Jack
Y de nuevo aquí vamos, no puedo creer que nos hayan quitado a Cassie, que me hayan alejado de mi familia, no podía permitirlo, necesitábamos que el segundo plan saliera a la perfección y si tenía que venderle mi alma al diablo para eso, lo haría.

No pude dormir absolutamente nada la noche antes de ir a la corte, sentía como el estómago se me revolvía de tan solo pensar en que no pudiéramos recuperar la custodia de Cassie, de mi bebé, pero no me iba a rendir, haría hasta lo imposible por volver a tener a mi familia reunida.

Esa mañana nos despertamos tarde, Cassie era la que nos levantaba temprano para comer, nos arreglamos tranquila y silenciosamente, Elsa se veía deprimida y nada de lo que hiciera la animaría.

Subimos al carro y nos dirigimos a un restaurante con las amigas de Elsa para discutir la siguiente movida, aunque ninguno de los dos estaba en las condiciones para discutir eso, pero era muy necesario.

Llegamos al restaurante y vimos a las tres chicas sentadas en una mesa al fondo, nos acercamos y nos sentamos.

Astrid- al fin llegan ¿que paso?

Elsa-nada, mejor hablemos del plan

Anna- bueno, estábamos pensando en que tenemos que hacer ver a Hans como en culpable también de esto y así ustedes no tendrán más problemas y podrán quedarse con la bebe

Al momento de escuchar la palabra bebe, vi como Elsa solo asentía y contenía las lágrimas.

Tome su mano en señal de apoyo y ella me sonrió. Pedimos de desayunar y al terminar pague por todas la chicas aunque ellas al principio se negaban, subimos cada quien a su auto y nos dirigimos a la corte.

Llegamos a la sala que nos tocaba y cada quien se sentó en el lugar que le correspondía y esperamos a que el juez llegara. Por fuera nos veíamos tranquilos y serenos, pero por dentro estábamos hechos un manojo de nervios e incluso podría decir que temblábamos.

El juez llegó de improvisto sobresaltándonos a Elsa y a mi, golpeó su mazo contra un círculo de madera callando a todos y dando inicio a un nuevo juicio.

Continuará