturaleza, camina con gracia y llega donde su mejor amigo, quien le acompaña desde el primer año de universidad. —Hola, guapo.

Lee Minho, veintiún años, un chico caliente como solo él, sonrisa perfecta, pero un corazón un poco frío, su único amigo en la facultad es Hyunjin, Lee rodó los ojos y bufo en respuesta, —¿Por qué te ves tan feliz, Hwang?

—Changmin aceptó salir conmigo este sábado, —dijo Hyun muy contento, Minho solo se encogió de hombros simulado que no le importa.

—¿Dejó a su novia?

—Nop, pero parece que comienza a sentir algo por mí, hace unos días estuvimos muy, muy juntos, —presumió acercándose demasiado a Lee, Min frunció los labios en un puchero, como si fuera a darle un beso y Hyunjin se alejó riendo, —y tú ¿Por qué no has follado con nadie? ¿Younghyun sigue molesto por lo del mes pasado?

—Younghyun estará molesto por eso toda la vida, aún no logro entender por qué se molestó tanto, solo tuvimos sexo, además él y Chan no son novios ni nada.

Hyunjin sacó su libro de filosofía y lo dejó caer sobre la cabeza de Minho ganándose de inmediato una mirada fría e intensa, —es tú culpa, Minho entiende que los hombres enamorados son impredecibles y difíciles de leer, no puedes ir por ahí fingiendo ser otro, dijiste que Younghyun te llamó Chan durante todo el sexo, ¿no crees que te pasaste un poco?

—No, yo solo quería a Younghyun y tuve a Younghyun, —Hyunjin rodó los ojos, su mejor amigo es tan descarado, —y no todos los hombres enamorados son difíciles, tú eres bastante fácil.

—Yo soy una excepción, —sonrió, —lo entenderás cuando te enamores.

El profesor de filosofía entró al salón de clases y los amigos tuvieron que dejar su conversación.

Hyunjin y Minho tiene una relación bastante peculiar, Minho es desinteresado por casi todo, le gusta el sexo y convivir ligero, nunca se confía de nadie más que de sus amigos del pasado, Younghyun y Chan, en cambio Hyunjin era bastante tímido en el primer año de universidad, las chicas lo rodeaban tanto como a Minho e incluso comenzó a llamar la atención de los chicos.

Un día de febrero, Hyunjin estaba solo en el salón de clases y Minho se sentó a su lado, Hyunjin y él sostuvieron miradas por cortos segundos y luego dejaron de mirarse.

—Eres tan guapo, —se dijeron mutuamente y se echaron a reír, fue raro, pero con esa pequeña interacción se hicieron amigos, comenzaron a sentarse juntos en cada clase, compartían puntos de vista sobre las clases más interesante e incluso comenzaron a compartir ideas sobre futuras novelas por que la meta de ambos era lograr convertirse en escritor, Minho por el lado intenso de la literatura, fan del erotismo y seducción, Hyunjin por el lado del romanticismo y sensualidad, rosando ligeramente lo erótico, pero para escenas de sexo, Minho siempre fue mejor.

Su relación se basaba, aunque parezca raro, en la confianza, nadie creía que fueran amigos realmente dado que Minho un día te sonreía y al otro de ignoraba, pero con Hyunjin duro mucho, demasiado según Chan y Younghyun, amigos de ambos, estos dos ya esperaban la decepción que Minho le daría a Hyunjin, pero no creían que sería tan degradante al grado de que Hyunjin abandonara la carrera y su sueño de ser escritor.

—Tengo una idea muy buena y tú eres mi inspiración, —dijo Minho a Hyunjin un día mientras estudiaban en la biblioteca, —será algo así como, una guía para enamorar a un chico hetero.

—No juegues Lee, ni se te ocurra escribir algo de lo que te cuento sobre Changmin, sabes lo mucho que me gusta este chico, no quiero que piense cosas que no son, —advirtió Hyunjin con un ligero tono de juego.

—No te preocupes, no será la primera novela que publicaré, —fue lo que Minho respondió.

Hyunjin fue un iluso, le abrió su corazón a la persona a la que menos debía tenerle confianza, adoraba a su amigo con la vida, le habló de todo, sin filtro, sin contenerse, cualquier cosa que Minho preguntara sobre su adorado Changmin, Hyunjin la confía sin problema y que tonto fue, porque Minho uso todas y cada una de sus descripciones y nadie le culpo o le acuso de plagió, porque nada de eso estaba escrito y registrado bajo en nombre de Hwang Hyunjin.

Minho escribió el primer borrador de su novela "Palabras Bonitas" en estilo de historia corta para un concurso y ganó. Cuándo la historia se publicó en el portal de la universidad, Hyunjin fue el centró de todos los comentarios, todos apuntaban a Hyunjin como él experimento de Minho, Changmin se sintió usado, no le creyó a Hyunjin cuando este trato de explicarse, lo acusó de ser igual que Minho y se alejó de él, Hyunjin sabía que Changmin también había empezado a sentir cosas por él, pero con todo esto el chico se sintió traicionado, los días de Hyunjin se volvieron insoportables, nadie le tomaba en serio ahora, Minho lo miraba con si no valiera nada y Hyunjin ni siquiera tenía ánimos de pelear con él por lo que hizo, solo dejó que su amistad se rompiera por completo porque, vamos ¿Quién quiere ser amigo de un cabrón dispuesto a venderte como pan caliente?

Hyunjin convirtió su vida en adorar a Shin Changmin de lejos, lo admiraba como lo más hermoso del universo, el chico siempre fue protegido de lejos, adorado en silencio, Hyunjin dejó de asistir a clases, ya no le parecía importante su sueño de ser escritor, ahora lo único de verdad importante era procurar el bienestar de su amor perdido, Hyunjin se hizo amigo de las personas del circulo amistoso de Changmin, preguntaba por él con cuidado e incluso se acercó a sus padres como un joven sin trabajo ni dinero para estudiar, se hizo pasar por vendedor de libros para acercarse a los padres del chico, se hizo amigo de ellos y los señores le confiaban algunas cosas de su hijo, y meses después Younghyun le pidió de la forma más sutil posible que visitará un psicólogo.

Hyunjin aceptó, en sus citas se dio cuenta de que tan mal quería a Changmin y aceptó ir con un psiquiatra, al poco tiempo se le diagnostico oficialmente con obsesión y abandonó la carrera, le pidió ayuda a sus padres para internarse en un hospital y estos aunque ya estaban separados, le ayudaron sin rechistar, dejó ir todo lo que tuviera que ver con Shin Changmin incluyendo a su amigo traidor, nunca le dijo a sus padres que paso con Minho, porque hasta sus padres sabía lo cercano que era con Lee, Hyunjin solo decidió olvidar por completo lo mal que actuó, fue tratado poco a poco para superar su obsesión.

Dos años luchando para superar sus problemas, un Hyunjin con veinticinco años recién cumplidos comenzó a trabajar de todo lo que encontraba, trabajó de mesero en una cafetería, fue bibliotecario e incluso trabajo atendiendo una pequeña librería de un vecino de su padre, trabajó tanto como pudo para hacer realidad su nuevo sueño, él siendo tan conocedor de literatura tenía como meta abrir su propia cafetería por ser fanático del café, una biblioteca para resguardar libros de todos los tiempos y así cualquiera pudiera acceder a estos conocimientos, por último una librería para vender felicidad y entretenimiento, tristeza y amor, para hacer valer el trabajo de colegas escritores a los cuales una vez quiso pertenecer.

Cuando casi cumplió veintiséis pudo lograr un préstamo en un banco para juntarlo a sus ahorros y ahorros que sus padres le prestaron, con todo esto pudo pagar el local que eligió y lo necesario para abrir su lugar, buscó muy exhaustivamente el lugar donde empezaría su sueño y no pudo elegir mejor opción que un lugar cerca de una universidad, los estudiantes son el mejor negoció de venta de libros y café, al principio tuvo que trabajar mucho ya que apenas y contaba con un empleado para cada área de su local, pero pronto logro reclutar a un par de chicos universitarios de diferentes turnos, chicos que necesitaban dinero, el negoció fue un poco básico al principio, la mayoría de los libros que vendía eran escolares, poco a poco fue haciendo más y más extensa la variedad de su librería hasta que llegó a vender novelas incluso eróticas, la cafetería se fue haciendo más famosa entre los estudiantes y comenzó a ser más cotizada, la biblioteca siempre se mantuvo en lo tranquilo, algunos alumnos llegan a estudiar un extra, o personas de oficina que aún aprecian un buen café y algo de lectura para relajarse.

Su nuevo sueño se hizo realidad, su hermanastra comenzó a ser más y más cercana a él y con el tiempo se volvió la segunda persona en la que más confiaba, cuando decidió que era tiempo de volver a tratar con sus amigos del pasado regresó a Younghyun, lo visitó en la universidad que justamente está cerca de su local, Younghyun le habló un poco de cómo fue todo cuando él se fue e incluso le habló sobre Minho, Hyunjin se dio cuenta de que Minho realmente ya no significaba nada aunque todavía punzaba escuchar su nombre.

Hyunjin visitaba seguido a Younghyun, pero un día creyó ver a su ex amor, Changmin, se asustó tanto que dejó de visitar a su amigo, siempre poniendo el trabajo antes que cualquier cosa, no quería pensar en que su obsesión podría regresar así que centró su vida al trabajo, se hizo muy amigo de sus jóvenes empleados e incluso algunos clientes frecuentes le pedían que se sentará a tomar un café, su yo amigable y carismático regresó convertido en un hombre con experiencia, se convirtió en alguien admirable para él mismo.

Y un día de lluvia, de los que más le más le gustan porqué el ambiente de frío y café es perfecto para leer, sacó su último libro favorito, un diccionario muy extenso sobre flores de todo el mundo, estaba leyendo la definición de la flor de Aster cuando un jovencito cruzó la puerta de su local soltando algunas maldiciones por un auto que mojó su ropa nada convencional, por un momento creyó que era un sueño, la silueta de Shin Changmin se cruzó por toda su mente, su garganta se secó y trago duro, su estómago se hizo pesado y entonces el chido dio la vuelta y le habló, tardó unos segundos para reaccionar por que la belleza del jovencito fue tan atrayente que su corazón quiso detenerse de la preciosa impresión, sintió sus piernas temblorosas, pero mantuvo su postura entre seria y pacífica, atendió al jovencito admirando cada detalle de él y cuando este se fue, por fin pudo desmoronarse en el piso soltando el aire que estuvo conteniendo, su corazón salto loco de emoción y su sonrisa no se borró en días, lo volvió a ver, tomando un americano en su cafetería, de nuevo la silueta de Changmin se dibujó en su mente pero desapareció cuando el jovencito sonrió, tal vez físicamente se parecía un poco a su ex amor, pero este chico tenía algo diferente, algo que Hyunjin quería saber. Varios días después se le ocurrió poner en práctica los años que estudió y escribir de nuevo, notas, notas que revelaran la verdad de sus sentimientos, notas que dijeran claramente todo, Hyunjin le pidió a su hermana que entregará las notas en el casillero del ángel que le robaba suspiros cada que llegaba a la cafetería, la imagen de Changmin jamás volvió a cruzar su mente, incluso después de saber que el chico se llama Kim Seungmin, aun cuando sus nombre son parecido, Hyunjin jamás volvió a pensar en Shin Changmin, sus días seguían pasando animados como siempre y entonces comenzó a pedir a su hermana fotos de Seungmin y alguna información que pudiera encontrar, así se enteró que Kim Seungmin es estudiante de medicina, que es un chico que jamás ha tenido novia y que se presume heterosexual, un chico agradable y amable, algo inexperto y con un gran corazón, pero todo se vino abajo, Hyunjin se dio cuenta de que estaba comenzando con el ciclo obsesivo que cumplió cuando su ex amor, y volvió a Younghyun para un diagnóstico, acudió a él seguido, tanto como pudo, pero ninguna palabra de Younghyun le garantizaba que no se obsesionaría con Seungmin, pensó en dejarlo todo, pensó en dejar de enviar las notas y dejar que Seungmin siguiera viéndolo como el hombre amable de la librería.

—Hyunjin Oppa, lo sabe, Kim Seungmin ha venido a mí... —dijo su hermana cuando llegó hasta él muy agitada, ahí Hyunjin supo que no iba a detenerse.

Seguiría adelante con Seungmin.