Capítulo 3: Soledad.
"Good Omens es una serie de Amazon Prime y un libro de Terry Pratchett y Neil Gaiman"
Crowley escucho las ultimas notas de la canción de "somebody to love", como si de un chiste se tratara, odiaba sentirse vulnerable, y sobre todo la desesperación de la soledad que lo carcomía, en su existencia terrenal, ningún lazo se había formado por 6,000 años, excepto la unión que que ambos, enemigos naturales, habían forjado.
Irónico, que un ángel y un demonio fueran amigos, y peor aun que un caído, hubiera sucumbido al deseo del romance, uno prohibido, le importaba un bledo la opinión del infierno, después de todo, el pecar estaba en sus genes.
Y ahí estaba, en el año 2018, mientras conducía por las calles de Londres rumbo a su departamento, enojado consigo mismo por haber sido débil ante la dulzura de un ángel, y por ser tonto al creer que tendría su pedazo de paraíso de nuevo. Que el fuego de sus pecados no arrasaría con aquel edén que representaba para él, Aziraphale.
Pero él de idiota se había quemado hasta los cimientos, su corazón dolía al ver el rostro de su ángel sacarlo de su hogar, rompió la única promesa que se hizo a si mismo después de aquella noche en Paris, no daría a mostrar sus sentimientos a Aziraphale de nuevo, no al menos que este estuviera listo para ellos.
Llego a su departamento cabizbajo, pronto tendría que concebir un plan para acercarse a su ángel, no soportaría dormir un siglo entero como ya hace mucho tiempo, en donde el dolor de su pleito en St. James lo llevó a dejarse llevar y solo cerrar los ojos, a sumergirse en el abismo de su subconsciente, en donde sus sueños eran el reflejo de la realidad que él quería y no podía obtener.
El alcohol aun permanecía en sus venas, y con lentitud se acostó en la cama, todo era de color oscuro en su hogar, la alcoba era sutilmente sensual, se rio de si mismo, cuando se instalo de manera permanente en Londres, lo hizo con el afán de seguir rondando a su ángel, incluso fantaseo con enseñarle sus plantas y llevarlo a su habitación.
Ahora solo estaba él aun con la ropa puesta en una enorme cama con sabanas de satín negro y dejó que el sopor del alcohol combinado con el peso de sus decisiones de aquel día, lo envolvieran, como una camisa de fuerza, se sumergió en ese barullo de pensamientos, que lo llevó a dormir desganado, pensando que tal vez, solo tal vez, su ángel era quien lo abrazaba mientras el fuerte viento que anunciaba una tormenta, azotaba las ventanas del edificio.
En una librería en Londres el fuego se consumía en una antigua chimenea, mientras un ángel observaba su taza de chocolate enfriarse sin que el sintiera deseos de tomarla, recordando unos labios más dulces que aquel remedio que el se había inventado cada vez que vaciaba el alcohol de su cuerpo.
En dos lugares diferentes, dos seres intentaban centrar sus pensamientos, mientras afuera, el viento rugía al igual que sus sentimientos.
N.A. Esto me quedo más Sad de lo que hubiera deseado, creo que acabare este reto hasta Diciembre jajajaja
Saludos.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro