"Good Omens es una serie de Amazon Prime y un libro de Terry Pratchett y Neil Gaiman"

El demonio conducía a toda velocidad, mascullando palabras incomprensibles para el oído humano, pero sin duda llena de improperios relativos a su suerte, sin duda los demonios estaban acostumbrados a ese lenguaje, y el pelirrojo no era la excepción.

El Bentley soportaba siempre la forma tan insana de conducir de Crowley, quien sin respetar ninguna señal de tránsito arranco con enojo por toda la ciudad de Londres, recibiendo cláxones furiosos por toda la calle y gritos de conductores más prudentes.

Estaba muy cerca del hogar del ángel, pero no por eso estaba tranquilo, su mente aún seguía un poco revuelta y sus pensamientos inconformes.

¿Qué había hecho mal?

Sin duda la respuesta a esa pregunta sería, muchas cosas, algunas de ellas adjudicadas para quedar bien con los jefes de abajo, y ganarse el respeto de los de arriba, de saber que él podía hacer cualquier cosa y que se había equivocado de echarlo, o más bien de precipitarlo hacia abajo.

Crowley de consideraba malvado, fue el causante de que Eva pecara, pero ahora se debatía en su interior.

¿Era realmente malvado?

Por qué últimamente salvar un ángel de tiempo completo, ayudar a detener el holocausto y sobre todo sentir lo que el denominaba amor por Aziraphale no podía ser de una "serpiente demoniaca" como él.

"En polvo eres y en polvo te convertirás" ellos pueden descansar, pero nosotros estamos destinados a la eternidad, a vivir décadas siendo enemigos, no es justo; pensó el demonio gruñendo al ver que un incauto casi se hacía uno con su parabrisas.

El demonio se estacionó con cautela frente a la librería, estaba haciendo un día lluvioso, las gotas de la brizna y la neblina que siempre acompañaba esa odiosa época del año lo hicieron sentirse desprotegido.

Lanzó un suspiro sonoro conforme bajaba del auto, pudo sentir las gotas de lluvia mojar su rostro, y empapar sus cabellos rojizos, había olvidado colocarse el sombrero y lo dejo en el asiento de Bentley, pero observo al rubio abrirle y salir con un paraguas color negro, y como en el Edén hacen muchos miles de año, su ángel lo protegió de la lluvia.

— Querido, te vas a empapar — le recriminó el rubio, Crowley sonrió y sacudió la cabeza, se quitó sus gafas de sol para enfocarlo mejor, y con sus ojos bífidos vio el puchero de Aziraphale, quien lo invito a pasar a dentro.

— Lamento lo de ayer — le dijo antes de pasar a la casa, el rubio lo miro, Crowley lucia devastado — perdóname por ser un imbécil, por haberme precipitado, por haberte be...

Los labios del ángel se estamparon en los del demonio, dejándolo atónito, no esperaba que Aziraphale tomara por sorpresa la boca del demonio y lo besara con tanta pasión, estaba atónito y sintió como el deseo recorría de nuevo su cuerpo.

— Solo guarda silencio, y entremos a casa, no vuelvas a decir que te arrepientes — le susurro en su oído después de separarse de sus labios.

Definitivamente Crowley no podía ser malvado después de aquel beso.

N.A. Aquí terminamos el primer arco, los siguientes serán ideas sueltas.

Gracias por leer.